Disculpen la tardanza pero trate de hacerlo lo mas largo que pude, nos vemos en la proxima nota...

EPILOGO.-

BELLA POV.-

La luz de la ventana se filtro, chocando directamente con mi piel desnuda, lentamente me removí, sintiendo un fuerte pecho pegado a mi espalda y una mano aferrada a mi cintura, inmediatamente los recuerdos de la noche anterior llegaron a mi, recordándome la gran noche movida, pasional y llena de ternura que viví con mi marido.

Sin que él se despertara quite su pesada brazo de mi cintura y dejando un suave beso en sus labios me puse de pie, camine por la habitación esquivando la ropa que había sobre el suelo, puesto que ayer el reloj apenas toco las doce de la noche me dedique a darle parte de mi regalos de cumpleaños a Edward, dentro de este fue una noche a puro amor en silencio obviamente, ya que al otro lado del pasillo teníamos a nuestros dos angelitos.

Me coloque la ropa interior y la camisa de Edward bajaría a hacerle el desayuno y a despertar a los niños.

Volví a caminar en silencio luego de higienizarme y marcar un pequeño punto en el almanaque puesto que con el pasar de los días una duda grande aumentaba en mi, solo tenia que confirmarlo, cuando llegue al pasillo cerré la puerta con mucho cuidado de no despertar a Edward, apenas me di vuelta para ir a las escaleras dos pares de ojos me miraban soñolientos.

Mami, es hora – dijo Anthony acomodando su piyama.

Papi pimple años! Quedo saludar! – dijo Renesmee con sus 5 añitos, si así como escucharon habían pasado exactamente 5 años desde que nuestra pequeña porotita llego a nosotros.

Nuestra porota era como todos sabíamos la nena de papa, tenia unos rizos color café al igual que los míos, pero sus ojos eran grandes y color verde, bien llamativos, su figura era pequeña también igual a la mía. Pero lo más sorprendente de Renesmee era que no había quien logre separarla de Edward.

Renesmee dio sus primeros pasos con Edward, al igual que Anthony, Su primera palabra fue “papa” al igual que Anthony, al primero a quien sonrió fue a Edward y con quien mas reía era con su padre, quien no dejaba de decir que ella era su pequeña princesa.

Durante los años que pasaron Edward y yo estuvimos lo mejor de nuestras vidas, ver a Anthony crecer y entrar al colegio, a diferencia de nuestra pequeña, Anthony siempre estaba conmigo, Edward obviamente siempre trataba de dividirse en dos y debo admitir que lo hacia muy bien, pero el puchero de su hija junto con sus ojos entristecidos lo podía mas que cualquier cosa.

Anthony sin embargo era mas libre, le gustaba pasar los fines de semana junto con su abuela y su nuevo abuelo, Gerardo, puesto que este ahora vivía con Esme y ambos eran un matrimonio muy bello. Ambos disfrutaban de la compañía de su nieto a diario y no paraban de consentirlo al igual que a Renesmee, ella cada vez que Anthony se iba a dormir a la casa de sus abuelos, se quedaba con nosotros y dormía abrazada a su padre.

Mama, podre hoy ir a la casa de los abuelos? – pregunto Anthony sacándome de mis pensamientos.

Eso tienes que hablarlo con la abuela, pero recuerda que hoy en la noche vienen todos a festejar el cumple de papi – señale sacando la fruta de la heladera.

Mami, tego degalo pada papi – señalo mi pequeña con su piyama rosa a rayas blancas, unas pantuflas de conejo y su pequeño peluche de vaca en la mano, mientras que en la otra señalaba una hoja de papel.

Que le has hecho a papa? – interrogo su hermano mirando el dibujo y se sentaba en la mesa.

Es dibujo, familia – contesto la porotita sentándose a su lado con dificultad.

Pero Nessie nosotros somos cuatro, quien es este punto? – Anthony tenia el ceño fruncido deje de cortar la fruta para acercarme al papel.

Reflejaba cuatro personas tomadas de la mano, debajo de este figuraba el nombre de cada uno de nosotros, pero de la mano de Nessie figuraba otra pequeña niña.

Es alguna amiga? – interrogue volviendo a mi labor.

No, pedo en mis sueños tu la llamas Lucy – finalizo volviendo a doblar el dibujito le sonreí y volví a cocinar.

Mama, crees que a papa le gustaron los regalos que compramos? – volvió a decir Anthony mientras ponía en la bandeja de desayuno las tazas.

Creo que le gustaran, pero lo que mas le encantara será que ustedes vayan a despertarlo llenándolo de besos y abrazos – finalice.

Es el primer cumpleaños que pasamos con papa, porque mama? – interrogo Anthony recordando los pasados cumpleaños de Edward, ya que tenia guardia en la clínica y no podía estar en casa.

