Hola Hola a Todas! (:

GRACIAS A POR COMENTAR LA HISTORIA Y DEJAR SU OPINION:

josifabiana xiomy Ely_0931 Jud!* zairamicaelaruth1998 Reyna2 martha spcullen ec07 ana bella MayaMasenCullen

RESPONDIENDO COMENTARIOS:

spcullen: Antes que nada hola! y GRACIAS por dejarme tu comentario, para sacarte tus dudas tienes el capitulo anterior que trate de adaptar tus preguntas al Fic, con respecto a lo que son las personales no me molesta que me preguntes por algo cree el Fic mi esposo tiene 18 años y yo 16. Se podria decir que si que hay un poco de autobiografia.

Saludos.

ec07: Amo leer tus comentarios al igual que las demas chicas, pero para responderte, en lo que es gitanos no sabemos muy bien a que se refieren con el amor, por lo general en mi mundo nos movemos con lo que es pasion y atraccion ya que el enamorarse a veces puede costarte hasta la vida, debido a que puedes enamorarte de quien no te correspode. Tengo una amistad muy linda con mi esposo, es raro seguramente para ustedes que lo llame asi, pero es la realidad para mi.

Saludos.

GRACIAS GRACIAS A TODAS POR COMENTAR Y DEJAR SU VOTO!

(todas las preguntas son respondidas por la autora del Fic, Giu)

Espero que les guste el capitulo y si llegamos a los 30 comentarios hoy se subira el camitulo siguiente que se viene con MUCHO lemon ! $:

Besossssss!

CAPITULO ANTERIOR.

Solo esperaba que ella no se enoje ante mi presente y lo acepte con la idea de sellar un futuro… Escuche sus pasos llegar y me senté como si nada estuviera pasado enfrente a la televisión haciéndome el distraído…

CAPITULO 17.-

BELLA POV.

Tengo pensado muy seriamente mandar a cambiar el color de este ambo!.- Me queje luego de un baño, entrando a la cocina donde Edward estaba sentado mirando la tele, el desayuno ya estaba listo.

Oye el rosa te queda lindo…- sonrió Edward.

No mientas, parezco una niña.- bufe acercándome a el quien estaba sentado y tomo mi cintura con su mano tras que yo lleve mis dos manos a sus mejillas.

Una niña muy linda entonces…- Rio mirándome a los ojos.

Te amo…- sonreí cuando me acerque a él.

Te amo…- contesto besándome, era el maldito cielo cuando sus labios tocaban los míos.

Bien siéntate a desayunar así vamos a la clínica nos espera un largo día…- ordeno sonriendo cuando centro sus ojos el la tele.

Edward, que vamos a hacer hoy?...- interrogue comiendo una galleta.

Tendremos que revisar el piso de los ansíanos, me ah dicho Seth que es el único piso que nos falta revisar, luego veremos que hacer, Emett, Alice y Jasper vendrán a la clínica a almorzar, tengo entendido que Jacob trabajara con Jasper y Jessica asique no, lo tendremos por que cruzar… mejor así cuanto mas lejos de ti mejor…- finalizo llevando sus ojos a unos papeles mientras tomaba su taza de café.

Es un enfermo, enserio hay que hacerlo tratar Edward es peligroso que este suelto…- murmure.

Tu misma lo escuchaste amor, “Engañar a un psicólogo es muy fácil”.- contesto recordando la frase que dijo su hermano en el día de ayer.

Me da terror el hecho de pensar que te haga daño…- dije mi pensamiento en vos alta.

Bella… la única que puede hacerme daño aquí eres tu, por que eres la única persona que me importa tener cerca los demás… son de palo, en fin voy al baño en un instante regreso… no me extrañes…- beso mis labios y desapareció.

Suspire y comencé a desayunar, tenia que aceptar que tenia un hambre grande, tome mi taza de café, cuando me percate de un extraño objeto alado… era una pequeña caja te terciopelo, mis rostro palideció… esto no podía ser… acaso era una Pulsera?.

“Bien es hora que yo me meta en tu cabeza, conciencia haciendo presencia en tu estúpida mente de santa, comencemos por el principio como va a ser una pulsera si la caja es pequeña y cuadrada?... Estúpida. Ni te atrevas a decir que es un collar por que romperé tus ausentes neuronas, ósea si fuera un collar la caga seria cuadrada y grande… imbécil.”

