Hola Hola a todas nuevamente, eh estado muy desaparecida pero eh vuelto!

Como están? Quería contarles que estoy un poco triste por que las saga llego a su “The End” al igual este fic lo hara dentro de unas semanas L se vienen capítulos decisivos y el final mas cerca que nunca.

GRACIAS A LAS QUE NOS ACOMPAÑAN!

Espero comentarios saludos.

Giu.

CAPITULO: Futuro.

BELLA POV.-

Mis padres se quedaron estáticos en el momento que los pasos de Edward se sintieron en la escalera, sabia que mi niño entraría por esa puerta junto con su padre, también sabia que haría cualquier cosa con tal de protegerlos a ambos.

Me parece que alguien tiene hambre – entro Edward a la habitación, uno de sus brazos pasaba por el pequeño trasero de Anthony tras que con la otra agarraba su espaldita, mientras nuestro hijo chupaba la mejilla de su padre, haciendo que este ría.

Hola pequeño – dije cuando ambos se acercaron a mi, bese la frente de mi hijo pero lo deje en brazos de Edward.

Le eh dicho a Seth que le avise a Zifrina que le prepare su mamadera – susurro Edward apoyándose en el escritorio, mientras Anthony se entretenía con su mano.

Bien – sonreí, gire y me encontré con mis padres pálidos como una hoja de papel, y mirando a Anthony atónitos.

Alguien puede decirme que significa esto? – pregunto mi padre señalando al bebe.

Se llama Anthony – masculle entre dientes, su mirada ante mi hijo no me gustaba nada.

Al diablo como se llame, quiero saber quien es y por qué, tu, has dicho “Tranquilo hijo papi esta aquí” – señalo a Edward repitiendo la frase con un intento de su voz.

Pues por que soy su padre – respondió tranquilo.

Pues de eso no hay duda, es igual a ti! – agrego mi madre, tras que en su cara pude ver una … ¿Sonrisa?

Lo se – sonrió Edward besando la frente del pequeño.

Isabella te escucho – ordeno Charlie.

Que es lo que quieres saber? – corte.

¿Quién es el pequeño?¿Porque le ah dicho padre?¿Porque esta contigo? Sabia, arruinaste la estabilidad de la pareja de Edward cierto? Te metiste en la cama de una persona que estaba a punto de ser padre… eres… eres una –

No se atreva a decirlo señor Swan, le eh dicho que esta es mi casa y aquí se respeta a mi mujer – defendió Edward.

No puedo creer que la hayas tomado como tu mujer, mira si te engaña como lo has hecho tú con la madre de tu hijo – grito Charlie a Edward.

Porque soy sumamente feliz con la madre de mi niño, por que la amo más que nada en el mundo y por qué estoy formando una familia con ella – enumero mi novio.

Claro… claro por eso te acuestas con Isabella en el momento que tu verdadera mujer se va – lo cuestiono, eso fue suficiente para saber que mis padres me tomaban como una puta.

Es que eres idiota? – le pregunto Renee señalando a Charlie.

No me faltes el respeto Renee – reto este.

Pero es que el nivel de idiotismo que tienes es realmente preocupante, observa bien al niño Charlie, mira sus gestos, mira sus rasgos, mira su cabello, mira su menuda figura, es que acaso no te hace acordarte a nadie? – le pregunto mi madre golpeando su hombro, mirando al niño como babosa.

No, no me recuerda a nadie, ahora si bella, recoge tus cosas si te vas a acostar con un hombre casado, debes pasarnos la mensualidad de lo que te paga – se atrevió a decir, di dos pasos hacia el, saque valor desde el fondo de mi cuerpo y le di un fuerte cachetazo con mi mano.

Siempre supe que eras una mierda como padre, pero jamás te creí capaz de calificar a tu hija como a una prostituta, banque que me vendieras como objeto, supere que no te hayas comunicado conmigo durante todo un año y medio, entendí tu vicio por el juego, pero jamás, en mi vida te creí capaz de esto – declare mirándolo fijamente a los ojos.

Te guste o no, yo soy tu padre y en el reino gitano se hace lo que el padre dice, vas a dejar a esta familia en paz, dejaras de entrometerte en la cama de un hombre que no te paga – ordeno.

No iré contigo ningún lado, no me venderás nuevamente, no me arriesgare al maltrato y tu masoquismo patético – respondí.

Gracias a mi estas aquí y has conocido a la familia Cullen –

Error, gracias a mi padre nosotros nos conocimos si él no hubiera sabido de ustedes no las aceptaría – salto Edward desde atrás, mire sobre mi hombro, Anthony tenia su rostro pegado al cuello de su padre tras que sus manitos hechas pomos sobre su camisa en el pecho.

