Bella POV

- Mami, papi, no quiero que regresen a Forks. Nos dijo Anthony triste. – Por que no se quedan aquí y somos toda una sola familia.

– Anthony. Le hablo Emmett, cargándolo en sus brazos. – Ya hemos hablado de eso, sabes que tu mami debe curarse primero para todos vivir juntos.

–  Lo se, solo que no me gustan despedirme de ustedes siempre.

– Cielo. Le dije. – Sabes que te amo verdad, eres lo más importante para mí, te prometo que para final del semestre todos estaremos reunidos.

– Mami de verdad me lo prometes.

– Si, hijo y creo que te mudaras a Forks con nosotros. Le dijo Emmett, poniéndolo en el suelo.

– Yupi!!! Decía brincando. – Así mi tío vaquero me dará mis clases de montar.

– Dios santo. Dijo Emmett bufando. – Te juro que Anthony no conoce a Alice y tiene sus mismas mañas no se donde aprendió eso.

Todos volvimos a ver a Tyler.

– Así ahora échenme la culpa de las mañas que aprende su hijo. Dijo este haciendo un puchero estilo Alice.

Pasajeros del  vuelo 315 con destino a Port Angels por favor abordar por la puerta G5

–Ese nuestro vuelo. Me dijo Emmett. – Hora de la despedida.

– Si pero primero abordan los de primera clase. Le dije, abrazando a Anthony y dándole un beso.

– Por eso tenemos que abordar. Me dijo abrazando el Anthony esta vez él.

– Compraste los pasajes de primera clase. Le dije molesta.

– Vamos Bells, solo por esta vez. Me dijo.

– Ya que ni modo que perdamos el vuelo. Le dije. – Pero eso no quiere decir que este contenta contigo.

– A papi le va ir mal con mami. Dijo mi hijo riéndose.

– Anthony hazle caso a tus abuelos y a tus tío y por favor aléjate de ese niño que me pego con el palo de la piñata. Le dijo Emmett sobándose la cabeza, todos soltamos la risa.

Después de la triste despedida Emmett y yo abordamos el vuelo, para mi mala suerte me gusto mucho la primera clase aunque muy ostentosa para mi gusto.

– En que piensas. Le dije a Emmett que miraba por la ventanilla

– En nuestro hijo, me gusta venir a verlo pero no me gusta la despedidas. Me dijo triste.

– A mi también. Le dije recostando mi cabeza a su hombro.

– Siento que crece muy rápido y me estoy perdiendo de muchas cosas de él. Me dijo

– Lo se yo también lo siento.

– Pero solo un mes mas y no estaremos separados de él. Dijo besándome en el cabello.

Emmett y yo habíamos hablado el día que Caleb llevo Anthony a la boda de mi padre que después de que finalizara el semestre llevaríamos Anthony a vivir a Forks, yo aun vivía con mi padre, pero Carlisle y Esme le obsequiaron una casa a Anthony la cual ya estaban por terminar de construirla era algo pequeña estaba en el patio trasero detrás de la casa de Charlie, porque sabia que si me la daban a mi no la aceptaría y mientras Esme la remodelaba yo seguiría con mi padre y Sue.

El vuelo se nos hizo corto nos quedamos dormidos todo el viaje, la fiesta de cumpleaños de Anthony nos había dejado exhausto, principalmente al pobre Emmett, que los niños lo agarrón como el payaso de la fiesta, lo consumieron en la piscina de pelotas, le agarrón como el burro para ponerle la cola, lo embarraron de pastel, lo confundieron con la piñata, que no le hicieron.

Cuando llegamos a Port Angels, mi hermoso ángel nos estaba esperando, donde lo vi corrí a sus brazos

– Mi princesa. Me dijo abrazándome

– Te amo, te extrañe.  Le dije besándolo y el cual el me correspondió ese momento era el nuestro nada ni nada nos separaría claro con excepción de Emmett que nos interrumpió.

– Siento interrumpir, pero estoy cansado. Dijo

– Que tal hermano. Le dijo Edward. – ¿Cómo estuvo todo?

– Hola Ed, te juro hermano que prefiero mil veces a los chicos del equipo de futbol que un montón de niños mal educados, gritones. Le dijo, yo solté una risita baja de solo acordarme de las torturas que fue sometido el pobre por los amigos de Anthony.

