Bella POV

-         ¿Reconciliación?- preguntó Jake.

-         Si- le confesé. Pedimos a los muchachos que se fueran a la cocina a almorzar, ya que la señora que nos venia a hacer las cosas tenía todo listo. Quería conversar con Jake un rato y que después como gente adulta nos sentáramos a comer junto a Edward, que al parecer se tomo muy bien lo del parentesco.

-         ¿estaba mal la relación? ¿por eso andabas tan llorona?- lo miré fingiendo enojo, pero no pude aguantar las ganas de reírme.

-         No, lo de llorona era por Uzzy, no anda muy bien- confesé suspirando sonoramente.

-         Es una lástima- agregó sentándose a mi lado.

-         Si, pero espero de corazón que Edward pueda hacerlo entender, es un niño Jake y no quiero que acarree una maldita fama igual que su padre- Jake asintió.

-         La diferencia fue que a pesar de todo Edward no empezó tan precoz, tu hijo batió el record- se rió y aunque la situación para nada resultaba graciosa, me vi forzada a reír, pues este muchacho me contagiaba.

-         Me haz hecho tanta falta Jake- dije lanzándome a su pecho, lo rodee por la cintura. El me acarició la espalda.

-         Lo siento cariño, pero necesitaba alejarme de ti. Estar mirando lo hermosa que te ponías día a día me desquiciaba. Te puedo decir que gracias a esa estúpida decisión, hoy por hoy tengo lo más hermoso de mi vida…- acotó.

-         Familia- dijimos al mismo tiempo, reímos, él por la complicidad de nuestros pensamiento y yo porque saltaba en su barriga por sus convulsiones.

-         Sigues igual Jake- le dije. Nos callamos y lo mire para saber que estaba pasando.- ¿Qué te preocupa?

-         No puedo creer que aya sido Gastón quien embarazó a Nessie- era verdad el no sabía nada de eso.

-         Si… era un chico tan lindo, era un miembro más de nuestra familia, por supuesto junto a los demás, pero esto que paso, dios Jake, me decepciono enormemente.- le confesé sin poder dar una idea clara.

-         ¿Crees que ellos puedan volver?- preguntó preocupado.

-         No. Esa ya no es una opción, Nessie esta enamorada de tu hijo, que de paso es todo un galán, me contó las maravillosas cosas que pasaron juntos.

-         Wow… déjame decirte que me quede para adentro cuando me entere de que ya estaban… bueno… estaban… tu entiendes…- le costo tanto y a fines de cuenta no pudo decirlo.

-         ¿haciendo el amor?- pregunté- bueno mi hija ya no era virgen, lamento que aya corrompido la inocencia de tu bebé.- agregué juguetonamente.

-         Toda una Swan- le pegue en el hombro. Y después reímos.

-         Me hubiera justado que hubiese esperado… creo que a ella también le hubiera gustado sabiendo que en un momento de su vida encontraría a tu hijo… que de paso es más encantador que tu- bromee

-         El aprendiz superó al maestro…- reímos, era tan fácil estar con él.

-         Pero… ¿te es difícil aceptarlo verdad?- le pregunté.

-         ¿Qué cosa?- al parecer no vio el hilo de mi pregunta.

-         Lo de su embarazo- acoté mirándolo a los ojos, quería saber si trataría de ser diplomático, pero lo que vi me encantó… había verdad y sinceridad.

-         No te niego que es raro, pero me encanta la idea, un bebé es una bendición y si Ian acepta todo no me queda más que aceptar que aunque aun soy una joven seré abuelo- nuevamente mis ojos se abnegaron de lagrimas- hey terminare pensando que te apesta la idea.

-         No sabes cuanto amo la idea- le dije. Y nos reímos otra vez.- con lo de joven… eso si que es un chiste.

-         No me insultes… aún soy un niño…- nos quedamos en silencio, ese típico pero que no molesta, si no que todo lo contrario, un silencio maravilloso.

-         Tengo que hablar algo muy serio contigo bella.- agregó y se acomodó en el asiento. De pronto todo mi cuerpo se tensó.

-         No me asustes Jake, por favor- le pedí.

-         No es mi idea asustarte pequeña, aunque igual es riesgoso espero que sea una buena noticia.- confesó. No podía imaginar que era lo que quería conversarme que fuese tan importante.

-         Suéltalo ya Jake, estoy sintiéndome mal.- eso era verdad, cada vez que mi cuerpo se tensaba me empezaba a sentir horrible.