Bueno, ustedes tienen que recordar que papa trabaja, entonces tenia que atender a un montón de pacientes, pero esta vez pudo cambiar el turno con otro doctor después de que se lo rogamos – explique poniendo sobre la bandeja el ultimo plato repleto de magdalenas marmoladas, las favoritas de Edward y como no, también de Renesmee.

Mami! Cocinaste mis favoditas! – festejo, aplaudiendo mientras tomaba una.

Las tuyas y las de tu padre – sonreí

Y para mí que has hecho? –

Para ti, Anthony, hice las galletas de pepitos como te gustan a vos crocantes abajo – le guiñe un ojo, mientras sacaba de uno de los frascos dichas galletas.

Eres la mejor mami – me abrazo, dejando un beso en mi mejilla.

Mami hoy venda tía Tanya? Hade mucho no vemos – Renesmee nombro a su tía como eh de hacerlo todos los días, mi hermana se encontraba fuera del país recorriendo el mundo, venia muy poco a saludar a todos para seguir la recorrida.

Bueno, a mi no me ah dicho nada, pero supongo que vendrá – dije, mientras los tres subíamos las escaleras, Anthony llevaba tres bolsas empaquetadas y con moños, Renesmee su dibujo y otros dos paquetes, mientras que yo la bandeja con el enorme desayuno.

Caminamos hasta la puerta cuando le guiñe el ojo a los niños, autorizándolos a que entren, me quede afuera y asome mi cabeza, Edward yacía dormido abrazado a la almohada boca abajo, su pelo despeinado caía para todos lados estaba tapado con la sabana hasta la cintura y una pierna destapada, era perfecto hasta estando imperfectamente acomodado.

EDWARD POV.-

Papi… Papi – mis sueños delicados, se vieron interrumpidos por la voz de mi porotita y un suave toque en mi hombro.

Papi… papa – la voz del campeón de la casa susurraba en mi oído al mismo tiempo que tiraba de mi hombro, pero no estaba listo para despertarme.

Attony… poque papa no despieta? – la voz de mi princesa era suave en un murmullo, pude sentir como se trepo a la cama con la ayuda de su hermano y se situó a mi lado poniendo sus dos pequeñas manos en mis mejillas.

Esta muy dormido Nessie, sabes que papi tiene el sueño pesado – susurro Anthony volviendo a tirar de mi hombro.

Attony, tenemos un papi muy guapo, los papis de mis companedas son viejos y feos – Renesmee enserio era muy tierna.

Nessie, es igual de guapo que yo –

¡Que humilde que es mi hijo!

Me guta el pelo de papi – susurro mi hija acariciando mis mechones, tal cual lo hacia Bella.

A mi sus ojos, pero esa parte la has heredado tu – contesto Anthony.

Sep, pedo tu hederaste sus ragos, eso no vale! – se quejo mi princesa.

Ni modo, ambos somos parecidos a él, ambos lo amamos, tenemos que despertarlo, mama le tiene el desayuno – volvió a decir Anthony, era divertido escuchar sus conversaciones mientras me acariciaban.

Papi… papi… papi – volvió a susurrar Renesmee acompañados de los zarandeos de Anthony en mi hombro.

Ya enserio duerme como una roca – se quejo Anthony.

PAPI, DEPIETA!!!!! – Escuche el grito de Renesmee que me hizo sobresaltar, ambos rieron.

FELIZ CUMPLEAÑOS PAPI! – Gritaron ambos al mismo tiempo mientras se tiraban sobre mi cuerpo abrazándome.

Ey, buen día! – salude besando la cabeza de ambos.

Papi, feliz cumple, te quiero mucho – me dijo Anthony abrazándome.

Yo también te quiero campeón y gracias – susurre mientras lo abrazaba contra mi cuerpo.

Me encontraba en el medio de la cama Anthony estaba bajo mi brazo a mi izquierda y Renesmee sobre mi regazo, quien obviamente no tardo en pasar sus pequeños brazos alrededor de mi cuello y besarme las dos mejillas

Feliz cumpe papi! Te quedo! – me saludo con una gran sonrisa.

¡Como los amaba!

Yo también te quiero princesa! – sonreí besando su cabeza.

Escuchamos el suave toque en la puerta, sabia que detrás de esta el amor de mi vida se encontraba.

Adelante – autorizamos los tres.

La puerta se abrió, revelando la perfecta figura de la mujer por la cual jamás me arrepiento de haber luchado día a día, llevaba mi camisa Azul remangada hasta los codos, sus primeros tres botones desabrochados y descalza, la imagen me hizo recordar la hermosa noche que pasamos ayer, entre besos, caricias y unas cuantas palabras de amor.

Permiso – susurro acercándose a nosotros con una bandeja con un enorme desayuno.

Buen día – murmuro sentándose a mi lado, pero del lado que tenia libre.

Buen día – conteste.

Feliz cumpleaños – susurro acercándose a mis labios, uniéndolos en un suave beso, esos besos que me perdían por completo.