– Veo que te divertiste. Le dijo Edward riéndose,  me tomo  de la mano y salimos del aeropuerto. – Esme nos espera para almorzar Jasper y Alice llegaron ayer en la noche.

– Si Jasper nos dijo ayer. Le dijo Emmett, cuando íbamos en el volvo, volví a ver a Emmett por el espejo retro visor, al verme comprendió que había cometido una indiscreción.

– No entiendo como que Jasper les dijo. Le pregunto Edward, yo inmediatamente le conteste.

– Es que Jasper llamo a Emmett ayer para decirle que estaba en Phoenix esperando el vuelo para viajar a Forks. Le dije algo nerviosa, pero la verdad era otra.

Flash  Black

Estábamos en el jardín de la casa de Emmett que había comprado para después que Anthony  nació en Phoenix, donde vivimos dos años casados celebrando el cumpleaños de Anthony, cuando el timbre sonó.

– Yo voy. Dije, al ver que Emmett era perseguido por un ejercito de niños que jugaban pongámosle la cola al burro con la diferencia que habían cambiado el nombre al juego por pongámosle la cola al gran oso, camine hacia la puerta aliviada de no oír tanta ruido, pero al abrirla me lleve una gran sorpresa. –Tu!!!, que haces aquí???. Le pregunte nerviosa.

– Hola Bella. Me dijo. – Puedo pasar??

No pude decir una sola palabra, solo asentí con la cabeza y el paso, yo cerré la puerta y camine hacia el living, el me siguió.

– Toma esto es para Anthony. Me dijo entregándome una caja enorme de regalo. – Es sola una parte, el resto se la daré después. Yo la tome nerviosa y la puse sobre la mesa de centro. – Espero no te moleste mi presencia.

Yo aun estaba en shock, cuando reaccione pude hablar.

– Como conseguiste mi dirección??? Le dije

– Llame a Caleb y me la dio.

– No entiendo. Le dije sentándome en un sillón, el hizo lo mismo y se sentó a la par mía.

– Sabes me gusta mucho tu casa, tiene un calor a hogar como la nuestra.

En ese momento Emmett entro a la sala.

– Bella, sabes donde quedaron las velas del pastel de Anthony??? Dijo, sin percatarse de la presencia del invitado, cuando lo vio quedo en estado de shock igual que mí.

– Hola hermano. Le dijo Jasper. Emmett reacciono

– ¿Jasper que haces aquí? Le dijo

– Se que se sorprenden que este aquí, pero supe por Edward que era el cumpleaños de Anthony y quise venir a dejarle un obsequio. Nos dijo

– Un momento como supiste nuestra dirección, porque Edward no sabia. Le dijo Emmett molesto.

– Fue Caleb. Le respondí yo.

En ese momento Anthony entro corriendo a la sala.

– Mami, mami vamos a cantar cumpleaños para luego abrir mis obsequios. Me dijo brincando.

– Hola Anthony. Le dijo Jasper, Anthony se volvió hacia él.

– Hola!!! Le dijo.

– Guao!!! Ya eres todo un hombre. Le dijo Jasper agachándose para quedar  a la altura de él.

– Gracias, pero quien tu quien eres???

– Creo que tu papá te hablado de mi. Le dijo, ¿como? Dijo tu papá, Emmett y yo nos volvimos a ver desconcentrados Jasper sabia la verdad. – Soy tu tío Jasper. Le culmino diciendo.

–Mi tío Jasper. Dijo Anthony, brincando de alegría. –eres mi tío el vaquero.

– Bueno creo que ese soy. Le dijo Jasper abrazándolo, yo estaba en completo estado de shock y tuve que sentarme, Emmett estaba paralizado a mi lado.

– Mi tío, ya conocí a otro tío. Decía Anthony. – La tía Alice, no vino contigo

– No ella se quedo en el hotel descansando, es que en un par de horas saldremos a Forks, pero debes guardarme un secreto sé que eres muy bueno para hacerlo. Mi hijo asintió con la cabeza. – Tu tía Alice no sabe que yo vine hasta aquí ella no aun sabe que Emmett es tu papá así que entenderás que…

– Que cuando la conozca debo decirle que mi papa es mi tito, como lo hice con tío Edward el día que fui a Forks.