Un anillo…- susurre tomando la caja sobre mis manos.

“Oh! No me digas enserio? No me había dado cuenta!”

Dios santo…- susurre cuando abrí la caja y me encontré con dos anillos durados, se leían las iniciales B en uno y la E en el otro, ambos tallados en Estrás.

Edward, mi amado Edward, estaba proponiéndome juntar nuestros caminos?¿Edward estaba confirmándome como suya?¿Edward me estaba marcando como su novia?

“Infarto en 3… 2… 1… solo espero que aceptes maldita perra, de lo contrario me encargare de romper tus dientes, recuerda yo también salgo perjudicada, no viviré toda mi vida con tus remordimientos”

Bella no encuentro mi celular… puedes llamarlo?...- escuche aquella aterciopelada voz que era, seguramente, el causante de esto.

Cullen ven aquí!...- reí poniéndome de pie.

Que paso?...- se sobresalto cuando apareció por el lumbral de la puerta.

Sabes al parecer tengo un admirador secreto, me ah dejado este paquete… lo reconoces?...- sonreí mostrando aquella caja en una de mis manos.

No tengo idea de que me estas hablando…- levanto sus manos en señal de inocencia.

Bueno, si lo conoces me harías un favor?... Comunícale que mi corazón ya tiene dueño… no tengo intenciones de buscar a alguien mas.- termine, era hora de hacerlo sufrir.

Oh se lo comunicare…- hizo una mueca de desilusión.

Dile que se llama Edward Anthony Cullen, que MISTERIOSAMENTE coincide con la inicial del anillo… raro no?...- bromee, cuando vi como sonrió.

Sé que no puedo proponerte casamiento por que no es el momento, no por que no quiera, pero si me gustaría que de alguna forma, poder agradecerte la forma en la que te entregaste a mi eso vale mucho para una mujer, y mas si sos gitana, solo quiero que nuestro destino este unido para siempre, yo sé que cuando todo esto se descubra nos querrán separar pero te juro que no lo permitiré, no si te tengo a mi lado, asique compre estos anillos para que los llevemos siempre con nosotros, como símbolo de que siempre estaremos uno con el otro, solo necesito saber si tu también estas dispuesta?...- conto, con sus manos acariciando las mías y mirándonos profundamente, podía ver paz en su interior y su suave mirada. Aparte de ansiosa, nerviosa y perdida.

“Oye Bella respira maldita sea no me llega el aire, vamos contesta zorra”

Si no quieres lo entenderé, capaz quieras seguir con las reglas, aunque en realidad ya rompimos la mas importante…- murmuro ante mi silencio.

Edward?... no hay nada mas que yo desee en este mundo que sea juntar nuestros caminos, pero solo con una condición…- susurre juntando nuestras frentes.

Solo dila…-

PARA SIEMPRE?...- Interrogue, acariciando su nariz con la mía.

Para siempre, Bella.- afirmo con una hermosa sonrisa y como toque final beso mis labios, volviendo a decir que era la mejor sensación del mundo.

Es hermoso amor.- sonreí cuando paso el anillo por mi dedo, hacia un perfecto contraste con mi piel pálida, el anillo era de un color dorado oro, con una pequeña “E” entallada en su centro, lucia tan hermoso, tome el de él y se lo coloque, le daba un tono de masculinidad a su mano.

Eres mio…- finalice, pasando mis manos por su cuello y entrelazando mis dedos en sus cabellos.

Eres mía…- sonrió sobre mis labios.

Bien, estamos en la puerta de la clínica, después de desaparecer un día, tenemos unos anillos en nuestras manos, tenemos 100 personas allí dentro que seguramente nos miraran y como punto final de la historia tendré que bancarme a los hombres babeando por ti…- Se quejo edward una vez en la clinica.

Ya Edward quieres calmarte?... nada pasara! Me estas poniendo mucho mas nerviosa a mi, que me dirán cuando me apunten con el dedo, “Oh allí va la novia del jefe… A C O M O D A D A”.- me queje cruzando mis brazos.

Amo como te vez cuando te enojas!...- rio bajando del auto.