Gracias – complete sobre sus labios mientras dejaba sobre mi regazo la bandeja con el enorme desayuno, frutas, jugos, café, medialunas, pakes, magdalenas, de todo.

Deje a Renesmee alado de Anthony y pase uno de mis brazos por la cintura de Bella para acercarla mas a mi, me encantaba sentir su calor cada vez que la apretaba contra mi cuerpo.

Desayunamos entre risas, besos y abrazos por parte de mis hijos y de mi esposa, quien cuando se acercó abrazarme murmuro un

“mi regalo te lo doy en la noche” haciendo rápidamente que mi cuerpo se tensara y al mismo tiempo se relajara pensando en la noche que me esperaba.

Papi, mira mi regalo – anuncio Anthony dándome una bolsa color azul, con un listón blanco, Bella se sentó en mi regazo mientras que los niños uno a cada lado de mis piernas.

A ver… a ver – sonreí mientras lo abría.

Una remera azul marino con las iniciales “A & R” cada una en su color preferente en este caso celeste y rosa, del otro lado de la remera, ósea a mi espalda una frase que me dejo realmente sorprendido… “Orgullosos de tener el mejor papa de mundo” evidentemente mi trabajo como padre iba perfecto, sonreí.

Es hermosa – sonreí, mientras mis niños se me acercaron besando cada uno mis mejillas y Bella mirando la escena con adoración sobre mi regazo.

Ete es mio – dijo Renesmee quien extendió una bolsa gris con un listón negro.

Era un enorme cuadro con distintas fotos de nosotros cuatro, pero hubo una que mas me llamo la atención, era la que estaba ubicada en el centro del cuadro, Renesmee estaba sobre mi regazo, mientras que Anthony estaba en el de Bella, nuestros dos hijos miraban la cámara pero mi esposa y yo teníamos nuestras frentes juntas, haciendo en si que los rayos del sol se filtraran por el hueco, sonreíamos el uno al otro, rodeados de unas hermosas flores, era en unos de nuestros viajes familiares en los parques de Orlando.

Me encanta – susurre mientras lo miraba con adoración, cada una de las fotos, reflejaba momentos felices, momentos únicos, momentos junto a ellos.

Es pada que lo poga en tu mesita de note – sonrió señalando la mesita que había alado de mi cama.

Así será princesa – conteste besando el tope de su cabeza.

Y este es de los dos, con mama no sabíamos si te gustaría pero Nessie dijo que te encantaría – dijo Anthony, me extendió una bolsa negra, pero pequeña, tenía un lazo blanco y fino, parecía de una joyería.

Apenas lo vimos dijimos que tenia que ser tuyo – sonrió bella mientras miraba como lo abría.

Una pequeña caja estaba dentro de la bolsa, la caja era pequeña pero pesada, al abrirla me lleve una hermosa sorpresa era un relicario de Oro, dentro tenia la foto de nosotros cuatro abrazados acompañados del otro lado con una hermosa frase en italiano.

“Insieme per l'eternità dei nostri giorni”

Juntos por la eternidad de nuestros días – resto Bella en mi oído dejando un suave beso en mis labios.

Es para que nos lleves siempre contigo pa – sonrió Anthony.

Siempre los llevare conmigo pequeños, siempre – reí abrazándolos a los dos, mientras que bella también nos abrazaba.

Los amo mucho sabes, mucho – murmure acariciando sus espaldas.

Te amo – me dijo bella en mi oído.

Te amo – conteste ahora besándola por cuenta propia mientras que mis hijos volvían a su desayuno.

.

.

.

BELLA POV –

Bella necesitas ayuda en algo? – pregunto Esme entrando en la cocina.

Después de pasar el día con Edward y con mis hijos, la familia comenzó a llegar a las ocho de la noche, listos para la cena para festejar el cumpleaños de mi marido.

Esme, llevarías esto al comedor, tengo que fijarme que la carne no se pase – pedí mientras miraba el horno nuevamente.

Claro que si hija – contesto tomando el bols con la verdura.

Esme desapareció por el lumbral de la puerta, pero al mismo tiempo una sonriente Alice llego.

Bella, llegue! – rio mientras me abrazaba.

Era hora, que hoz paso, por que la tardanza? – pregunte.

No ah sido fácil distraer a Jasper sobre el tema que me dijiste, tuve que decirle que necesitaba parar en la farmacia para tomar un remedio de los niños, me creyó asique antes de salir guarde lo que me pediste en mi bolso para después poder dártelo – explico mientras tomaba un trozo de zanahoria y se lo comía.

Eres genial Alice! – sonreí.

Lo se, pero mírate nada mas, ya no necesitas ayuda con la vestimenta – dijo observando mi vestido azul hasta mi rodillas y unos zapatos de medio taco negros.

E aprendido de la mejor – reí.