– exacto eres un niño muy inteligente, ahora me gustaría hablar con tus padres asolas. Le dijo.

– Esta bien, pero no te vayas sin despedirte.

– Lo prometo. Le dijo Jasper y Anthony salió para el patio feliz, Jasper se volvió a sentar a mi lado. –Bueno creo que se preguntaran como se la verdad.

– Desde cuando lo sabes? Le pregunto Emmett.

– Desde que Rosalie los descubrió en tu departamento juntos, ese día yo también había viajado con ella, me quede en el hotel y fui ahí que Rosalie llego llorando y me conto todo.

– Pero porque te has quedado callado todo estos años??? Le volvió a decir Emmett.

– Al principio por Rosalie, no quería que sufriera mas al saber que Carlisle y Esme te apoyaban en todo, sé que ellos lo saben y sé que ustedes se casaron dos días después de que Rosalie te visito y que se divorciaron a los dos años,  así mismo se lo que le sucedió a Bella y el motivo por lo cual tu no fuiste por tres meses a Forks.

– Un momento. Le dije. – tu sabes lo que me sucedió realmente.

– Lo descubrí hace cinco meses cuando me contaste lo de tu exnovio, cuando paso todo que Rosalie te descubrió en el departamento de Emmett y ella se fue pague un investigador privado para saber de ustedes, pero siempre me decía lo que ya sabia que se habían casado, que iban a tener un hijo, pero no fue hasta el día que paso lo de James que empecé atar cabos solo y volví a pagar otro detective y el me confirmo lo que suponía, bueno claro nunca me imagine lo que realmente te paso. Me dijo tristemente.

– Por eso tu cambio conmigo. Dije. – En el evento llevaste a Porta porque ya lo sabias.

– Si, Bella todo estos años te odiado por hacer sufrir a mi hermana, pero al descubrir la verdad me di cuenta que tu eres la que ha sufrido mas con todo esto, cuando me di cuenta de lo que te paso, me sentí el hombre mas ruin y canalla del mundo te juzgue sin conocerte, sé que lo que te diga no te importa, pero me gustaría que me perdonaras. Me dijo

– Jasper yo no tengo nada que perdonarte, ustedes son los que tienen que hacerlo yo destruir la vida de Rosalie, la de Emmett y sin querer la tuya y ahora estoy haciéndola con la de Edward.

– Bella, no digas eso, Edward te ama y así como yo lo entendí él lo hará. Me dijo

– eso es lo que mas quiero.

– Emmett hermano, tu también perdóname, debí hablar contigo desde el principio y así ayudarte con todo.

– No tengo nada que perdonarte, te agradezco el que hallas venido es el mejor regalo de cumpleaños de mi hijo.

– Es un gran chico y tienes tus ojos Bella. Me dijo. – Y su cabello es… bueno.

– Carlisle dice que lo heredo de su abuelo. Dijo Emmett riéndose.

– Pero también tiene facciones tuya. Le dijo, viendo a Emmett, este lo volvió a ver con cara echa un  poema. – Se que suena absurdo, pero hace un mes me encontré unas fotos en el altico de la casa. Nos dijo sacando dos fotos de su chaqueta y los la dio.

– Quienes son estos niños? Pregunte.

– Este soy yo. Dijo Emmett. – Y este es mi padre cuando era niño.

– Pero son dos gotas de agua. Dije admirada.

 – Yo diría que tres gotas de agua. Dijo Jasper tomando una foto de Anthony que estaba en la sala y comparándola con las otras dos.

– Por Dios, tienes razón se parecen mucho los tres. Todo quedo en un silencio total ninguno de los tres dijo nada

Después de una hora de charla, de presentarles a mis madre y Phil a Jasper le cantamos cumpleaños a Anthony, para terminar abriendo los obsequios, Reid le regalo una guitarra, Tyler una cámara de video, Pogue video juegos y un Wii,  mi madre y Phil un piano nuevo, Emmett un equipo completo de futbol, Caleb dos pasajes de avión para viajar a Inglaterra lo curioso es que era de ida nada mas, Esme, Carlisle la casa en Forks,  mi padre el pequeño lote donde construían la casa, Edward le consiguió un mejor profesor de piano y bueno yo el mejor regalo no material si no decirle que pronto se iría conmigo  Forks.