Imbécil…- rete cuando me abrió la puerta del coche.

Te amo…- contesto, con una sonrisa.

Odio que me compres así!.- bromee, cuando beso mis labios y entrelazo nuestros dedos para entrar a la clínica.

Yo sé que me amas después de todo, lo demuestras cada noche.- murmuro cuando la puerta de la clínica se abrieron.

Voy a hacer que no escuche nada…- reí.

Apartir de ahora en este instante eres la Doctora y mujer Cullen...- susurro, la idea no me parecia nada mala.

Amo como suena...- rei.

Inmediatamente como las puertas de la clínica se abrieron, entrelace mis dedos mas fuertes con los de Edward, a medida que íbamos caminando entre risas y palabras dulces la gente se nos quedaba mirando, en especial los empleados que dependían de las decisiones de Edward, el caminaba con una sonrisa en su rostro y se escuchaban murmullos a medida que caminábamos.

Buenos días señor Cullen…- Dijo aquella voz que detestaba tanto, cuando llegamos al mostrador principal de la clínica.

Buenos días Lauren…- corto Edward apoyándose en el escritorio sin soltar mi mano, podía sentir todas las miradas sobre mi a mis espaldas.

Tiene que autorizar las cirugías y hacer firmar a la enfermera que lo ayudara seguramente seré yo como todos los años.- rio ignorándome.

Como punto uno me encantaría que a partir de mañana me saludes con un “Buenos días Doctor Cullen, Buenos días doctora Cullen” tienes a mi futura esposa enfrente tuyo no quiero malos modales en mi clínica Lauren y lo sabes…- reto Edward, poniéndome de espalda a él y enfrentándome al escritorio donde pude ver como Lauren mi miraba con odio.

Donde están los papeles?... los firmaste tu?.- le pregunto poniendo una de sus manos en mi cintura tras que la otra, que para mi felicidad tenia el anillo, sobre la mesada.

No doctor, no los eh firmado aun pensé que como es costumbre los firmaría usted primero y luego los firmare yo, obviamente lo acompañare como en todos los años.- sonrió la muy perra.

Hash, muchísimo mejor así no tengo que mandar a reimprimirlos, no les firmes Lauren.- ordeno Edward firmando aquel gran papel con miles de letras, aquellas enfermeras que se encontraban en el mostrador se detuvieron a mirar con mucha disimulación el anillo de Edward.

Pero doctor si no las firmas no me dejaran entrar a la operación.- se quejo la mujer.

Y quien dijo que serás tú la que me acompañara?.- interrogo cuando agarro la lapicera y me la entrego a mi.

La doctora Cullen por supuesto, como te dije ella es mi secretaria asique ella me acompañara en las cirugías.- contesto cuando tome la lapicera, pude ver como todas las mujeres que escucharon el comentario quedaron con su boca formando una enorme “O” tras que Lauren me dedico una mirada de odio.

Pero doctor… siempre hemos hecho esto juntos…- insistía la muy zorra, pero era hora de marcar ciertos puntos.

Creo que has escuchado… “La DOCTORA CULLEN POR SUPUESTO” ordenes son ordenes, ahora si me permites la lapicera…- murmure cuando me di cuenta que ella me la había arrebatado de las manos.

Disculpen la interrupción, pero necesitamos los papeles para subirlos al directorio, Lauren me permites?...- Dijo un enfermero esperando el papel que tenia que ser firmado.

Oh todavía falta que firme mi mujer, Lauren… la lapicera.- dijo Edward con impaciencia, pero la mujer no estaba dispuesta a dármela.

“Bella muestra tu lado salvaje, demuéstrale quien es la mujer aquí, solo ocupa tu lugar”

Bien, creo que se te ah pegado la lapicera a la mano, tomare la mía…- comencé a jugar tocando mis bolsillos.

Oh amor, creo que después de la noche de ayer se me han caído las lapiceras de mi ambo, tu tienes alguna a mano?...- pregunte enfrentándome a Edward quien me miraba con una sonrisa picara, el si entendía mi juego.

No se fíjate tu, tengo que leer esto…- contesto incrédulo, mientras tomaba otro papel, Lauren miraba sin entender.

