Hola mi niñas hermosas quiero pedirles disculpas sé que he estado muy perdidas pero me han pasado muchas cosas estos meses, pero de nuevo estoy aquí gracias por estar pendiente y espero no se hayan olvidado de mi aquí les dejo este capítulo aunque es pequeño esta echo con  mucho amor tratare de volver actualizar más seguido  como antes. Las quiero a todas

Edward POV

Me sentía vacío al no sentir el calor del cuerpo de Bella a mi lado, inmediatamente abrí los ojos preocupado al ver que no estaba en durmiendo voltee a ver el reloj de mi mesita de noche el cual marcaba las 8 de la mañana, me levante lo más rápido que pude poniéndome el pantalón de mi pijama y corrí al baño pensando que tal vez estaba ahí que le habían dado las nausea matutinas, pero cuando llegue no estaba así que decidí ir a la cocina y ahí la encontré preparando el desayuno esta de espalda batiendo unos huevos, se veía tan sexy vistiendo sola mi camisa de pijama, me acerque lentamente abrazándola por atrás, ella pego un brinco cuando me sintió.

– Buenos días – Le dije besando su cuello y acariciando su vientre para darle los buenos días a nuestro bebé también.

– Mmmmm… buenos días amor, te levantaste temprano.

– Si, desperté y tú no estabas. – Dije recorriendo con mis manos sus pechos sobre la camisa y mordiendo el lóbulo de su oreja, lo cual hizo que soltara un gemido.

– Que…ría dejarte dormir un rato más y preparar el desayuno antes que los chicos y los niños se despertaran. – Me contesto reposando su cabeza sobre mi pecho

– Pero, yo ya estoy despierto y quiero desayunar.  –Le susurre al oído mordiéndole el lóbulo de la oreja a su vez.

– Dame…cinco… minutos… y…te… lo… preparo. – Me dijo volviéndose hacia mí y dándome un beso.

– Creo que no entendiste. – Le dije tomándola de la cintura y alzándola ella  me rodeo con sus piernas mi cintura. – Quiero desayunarte a ti. – Y diciendo esto la lleve de nuevo a nuestra habitación y la acosté sobre la cama.

– Oh, profesor Cullen sabe que si me desayuna llegara tarde al instituto. – Me dijo en tono jocoso.

– Eso no importa profesora Swan, porque ahora lo que único que me interesa es que te quites mi pijama y me dejes probar de ti.

***********

– Buenos días Bella, Edward.

Dijo Tyler cuando llego a la cocina, Bella y yo lo saludamos al mismo tiempo, él se sentó a la mesa y se sirvió un vaso de zumo de naranja, mientras Bella le servía unos huevos con tocino, cinco minutos después llego Reid acompañarnos cuando todos estábamos sentados a la mesa a desayunar oímos unos pequeños pasos que caminaban hacia a la cocina, Bella me observo y sonrió, se levantó y camino hacia la pequeña que se nota tímida ante nuestra presencia.

– ¡Hola! – Le dijo Bella poniendo de cuclillas para quedar a su altura, la pequeña solo sonrió tímidamente. –Espero que hallas dormido bien.

– Si gracias.

Bella la tomo de la mano y la llevo a la mesa donde todos le dimos los buenos días, mientras Bella terminaba de servirle el desayuno, un adormilado Anthony ingreso a la cocina, halo su silla se estiro y  nos dio los buenos días sin percatarse de la presencia de la pequeña Samantha.

– Buenos días mamita. Le dijo a Bella, acercándose y dándole un beso.

– Buenos días cielo. Le respondió Bella devolviéndole el beso.

Anthony se volteo hacia mí.

– Buenos días papá–Yo lo salude pasándole la mano por su cabello desordenado, luego se volvió hacia Tyler y Reid y los saludo. –Buenos días tío Reid, tío Tyler. –Aun un poco adormilado miro hacia donde está su amiga sentada. – Buenos días a ti también Sam. Le dijo tomando su zumo, Bella me volvió a ver y soltamos una risa, de pronto Anthony abrió sus ojos de par en par y como si creyera que aún estaba dormido se froto sus ojitos con sus manos.

– Hola Thony. –Le dijo la pequeña sonriendo, Anthony no salía de su impresión al ver a su pequeña amiga

– ¡¡¡SAM!!! –Grito cuando descubrió que no era un sueño. – ¿Qué haces aquí?