– Y este es el mio. Le dijo Jasper. –Bueno una parte la otra esta en Forks, ábrelo a ver si te gusta.

Anthony abrió desesperado la caja enorme de regalo.

– Guao!!! Es un equipo para equitación. Dijo feliz. – Gracias tío Jasper, no sabes la ganas que he tenido de aprender a montar a caballo.

– Lo se por eso, te pague una membrecía en una escuela de equitación aquí en Phoenix para ti y para tu tío Pogue, sé que él es muy unido a ti y hacen  muchas cosas juntos.

– Gracias Jasper, pero no debiste yo solo podía acompañarlo. Dijo Pogue.

– Ja,ja,ja a tío Pogue le dan miedos los caballos. Dijo Anthony riéndose. Todos soltamos la risa y Pogue no dijo nada. – Y cual es la otra parte de mi regalo.

– Mira es esta. Le dijo Jasper sacándose una foto de su chaqueta y se la dio a Anthony.

– Una foto de un  ponny. Le dijo el.

– No es un ponny es un pequeño potro, tiene  dos meses y es tuyo.

– Mio. Dijo Anthony feliz.

– Si pequeño

– Jasper pensé que ese potro era para tu bebe. Le dijo Emmett.

– No era para Anthony. Le dijo. –Es de sangre pura y esta valorado en mucho dinero y ahora es tuyo Anthony, pero mientras estés aquí yo me encargare de cuidarlo, hasta que vayas a Forks.

– gracias Jasper. Le dije.

– Con gusto Bella, bueno es mejor que regrese al hotel sino Alice preguntara donde estoy, nos vemos mañana en Forks. Dijo despidiéndose de todos. –Cuídate. Le dijo abrazando a mi hijo.

–Te quiero tío Jasper, vuelve pronto.

– Lo hare. Le dijo saliendo de la casa.

Fin Flash Black

– Si, así fue. Dijo Emmett también nervioso

– Mmm ya, me extrañaste. Me dijo Edward  tomando mi mano y dándole un beso.

– Si y mucho. Le respondí

– él estaba ahí, me refiero a Caleb. Note un poco de celos en el

– No, viajo a Inglaterra a ver a su madre, pero creo que lo hizo para evitar verme. Dije resoplando.

– El padre de Anthony asistió. Dijo como cambiando el tema

– Si. Dijo Emmett contestado por mi – ese si es un gran padre sabes le regalo todo un equipo de futbol a Anthony hubieras visto su cara, ese tipo sabe lo que realmente quiere su hijo. Edward y yo soltamos la risa, si supiera Edward que Emmett mismo se esta tirando flores.

Cuando llegamos a la casa la primera en salir a recibirnos fue Alice, radiante y feliz con su una gran pancita de siete meses, Alice corrió hacia a mi para abrazarme, después de que Emmett y yo la saludáramos entramos en la casa, empezamos a subir a la sala y mi celular sonó.

– Es Charlie. Dije. – se me olvido avisarle que llegaba hoy. Dije devolviéndome al living, para contestar la llamada.

– Te espero arriba. Me dijo Edward ayudando Alice a subir. –Así hablaras con mas calma con el. 

Cuando termine de hablar con mi padre y le explique que ya había regresado se quedo muy tranquilo, decide subir a la sala, pero al pasar por la puerta de vidrio vi a Jasper sentado en una banca del patio, así que decidí ir a donde él estaba, estaba concentrado leyendo un libro así que no me oyó llegar.

– Hola. Le dije sentándome  a su lado.

– Hola Bella, como estuvo su vuelo.

– No me quejo volar en primera clase me puede llegar a gustar. El sonrió. – Que lees??. Le pregunte.

– Nada, solo me preparo para ser un buen padre. Me dijo enseñándome la portada del libro.

– Sabes que los libros no te dicen como es la realidad. Le dije.

– Si ya lo se. Me dijo cerrando el libro. – Es difícil ser padre?

– Un poco, pero todo esta aquí y aquí. Le dije señalándome la cabeza y el corazón.