Si mi vida.- obedecí, pero lleve mis manos a su pecho, deslizándolos muy lento por su cuerpo, el me miraba sobre la lectura y me sonreía, luego deslice mis manos a sus bolsillos y encontré una lapicera, subí mis manos y me acerque a él.

Amo que siempre tengas lo que quiero…- guiñe mi ojo, mientras besaba sus labios lentamente.

Eso siempre…- contesto cuando rio y volvió a su lectura.

Perfecto, ahora si… a donde firmo?.- pregunte haciéndome la distraída, Lauren estaba que echaba humo por las orejas.

Aquí… Doctora…- señalo pero no termino la frase.

Cullen… Doctora Cullen.- termine sonriendo cuando firme aquellos papeles que no tenia idea de lo que se trataban.

Perfecto… hora si, Lauren iré por los pisos de arriba a controlar el piso de los ansíanos…- comenzó Edward.

Muy bien doctor Cullen, ya me preparo para acompañarlo.- Sonrió.

Oh no necesitas hacerlo, iré con Isabella, tu pasaras a ser la enfermera de apoyo de Seth, procura tratarlo bien y hoy revisen los pisos de niños, mis hermanos llegaran al mediodía para almorzar, si no estoy yo a tu alcance comunícaselo a Bella claro?...- explico acariciando mi cintura.

Si doctor.- afirmo bajando su cabeza.

Cualquier llamado lo pasas a mi consultorio a partir de ahora Bella ocupara el escritorio vacío de allí.- ordeno.

Pero doctor, usted nunca quiso que ese escritorio su ocupase…- se indigno la rubia.

Disculpa… estas aquí para escuchar mis ordenes o para cuestionarme cada paso que doy?.- se enfado mi novio.

Bien si me permites tenemos miles de cosas que hacer y quiero volver a casa temprano amor, mañana tenemos guardia.- hable luego de estar cansada de escuchar aquella mujer tan inútil.

Pero mañana es la guardia de Leah, Edward y yo no podemos ser cuatro en guardia.- se quejo la muy descarada, era tan estúpida que no entendía que mi hombre no la quería cerca!?. Me ponía de la cabeza.

Te dije que tu pasarías a ser la enfermera de apoyo para Seth por lo tanto tus guardias las compartirás con el, entrega estas carpetas a los empleados del piso 3, cuando termines tráeme el papelerío para pasarte de área, con permiso.- Finalizo, por fin, aquella estúpida conversación Edward con un tono de enfado, la dejamos a la mujer paralizada ante el acto que acababa de presenciar, caminamos de la mano hacia el ascensor donde todos los doctores, enfermeros, pacientes y guardias volteaban a vernos.

Wow llegaron los tortolos!.- Nos saludo Leah acercándose a nosotros, Edward tenía sus manos agarradas a mi cintura con su pecho pegado a mi espalda y nuestras manos con los dedos entrelazados.

Hola Leah…- saludamos ambos al mismo tiempo.

Oigan alguien me explica por qué hay tanto revuelo en la entrada?... Lauren esta hecha una loca al igual que sus amigas, Irina y no se como se llama la otra!.- interrogo Leah con su ambo color azul y unas carpetas en las manos.

Acabo de removerla al área de Seth, esta insoportable.- se quejo Edward mientras entrabamos al ascensor.

Pero Cullen, si la sacas de nuestra… OWWWW SE CASAN!?.- Grito cuando miro nuestros dedos entrelazados.

Leah me vas a matar del infarto!.- Rio Edward.

Oh lo siento lo siento, pero.. Es que oh dios no puedo creerlo, no me digas Cullen que te casaras? Con razón todo el mundo esta tan alterado!.-

Oye tu sabes perfectamente que no tengo permitido casarme con una mujer que no me corresponde…- contesto Edward con su voz seca, mientras me apretaba mas a su cuerpo.

Cierto… las reglas.- recordó Leah, luego de eso un silencio profundo se hizo en el ascensor Edward cada tanto besaba la punta de mi cabeza.

Vamos niños a mi no pueden mentirme apuesto a que la regla mas importante ya la rompieron, que caso tiene seguir con esto!.- rompió el silencio aquella mujer alta y morocha.

Nuestras vidas?...- murmuren.