-         Quería hablar de tu 10%- agregó. Solté todo el aire que se había retenido en mis pulmones. Me apestaba que él también empezara con lo mismo. Creo que el disgusto se vislumbro en mi rostro.- Nessie me contó que ya no tienes ganas de operarte porque la enfermedad a avanzado mucho, pero bella quiero que sepas que…- no lo dejé.

-         Basta Jake, me cansé de las falsas esperanzas, ni siquiera conozco al Dr. Riveros, imagínate que clase de medico puede ser. Ya no quiero arriesgarme, Carlisle me dijo que podía vivir más o menos hasta que naciera mi nieto, con eso me basta Jake, y por favor respeta mi decisión sobre no hablar más del tema.- le pedí, ya estaba cansada, ya no quería discutir con más gente por la maldita platica de la operación. No quería pelearme con él.

-         Bella no hablo del Dr. Rive… no se cuanto, hablo de mí- no entendí y lo miré extrañada.

-         ¿Qué?- esta era una mala broma.

-         Bella, soy Oncólogo.- agregó- me especializo en este tipo de casos, esos que tienes pocos pronósticos de sobrevivencia. Bella un 10% para mi es mucho, se puede hacer mucho con él.- agregó, estaba congelada, no podía creer que él estaba dispuesto a arriesgarse de esa forma por tratar de salvarme- bella dime algo.

-         Es que… no… yo…- no era capaz de decir nada coherente. Tenía ganas de llorar.

-         Bella te puedo sanar… lo voy a hacer, tienes que confiar en mí- pidió.

-         Es que… yo… yo… - y empezaron a caer las traicioneras lágrimas por mis ojos.

-         Se que es difícil para ti, pero tienes que darte la opción- agregó.

-         Pero… ¿Qué pasa si no funciona?- iba a contestar pero no lo deje- ¿Qué pasa si muero en la mesa? ¿en tus manos? ¿Qué pasara contigo Jake?- le fulmine, tubo que pensar un poco la respuesta.

-         Bella, son posibilidades… pero la mejor de todas las posibilidades es que tu de ese hospital vas a salir sana, que vas a poder ver no a uno, si no a todos tus nietos nacer y “crecer”… si deseas volverás a tener bebes… bella, se que es complicado para ti, pero quiero asegurarte que e hecho este tipo de operaciones en pacientes peores y han salido perfectos. Bella aprovechemos el ahora, porque para mí un 10% es buen pronostico.- concluyo muy seguro de sí.

-         Es que Jake… te-tengo mie-miedo-confesé tartamudeando.

-         Y es normal que lo tengas, pero te juro que después de esa operación podrás vivir. Te lo juro bella- dijo lo último tomando mi rostro entre sus manos, de nuevo cayeron un montón de nuevas lágrimas.

-         ¿Nos perdimos de algo?- preguntó Edward que venía bajando del segundo piso abrazado de Uzziel, sus rostros se contrajeron y se asustaron bastante cuando me vieron llorar entre los brazos de Jake.

-         ¿Qué demonios le hiciste?- se adelanto Uzziel hasta tomas mi cuerpo, al parecer había estado tan absorta en mis pensamientos que no me había dado cuenta de lo grande que estaba mi hijo, pues sus brazos me rodearon completa y ya estaba más grande que yo.

-         Nada, solo estoy conversando con ella- me miro con pena, aun no podía contestar, seguía sollozando.

-         ¿Qué le dijiste?- preguntó Edward,- espero que no la estés mortificando por segunda vez como hace años- le critico.

-         Sigues tan Cullen como siempre- sonrió- cálmate hombre- palmeo su hombro- ella te ama y yo estoy felizmente casado, créeme cuando te digo que no es eso- confesó con una gran sonrisa, me encanto como tomo el control de la situación, el único que no se relajo fue Uzziel que aun me tenía apretada a su cuerpo. De repente vi a todos los jóvenes atravesar preocupados la puerta del la cocina. Hasta la señora que nos hacia las cosas se apareció.

-         ¿Qué sucede papá?- preguntó Ian un poco extrañado.

-         Nada hijo, es que bella sigue tan llorona como siempre- mi Jake quería restarle importancia al asunto. Ya era hora de intervenir, pues pude ver su rostro enrojecer, creo que estaba nervioso por las miradas inquisidora de todos los presentes.

-         Me estas asfixiando Uzziel- le dije.- suéltame un poquito.