– Pero tú y Emmett lo han sido buenos padres con Anthony.

– A veces creo que no he sido buena madre, estar alejado de él, negarle una vida como un niño normal.

– Bella pero todo lo has hecho por que no corra peligro eso no es ser mala madre. Me dijo tomando una de mis mano.

– Sabes cuando Carlisle me dijo que estaba embarazada mi mundo se me vino abajo, pero cuando me dijo que si quería podía interrumpir mi embarazo me negué rotundamente aun sabiendo las consecuencias que este traería.

– Esto de ser padres te cambia la vida verdad. Me dijo sonriendo mucho.

– Demasiado, pero lo harás bien no te preocupes. El me devolvió una sonrisa como agradecimiento, no pude evitar verlo a los ojos, esos ojos que desde el día que lo conocí me recordaba que ya lo conocía.

– ¿Qué pasa, Bella?

– Nada solo que tus ojos siempre me hace creer que ya te había visto antes, pero creo que es son solo ideas mías. Él guardo silencio por unos segundos hasta que hablo serio.

– Bella, tengo que decirte algo. Yo lo observe serio. – Tienes razón ya una vez nos habíamos visto, pero tu estabas a punto de quedar inconsciente.

– No entiendo. Le dije, cuando fue eso.

– Veraz, fue al otro día de que fue al hospital y te vi a ti a Emmett y a mis padres, decidí regresar al otro día al hospital y esta vez enfrentar a Emmett y a mis padres por burlarse de Rosalie y darte todo el apoyo a ti a la que creí que  le había  destruido la vida a mi hermana, llegue al hospital y subí a la habitación donde te encontrabas, me acerque lentamente la puerta de la habitación y pude oír la voz de un hombre discutiendo contigo adentro, tu estabas nerviosa y con algo de miedo, mientras el hombre que  no reconocí  te reclamaba cosas, yo abrí lentamente la puerta para escuchar bien pude verte de pie frente a tu cama sosteniéndote de una de las barandas de la cama descalza y temblando de miedo, el hombre estaba de frente tuyo yo no le pode ver el rostro pero estaba muy enfadado, te reclamaba cosas, que yo  no entendía, aun recuerdo todo la discusión. Me dijo y empezó a relatarme palabra por palabra–

–Tú crees que me voy a comer  ese cuento. Te dijo el hombre

–Tú sabes que no estoy mintiendo. Le decías tu temerosa.

––No me hagas reír. Te dijo acercándose a ti y tomándote de la cara fuertemente. – tu le dijiste que estaba lastimando, que te soltara, luego el pregunto por Emmett y que porque te había dejado sola ya que siempre estaba tan pendiente de ti, tu le respondiste que Emmett esta por llegar que se fuera, pero él te abrazo a la fuerza y trato de besarte, te soltaste en un temblar de miedo, él muy estúpido te dijo que si  no te gusta que te abrasara y te besara, como pudiste te soltaste él.

–Suéltame, no me vuelvas a poner una mano encima, porque no será Emmett quien te mate, si no yo oíste. Le dijiste. – el empezó a burlase de ti de tu condición económica de tus padres, luego te grito eras una oportunista como que lo dejaste a  el por Emmett y que lo habías conseguido embarazándote de él,  para subir de posición, y te juró que ese niño no iba a nacer, que tu eras de él  y  que no te compartiría. Te  zarandeo y haciendo que cayeras al piso, yo me dispuse a entrar a defenderte, pero  él se dio media vuelta caminando hacia la puerta yo me senté en una de la sillas del pasillo él no me vio cuando  salió de la habitación yo me incorpore de inmediato y entre a prisa a tu habitación, entre y vi a desmayada en el piso, me acerque y te empecé a hablar, tu abriste los ojos y viéndome a los míos lo único que me dijiste fue

– Mi hijo, no quiero perder a mi hijo. Te levante del piso y te acostándote en la cama y llame una enfermera, cuan la localice decidí salir del hospital, era lo mejor, creo que tú no estabas para reproches menos en tu estado de todos modos y además el bebé era inocente de todo lo que estaba pasando. Termino de contarme.

– Tú estuviste ahí ese día. Le dije llorando.