–Tu papá, tu mamá y tu abuelo fueron por mí anoche a mi casa.

La pequeña comenzó a contarle todo a Anthony como habían sucedido las cosas de pronto Anthony se levantó de la silla y se acercó hacia a mí y me abrazo.

– Gracias papá, por ayudar a Sam

– No fue nada te lo prometí anoche, ella estará aquí todo el día hasta que su padre regrese esta misma noche.

– ¡¡Hurra!! Que bien. –Dijo brincando y volviendo a su silla.

Todos sonreímos al ver como Anthony estaba feliz con su amiga en la casa, seguimos compartiendo el desayuno Sam se está empezando a sentir cómoda entre nosotros y Anthony está feliz porque su amiga estaba bien, Bella me tomo la mano y la apretó fuertemente la volví a ver me acerque a ella y le di un beso.

–Te amo. –Le dije sobre sus labios.

–Yo también.

– Papá. –Me dijo mi hijo yo me voltee a mirarlo. – Sé que estoy castigado, pero quisiera ver si me dejabas tocar una canción en el piano a Sam, yo se lo había prometido que la primera vez que me visitara tocaría para ella.

Volví a ver a Bella y ella solo asintió con la cabeza y una pequeña sonrisa

– Bueno hijo, creo que por esta vez te levantaremos el castigo, sé que lo hiciste por ayudar a Sam, pero aun así no estamos de acuerdo en que usaras la violencia así que si vuelve ocurrir tu castigo no será levantado.

– Lo sé y gracias. –Me dijo tomando de la mano a Sam y llevándolo a la sala de música, Bella empezó a recoger la mesa con ayuda de Tyler, mientras  Reid leía el periódico y yo terminaba de alistar mis cosas para ir al instituto.

– Es una niña, muy encantadora. – Dijo Reid, doblando el periódico y dejándolo sobre la mesa.

– Sí. –Respondió Bella, mientras secaba un plato que Tyler le pasaba lavado

– ¿Qué se siente ser suegra tan joven? –Le menciono en forma de burla, yo solo puse los ojos en blanco y seguí con lo que estaba haciendo, pero me distraje cuando oí el sonido de algo duro cayendo al suelo, volví a ver de dónde provenía el ruido y vi como Bella se sostenía del fregadero y se llevaba una mano a su pecho como si le faltara aire corrí a su lado, mientras Tyler estaba levantando los pedazos del plato que se había quebrado.

– ¿Amor que te pasa? –Le pregunte alarmado. –Tyler llama a mi padre dile que Bella no está bien.

Tyler corrió al teléfono, pero Bella hablo y todos la volvimos a ver.

– Mi bebé… –dijo con lágrimas en los ojos.

– Dios Bella, el bebé que le pasa al bebé te duele algo.  –Le dije acariciando su vientre.

– No. –Ella levanto su mirada hacia mí. – El bebé está bien, es Anthony él es  mi bebé aun y no quiero que crezca tan rápido.  – Se aferró a mi pecho con fuerza, solté un suspiro de  aliviado, abrace a Bella y bese su cabello, mientras la oí sollozar.

– Bella!!! – Dijo Reid algo avergonzado. – Perdón no era mi intención hacerte llorar sabes como soy de bromista, no pensé que te fueras a molestar menos hacerte sentir mal.

Bella saco la cabeza de mi pecho y se secó las lágrimas.

– Lo se Reid, es solo que con lo del embarazo estoy un poco susceptible las hormonas ya sabes.

Los tres nos miramos y suspiramos tranquilos.

– Amor, escúchame Anthony es todavía un niño todavía le queda mucho para seguir siendo tu bebé, así que no te preocupes créeme que él tampoco quiere crecer rápido, el tiempo nos dirá si Sam formara parte de su vida, por el momentos son niños y los mejores amigos. – Ella asintió y me dio un beso. –Ahora me voy al instituto estaré aquí para el almuerzo, luego iremos a Port Angels a escoger las sortijas de matrimonio y llevaremos  los niños.

– Este bien. –Me respondió, Reid y Tyler se retiraron dejándonos para despedirnos  a solas.

– Y otra cosa anoche se me olvido decirte que Alice quería saber quién iba hacer tu madrina. –Ella me volvió a ver y se mordió el labio.  – ¿Qué pasa?