Bien, te lo doy ahora, ve a hacértelo yo te cubriré – ordeno.

Camine con la caja escondida tras mi espalda, antes de entrar al baño mire por la puerta, Edward jugaba con sus dos pequeños hijos, mientras que Esme reía de la mano de Gerardo ambos tenia una animada conversación con Emett quien tenia en brazos a su hija, era un plano familiar hermoso, Jasper estaba terminado de poner la mesa con ayuda de Martin.

Okey Bella, tranquila, ya has hecho esto una vez, no hay nada de malo en la tercera – susurre para mi misma mientras seguía al pie de la letra las instrucciones de test de embarazo.

Bueno, respira… respira… todo estará bien, si da negativo otra vez será, si da positivo pues Edward tiene muy buena puntería – reí frente al espejo del tocador.

Mientras esperaba el resultado el test comencé a pensar todo lo que habíamos pasado con Edward, desde las insignificantes peleas, desde las hermosas reconciliaciones, nuestros hermosos hijos, la forma en la que nos conocimos, nuestro primer beso, nuestra primera vez, entre otras cosas, era increíble cada paso que habíamos dado juntos.

Todo empezó de una manera extraña con tratados, por plata, todo empezó con decepciones, malos comportamientos, peleas, golpes y con el paso del tiempo entre todos nosotros pudimos sanarnos, Edward puso superar sus problemas y todo aquello que lo haba lastimado en el pasado, en vez de eso, tenia recuerdos hermosos sobre el nacimiento de sus hijos, y miles de momentos familiares que compensaron todo el dolor.

Sabia, desde el momento que por primera vez me beso, ese será el hombre de mi vida y así fue, no se vivir sin el, no puedo respirar sin el, no puedo sonreír sin el, no soy nada sin el.

El paso del tiempo me comprobó, también, que la vida gitana así como tiene sus bajos, también tienes sus hermosos finales felices, así como muchos matrimonios eran arreglados muchos otros se casaban por voluntad propia y podían comprobar su felices para siempre, ese era el caso mio con el de Edward, estábamos en nuestro hogar, con nuestros hijos, con nuestra felicidad, todo era rosa y así se quedaría para siempre.

TOC TOC TOC – Un suave golpe en la puerta hizo que me sobresaltara.

Si? – pregunte preocupada.

Mami?... mami dice Abu esme que cena tal sevida – explico mi pequeña porotita con su vestido rosa y sus hermosas colitas colgando a cada lado de su cabeza, se veía hermosa.

Ya bajo porotita – sonreí, mi hija me dedico una sonrisa y desapareció.

Tome tres respiraciones como cuando había mirado el test de Renesmee, cerré los ojos y tome el pequeño dispositivo, UNO… DOS… TRES

Abrí mis ojos para ver lo que el resultado reflejaba…

EDWARD POV .-

Amor, donde estabas? – pregunte, cuando observe a Bella entrar al comedor, mas pálida de lo común.

En… en el baño – dijo, algo nerviosa.

Estas bien?... te sientes bien? – pregunte haciéndole lugar para que se siente en la mesa a mi lado.

Si, solo… solo que estoy nerviosa – sugirió.

Nerviosa?... pasa algo

– pregunte, Bella movió sus labios como signo que iba a contestar cuando unas manitas tiraron de mi pantalón.

Papi, podo sentarme a tu Ado? – pregunto mi porota, asentí sonriente y la senté a mi lado libre, puesto que de mi derecha estaba Bella.

Claro que si pequeña – respondí besando el tope de mi cabeza, pase un brazo por los hombros de Bella, mientras que Anthony se sentaba a su lado.

Hijo, este es nuestro regalo te lo hemos elegido con Gerardo – sonrío mi madre extendiendo un sobre.

Lo abrí y me encontré con cuatro pasajes al norte de Brasil.

Oh mama, gracias! – sonreí.

Supuse que necesitaban otras vacaciones en familia, son para dentro de unas semanas, supuse que querrían arreglar algunas cosas antes de irse, el hotel donde les reserve tiene un parque de agua para los niños, es hermoso –

Gracias madre – sonreí cuando la abrace a ella y a Gerardo, para luego volver a mi lugar.

Tío, este es nuestro – dijo la pequeña voz de Martin el hijo de Alice.

Gracias pequeño campeón – sonreí para abrir la bolsa, dentro de esta un reloj de plata con números romanos me dio la sorpresa.

Supusimos que necesitarías uno luego de lo que paso con el antiguo – rio Jasper al recordar, que mi otro reloj Renesmee lo había escondido, luego de eso no lo encontramos mas, pero al pasar los meses Bella lo encontró en el filtro de la pileta que teníamos en el fondo de la casa, el recuerdo me hizo reír.

Enserio lo necesitaba – reí, agradeciendo obviamente luego de abrazar a mis sobrinos, a Alice y Jasper.