Había olvidado que los padres de Edward son gitanos de raíz, igual creo que estaría bueno que conversen con ellos, seguramente hoz entenderá…- dijo Leah cuando el ascensor sonó su timbre llegando al piso deseado.

Flaca tu conoces a nuestra familia, mas que nada en el mundo, a ti te parece que solo con hablar todo se entenderá?... sabes que en este mundo la muerte es la única solución a todo, solo queda esperar a que la guerra se inicie y solo quede un ganador.- le cuestiono Edward quien caminaba de mi mano, el tenia razón pronto todo caería.

Creo que se están tomando las cosas muy trágicamente, deben esperar… todo puede sorprenderte…- sonrió Leah mientras llegábamos a la recepción del piso en el que estábamos.

Solo quiero estar con ella, eso es lo que me interesa.- sonrió Edward dándome un corto beso en los labios.

Yo creo que todo saldrá bien, solo es cuestión de esperar, oigan volviendo al tema, Edward no podremos hacer la guardia nosotros dos solos, quien estará…?.- levanto su ceja Leah quien tenia en sus manos ahora un ambo color azul igual que el de Edward.

Bueno hoy tuve la queja de una de mis enfermeras, va la de mi piso, donde me decía que odiaba su ambo color rosa, debo admitirlo el color es horrible, pero todo en ella luce bien, en fin tenia ganas de sacarme a Lauren de encima y la escusa de la enfermera me vino como anillo al dedo…- explico Edward, mi celos comenzaron a brotar como podía ser que cambiara todo por tan solo el capricho de una enfermera, seguramente era para tenerla mas cerca.

Cullen no sé que te traes en manos pero solo espero que sea digna de pertenecer al trio de guardia que nos corresponde.- dijo frunciendo el ceño Leah, genial otra mujer a la cual indicarle que el doctor Cullen es mio.

Puedes darle el nuevo ambo? Tengo que subir a buscar las carpetas, dile que se cambie y que la espero para comenzar el control.- se despidió dándome un pequeño beso y desapareciendo por el ascensor.

Este hombre esta loco, hizo un escandalo abajo por que quería que lo acompañe a hacer los controles arriba y ahora el bobo consigue otra, voy a terminar muriendo por sus cambios de estado síquico!.- Me queje, a lo que escuche a Leah reírse

No te rías, no es cómico, tendrías que haberlo escucharlo hoy de mañana… “Tendremos que ir a hacer los controles del piso de ansíanos”.- continúe imitando su voz mientras caminábamos a la sala donde algunos doctores seguramente estarían tomando un descanso.

Bella tu sabes como es Edward…- rio cuando estábamos por entrar a la sala.

Leah no lo defiendas, ahora dime quien es la nueva así le indico que Edward es mio… ya fue suficiente con aquella zorra de Lauren…- bufe entrando a la sala.

Cinco médicos estaban sentados y dos enfermeras se servían café, al verme entrar se quedaron inmutados en el lugar y un silencian se apodero inmediatamente de la sala, camine tratando de ignorar sus miradas y me serví un café, Leah seguía hablando como si nada pasara.

Oye si enserio vieras a la mujer que le tengo que dar este uniforme estarías retirando todas tus palabras.- sentencio tomando el otro café.

No me provoques quieres?... ni tampoco quiero conocerla, la mataría, tu eres distinto pero pensar que otra mujer tiene que pasar todo el día con mi hombre me pone de la cabeza!.- explique enojada mientras todos los presentes miraban la Escena.

Disculpen que las interrumpa… doctora Cullen un placer conocerla… de hecho tengo entendido que ah llegado el día de ayer y hoy su nombre ah deambulado por todos los pasillos.- Se presento una mujer morocha con gafas, tenia un ambo color rosa al igual que el mio, su sonrisa era deslumbrante, los médicos de atrás comenzaron a removerse en su silla.

Un placer…- sonreí tratando de ser amable esperando su nombre.

Ángela… mi nombre es Ángela…- se presento.

Disculpen que sea descortés pero alguien me puede explicar por qué me miran tanto y no hablan?.- Murmure solo para que ellas me escucharan.