– No sé a quién escoger, me refiero nunca he tenido amigas hasta que conocí a tus hermanas a las dos las quiero mucho, Alice me recibió con los brazos abiertos y nunca se enojó cuando Emmett y yo dijimos la verdad y aun así siempre quiso que fuera la madrina de Jaslice y aparte está cargando con la organización de la boda y bueno Rosalie sé que no empezamos con el pie derecho, pero me perdono y ahora nos llevamos muy bien.

– Sea cual sea tu decisión de madrina sé que ninguna se molestara contigo porque te quieren y velo de esta forma a la que no elijas de madrina para la boda podemos escogerla para madrina del bebé, a mí me costó mucho también escoger a mi padrino, sabes que Jasper siempre ha estado a mi lado y a pesar de lo que pasado en el pasado entre nosotros nos llevamos bien y bueno Em siempre ha si mi apoyo y mi confidente.

– ¿A quién elegiste como tu padrino?

– A Emmett y sabes porque. –Ella negó con la cabeza. – Porque él te trajo a mi vida, por él me enamore de ti, por él soy un hombre que se declara irremediablemente enamorada de su prometida, su mujer, la madre de sus hijos.

– Te amo. –Me dijo, poniéndose se puntillas para besarme yo la recibí con gusto poco a poco el beso se hizo más profundo hasta que un pequeño carraspeo nos hizo separarnos.

– Hey tortolos, la boda es para dentro de cinco días dejen  todo para la luna de miel–. Dijo una pequeña voz que conocía muy bien.

– Alice–. Dije. –¿Qué haces aquí tan temprano?

– Buenos días para ti también hermanito–. Dijo adentrando en la cocina con un montón de bolsas. – Bella me puso un mensaje anoche diciendo de la pequeña amiga de Anthony y me tome la libertad de traer algo de ropa nueva, no pensaras que la niña se quede con la ropa con la sacaron de su casa anoche todo el día.

Iba responderle cuando Rosalie entro con Jaslice en brazos seguido de Jasper y Emmett este último cargando un potro de prueba para ropa y Jasper con una funda de ropa donde venía envuelto algo.

–Buenos días –. Saludaron los tres, Bella corrió hacia Rosalie y le quito a nuestra ahijada y volvió a donde estaba yo.

– Mírala amor, esta preciosa nuestra ahijada–. Me dijo sonriendo, tome una de sus manitas y se la llevo a la boca.

A pesar de que tenía un mes y medio de nacida era una niña muy despabilada diría que igual a su madre.

– Es increíble como un hijo cambia tu vida. –Dijo Jasper. – Puedo decir que Jaslice ha sido una bendición para Alice y para mí.

– Lo se hermano y créeme que te entiendo Anthony también lo ha sido para mí y Bella. –Hablo Emmett.

– La verdad que es algo extraordinario aunque nuestro bebé este aquí aun –. Les dije acariciando el vientre Bella. – El domingo cuando escuche su corazón fue como si flotara en el aire un nuevo sentimiento aflora en ti y es indescriptible.

– Bueno es mejor que nos vayamos, vamos a llegar a tarde –. Dijo Rosalie con algo de tristeza y saliendo de la cocina, todos nos volvimos a ver, Bella me dio a Jaslice y salió tras Rosalie.

– Creo que debimos medir lo que hablábamos por lo menos ese tema enfrente de Rosalie –. Dijo Jasper con tristeza.

– Debió ser duro para ella, sabes lo que es cargar con un bebé nueve meses en tu vientre y que muera tres días después de nacer–. Dijo Alice, secándose unas pequeñas lágrimas.

– Y aun peor es pasar todo eso sola –. Dijo Emmett, con melancolía. – Si ella me hubiera dicho desde el principio yo…

– Emmett, él hubiera no existe –. Le dijo Alice interrumpiéndolo y acercándose a mí y cargando a Jaslice. –Es mejor que se vayan debo probarle el vestido de novia a Bella y necesito que tú no estés –. Me dijo frunciendo el ceño.

Emmett dijo que nos alcanzaría en unos minutos que iría a ver a Anthony, cuando salimos al jardín Bella y Rosalie estaban abrazadas.

– Nos vamos –. Les dije a los chicos.

– Yo  no iré, llamaré al instituto y pediré el resto de la semana –. Dijo Rosalie.

– ¿Y eso porque? –Pregunto Jasper.

– Quiero ayudar a Alice y a Bella con los preparativos de la boda

– Siiiiiiiiiii –. Grito Alice.