– Bella perdón sé que debí entrar y defenderte de ese  maldito, pero en ese momento la rabia por lo que supuestamente ustedes le habían echo a Rosalie era mas fuerte que la razón.

– No te culpo Jasper, solo que recordar es muy difícil para mí.

– Lo se, pero tengo entendido que te estas con el psicólogo y que las terapias van bien.

– Si, pero aun no recuerdo mucho. Le dije secándome las lagrimas el tomo una de mis mejillas en su mano y lo hizo por mi.

– Todo va estar bien. Me dijo yo le respondí con beso en la mejilla y luego lo abrace.

– Gracias, Jasper.

– No es nada, vamos debes tener hambre y no quiero ni imaginar si Edward nos ve aquí a los dos sentados solos, con lo celoso que es. Me dijo poniéndose de pie y dándome la mano, caminamos entre risas y bromas a la casa.

– Los celos de Edward son con todos o especialmente contigo. Le dije ya que tenia entendido que Jasper se había metido con la novia de Edward en la universidad.

– Con todos, aunque en el fondo aun desconfía de mi, así que mejor no darle motivos. Dijo abriendo la puerta para que pasara.  – Primero las damas.

– Gracias, muy amable caballero. Y los dos soltamos a reír, pero al entrar al living vi a Edward sentado en una silla con cara de pocos amigos, volví a ver a Jasper, este me dio una mirada que me decía te lo dije esta celoso. – Edward, amor que haces aquí. Le dije nerviosa.

– Bueno el almuerzo esta servido y baje por ti al living, pero como te vi tan feliz en el patio hablando con Jasper, no quise interrumpir. Me dijo serio.

– Edward. Le dijo Jasper. – No es nada de lo que estas pensando no mal intérpretes las cosas.

– No necesito mal interpretar las cosas cuando yo mismo las vi. Dijo. Más enojado

– Jasper, déjame sola con Edward, por favor. Le dije, este asintió y subió a la sala, cuando Jasper nos dejo sola me acerque a Edward. – Me vas diciendo que te pasa Edward, porque me tratas así y a Jasper también.

– Como quieres que este si bajo a buscarte y te veo con mi hermano acariciándote y tu le devuelves la caricia con un beso y un abrazo y todavía Jasper me dice que no malinterprete las cosas.

– Solo le estaba agradeciendo por el regalo que le hizo Anthony, por si no sabias le regalo un caballo. Le dije. –Luego me conto de lo nervioso que estaba por ser padre y me pidió consejos, la caricia que viste fue que estaba llorando porque le conté cosas de mi hijo cuando era pequeño, le dije que yo no creía ser una buena madre por dejarlo abandonado tanto tiempo y el me reconforto por eso le di un beso y lo abrace, pero si no puedes entenderlo lo siento por ti.

– Bella, perdón es solo que soy, soy…

– Un celoso, me celas con Jasper por algo que te hizo tu ex novia, lo siento Edward yo no soy ella y tampoco quiero otro exnovio celoso que me someta a sus celos y autoridad. Le dije subiendo a la sala, pude oír a Edward que venia detrás mio.

– Amor lo siento… me decía.

– Que pasa. Dijo Esme.

– Nada. Le dije. – Gracias por el almuerzo, pero se me quito el hambre, es mejor que regrese a casa de Charlie, gracias por todo. Le dije Esme abrazándola.

– Amor, por favor no te vayas, aclaremos esto. Me decía Edward.

– No hay nada que aclarar, odio tus celos, odio que no confíes en mí. Le dije.

– Peque como te vas a ir y un momento que paso, que te hizo Edward. Me dijo Emmett.

– Pediré un taxi. Le respondí. – Y Jasper les contara lo que paso

– Por lo menos déjame llevarte. Me dijo Edward.

– Edward que parte de que no quiero no entendiste. Le dije, bajando de nuevo a living, el me siguió, me tomo del brazo y me volvió hacia el abrazándome.

– Perdón, perdón, pero no te vayas así, te amo no quiero que me dejes por mis estúpidos celos. Me dijo sobre mis labios. – No soy nada sin ti. Me decía acariciándome con la nariz mi rostro, sentí como mi cuerpo flaqueaba. – Dime que me perdonas.