Tío, ete nuestro! – rio Emily, la hija de Emett y Kate.

Desenvolví el pequeño paquete en este me encontré un set de perfumes “polo” recordando que eran la marca mas cara del mundo, el set incluía todas las fragancias de la ultima colección.

Gracias pequeña – sonreí acariciando la mejilla de mi sobrina.

Lo compramos en nuestro viaje, sabia que te gustaba esa colección, espero que la uses – sonrió Kate.

Al igual que lo que hay en el fondo del paquete – sonrió Emett, lo mire extrañado para volver a meter la mano.

¡No puede ser!

Eres un degenerado! – dije entre dientes al reconocer tres cajas de preservativos con distinto sabor.

Pues estoy seguro que bella me lo agradecerá –

Emett, cállate – le dijo bella entre dientes.

Ya, no hablo mas – rio, agite la cabeza en señal de que ese hombre jamás cambiaria y volví a mi labor de admirar a mi esposa quien hablaba entretenidamente con Esme.

Después de todo la vida gitana nos ah dado hermosos tesoros no? – pregunto Jasper a mi lado, ya que ambos estábamos sentados en el sillón grande esperando que las mujeres se sienten.

Me ah dado lo mejor del mundo, mi esposa y mis dos niños – murmure.

Creo que no me arrepiento de nada, absolutamente nada – suspiro Emett.

Creme que yo tampoco, estoy tan orgulloso de tener a mi dos niños, a Bella quien con el pasar de los días me demuestra cuando me ama al igual que yo me enamoro cada vez mas, creo que ya es imposible – agregue mirando a mis hijos jugar entre ellos.

Son hermosos Edward, enserio los felicito por todo lo que lograron juntos bella te abrió las puertas nuevamente son el claro ejemplo que después de todo los finales felices existen – explico Jasper.

Pues no somos los únicos ustedes también – sonreí.

Es distinto hermano, tu has superado cada uno de los obstáculos que la vida te puso, los golpes, los gritos, las cuidas, los engaños y desengaños, en cambio nosotros solo aceptamos lo que venia y nos rendimos aun así aprendimos a amar a nuestras mujeres – explico Emett.

Creo que si tuviera que pasar todo nuevamente para volver a estar aquí, lo haría sin ningún problema – sonreí.

Claro que si hermano – sonrió Emett golpeando mi espalda.

Amor a comer – me grito Bella, me puse de pie en un salto y camine hacia la mesa.

La cena paso entre risas, anécdotas y momentos que la vida nos iba regalando con el pasar del tiempo, sabia que la vida tenia un largo futuro para recorrer y un destino que seguir, pero si de algo estaba segurísimo es que mi futuro será con Bella y ese destino será alado de ella y nuestros hijos, solo eso me importaba, solo eso me importa.

Enserio Edward tus hijos no se duermen pero ni con sedante – entro Bella a la habitación, luego de cenar y tomar un café el reloj marco las dos y media de la mañana, las personas se comenzaron a ir, obviamente Anthony corrió a los brazos de su abuela y se fue a dormir a su casa mientras que Renesmee estaba en su cuarto, ahora, dormida.

Tu la despabilas – reí golpeando la cama para que se siente a mi lado.

Voy a cambiarme amor – sonrió, besando mis labios suavemente.

Luego de unos minutos en los que me dedique a mirar el techo, la puerta del baño se abrió revelando a la mujer de mi vida con un sensual conjunto que dejaba volar la imaginación a cualquier lado, menos a la iglesia.

Oh… Señora Cullen, veo que tiene ganas de que le de un infarto a su marido – susurre al recorrer sus curvas, el sensual conjunto era de encaje color negro.

Bueno… digamos que últimamente me ah dolido un poco el estomago y necesito una revisión profunda – conto mientras se acercaba lentamente a mi.

En días como estos agradezco el tener mi titulo de medicina – reí, tomando su mano, logrando así que caiga entera sobre mi cuerpo.

Eres tan hermosa – susurre mirando sus ojos, los cuales reflejaban felicidad, amor, pasión, entre otras cosas.

Tu no te quedas atrás – respondió quitando los mechones de mi frente.

Te amo – murmure cerca de sus labios

Te amo – dijo sobre mis labios.

Con un beso que comenzó lleno de dulzura, lleno de amor, el cual no tardo en pasar a uno de pasión y lujuria, mis manos no dejaban de recorrer la suavidad de su piel, el calor que emitía sobre mi cuerpo, cada minuto que pasaba, cada segundo la amaba mas y mas, sus manos recorrían mi espalda desnuda tras que las mías sus resaltantes curvas, las respiraciones comenzaron a agitarse al igual que el latido de nuestros propios corazones.

Mi cuerpo inmediatamente reacciono como siempre de forma calurosa, jadeos, gemidos y el sonido de nuestros labios anudaban la habitación logrando así que mi control se pierda.