– Además si voy a ser la madrina de Bella creo que debo involucrarme mas ¿no crees Alice?–. Le dijo Rose guiñéndole un ojo a Bella.

– Claramente. Dijo Alice. –Bueno me alegro de que por fin ya escogieras a tu madrina ahora vamos a terminar con lo que falta más rápido.

Después de que Emmett llegara nos despedimos de las chicas y nos pusimos en marcha al instituto.

*******

– ¡Me gusta mucho estos! –

Me dijo Bella tomando un par de sortijas de matrimonio entre sus dedos y mostrándomelas, las tome en mis manos y las observe con detenimiento. Las sortijas eran de oro blanco con pequeñas hendiduras en las cuales se rellenaban con pequeños piedrecillas blancas redondas.

– A mí también. –Le respondí con una sonrisa. –Hace juego con tu sortija de compromiso. – Me volví hacia el encargado de la joyería. – Nos dejaremos estas. – Le dije – ¿Cree que estén para el viernes?

– Excelente elección son unos anillos preciosos y son únicos tengan la seguridad que no conseguirán otros iguales al menos que los paguen a confesional y no se preocupen para el jueves al medio día estarán, solo permítanme tomar la talla de sus dedos, como puede ver señor Cullen la banda de su anillo es más ancha que el de su prometida esto para que sea más masculino pero tiene el  mismo estilo.

– ¿Entonces no hay ningún problema para el jueves? –Le pregunte, el asintió simplemente.

Después de pagar las sortijas salí con Bella al área de comidas en donde Tyler se encontraba con los niños, mientras caminábamos íbamos tomados de la mano Bella iba pensativa como si algo le preocupara.

– ¿Qué pasa? Te noto pensativa

–No es nada no te preocupes.

Pare en seco y hale a Bella hacia mí, sabía que algo le pasaba.

– No me mientas sé que algo te pasa y quiero saber que es

– Es todo esto, la boda, los anillos, el vestido, la fiesta, todo tu… –No pudo terminar de decirlo porque se soltó a llorar, la atraje a mi pecho abrazándola.

– ¿estas arrepentida? – le pregunte temeroso de su respuesta, ella levanto su cabeza y me miro a los ojos lleve mis manos a sus mejillas y con mis pulgares le seque las lágrimas. – Es eso estas arrepentida de la boda de casarte conmigo si es eso podemos suspender todo.

– No, yo no estoy arrepentida es solo que… –Tomo una profunda respiración. –Tu estas pagando por todo el vestido, los anillos, la tiara, la fiesta y yo siento que me estoy aprovechando de ti, no puedo ayudarte económicamente en nada, Alice consiguió como treinta vestidos de novia y todos eran muy costosos cuestan el triple de lo que yo gano en un mes como profesora y los anillos salieron aún más costosos.

– Es eso lo que te preocupa el dinero por eso le dijiste a Alice que no querías comprar el vestido si no alquilarlo.

–Sí, es que si lo consigo alquilado yo poder pagarlo y tú no te tendrás que hacer cargo de eso.

– Bella amor, no me importa pagar por tu vestido, ni por nada de nuestra boda, todo lo que tengo es tuyo y de Anthony por favor acepta que yo cubra todo lo de la boda, sí.

– Entonces déjame pagar la mitad de los anillos.

– No

– El banquete

– No

–No es justo yo quiero ayudarte con algo referente a la boda.

– De verdad quieres comprar algo para el día de la boda. – le pregunte, ella asintió. –Bueno tengo una idea de que puedes comprar para ese día y no me opondré en que uses tu dinero.

–En serio y que. –Me pregunto curiosa, la tome de los hombros y le di vuelta, me acerque a su oído y le hable suavecito.

–Vez la tienda del frente, te dejare que compres algo para nuestra boda de ahí.

– Ed…Ward. – Dijo conteniendo la respiración y podía sentir el calor de sus mejillas se había sonrojado

– Quiero que te compres algo sexy para mí, para nuestra noche de bodas, ¿lo harás?

– Es..ta bi..en. – la tome de la mano y la lleve a la tienda donde se veía el gran letrero de VICTORIA SECRET´S  

Bella POV

Los días pasaron en un abrir y cerrar de ojos y gracias a una Alice ágil logro organizar todo lo de la boda sin necesidad de postergarla ni una semana más a pesar de su insistencia, hoy era viernes y estábamos esperando el vuelo con destino a Phoenix donde se realizaría nuestra boda mientras esperamos a que nos llamaran a aborda recargue mi cabeza en el hombro de Edward, donde el aprovecho y paso su mano por encima de mi hombro para halarme más hacia él.