-         Pero… ¿Qué paso mamá?- preguntó aún sin creer del todo que Jake no me había hecho nada.

-         Creo que será mejor que tomen asiento, este es un tema familiar- agregó Jake, y todos le hicieron caso. Edward se sentó a mi lado y mando a Uzzy a sentarse en el sillón de enfrente al lado de Nessie que pude ver se apartó lo más que pudo.

-         Jake me ofreció una opción- agregué velozmente tomando su mano, si confiaba en él.

-         ¿Qué opción?- preguntó un extrañado Eddy que miró de reojo mi mano sobre la de mi amigo, creo que su cuerpo se tenso más de lo esperado.

-         Soy Oncólogo Edward, le estoy dando a tu mujer una posibilidad de vivir- agregó seguro- le estoy dando la opción de vivir.

-         ¿Qué?- preguntaron todos los chicos a coro, incluso Edward.

-         La voy a salvar.- concluyó muy seguro de las posibilidades y muy satisfecho por mi 10%. Que maravillosa posibilidad, porque de algo estaba segura, esta era una bendición en mi vida. Otra vez vi aquella luz resplandeciente en la cabeza de Jake, igual como hace años en el aparcamiento de la universidad. Mi Jake mi gran amigo me iba a sanar.

Nessie POV

No entendía porque mamá se había portado tan agresiva con Uzzy. No lo dejo ni hablar. Me sorprendió su reacción, él ni siquiera se defendió, ni le respondió, incluso podría haber apostado que si no hubiese habido mucha gente que más encima se reía de él, se habría puesto a llorar. No podía creer que mamá le había gritado tanto.

Me fui a la sala, tenía mi última clase, Uzzy se escapó, lo pude ver alejarse con su mochila al hombro.

Malditas matemáticas, no entendía nada, más encima era a la última hora donde solo quieres irte. Al parecer Salí igual que mamá en ese aspecto porque el tío…. Jake, aun me costaba pensar en el sin unirlo al único y verdadero amor que e tenido, le había hecho clases particulares.

-         ¿En qué piensas Nessie?- preguntó mi gran amiga y compañera de curso Danny.- no me digas que en Gastón.

-         Para nada mujer…- trate de bajarle el perfil al asunto, sabía que la ponía triste el que me sintiera deprimida.- pensaba en otras cosas…- de igual forma esquive su mirada, ella me conocía tanto que igual se habría dado cuenta de la verdad.

-         Y ¿entonces?- volvió a preguntar.

-         Danny… no preguntes tanto- agregué en tono jocoso.

-         Ian… ¿verdad?- ella me conocía tan, pero tan bien.

-         Es inevitable no imaginármelo- argumenté. Era verdad, cada vez que cerraba los ojos pensaba en lo maravilloso que sería si estuviera a mi lado. Lo maravilloso que sería que el me hubiese aceptado junto a mi bebé. O quizás, lo maravilloso que hubiese sido que desde un principio le hubiese dicho la verdad, a lo mejor las cosas serían tan diferentes.

-         Se que lo extrañas, pero tienes que estar bien por él…- dijo acariciándome la barriga que cada vez estaba más grande. El abuelo dice que mi bebé cada día crece mucho más. Me alegra tanto su apoyo, me sonríe el alma al ver sus ojitos brillar cuando me examina o cuando escucha el repiqueteo de su pequeñito corazón. Un Cullen, solo un Cullen. Me aterraba esa opción, pero tampoco quería que llevara el apellido del animal que se atrevió a negarlo, ese tipo no merecía la bendición de poder ser padre.

-         Lo amo… y me duele no tenerlo- sabía que debía estar anímicamente bien para que le bebé no sintiera mi estado y no pudiese salir con estrés, pero me era imposible. Simplemente no podía hacer como que nada había ocurrido y dar vuelta la pagina. Me quedé un buen rato pensando.

-         Nessie…- sentí de forma lejana a alguien susurrar mi nombre- Nessie…- otra vez- RENESMEE- gritaron y me sobresalte. Mire enojada a mi amiga, esta torpe pudo provocarme un paro cardiaco.

-         Torpe… me asustaste- le dije mientras recogía las cosas, ya quería irme a casa, solo esperaba que ya estuviese mamá o papá esperándonos afuera.

-         Tocaron el timbre hace 5 minutos y tu no reaccionabas ¿Qué querías que hiciera?- pregunto tranquilamente, como si fuera normal exaltar a la gente que descansa sobre el pupitre.