Que Mas da ya no importa, ambos deben separarse no puedo creer que te metas en una familia y la arruines – me miro mi padre con asco.

No puedo creer que no creas en la palabra de tu hija, se nota que jamás me has prestado atención de pequeña, tan solo mírale la oreja a Anthony .- ordene, mi hijo tenia cerca de su oreja un pequeño lunar que también tenia yo, pero también había sacado los de su padre en la nuca.

Dime que es lo que vez – ordene, cuando mi padre realizo la acción se quedo estático en el lugar tras que mi madre solo se dedico a mirar y una lagrima solitaria callo por su mejilla.

No… no puede ser – dijo Charlie.

Bella es mi mujer, Bella es la persona con la cual estoy dispuesto a pelear, Bella es la madre de este pequeño – sonrió Edward besando la cabeza de Anthony quien ahora jugaba con uno de sus botones.

Pero… pero como?... cuando?... donde? – comento mi padre.

Como? Creo que eso ya lo debe saber señor Swan, ¿Cuándo? Hace un par de meses nació ¿Dónde? Pues aquí, o no lo ve? – le respondió Edward mientras me acercaba y pase mis brazos por su cintura. El me paso a Anthony y beso nuestras frentes.

Este niño no puede ser tu hijo, en que momento?... pero porque? No, no entiendo – comenzó a ponerse nervioso mi padre, eso no era una buena señal.

Que es lo que quieren? – corte ignorándolo.

Al niño, si nos llevaremos a ese niño, lo venderemos o algo no puedes ser madre sin antes casarte tan solo mira que vergüenza entrégame al niño – amenazo mi padre, en ese instante ni lo dude aprisione a mi niño mas contra mi pecho nadie me lo sacaría, cuando mi padre estaba a centímetros de tocar a Anthony …

Le pone una sola mano encima a mi hijo y le puedo asegurar que olvidare que es un pobre anciano – amenazo Edward poniéndole su firme mano en el hombro de Charlie.

Ese niño no puede vivir! Es fruto de un mal amor, es un fruto de un amor no correspondido, dan intereses para ninguno, sin beneficios, ese niño debe morir! – grito Charlie.

Escúcheme bien pedazo de basura o como sea que quiera que lo llame, llega a tocar a alguna de estar personas y juro por mi vida volarles los casos! – Escupió Edward empujando a mi padre lejos de nosotros.

Ustedes no entienden, nada de dinero hay aquí y eso no es lo acordado, firmamos un trato a cambio de dinero, pero en el trato no decía que Isabella quedaría embarazada – le sentencio a Edward.

MALDITA SEA CHARLIE, QUE MIERDA TIENES EN LA CABEZA? NO TE DAS CUENTA QUE SOY FELIZ, QUE ESTOY BIEN TENGO UN HIJO AL CUAL CUIDAR Y UN MARIDO AL CUAL AMAR, POR TODOS LOS CIELOS TAN SOLO NO PUEDES DESAPARECER PARA SIEMPRE? VETE, VETE DE MI VIDA DEJAME, DEJAME SER FELIZ A MI MANERA, DEJA DE PENSAR EN EL DINERO Y BENEFICIOS, QUIERO A MI FAMILIA VIVA EN UN PALACIO O DEBAJO DE UN PUENTE! – Escupí con bronca Charlie se acercó aun mas quedando cara a cara conmigo, Anthony ya no estaba en mis brazos Zifrina se lo llevo para alimentarlo.

Solo quiero mi di ni ro – separo.

Para que quieres tu dinero?... para volver a jugar?... para volver a quedar condenado de deudas? Hasta el limite de tener que vender a tus hijas?... hasta el limite de ya no saber de donde sacarlo? – susurre mirando sus ojos negros.

Tu no eres nadie… sabia que ibas a ser la deshonradas de la familia… en este momento te informo que eres la mancha negra de la familia – me sentencio.

En este momento te informo que ya no soy mas una Swan, Soy una Cullen pese lo que pese, pertenezco a ellos –

Si hay algo que JAMAS voy a permitir es que te denomines de esa familia, te vendí para pagar las deudas pero ahora vengo por ti, juro por mi vida que te llevare lejos de esto! – me tomo del brazo tan fuerte hasta el punto de lastimarme.

Suéltame – susurre.

Eres mi hija –

Suéltame – repetí – me estas lastimando – agrega.

No me importa –

Mi esposa a dicho que la suelte – dijo Edward tomando a mi padre del cuello y echándolo hacia atrás.