– ¿Nerviosa? – Me pregunto

– No, solo estoy feliz Edward, me parece un sueño que mañana seré tu esposa, a veces creo que voy a despertar de este sueño tan maravilloso.

– Tu eres mi sueño hecho realidad Bella – Me dijo dejándome un beso en mi cabello. – ¿Te gusto mi regalo de bodas?

– Si mucho, eres increíble cómo pudiste organizar todo en tan poco tiempo.

– Tengo una madre que le gusta la decoración y dos hermanas muy creativas, pero debo reconocer que tuve u ayuda de mi nana ella me mando mi cuna y algunas otras cosas de cuando era bebé para decorar el cuarto de nuestra hija y  bueno y tu padre también ayudo con algunas de tus cosas de bebé incluyendo tu cuna.

Sonríe  recordando el día de ayer cuando Edward me dio mi presente de bodas fue algo increíble y hermoso.

Flash Black

Edward había organizado  una cena en la mansión el jueves como celebración cuando Alice dijo que ya lo de la boda estaba cubierto y que por tal motivo era la parte de hacer las despedidas de solteros cosa que a Edward y a mí no nos gustó mucho, pero gracias a la oposición rotunda de mi prometido eso no se hizo, la sola idea de que Alice me llevara un bar de stripper no le gustó mucho y menos a mí cuando Emmett dijo que llevarían a Edward a un burdel inmediatamente Edward organizo una cena donde todos nuestros amigos e invitados a la boda estuvieron incluyendo a Martin el padre de Samantha el cual estaba muy agradecido por ayudar y cuidar a su hija.

–Quiero proponer un brindis –. Dijo Carlisle levantando su copa. – Por mi hijo Edward aunque no lleva mi sangre lo considero mi hijo al igual que los demás, Edward hijo te deseo la mejor de la felicidad te llevas a una gran mujer, una luchadora, un ser maravilloso, cuídala, amala pero todo respétala ella se lo merece. Y por Bella mi hija la que por cosas del destino nos conocimos en una situación difícil, pero en ese momento supe que serias parte de mi familia algún día no te digo que bienvenida a nuestra familia porque siempre lo has sido, has sido parte de esta familia desde el momento en que Emmett te salvo de morir atropellada en la universidad, nos diste un gran regalo un nieto maravilloso y uno que está en camino y créeme hija que te lo agradecemos y te queremos así que ¡salud! 

–SALUD– dijeron todos – POR EDWARD Y BELLA

Edward entre enlazo su copa con la mía mientras los demás brindan con champan Edward y yo lo hacíamos con jugo de uvas, él lo hacía en forma de solidaridad ya que yo no podía beber nada con alcohol así que si yo no podía él no lo aria. Edward me volvió a ver y sonrió pícaramente

–Preparada para tu regalo de bodas? – Me pregunto quitándome la copa de mis manos y pasándose a las Esme y esta a su vez le entrego una llave. – Bella, esta llave contiene mi regalo de bodas es para demostrarte lo feliz que me haces no solo por aceptar ser mi esposa que sino por darme el mejor regalo nuestro bebé. – Dijo posando mi mano en ese pequeño bulto que había empezado a notar desde el miércoles.

– Edward yo…

– Shhh no digas nada. – Me tomo de la mano y camino hacia Anthony quien tomo mi otra mano.

– Vamos mami te va a gustar yo también ayude. –me dijo mi hijo brincando de felicidad y halándonos a mí a Edward hasta el último piso de la casa donde estaba la habitación de Edward cuando llagamos Anthony se detuvo frente a la puerta que era ante4s de la habitación de Jasper –Vamos mami ábrela.

Edward me paso la llave la cual introduje lentamente cuando oí el clic tome el pomo y la abrí cuando la puerta se abrió lentamente me quede paralizada cuando observe con detenimiento la habitación, la que solía  ser la habitación de Jasper ahora era una habitación del bebé está pintada de amarillo suave, había un mueble para cambiar al bebé, una mecedora un pequeño estante con algunos peluches, pero lo que me llamo la atención era ver dos cunas una en celeste y la otra.

