Daniela, ese color se veía precioso en ella, cada vez estaba más cómoda con nosotros, la amábamos mucho, ya era una hija más para mi, y Diegito mi otro nieto.
 
Renesmee, no me gustaba que se pusiese un vestido tan corto, más encima por el hecho de que vendría Gastón, no quería problemas, pero bueno, solo espero que su padre no se disguste mucho.
 
Grece, mi niñita siempre con su gran estilo ayudado por la loca de su tía Alice.
 
Esme, mi suegra tan linda y elegante como siempre.
 
Rosalie, terriblemente hermosa, ella era capaz como siempre de dejar mi autoestima en el suelo.
 
Emily, que cada día amaba y hacía más feliz a mi hijo… ella siempre con su estilo, es muy parecida a mi Grece.
 
Sarah, que digo, esta niña se estaba llevando de maravilla con mi Vlady, tal parece que en unos años más, quizás, terminemos siendo consuegros por partida doble.
 
Marina, no encontré lo mejor del mundo enviarle una invitación, pero Edward insistió y no me pude negar, así que bueno aquí esta.
 
Celeste, mi gran amiga, mi segunda madre, ella es perfecta, hermosa y estoy tan feliz de que mi Charlie la aya encontrado, esta tan bien, tan feliz con sus hijos, mis hermanos y esta esperando otro, se ve tan encantadora con su pancita, es magnifico, ahora por fin tengo una familia grande… ella es una gran mujer y verdaderamente la amo.
 
Marie, mi hermanita pequeña que es la viva replica de mi padre, mis 3 hermanitos son mi adoración completa, de vez en cuando Alec se viene a quedar a casa conmigo… no me canso de agradecerle a dios por habérmelos dado.
 
Charlotte, mi niña hermosa, igualita, igualita a la loca de su madre, es una Alice cualquiera que ahora obliga a sus primas, si parece que la historia se repite.
 
Alice, mi loca y leal amiga… es mi gran pilar, es perfecta pero un poquito mandona, en todo caso me encanta que me arregle porque siempre me deja perfecta, aunque jamás lo voy a aceptar… sería mi perdición total.
 
Por fin yo… no podía creer cuando me mostró mi vestido, me negué rotundamente pero cuando terminó y me miré al espejo, no podía creer lo bien que me veía, ese color y el vestido en si me sentaba muy bien, ya me imaginaba cuando Edward me viese su boca se abriría a más no poder. Me encantó, yo a esta mujer realmente lo amo.
  
Esme (nieta), preciosa mi niña, era igual de calladita y bajo perfil que mi Grece.
 
Britany, con la cual ya habíamos conversado y hoy por hoy estaban de maravilla con mi gran amigo.
 
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