-         Mmmmm…. No tienes justificación- agregué ya con un tono más juguetón.- ven con nosotros, le diré a papá que te lleve a casa- los padres de Danny son divorciados, viven sus mundos y no se preocupan de ella. El padre gano su custodia, pero ni se soportan, incluso muchas veces a tenido que dormir en mi casa porque su padre la golpea.

-         No quiero abusar, tú sabes que no me gusta- agregó.

-         No seas boba…- rodee los ojos, era un soberana bobería pensar que me molestaba si era mi mejor amiga junto a mi prima Emmy y mi hermana, que aunque estos meses había cambiado mucho seguía siendo una gran amiga para mí.

-         De verdad Nessie, no quiero molestar- bajo la vista avergonzada.

-         No seas gansa Danny, para mis padres no es problema llevarte a casa, además hace mucho frío como para que camines, luego se pondrá a llover. Vamos amiga, nos queda de pasada- agregué con mi mejor carita de perrito hambriento, aquella que le ponía a papá o mamá y no podían negarse. ¡Bendita tía Alice!

-         Esta bien… pero quiero que sepas que eres una manipuladora…- recogió sus cosas y nos fuimos en dirección a la sala de Vlady, donde se suponía que tendría que estar Grece.

-         ¿listo?- le pregunté tomando su mochila y a él de la mano.

-         Listo- me grito malhumorado, al parecer los problemas en casa lo estaban molestando más que a nosotros.

-         ¿Qué te sucede?- le pregunte sabiendo de ante mano cual sería la respuesta.

-         Hay una niña en mi clase que no deja de molestarme…- agregó con el seño fruncido, su respuesta me dejo totalmente sorprendida.

-         ¿pero que te hace?- pregunté. Me extrañaba su actitud, Vlady nunca había sido un niño problemático o rezongón o en último caso descortés con una niña.

-         Me dice que me conoce… que de algún lado me vio, pero yo no la conozco… se que no la conozco porque…- titubeo- bueno solo se que no la conozco…- finalizó.

-         Pero ¿Por qué estas tan seguro? A lo mejor no la recuerdas, y la viste en el parque con la abu.- le di como opción, no quería verlo disgustado, a parte que con lo de casa y las constantes peleas de los papás nos bastaba.

-         No… si te digo que no la conozco es porque no la conozco.- zanjó.

-         No eres perfecto Uzzy, puedes haberla olvidado- le dije, quería hacerle ver que no era perfecto como nuestro hermano creía que él mismo era. Quería hacerlo entender ahora de pequeño y no lamentar después de grande.

-         ¡Una niña como ella no se olvida!- gritó, me quede helada.

-         ¿Así? Y ¿Por qué?- pregunté curiosa.

-         Porque las niñas hermosas no se olvidan y ella es verdaderamente hermosa… es… es-es por eso que estoy enojado, si es que de verdad la conozco me molesta haberla olvidado- confesó todo muy rápido y con mejillas sonrojadas.

-         ¿quieres que la vea para saber si la conozco?- le pregunté asintió y me susurró que fuese disimulada y que fingiéramos ir a buscar un libro a su pupitre. No podía creerlo, esto era tan irreal como un montón de mis malditos sueños, ella no podía estar aquí, era muy poco probable. Mi rostro denoto la gran sorpresa que me causo su presencia y creo que a ella también le causo sorpresa verme, me miro la panza y se me acerco.

-         ¿el es mi sobrino?- preguntó con una gran sonrisa en el rostro.

-         Yo… yo… Sa-Sa-Sarah…- concluí más nerviosa de lo que pensaba podría haber estado. Y ¿si el esta aquí? ¿En este mismo colegio? Y ¿Si ahora mismo esta saliendo de su clase?

-         Sabía que te conocía- susurro Sarah Black en dirección a mi pequeño hermano, que estaba sonrojado completamente.

-         ¿Ian?- pregunté sin poder o tener las ganas de formar una oración más diplomática, necesitaba respuestas, y las necesitaba ¡YA!

-         Tiene que estar con papá- agregó ella.