Mmm… siempre tan mojada y lista para mi – susurre mordiendo el lóbulo de su oreja, recibiendo un jadeo de respuesta tras introducir los dedos

para tocar su zona mas intima.

Solo… solo… has, has lo tuyo – jadeo clavando sus uñas en mi espalda, comencé a recorrer su fabuloso cuerpo con besos mojados, desde su cuello, pechos, cintura, vientre, ombligo hasta rozar aquella parte que a ambos nos volvía locos, recibiendo como respuesta jadeos.

Tome con mis dientes su bragas comenzando a bajarlas con suavidad, observando desde allí la cara de placer que Bella tenia, sus ojos cerrados mientras que su cuerpo se arqueaba lentamente, una vez que la bendita ropa estuvo fuera de su cuerpo comencé a saborear aquella zona que me daba el liquido mas delicioso.

Ed… Edward, oh dios – gimió Bella al sentir como mi lengua la embestía con locura, su espalda se arqueo y sus manos fueron a mi nuca apretándome mas contra aquella zona, sus gemidos, sus jadeos y sus suaves gritos con mi nombre hacían que mi miembro cada vez se ponga mas duro.

Eso bella… vente para mi… necesito beberte – ordene sobre sus labios inferiores, Bella jadeo nuevamente gritando mi nombre, como respuesta tape su boca con mi mano.

Sh… Nessie – reí recordando que al otro lado del pasillo nuestra hija dormía, Bella asintió con los ojos cerrados, pero mordió uno de mis dedos, para luego venirse sobre mi boca.

Emmm… cada vez más deliciosa – susurre subiendo por su cuerpo nuevamente con un camino de besos mojados.

Voy a matarte Edward – dijo bella cuando llegue a su altura ubicándome entre sus piernas.

Porque? – pregunte de forma inocente besando su cuello.

Porque… me haces… esperar… de-demasiado – contesto con dificultad por la suavidad de mis besos en la parte sensible de su cuello.

Y cuéntame… que es… lo que quieres? – interrogue entre besos.

A ti… ahora… dentro mio… ya – contesto entre jadeos.

Te amo, lo sabes? – confesé mirando sus ojos acomodando un mechón de pelo en detrás de su oreja.

Te amo – contesto pasando sus brazos por mi cuello, haciendo un movimiento en el cual me acerco a ella para estampar mis labios con los de ella.

Por favor… Edward… hazlo ya – pidió sobre mis labios mientras que enredaba una de sus piernas en mis caderas, en el choque de nuestras partes intimas gemimos en respuesta.

Nuevamente comencé a besar sus labios mientras que lentamente comenzaba a fundirme en ella, sintiendo su calor nuevamente, dándome la bienvenida como la noche anterior, el vaivén era suave acompañado de nuestras caricias con las manos.

Mph.. Edward, necesito mas – jadeo Bella cuando el vaivén de nuestros cuerpos comenzó a hacerse mas fuerte, mas frenético, mas salvaje.

Me sostuve con mis codos, para no poner todo mi peso sobre su pequeño cuerpo, comenzando a entrar y salir de ella con más intensidad y profundidad, ahora sus dos piernas estaban prendidas en mis caderas, todo era profundo, salvaje.

La habitación inmediatamente se inundo de gemidos, de jadeos de placer, ambos gritábamos el nombre del otro, al mismo tiempo que se escuchaba el chocar de nuestros cuerpos, una fina capa de sudor nos envolvió a los dos, provocando así que ambos resbaláramos con mas pasión, erotismo, inmediatamente el lugar también se inundo de ese olor, el olor a sexo. El olor que caracterizaba la unión de dos cuerpos.

Edward… Edward – escuchaba la voz de bella pidiendo por mí, ya que ambos teníamos las frentes unidas y los ojos cerrados, los abrí al sentir como sus paredes se apretaban mas a mi miembro ambos estábamos cerca.

Vamos Bella, vente conmigo… vente para mi – susurre en su oído mientras que al mismo tiempo lo mordía, nuestros cuerpos no daban mas, las embestidas se hicieron mas fuertes, mas profundas, salvajes los gritos, los jadeos, el choque de nuestros cuerpos, el fuerte movimientos de la cama, hacia que la pasión aumentara aun mas llegando entonces ambos a tocar el cielo.

Cuando mis líquidos se fundieron en su cuerpo al igual que ella, caí rendido completamente sobre su hermosa figura, jadeando, ella mientras tanto acaricio mi espalda de una manera tierna, mientras que yo acariciaba sus costados, mientras esperábamos que las respiraciones se estabilicen.

Oh dios… eso fue… eso fue – trate de decir.

Increíble – completo sonriendo, quise acomodarme pero me detuvo.

No, quédate un rato así, es lindo tenerte dentro mio – susurro en mi oído.