– Eeeddwarr… yo, yo. Le decía. – Si te perdono, me lo volverás hacer y yo no quiero vivir esa rutina no otra vez. Le dije esta vez soltándome de su abrazo, para luego salir de la casa sin mirar atrás sentí mi corazón se partía al hacerle esto, pero Edward se merecía una lección yo lo amo con todo mi alma pero no iba a permitir vivir con celos otra vez.

Salí hasta la carretera caminando, mi celular se había quedado sin batería y no pasaba ni un taxi, menos un auto y estaba a punto de llover, – genial. Dije, en eso vi como el volvo de Edward paso a mi lado y se detuvo, se bajo de su auto y lo rodeo para llegar a mi lado.

– Se que no quieres nada de mi, pero no te voy a dejar que camines a hasta tu casa estas muy lejos y esta zona es muy sola y puede ser peligrosa  y aparte va llover. Me dijo. – Así que…

No termino de decirme lo que iba a decir y me tomo de la mano abrió la puerta del copilo y me subió a su volvo me abrocho el cinturón cerro la puerta y corrió a subirse, encendió de nuevo el volvo y se puso en marcha.

Íbamos callados todo el camino yo miraba por la ventanilla de mi lado y el con su mirada fija en la carretera, solo hable cuando vi que tomo otro camino.

– ¿Para donde me llevas? Le dije enojada. –

– Te tenía una sorpresa preparada y quería mostrarte algo, pero las circunstancias hicieron que lo hiciera así. Me dijo triste. –Después que te lo enseñe te llevare a tu casa. Me musito

Llegamos hasta donde terminaba el camino, apago el coche y se abajo para dirigirse a mi lado me abrió la puerta

– de aquí seguiremos a pie. Me dijo señalando un sendero yo puse cara de pocos amigos. –Es solo un kilometro, confía en mi. Dijo extendiéndome su mano.

– esta bien. Dije no muy convencida, tome su mano y baje del auto deje mi bolso en el, empezamos a caminar el sendero era bruscoso, pero aun así Edward me llevaba de la mano.

– Ya llegamos es detrás de esa fila de arboles. Me dijo señalando con su mano. – Es mi lugar favorito cuando me siento mal o quiero estar solo me gusta venir aquí.

Caminamos despacio aun tomados de las manos, paso la fila de arboles Caminamos despacio aun tomados de las manos, paso la fila de arboles y quede maravillada con lo que vía mis ojos.

– Esto es hermoso. Le dije soltando su mano y caminando hacia un gran prado lleno de flores silvestres: violetas, amarillas y de tenue blanco al fondo se oí el caer  de una cascada de agua cristalinas, tome una flor la olí y empezó a dar vueltas felices, me sentía como Heidi cuando llego a vivir a la montañas de los Alpes con su abuelo.

– Te gusta. Me dijo sentándose en la hierba.

– Es hermoso no pensé que existiera un lugar tan hermoso como este. Le dije

– Vez ese otro sendero. Dijo señalándolo yo volví a ver. – Por ahí a dos kilómetros se llega a la casa grande, estamos en los terrenos de los Cullen.

– Edward, esto parece un espejismo.

– me alegro que te allá gustado, eres la primera persona aparte de mi familia que traigo.

Me quede callada no sabia que decir deseaba balancearme asía el y besarlo, pero Dios fui una idiota no debí reaccionar así, nos quedamos ahí media hora sin decir nada ninguno de los dos.

– Bueno creo que es hora de regresar. Me dijo poniéndose de pie. – Te llevare a tu casa. Yo me levante de donde estaba sentada no quería irme sin arreglar las cosas el me volvió a ver con ojos de tristeza. – Prometo que te daré tu espacio y no te presionare para que me perdones. Finalizando de decir esto me tomo de la mano y empezó a caminar yo me solté de su mano y me quede parada él se volvió hacia mi confundido.

– Edward, perdóname. Ahora era yo quien pedía perdón. –No debí reaccionar así, te amo y no quiero  estar lejos de ti.

Él se acercó rápidamente hacia mí y me tomo en sus brazos y me beso.

– Yo tampoco puedo estar lejos de ti. Me dijo cuando termino de besarme. – Y no tienes que pedirme perdón yo fui el tonto celoso, te prometo que hare lo posible para que no vuelva a suceder lo de hoy, pero debes tenerme paciencia.