Edward – susurro Renee.

No quiero que le vuelva a poner un dedo encima a Bella, no quiero que la mire, no quiero que la toque, no quiero que le hable si quiera quiero que respire cerca de ella, mantenga su cuerpo lejos de mi niño y mi esposa, por que nunca me arrepentiré de sacarles los ojos, recuerde como se arreglan los gitanos Señor Swan, no quiero llegar al limite – lo amenazo Edward con sus ojos negros.

Charlie vámonos… jamás tuvimos que hacer esto… dejémoslas ser felices se lo merecen – dijo Renee separándolos.

A cambio de que?... a cambio de que nosotros dos terminemos en la calle?.. Renee no tenemos fondos para sobrevivir un día mas necesitamos venderlas, necesitamos el dinero – grito Charlie.

TE DIJE QUE NO TENDRIAMOS QUE VENDER A NUESTRAS HIJAS, MALDITA SEA ERA MIS NIÑAS ME HICISTE FIRMAR UN CONTRATO SIN SABER DE QUE SE TRATABA, JAMAS PENSE QUE LLEGARIAS A TANTO, SON TUS HIJAS QUE DIABLOS TIENES EN LA CABEZA, ACASO HAZ VISTO AL NIÑO? POR QUE NO PUEDO DISFRUTAR DE MI NIETO TRANQUILA, POR QUE NO PERMITES LA FELICIDAD DE OTROS… DEJALAS EN PAZ, DEJA DE TORTURARNOS Y QUERER MANIPULARNOS A TU MANERA DEJEMOSLAS EN PAZ POR FAVOR CHARLIE! – Le grito mi madre, rápidamente comprendí que ella no quería ser parte de esto.

Las tuvimos para hacer dinero recuerdas? –

Las tuve por que sentía amor por ti, por que mi sueño era ser madre tu lo arruinaste con el tiempo, tan solo mira a Isabella, mira su casa, su hijo, su marido, esto éramos nosotros antes… así con sonrisas cuidando de todo… Charlie es hora de dejarlas ser ellas mismas… es hora de que vivan como quieran… Charlie es hora de entregarte… es hora de volver al lugar donde tendrías que haber estado hace mucho tiempo – le susurro Renee acercándose a él.

No volveré a ese lugar… no… no… no – se negó metiendo la mano dentro de unos de sus bolsillos sacando un arma.

Tu maldito idiota te has enamorado de mi hija y has arruinado todo, sabias perfectamente que ella tenia que seguir con tu hermano, sabias perfectamente que el contrato era por un mes para cobrar la plata – apunto a Edward, en la cabeza me aferre a su brazo.

Escúcheme señor Swan… necesito que se calme por favor… podemos hablar esto – le susurro Edward para intentar calmarlo.

Tu maldita mujer córrete de ahí… sal de ahí vamos apártate – me grito, Edward me miro con ternura y asintió con sus manos en alto, Salí de su espalda y corrí a los brazos de mi madre, ella… ella no tenia la culpa de nada, el miedo me inundo no quería perderlo a Edward… no de nuevo.

Charlie por favor… hablemos, que es lo que quieres? Dinero? Puedo darte de sobre… quieres irte del país? Te contrato el primer vuelvo, pero por favor guarda el arma, consiguieras nada matándome, Bella no tiene acceso a mis cuentas no tendrás de donde sacar el dinero – Edward comenzaba a hacerlo entrar en razón.

Si te mato la libero, podre venderla sin problema – tembló Charlie.

No si hay un hijo de por medio Charlie, las reglas gitanas bien dicen… si algunos de los dos muere y hay un hijo de por medio, nuestra vida será destinada al cuidado de nuestros hijos por lo tanto cualquier contrato de matrimonio caduca… piénsalo Charlie – explico mi hombre.

Solo quiero dinero – susurro mi padre.

Esta no es la forma – murmuro Edward al fin.

Yo… yo, lo, lo siento – se derrumbo mi padre de rodillas en el piso dejando el arma a los pies de Edward mi alma volvió al cuerpo.

Todavía tienes chances de volver a ser quien eras antes de toda esta locura… puedes de disfrutar de Anthony, carleslie no esta el no tendrá abuelos… pero antes, antes tienes que sanar – sentencio Edward mientras veía como por la puerta entraban dos enfermeros, vestidos de blanco inmediatamente comprendí… mi padre tenia que estar en un centro de rehabilitación.

Que?... que? Que están haciendo?... que es esto? – se nervioso Charlie mientras los enfermeros lo agarraban uno de cada brazo, mi madre tapo su boca para ahogar el grito, mi nudo en la garganta se hizo mas grande al punto de doler.