-         Vallan a buscar a papá con cuidado, nos vemos después- salí corriendo del salón. Necesitaba verlo, necesitaba encontrármelo y hasta si el me lo permitía besarlo, lo necesitaba a mi lado, para saber que era verdad, que él estaba aquí a mi lado, que me había buscado. De un momento a otro mis pies se pegaron al suelo, ya no podía provocar el movimiento para poder caminar o correr. Mi cuerpo se paralizó cuando lo vi. Todos los miedos volvieron, quizás él no volvió por mí, quizás vinieron de vacaciones a ver a los familiares, quizás ya ni siquiera quería mirarme. No lo podía creer se veía hermoso, su cuerpo era tan bello como lo recordaba, su espalda maciza. Este hombre era perfecto, su rostro… su ros…tro… ¿esta sangrando? ¿Ian esta sangrando? Me espante y corrí en su dirección.

-         Nessie…- susurró avergonzado. Su rostro estaba hinchado, me dolía verlo herido, ¿Quién pudo haberle hecho eso? ¿Quién podía odiarlo tanto como para hacerle ese daño? ¿a quien conocía en Forks?

-         ¿Qué te paso?- pregunte mientras le acariciaba el rostro de forma sutil, porque no quería dañarlo. Cerró los ojos, creo que se sorprendió de que lo tocara al instante.

-         Nessie…- susurró.

-         ¿Qué te paso?- le pregunté dulcemente, ni siquiera pensar en las conversaciones pendientes. Solo necesitaba saber quien pudo ensañarse tanto con él.

-         Necesito que me perdones…- pidió con los ojos llorosos.

-         ¿Qué?- no podía dar fe a lo que estaba escuchando. No podía creer que me estuviera él pidiendo perdón cuando era a mí a quien le correspondía eso.

-         Perdóname por ser tan imbecíl… - suplico cerrando aun más los ojos, si es que eso fuese posible, su rostro estaba compungido.

-         Tendremos tiempo para conversar si es que tú me lo permites, pero ahora dime ¿Qué te paso? ¿Quién se ensaño tanto contigo?- pregunté acomplejada.

-         ¿si yo te lo permito? Cariño eres tu quien puede o no darme una oportunidad- agregó afligido ¿Qué acaso el pensaba que para mi era una opción no hablar con él? ¿Qué acaso aun seguía dudando de mi amor?

-         ¿piensas que no querré hablar contigo?- pregunté. Tenía que sacar de mi cabeza las dudas- ¿Qué acaso aun dudas de mi amor?

-         ¿a… m… o… r?- preguntó confundido- ¿tú… tú-tú aun me-me a-amas?- tartamudeo.

-         Desde el primer minuto que te vi… desde ese día supe que ya no habría otro… supe que siempre te amaría…- agregué con suma sinceridad.

-         ¿me amas?- volvió a preguntar pero esta vez feliz.

-         ¿tú me amas?- le pregunté.

-         ¿te atreves a dudarlo?- preguntó haciéndose el fingido.

-         ¿me amas?- volví a preguntarle, necesitaba que me dijera que si o que en el peor de los casos me dijera no.

-         Con toda mi alma… te amo a ti y a nuestro bebé- me miro expectante- si me das el privilegio de hacerlo mío- mi pecho empezó a doler un poco, sentía que algo se estaba quebrando y rompiendo y creo que eran las cadenas que mantenían preso, sin movimiento y sin vida a mi corazón. Cada músculo dolía, cada repiqueteo era como un nuevo desgarro, pero todo aquel dolor valdría la pena. Poco a poco empezó a pasar y mi corazón se lleno de vitalidad. Sonreí como si de eso dependiera mi vida, creo que hasta el bebé se dio cuenta de mi maravilloso estado de ánimo, porque pateaba delicadamente, pero pateaba. Tome la mano de Ian y la lleve hasta mi vientre.

-         Al parecer también le agrada la idea….- se le llenaron los ojos de lágrimas- te amo Ian… gracias- dije y no aguante más y me abalancé sobre él para poder besarlo. Vi su rostro crisparse y me di cuenta de lo brusca que fui al momento de besarlo.- lo siento- me excuse.

-         No hay problema. Puedes hacer conmigo lo que quiera- agregó picadamente alzando las cejas. Entrecerré los ojos.- ¡Hey! tienes la mente podrida…- se rió.

-         No he dicho nada- dije tratando de hacerme la desentendida, aunque en todo caso no tenía ni ganas de hacerlo, porque lo que más deseaba en este momento era hacer el amor con este hombre.