– Oh por Dios, es mi cuna. – Le dije a Edward.

– Si Charlie me la dio el día que fuimos a cenar a su casa y la otra es la mía, mi nana me la envió.

Camine hacia las cunas y acaricie suavemente las dos.

–Son lindas.-Dijo Anthony– ¿Pero porque dos, papá?

– Bueno…. Veraz – Se pasó la mano por el cabello. – Como aún no sabemos que será decidí poner las dos para tener una idea, cuando sepamos el sexo del bebé desmontaremos la que no ocupemos y la guardaremos para el próximo. – Me volvió a ver nervioso – ¿Te gusta?

– Por Dios Edward me fascina, gracias, gracias, gracias… – Le dije besando apasionadamente.

– Maní, Sam me ayudo con esto. –Anthony me entro un pequeño portarretratos – Es una foto mía, la otro  es de Christopher y la foto de mi hermanito, quiero que vea que lo amo tanto como a Christopher. –No pude evitar que unas lágrimas surgieran.

– Gracias hijo esta hermosa que te parece si la colocamos aquí en la mesita de noche y cuando sepamos que cuna usar la colocaremos cerca de ella. –Mi hijo asintió feliz, Edward me halo hacia su pecho abrazándome a mí y Anthony

– los amo a los tres, gracias por llegar a mi vida.

–Gracias a ti por aceptarme con mi pasado.

– Y a mí por convertirte en mi papá.

Los tres nos miramos y nos quedamos un rato así abrazados como la familia que ya éramos

Fin Flash Black

Sentí cuando Edward me beso la nariz.

– ¿Soñando despierta? – Asentí tímidamente. –Bueno despierta porque es hora de tomar un avión, ¿quieres ir al baño primero? Emmett anda con Anthony.

– Si, es preferible no me gustan muchos los servicios sanitarios del avión.

Edward se levantó de su asiento me tomo de la mano y me ayudo aponerme de pie y acompaño a la puerta del baño.

– Te espero aquí– Me dijo yo asentí ingrese, cuando salí me sorprendió ver a Edward mirando a Emmett con detenimiento.

– ¿Qué le vez tanto a Emmett?

– No se creó que son cosas mías, pero desde unos días atrás lo noto extraño  algo nervioso y ansioso sin decir que vive pegado del celular.

– Yo no le he notado, aunque si he notado las miradas entre él y Rosalie crees que esos dos hallan vuelto y no quieran decir nada.

– Ayer en la cena vi algo pero no estoy seguro, durante la cena vi como Emmett se levantó de la mesa dijo que iba al baño luego Rosalie le ingreso una llamada y se retiró los dos duraron mucho en llegar de nuevo a la mesa y cuando lo hicieron los dos llegaron nerviosos. –Edward tomo mi mano. –Sea lo que sea espero que sea para su felicidad, ahora vamos el vuelo está por salir.

– Si, Dios me libre si pierdo el vuelo no puedo dejar a mi novio plantado en el altar. –Le dije dándole un codazo.

– Antes te llevo cargando antes de que me hagas eso.

– No te atreverías.

– Claro que sí, ¿quieres ver?

– Edward Cullen ni se te ocu…. EDWARD NO!!!

Grite cuando sentí que Edward me levantaba del suelo y me cargaba al estilo de novia.

– Con permiso, con permiso… – Le decía Edward a las personas pidiendo campo, yo oculte mi cara en su cuello de la vergüenza. – Debemos tomar un avión porque esta señorita y yo nos casaremos mañana y no podemos perder ese vuelo.

Oí como la gente reí y otros nos felicitaban.

– ¡Amor!. –Me llamo Edward, levante mi cabeza para verlo. –Te amo

– Y yo a ti Edward

En ese momento no importaba donde estábamos nos fundimos en un beso lleno de amor y pasión, un beso donde la felicidad era lo más importante para los dos, sabíamos que debíamos tomar una avión pero no era solo un avión era nuestro avión a nuestra felicidad, el avión de Edward y Bella.

 Hola quieros decirle que estoy publicando esta historia en FF, también apenas voy por el capítulo 6 me arriesgue al principio me dio nervios pero mis amigas me animaron y ahi voy.

Por ahi me encontre a ALEVILSA, gracias por tu rewien que me dejaste FF eso me motiva a seguir adelante.

Las quiero a todas espero pronto sus comentarios

Besiticos