Charles escúchame! – ordeno Edward acercándose a él.

Me mentiste, diste que vendríamos por plata! – acuso mi padre a los gritos.

Entiende que es la mejor manera, necesito que sanes para que mi mujer pueda disfrutar de lo que alguna vez fue su padre, necesito que mi suegra pueda disfrutar de su marido y que mi hijo tenga un abuelo que le enseñe leyendas, necesito que mejores Charlie – lo alentó para mi sorpresa Edward, la respiración de Charlie se calmo, asintió con la cabeza.

Lo hare – murmuro, Edward sonrió y asintió con la cabeza los enfermeros se lo llevaron y así se cerraba el capitulo de mi vida, mi padre sanaría eso lo sabia.

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Anthony que es lo que pasa?... porque no quieres dormir? – habían pasado tres días desde todo el problema de mi padre, mi madre me había pedido perdón y me explico que ella no quería que esto sucediera, pero los hábitos así lo propusieron, en este momento Edward estaba en la clínica volviendo a su trabajo sabia que llegaría dentro de una hora, mi madre estaba conmigo ayudando a que Anthony se calmara.

Que es lo que le pasa madre? – murmure con preocupación.

Tal vez le duela algo –

Ya lo eh revisado no tiene nada – casi llore Anthony estaba en mis brazos llorando sin ningún tipo de pausa.

Seguramente son los dientes – sonrió mi madre, camine y camine por toda la sala con mi hijo, lo puse en distintas posiciones para lograr que se calmara pero nada, abran pasado dos horas, mi mente estaba agotada, al igual que mis brazos.

Escuche como un auto se detenía en la puerta de mi casa y así lo identifique Edward ya había terminado su jornada laboral, Anthony aun lloraba mi cabeza no hacia otra cosa mas que dar vueltas y vueltas.

Voy a preparar la cena hija – sonrió mi madre desapareciendo.

Sh… tranquilo hijo… dile a mama que te pasa – rogué cuando sentí como unos brazos se apoderaban de mi cintura.

Hola amor – susurro en mi oído.

Hola vida – respondí, pero Anthony seguía llorando.

Que pasa? – pregunto luego de dejar un beso en mi cuello y mirando a Anthony sobre mi hombro.

No se no se calma ah estado así todo el día – casi llore, Edward ahora camino unos pasos y se puso delante mio.

Hola pequeño… eso… hola – le dijo Edward, el niño inmediatamente dejo de llorar y abrió sus ojitos en busca de su padre.

Genial! Buenísimo… esta era la estúpida solución?... Anthony lloraste todo el día hasta el punto de volverme loca por que querías estar con tu padre? Maldición como no se me ocurrió! – camine por toda la sala, mientras veía como mi niño enrollaba el dedo de su padre en su pequeña mano y luego de unos minutos y un par de besos se quedo dormido en los brazos de mi esposo.

Asique la solución era su padre… tu eras igual – suspiro mi madre.

Como no se nos ocurrió? – le pregunte mientras Edward se sentaba en el sillón.

Cada vez que llorabas Charlie era el primero en aparecer, apenas escuchabas su voz te callabas y esperabas tenerlo cerca para abrir los ojos, digno hijo tuyo – rio mi madre, no podía creer en lo que era mi padre ahora y lo que alguna vez fue.

Los meses comenzaron a pasar y pasar, Anthony crecía cada vez mas y mas, mi madre ya no estaba en casa tenia un departamento a unas pocas cuadras, el juicio se retraso, el abogado decidió prolongarlo para juntar mas pruebas, sabíamos que cuanto mas pruebas tengamos mas seguro era la felicidad en nuestra vida.

Anthony ya cumpliría dos años dentro de muy pocos días, sus dientes ya estaban, se pasaba horas y horas mordiendo todo aquello que tenia a mano para calmar la molestia, todavía recuerdo cuales fueron sus primeros pasos, es demasiado obvio decir con quien fue cierto?

FLASHBACK.

Anthony quieres que te traiga la mamadera? – le pregunte a mi pequeño que se encontraba estirado en el sillón mordisqueando aquel mordillo.

Camine unos pasos en busca de este y llegue al sillón, le entregue su mamadera y el como un buen niño comenzó a tomarlo, me unid nuevamente en la lectura de mi libro, tras que también acariciaba la pierna de mi niño, sus manos se agitaban de un lado a otro mientras que con la otra sostenía su propia mamadera.