Oh… es que b-bueno usted es la esposa del dueño del hospital… t-todos debemos tener respeto ante usted y saber que temas tocar enfrente suyo, digamos que es como la nueva autoridad, al doctor Cullen no le gustaría que le llegue el chisme de que alguien insinuó algo de su nueva esposa, inmediatamente perdería la cordura y lo mataría.- explico Ángela solo para que nosotras la escucháramos.

La nueva autoridad…- murmure, era rarísimo, odiaba que me miren y ser el centro de atención y esto no ayudaba en nada.

En fin, Leah quien es la nueva de guardia? Tengo entendido que han sacado a Lauren de tu equipo y el de Edward… veo el uniforme en tus manos pero ninguna cara nueva…- sentencio señalando el ambo azul.

Genial, yo tampoco conozco a la mujer que compartirá todo el día con MI HOMBRE…- dije entre dientes.

Eres así de celosa siempre?...- pegunto Leah riendo.

No soy celosa, defiendo lo mio!.- señale.

Bueno toma ve a cambiarte!.- me dijo extendiéndome el uniforme.

Que?...- pregunte mirando para mis lados pero no había otra persona que no sea yo.

Que vayas a cambiarte el rosa te queda horrible…- señalo Leah… acaso era yo la nueva enfermera del área de Edward?.

Oh felicitaciones te ascendieron! Pasas al área de Edward!.- festejo Ángela a lo que todas las enfermeras de atrás se atragantaron.

Eres tu la doctora de la cual hablaba Edward… debe ser menos impulsiva doctora Cullen.- guiño un ojo Leah.

Es un idiota… lo matare!.- me queje con una sonrisa.

Nos han llegado informes de aquellos cursos que realizaste durante la preparatoria, hemos conversado con Edward por teléfono decidió que podrías hacer buen equipo con nosotros tus títulos hacen preferencia con nuestra área… asique aquí tienes…- me extendió el vestuario y me indico una puerta que había allí me dirija a cambiarme.

Cuando termine empecé a escuchar susurros al otro lado de la puerta.

Como te atreves a hablarle?...- decía un hombre.

Oigan es la esposa del jefe no un policía!.- dijo Ángela.

Eres un loca… ahora no entiendo como la hacienden?... están locos? La mina ni siquiera a ejercido aquí, claro siendo la mujer del jefe todo el mundo haciende!..- señalo el hombre.

Tiene muy buen cuerpo seguramente ya se revolcó con Edward, no todo el mundo sube de puesto tan rápido.- termino nuevamente el hombre, mi animo se bajo, me estaban diciendo interesada y eso me daba odio, bronca, impotencia asique Salí de allí y todo el mundo volvió al silencio si querían que fuera mala, mala seria.

Disculpa… tú!.- señale al hombre quien me miro con miedo.

Si, si, tu el que me esta mirando!.- le ordene.

Si doctora que necesita?...- murmuro el cara rota acercándose a mi.

Hacedme un café… trata de que sea bien cargado tuve una larga noche no dormí nada…- ordene, a lo que todo el mundo solo se quedo paralizado.

Pero soy doctor… no mesero…- se atrevió a responder a lo que los de atrás solo se removieron en su asiento.

Escúchame bien, rata de hospital ya mueves ese maldito trasero hacia la cafetera y me haces un café… quieres que te lo repita!? Al doctor Cullen no le gustaría enterarse que anduviste diciendo que su mujer se revuelca por interés…- insulte a lo que el hombre se puso blanco y corrió a la cafetera, Leah y Ángela estallaron en risa tras que los doctores y enfermeras de atrás miraban con miedo.

Buenos días…- Escuche como una voz seria, seca y aterciopelada al mismo tiempo interrumpió la sala seguido por un pequeño enfermero.

Buenos días doctor…- saludo Ángela, todos los enfermeros y doctores volvieron al silencio tras que aquel hombre que me falto el respeto se encontraba sirviendo la taza de café y podía escuchar como su mano temblaba.

Oye te queda bien el azul…- me señalo ignorando las miradas de los demás.

Mejor que el rosa.- reí, cuando se acercó por completo a mí.

Oye el de blanco… maldita sea nunca me acuerdo su nombre… en… dios no me sale! Ah si… este…- trataba de descifrar Edward el nombre del hombre que me estaba sirviendo mi café.

Javier… el Doctor Javier Street.- le recordó Leah.