Así estábamos, ella bajo mi cuerpo con sus piernas aun enredadas en mi cuerpo, fundiéndome en ella, mientras que con sus uñas acariciaba mi espalda, mi rostro escondido en el hueco de su hombro cada minuto dejaba suaves besos en su piel, mire de reojo ella tenia los ojos cerrados pero sus caricias continuaban, estaba en paz.

Edward… feliz cumpleaños – sonrió abriendo los ojos, para clavarlos en mí.

Es el mejor regalo – reí besando su frente.

Luego de un par de cariocas mas y unas cuantas palabras de amor, ambos nos pusimos de pie, yo me puse mis boxes mientras que Bella mi remera que estaba al pie de la cama.

Te ves hermosa con mis remeras – susurre besando su cuello.

Edward… son las cinco de la mañana tu hija va a entrar – respondió recordando que cada vez que Anthony se quedaba en la casa de los abuelos, Nessie se pasaba a la cama con nosotros.

Me vuelves loco – la gire entre mis brazos para besarnos nuevamente, pero esta vez un beso suave, tierno, tranquilo.

Vamos a dormir – sonrió sobre mis labios mientras entrelazábamos nuestros dedos caminando hacia la cama.

Me recosté apoyado mi espalda en el respaldo de la cama, Bella se recostó a mi lado, pase mi brazo por su cintura atrayéndola mas a mi, ella enredo sus piernas con las mías, de tal manera que mitad de su cuerpo quedo sobre el mio, sus dedos hacían círculos en mi pecho mientras que yo acariciaba su brazo, la atmosfera nos irradiaba paz a ambos mientras que una sabana nos cubría.

Es tan lindo sentirte así… conmigo… siempre – susurro después de un largo silencio, apretando mi cintura.

Todo lo que paso, todo lo que pasamos para ahora estar así, debo admitir que valió la pena no? – pregunte sonriente, levantando su rostro con mi mano.

Cada minuto, cada segundo, cada día, mes, año que pase lo volvería a pasar si el resultado es este, Edward es increíble lo que viví contigo y las cosas que nos quedan por recorrer, hiciste lo que menos pensé conmigo, me has dado amor, paciencia, me defendiste ante todo, a mi y nuestros hijos, siempre fuimos tu prioridad y no tienes idea lo agradecida que estoy de haberte elegido, de haber podido estar contigo siempre, ciudades y apoyándote ante todo, enserio gracias  -- susurro acariciando mis mejillas con sus pulgares.

Eres tanto para mi bella, eres todo, creo que lo único que tengo que agradecer es el tenerte que eso es demasiado, aun no creo como un hombre como yo que vivía prácticamente en un infierno, ahora es quien es, ya sabes con una familia, un hogar, contigo, eso es lo que me importa el tenerte así bien aferrada a mi cuerpo – susurre apretándola mas a mi.

Es increíble todo lo que vivimos, gritos, peleas, juicios – comenzó, pero tenia que borrar esos recuerdos.

Sonrisas, Risas, besos, caricias, sentimientos, sabes amor, no siempre hay que recordaos las cosas malas, todo aquello que alguna vez sufrí hoy fue tapado por la risa de nuestros hijos, por tus besos, o por cuanto me quieres, poco me importa lo que pase hace años por que sé que el destino nos ah ayudado, el destino nos brindo todo Bella, cada herida la sano con un recuerdo inigualable, cada día que te miro y te veo interactuar con los niños me di cuenta que no me equivoque al elegirte como esposa y madre de mis hijos, por que te lo mereces, por que te entregue todo, mi corazón, mi alma, mi amor y tu me has dado todo a cambio, creo que en la vida gitana todo se consigue a cambio de algo, no te parece que nosotros hemos conseguido todo a cambio de nada? – pregunte mientras veía como sus ojos se aguaron.

Te equivocas, conseguimos que todo ese dolor se vaya a cambio de vivir felices para siempre, no te parece eso un intercambio? – pregunto en un murmullo acariciando mi pecho nuevamente.

Un intercambio del que nunca me arrepentiré y sabes porque? Porque me enseñaste cada una de las cosas que la vida te da y no tienes idea lo agradecido que estoy por ello, eres todo Bella… Todo – comente para luego ambos, fundirnos en un beso ese beso que reflejaba cada segundo que pasamos juntos y la cantidad de años que nos queda por delante, amaba a esa mujer y jamás me arrepentiría de hacerlo.

Papi? – escuchamos esa voz que nos hizo separarnos de nuestros besos, mire sobre el hombro de Bella y me encontrar a mi pequeña princesita con su piyama a rayas pero esta vez tenia dibujado pequeños ositos bebes, frotaba sus ojitos semi cerrados mientras que de su mano colgaba su oso panda.

Que pasa mi niña? – pregunte.

Me juta cundo besas a mama – murmuro sonriendo, Bella rio al mismo tiempo que yo mientras que el amanecer ya se acercaba.