Escuche el coche en el garaje inmediatamente supe quien había llegado a casa, mi hermoso esposo… si ahora lo podía denominar esposo, tras que una tarde nos agarró la locura y nos presentamos en el registro civil, solo dijimos “Si quiero” firmamos y oficialmente ya era una Cullen.

Las llaves de Edward comenzaron a hacer ruido en la puerta cuando mis ojos se congelaron al ver lo que veía.

Mi pequeño bebe dejo su mamadera en el sillón, abrió sus ojos rápidamente y comenzó a patear y estirar sus brazos hasta el limite de comenzar a resbalar para quedar de pie sujetado del sillón, levanto su mirada y me sonrió, los pasos de Edward se escucharon en la entrada y Anthony como si fuera el mismo dios, comenzó a caminar… sus pasos eran torpes y se sujetaba absolutamente de todo, primero el sillón, luego la mesita hasta llegar al limite de caminar sin necesidad de agarrarse de nada, mi cara palideció mi pequeño había dado sus primeros pasos.

Hola amor – me dijo Edward sin bajar la mirada no se había percatado a quien tenia enfrente de pie.

Y Anthony? – se extraño al no verlo en el sillón.

Compruébalo tu mismo – sonreí, y Anthony comenzó a tirar de su pantalón, Edward bajo su mirada y palideció completamente, el niño sonreía y gritaba tirando del pantalón de su padre.

FIN DEL FLASHBACK.

Y así eran todas las tardes, Edward llegaba y mi pequeño corría a su encuentro.

Amor perdí mis llaves – rio Edward mientras se sentaba en la mesa listo para cenar.

Deben estar en el coche – excuse sentándome a su lado luego de terminar de servir la comida, Anthony estaba en su sillita jugando con el puré y riendo.

Amor… mañana… mañana es el día – recordé, mañana se llevaría a cabo el juicio de tantos años.

Lo.. Lose – tartamudeo.

No se si quiero que vayas Edward… hemos estado estos años olvidando no creo que sea necesario que tengas que recordar nuevamente – dijo tomando su mano

No… necesito que se queden allí dentro… solo, solo necesito protegerlos – murmuro con voz quebrada

Sabes que estoy contigo cierto? – acaricie el dorso de su mano.

Es… es lo único que necesito – sonrió débilmente, sus ojos se aguaron.

Eu… no, no llores Edward estoy contigo… siempre – acaricie ahora su mejilla.

Tengo miedo… miedo que las cosas salgan mal y no poder protegerlos… tengo miedo solo eso – anuncio.

Te amo – le recordé acercándome a sus labios.

Gracias por estar conmigo bella, te amo – finalizo ahora besando mis labios.

P.a.… p.a.… -- escuchamos una voz pequeña que nos hizo desconectar ambos nos quedamos inmóviles en nuestros lugares.

Que ah dicho? – pregunto Edward pálido.

Lo que escuche? – pregunte, mirando ahora a nuestro pequeños que nos miraba con sus grandes ojos color verde.

Papa – lanzo de repente apuntando con su cuchara a Edward quien sonrió de oreja a oreja y se puso de pie sacándolo de su sillita.

Mi campeón! – grito Edward abrazando al pequeño.

Papa… Papa… Papaaaaaaaaaaa! – gritaba el niño aplaudiendo y sonriendo, sabia que estos dos iban a ser un dueto difícil de separar.

Luego de unas horas Anthony se durmió en los brazos de su padre como siempre, mientras yo terminaba de acomodar la cocina, con respecto a la familia Kate y Emett se encontraban fuera del país con sus hijas, volvería hoy mañana por la madrugada para el juicio, esme vivía en una casa muy cerca nuestro al igual que Alice y Jasper junto con su hijo.

Me termine de dar una ducha, el miedo de lo que pasaría mañana me inundaba cada dos por tres, miedo a que pasara con nuestro futuro, miedo a que todo lo hecho se pierda con tan solo una palabra, me coloque mi piyama y comencé a peinar mi cabello.

Sentí unos brazos aferrarse a mi cintura besando mi cuello, para después subir a mis labios besándonos con pasión y necesidad, amaba a Edward con todo mi amor y sabia que él me amaba a mi, sabíamos que no viviríamos uno sin el otro, cada día a su lado era una sonrisa tanto para mi como para nuestro hijo, así nos volvimos a amar como lo hacíamos todas las noches, con ternura, nombres, pasión y razón. Pudiendo así deshacernos de todos las tensiones.

Pero mañana nuestro futuro seria definitivo, si en esta guerra triunfa el bien o el mal, nadie lo sabe solo se que el amor gitano... no es nada sano.