Ese si.. Street quieres servirme un café… no dormí nada anoche y dudo que hoy pueda resistir.- dijo… Punto a favor Bella… las noches son largas, de nuevo las caras de sorpresa volvieron.

Si doctor Cullen ya… ya se lo p-preparo…- dijo con nerviosismo el hombre mientras me traía la taza con mi café, le dedique una mirada asesina donde agacho su vista y volvió a hacerle el café a mi novio.

Buenos días doctora Cullen…- saludo acorralándome con una sonrisa benévola entre la mesada y su cuerpo.

Buenos días doctor…- respondí cuando una de sus manos se deposito en mi cintura y con la otra tomaba el café que el hombre le brindo.

Esa no son maneras de darme el buenos días…- murmuro, cuando supe a que se refería, me acerque aun mas y lo bese, pase mi mano libre por su cintura, para atraerlo mas a mi cuerpo que se encontraba contra la mesada.

Se podían escuchar de fondo los “Aug” de las enfermeras románticas, los “Dios” de Seth, la risa de Leah, y algún que otro comentario fuera de lugar.

Todavía no entiendo que hacen hay sentados tan cómodamente hablando entre ustedes cuando tienen un piso a cargo cada uno donde aproximadamente tienen 15 pacientes para atender…- pregunto Edward levantando su ceja y bebiendo de su café, mientras se ponía a mi lado y tomaba mi cintura.

Y dudo que ningún de ellos no necesite algo…- interrumpió Seth entrando a la sala.

Buenos días Doctor Cullen…- saludo Seth con una palmada en mi hombre.

Que tal Seth…?...- lo saludo.

Dios santo y la virgen! SE CASAN!... SE CASAN, SE CASAN O ME MUERO LEAH POR QUE NO ME AVISASTE!.- Se sobresalto el pequeño, festejando, a lo que todos los de atrás se quedaron quietos.

Ahora entiendo porque el “Doctora Cullen” BASURA GRACIAS POR AVISARME!.- Señalo a su hermana.

Recién me entero…- levanto las manos Leah en modo de inocencia todos reímos.

Ah y respondiendo a tu pregunta Cullen no estoy NADA NADA BIEN!.- se quejo Seth tomando un sorbo de su café.

Que te paso?.- pregunto Edward divertido.

Que paso? Me has movido a la persona mas insoportable a mi área… cuídate por que pagaras por esto y tu… si tu la de pelo y ojos cafés pagaras por sacarme a mi amigo de la soltería!.- rio Seth divertido, era una persona con la cual se podía bromear y divertirse.

Lo siento…- reí.

En fin vamos amor?... quiero revisar eso para llegar rápido a casa.- ordeno Edward dejando la tasa de café ya vacía y tomándome de la mano.

Si amor… nos vemos luego chicos…- saludo a todos dejándolos atrás, comenzamos a caminar con nuestras manos entrelazadas.

Asique Street te trato de revolcada?... o me a llegado mal el comentario?.- dijo para mi sorpresa mientras esperábamos el ascensor, tenia sus mentón apoyado en mi hombro.

C-como te has enterado?...- pregunte mientras entrabamos al ascensor.

Bella soy bueno no idiota debería volver y romperle la cara.- susurro con odio apoyando mi espalda en su pecho.

Pero no lo harás…- sentencie dándome vuelta sobre sus labios.

No puede ser tan estúpido nunca me lo banque!.- dijo con odio, si no lo calmaba iba a matar al muchacho asique me solté de su agarre y toque el botón para detener el ascensor.

Escúchame bien Cullen, no me ah dicho nada raro yo me defendí y no me ah lastimado sus palabras no me llegan… te amo a ti y estoy aquí por ti…- susurre tomando su rostro para que me mire, pero no lo hacia.

Solo no quiero que digan cosas que no son…- murmuro.

Sabes algo?... el azul es uno de mis colores favoritos, tengo que agradecerte de alguna forma lo que has hecho con mi uniforme rosa… que te parece si cumplimos una de mis fantasías?...- insinué acercándome a él y deslizando mi dedo desde su mentón hasta llegar al borde de su píntalo, pude sentir como gruño y me acorralo en contra de su cuerpo y la pared del ascensor.