– Lo hare, pero por favor bésame de nuevo. Le dije

El tomo mi rostros en sus manos y empezó a besarme, sentir su aliento en mi boca, su lengua rosando mis labios, no pude mas y me colgué a su cuello asiendo que los dos cayéramos acostados al suelo el encima mio.

– Ups. Dije el solo soltó una risa y siguió besándome.

– Sabes que lo que más me gusta de las peleas son las reconciliaciones. Me dijo mordiéndome el glóbulo de mi oreja.

– Espero que no se haga costumbre. Le dije mordiéndole el cuello.

– Aunch, eso dolió.

– A mi no. Le dije riéndome.

– así , ya vas a ver. Dijo haciéndome cosquillas.

– Eso es trampa. Dije, como pude logre salir de su agarre me levante rápidamente el hizo lo mismo.

– A donde crees que vas??? Dijo con una sonrisa maliciosa.

– Lejos de ti. Le dije echando a correr por el prado, el corría detrás de mi, parecíamos niños jugando, las risas y los gritos era lo que se oían de parte de lo dos.

– Te alcance. Dijo abrazándome por atrás y dando vueltas conmigo.

– Me mareo. Le dije, él se detuvo y me puso en el suelo yo me volví para que dar frente a él, nos quedamos viendo fijamente. – Te quieres ir ya. Yo le respondí con la cabeza que no. – Debes tener hambre no almorzaste.

– Un poco, pero tu tampoco almorzaste. Le dije.

– deberíamos regresar a mi casa, seria lo mejor… pero no lo deje seguir lo bese con deseo pasión desenfrenada él se soltó de mi beso. – Mmm o creo que podemos quedarnos un rato mas. Dijo enarcando una ceja. –Siempre y cuando tú quieras.

– Me gustaría quedarme aquí, pero ya es tarde mejor llévame a casa, tengo cosas que hacer. Le dije. –le prometí Anthony hablar esta noche con el y quiere que tu estés presente, quiere enseñarte un nuevo acorde que aprendió en el piano.

Desde que Anthony conoció a Edward le gano mucho aprecio, hablaban mucho cuando realizábamos las videos llamadas, principalmente desde que Pogue, Reid, Tyler y Caleb nos habían regalado una computadora para poder hacer eso posible esa era la sorpresa que me tenían el día del almuerzo en la casa de la playa y la verdad se los agradecí mucho.

– Ya le contaste a Anthony de lo nuestro. Me dijo cuando íbamos en su volvo.

– No, bueno pensaba hacerlo este fin de semana, pero me gustaría hablarlo con su padre antes.

– Crees que él se molestara cuando se entere que estas conmigo.

– No él ya lo sabe y esta muy feliz, solo es que Anthony todavía alberga la esperanza de ver a su papa y mama juntos y no se como tomara la noticia de que su madre esta enamorada de otro hombre que no es su padre.

– Y si la próxima vez viajo contigo y le decimos a Anthony juntos, cuando digo juntos es tu, yo y tu exesposo. Me dijo Edward tomándome la mano y ahora que le inventaba no podía sentarlo en la misma sala con mi exesposo sin que se diera cuenta que era Emmett. –No, piensas decirme nada.

– Perdón estaba pensando en que tener a los tres hombres que más he amado en mi vida en la misma sala debe ser complicado. Dije soltando una sonrisa fingida.

El solo siguió conduciendo hacia mi casa, mientras yo buscaba la mejor idea para evitar el próximo viaje sin que Edward buscara una charla con mi exesposo.

Hola mis amigas gracias por sus comentarios no sabes como me gusta verlas ahi siempre, DANNYFER gracias por tu saludos así que eres de México, mi sueño es algún día ir me gusta mucho sus tradiciones y costumbres yo soy de Costa Rica o sea una Tica.

Mi querida KRISTY_87, claro que no iba a dejar pasar sin mencionarte si eres mi fan #1, gracias por estar ahí siempre que actualizo, las quiero a las dos y a las demás que sé que están ahí pero que son lectoras fantasma de igual les agradezco

Besiticos desde mi hermoso país Costa Rica, nos vemos Pura Vida

JCullen