Que pasa porotita? – pregunto Bella.

Pudo doma con utedes? – interrogo frotando sus ojitos nuevamente, bella dejo de abrazarme para que yo pudieron tender mis brazos hacia Renesmee quien corrió rápidamente a la cama y trepándose se acurrucó encima mio, sus piernas estaban a cada lado de mi cuerpo mientras que su carita se enterró en mi pecho, sus manos se aferraron a mi, Bella nos miro con ternura, pase una de mis manos por su  cintura acercándola a nosotros, pase un brazo por su cintura, mientras que ella apoyaba su cabeza en mi hombro y como pudo volvió a enredar nuestras piernas.

Papi – dijo aquella voz casi adormecida.

Que pasa mi niña? – pregunte mientras que con mi mano libre la acariciaba.

Mami – dijo ahora.

Si Nessie? – pregunto Bella.

Los amo – contesto sonriendo contra mi cuello.

Nosotros también – susurren besando sus cabellos.

Luego de tararearle la canción a Renesmee acompañadas de unas suaves palmitas en su trasero se quedo dormida sobre mí, como era de hacerlo siempre, Bella acariciaba su espalda.

Es tan linda – susurro luego de un silencio.

Salió a la madre – conteste medio adormecido.

Escuche la conversación de ellos hoy a la mañana Anthony es el mas parecido a ti – rio recordando la charla de mis hijos.

En realidad Anthony se parece a mi, Renesmee se parece a ti, solo nos falta la mescla de los dos – bromee pensando en la posibilidad de tener un hijo mas.

Edward? –

Si Bella – bajo su mirada acariciando la parte libre de mi pecho, antes de hablar levanto la mirada para hablarme.

Crees que podríamos usar la habitación que nos sobra? – pregunto de la nada, en el piso de arriba había cuatro habitaciones, una estaba vacía, otra era de Renesmee y la ultima de Anthony aparte de la nuestra obviamente.

Quieres poner más libros? – pregunte extrañado.

No… Pero que tal si ponemos una mecedora, unas cortinas, un roperito… una cuna… juguetes, chupetes, mamaderas, ropita pequeña… la decoramos – las palabras salían con lentitud de su boca mientras ambos teníamos las miradas conectadas.

Un momento…

¿Mecedora? Por lo general las madres la usan para alimentar a sus bebes, así logran que se duerman, idiota.

¿Cortinas? Tapan el sol, tarado.

¿Un roperito? Se guarda ropa, por lo general pequeña, termina en “ito”

¿Cuna? Duermen los niños.

¿Chupetes, Mamaderas, ropita, juguetes? Ya enserio, esto tiene que ser broma, eres un medico y tardas hasta para adivinar que serás padre de nuevo…

¡Oh Dios Mio!

Me estas cargando? Bella enserio si es un chiste retira las palabras ahora, me hago ilusiones, aunque si quieres te puedo dar un niño mas – susurre con picardía, terminando la conversación con mi subconsciente.

Eres un idiota! – rio pegándome en mi hombro.

Yo idiota? Tu eres la que bromea con cosas semejantes, muero por tener otro hijo – sonreí.

Espero entonces que tengas lugar para una princesita mas – sonrió Bella tocando su vientre.

No puede ser! Como?... cuando? – pregunte feliz por la noticia.

Bueno el como supongo que lo sabrás, ¿Cuándo? Oh Cullen, debes contenerte mas en los ascensores – rio Bella recordando aquella travesura que nos mandamos un día llegando al hospital, esa noche no habíamos dormido mucho debido a que ambos habíamos trabajado hasta tarde, al llegar a ascensor apreté el botón “Stop” para disfrutar de mi esposa un rato antes de ir al labor.

Esto es increíble! – reí besando a mi esposa dulcemente.

Felicidades papa – sonrió Bella besándome nuevamente.

Te Amo… Te Amo… Te amo!! – dije entre besos.

Yo también te amo – rio mi pequeña bella mientras dejaba mas besos en mis labios, luego de eso nos acomodamos para descansar en familia, obviamente felices por la llegada de un hijo mas y felices por tener los hijos que teníamos.

POV (NARRACION TERCERA PERSONA)

Ese mismo día Edward Cullen descubrió junto a su esposa Isabella Cullen, que el amor puede pasar cualquier tipo de barreras, barreras que abarcan desde el más feo de los momentos hasta el más Bello.

El amor es la magia que absolutamente a todos nos ciega, pero en mundos distintos a lo común, muy pocas veces triunfa.

En la vida gitana son muy pocos los matrimonios que tienen su felices para siempre… pero ese día Isabella Cullen también descubrió que vivió el mas dulce de los amores, pero al mismo tiempo el mas amargo…

Pues fue así entonces como Edward Cullen e Isabella Cullen vivieron, disfrutaron y vivirán, El amor gitano.

                                                               .FIN.