-         Te deseo- me susurró y no me pude aguantar, mi ritmo cardiaco se puso irregular y mi respiración se agitó, no necesitaba mirarme para darme cuenta que estaba sonrojada, él no se imaginaba como lo deseaba, cuantas veces había añorado sentir su cuerpo junto al mío. Acerque lo más que pude mi cuerpo al del, sin darme cuenta del lugar en el que estábamos y la gente que nos observaba. Este momento era solo nuestro. Me acerque tanto que pude sentir su prominente excitación, lo que me hizo soltar un sonoro gemido. De un segundo a otro aquel momento maravilloso envuelto de excitación se rompió. Se sintió carraspear a alguien.

-         El suegro esta presente- sentí decir a tío Jake. Me avergoncé demasiado, tuve que hundir la cabeza en el pecho de mi hombre.- ven a darle un beso y un abrazo a tu suegro.- agregó con tono sonriente.

-         Que vergüenza- le susurré a Ian quien acarició mi cabeza y me hizo voltearme para encarar a su padre. Me infundo valor lo que me hizo sentir realmente apoyada.

-         Hola hermosa- dijo extendiendo sus manos hacia mí me dirigí rápidamente a sus brazos.

-         Jake… te eche mucho de menos- le confesé. Verdaderamente no habíamos tenido oportunidad de hablar en Brasil. Necesitaba disculparme por mentirles, por no contarle sobre mamá. Nunca me había estrechado en sus brazos sabiéndome Nessie Cullen… su Renesmee Cullen.- te quiero- dije sin poder aguantar las lágrimas.

-         No llores preciosa… ya estamos aquí y no nos iremos- me separe velozmente de su pecho y lo mire sin poder dar fe a lo que de su boca había salido. Nunca pensé que ellos vinieran para quedarse, esto era maravilloso. Lo solté y me voltee para poder mirar a Ian que sonreía como bobo.

-         ¿verdad?- pregunté expectante. Me sonrió y asintió- no lo puedo creer- salté nuevamente a los brazos de mi hombre, porque ya sería mi hombre, mi amante, mi amor y en un maravilloso futuro mi esposo.

-         ¡Ouch!- agregó adolorido, lo que me trajo nuevamente a la realidad.

-         Lo siento cariño- acaricie dulcemente su rostro- pero ahora quiero que me digas que paso… ¿Cómo quien discutiste?

-         No hablemos de eso- agregó y me abrazo tratando de hacerme distraer del asunto.

-         ¡Hey! Quiero saber…- le pedí tajantemente.

-         Uzziel- susurró.

-         ¡¿¡¿QUÉ?!?!- grité.

-         No te exaltes, me lo merecía- ¿Qué? ¿Qué acaso pensaba que al decir eso me tranquilizaría?- él solo te estaba protegiendo- agregó tranquilo.

-         ¿Cómo puedes decir eso? ¿Cómo puedes esperar que esa explicación me tranquilice? Él no tenía derecho a golpearte pero ¿Quién demonios se cree?- estaba totalmente enojada, cuando llegara a casa ese idiota sobre protector tendría que escucharme.- ¿han visto a mamá o papá?- pregunté, tenia ganas de ir a casa, obvio no sin antes suplicarle a Ian que viniera conmigo.

-         No- agregó Jake.

-         ¿me prestarías tu móvil para preguntarles quien vendrá por nosotros?- le pedí.

-         ¿Por qué crees que estamos aquí?- pregunto Ian. Sonreí ante su entusiasmo, pero no lo hice completamente ya que aun estaba muy enojada.- mamá se llevara a mis hermanos y nosotros iremos a tu casa.

-         Ok- llame a mis hermanos y a Danny.

-         Hola- la saludo Ian.

-         Así que tú eres el famosísimo Ian…- dijo sonriente.

-         Wow… ¿famoso? No lo sabia.- se rió y me besó.

-         Así qué ¿todo bien?- preguntó.

-         Todo fantástico…- agregó él. El rato pasó tranquilamente. Pasamos a dejar a Danny y luego nos fuimos a casa. Me baje velozmente del auto y me dirigí a la entrada. No vi a papá o mamá en la sala, solo estaba Uzziel con los audífonos en los oídos y con los ojos cerrados. Me acerque y le quite los audífonos bruscamente.

-         ¿Qué mierda?- agregó sobre saltándose.

-         ¿Por qué lo hiciste?- le grité.

-         ¿Y lo preguntas?- agregó el muy idiota.

-         ¿me e metido alguna vez en tu vida?- pregunté.

-         ¿A dónde quieres llegar?- preguntó.

-         Nunca e dicho, pensado o creído nada sobre las zorras con las que tiras en los baños del colegio.- abrió unos inmensos ojos.

-         ¿Por qué dices esas cosas? Mídete, Grece y Vlady no tienen porque escuchar ese tipo de cosas- agregó el muy idiota.

-         Dime si es mentira… nunca me e metido con ninguna de tus zorras y si que e deseado hacerlo, pero me e mantenido al margen porque es tu vida, tu intimidad… si hubiese sabido la estupidez que ibas a hacer jamás abría confiado en ti.- le dije.

-         No seas dramática- maldito idiota, más encima se burla de mí.

-         Pero quien…- no me dejo seguir.

-         Cállate…- me grito- estoy aburrido de tus berrinches.

-         ¿Cómo se te ocurre golpearlo? ¿Quién te crees que eres?- le critiqué, quería que me diera una buena explicación.

-         Pensé que era lo correcto después de las cosas que te dijo- agregó haciéndose el sentido.

-         No tienes porque pensar por mi idiota- me exalte, esta situación me descomponía. Él no tenía por que creer o pensar por mí. Él no era nadie para meterse en mi vida

-         Perdóname… pensé que después de que se acostó contigo y que te dijo casi, casi eras una puta no lo ibas a querer volver a ver.- ¿Cómo se atrevía a decir ese tipo de cosas delante de los papás? O ¿delante de Jake? Es un inconciente mal hermano.

-         Ese no es tu problema… y déjame decirte que eso fue exactamente lo que me hizo Gastón y aún lo sigues saludando- critiqué su actuar, porque no había nada más doloroso que él siguiera saludando al patán que me hizo sufrir.

-         Porque él es el papá de tu hijo, Nessie, no este- indicó a Ian- Gastón terminara entrando en razón y créeme cuando te digo que ella- me indicó- te va abandonar, porque ella esta completamente enamorada de él. Lo de ustedes paso y como paso de fue ¿OK?

-         Óyeme, yo no soy igual a ti, no me ando acostando con una y con otra- esta maldita situación me estaba colmando la paciencia.

-         Claro que no, si no serías rara y mi competencia.- se rió de mí… madito se reía de mí, la situación le era graciosa. Ian me observaba suplicante, casi pidiéndome que dejara el asunto.

-         Idiota…- mire a papá, él tenía que retarlo, sancionar su actuar. Tenía que disculparse por su atrevimiento y su salvajería- no te metas en mi vida, nunca has dejado que yo opine de la tuya, déjame tranquila…- luego le hable a papá, Uzziel tenía que empezar a medirse ya estaba bastante grandecito y papá tendría que aprender a castigarlo, a ponerle limites- dile que le pida perdón a Ian- sabía que aunque lo hiciera no sería de corazón, la sola idea me decepciono, pero por lo menos algo era algo…

-         No es necesario- agregó Ian acariciando mi cintura, él quería que esta rencilla familiar pasara rápido, pero por él era que hacía esto. Ian formaría parte de la familia, merecía respeto.

-         ¿te percataste de lo que has hecho?- preguntó derepente papá, muy bien no entendí el hilo de la pregunta, pero de seguro sería relacionado a las disculpas.

-         ¿Qué?- preguntó Uzziel confundido igual que todos en la sala. Mamá no miraba mucho a Uzziel creo que aun estaba apenada por la situación, pero este niño engreído se lo había ganado, así que mamá no tenía porque avergonzarse.

-         Acabas de decepcionar a tu hermana con tu actitud… Uzziel no puedes andar por el mundo tratando de hacer justicia por cosas que solo existen en tu mente- papá por fin estaba enojado con él.

-         ¿Qué clase de padre eres?- preguntó Uzziel, el muy idota se atrevía a cuestionar, papá se puse muy triste.

-         De la clase que siempre ha escuchado a sus hijos, que los ha comprendido y justificado, ese fue mi gran error, que fui muy flexible con ustedes. Nessie se embaraza a los 15- Ouch… golpe bajo, Ian apretó mi mano- tu tienes 14 y has pasado no sé por cuantas muchachas… de esa clase de padre soy, del que se equivocó en la crianza.- dijo apenado.

-         Creo que será mejor irnos, ustedes necesitan conversar -agregó tío Jake. Realmente no quería que se fuera, porque de hacerlo él lo haría Ian, y había estado mucho tiempo lejos, así que lo necesitaba conmigo.

-         No tienes porque irte… acabamos de pasar a ser familia o ¿no?- papá nos miro y le sonreí, me dio mucha alegría su actitud.

-         O por dios- fue lo último que escuche decir a Uzziel antes de que partiera dando fuertes pizotadas en las escaleras.

-         Siento esto, los dejo en su casa, necesito conversar con ese muchacho ahora, antes de que me ablande- sonrió y lo noté, sus ojos tenían un brillo especial. Ese brillo que me advirtió que algo estaba pasando. De repente papá se acerco a mamá y se besaron, ese era el brillo, una hermosa reconciliación.

-         ¿Reconciliación?- preguntó emocionadísima, la idea de saberlos bien me maravillaba.

-         Sip…- sonrió. No pude aguantarme las ganas y me lance, delicadamente, a los brazos de mamá, quería besarla y felicitarla- gracias por lo que me toca- papá empezó a subir las escaleras, pero antes de que se fuera lejos de mí me abalance a su espalda y lo abrace muy fuerte.

-         Te amo- dije.

-         Y yo- respondió, a Grece le costo mucho abrazarlo, pero después cedió, se notaba en sus ojitos lindos lo emocionada que se encontraba por la situación.

Mamá nos pidió que fuéramos a almorzar. Le hicimos caso, cuando escuchamos unos gritos salimos muy preocupados. Después tío Jake nos dijo de la maravillosa noticia. Lo único que hice fue abrazar a Ian, necesitaba darle las gracias por tener un padre tan maravilloso y talentoso. Me puse a llorar de la felicidad. Era la mejor noticia de mi vida… mamá tenía enormes posibilidades de vivir, de ver crecer a mi hijo, de ella poder tener más hijos, él sueño que tenían con papá.

-         Dime que sí…- pidió.

-         ¿Qué?- no entendí la pregunta, estaba absorta en mis maravilloso pensamientos, donde veía a mamá con larga vida.

-         Solo dime que sí, es una sorpresa…- volvió a agregar.

-         Ok… entonces digo si- agregué besándolo, en eso también me parecía a mamá, no me gustaban las sorpresas, pero si venían de él, las aceptaba gustosamente.

-         Entonces ve por un abrigo- le dije.

-         Ok…- me cambié la ropa, no me sentiría cómoda con la ropa del colegio. Me puse un vestido hermoso que fomentaba el pequeño volumen de mi vientre. Así que con él si que parecía embarazada.

-         Bella, Edward- habló Ian visiblemente nervioso- quería pedirles permiso para poder ser novio de Nessie y poder llevarla a pasear y cenar… de ante mano juro cuidarla con mi propia vida… a ella y a nuestro… bueno… al niño- sonreí al apreciar que él tenía la intención de decir nuestro bebé.

-         Tienen nuestra bendición- agregó papá risueño, creo que también noto el detalle que yo aprecie- solo te pido que la traigas a una hora prudente y que no hagan nada… bueno nada malo- me sonroje un poco. Ian miro a Jake.

-         No hay problema hijo, los Cullen me invitaron a cenar, le diré a Bry que venga- agregó mirando a mis padres.

-         Suena genial- dijo mamá que se veía hermosa, con sus ojos abnegados de ilusiones.

-         Gracias…- agregó otra vez mi suegro.

-         Ok… ¿nos vamos entonces?- me preguntó, asentí.

-         No hagan nada malo- agregó muy serio papá.

-         Créeme, no haremos nada “MALO”…- acentué para que se diera cuenta de mi doble sentido- aparte ¿catalogarías como malo lo que hacen tu y mamá?- pregunte riendo. Todos quedaron boquiabiertos, incluso Ian estaba perplejo.- no te sorprendas, ya sabes como soy- le dije riéndome de lo lindo.

-         Por eso te amo- agregó acercando sus labios a los mió, fue un beso tierno, el mejor hasta ahora, porque claramente no sería el mejor del día. Por fin este hombre había vuelto a mí. Por fin lo tenía devuelta, por fin podía ver brillar en mi interior la luz de la felicidad, mi propia felicidad.

-         Yo te amo más, por que te amo por dos- agregué guiando sus manos hasta mi barriga. Ambos sonreímos y nos dejamos envolver por aquella luz tan especial, ella luz que nos llenaba de vida.

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chicas siento mucho el retraso... pero no e podido subir antes.... igual quiero agradecer el apoyo a todas....

vi remember me y me dejo O.o.... que perdida...

jaja

ni de verdad me dejo marcando ocupado....

las quiero mil