"Llevas una estrella en tu vientre, llevas una vida que late"

"A esa estrella que llevas en tu vientre, no le digas detente" 



La mañana era hermosa y brillante.

Rosalie no tardaría mucho en llegar, y Alice llamaba a la puerta, para realizar su típica visita antes de ir a trabajar.

-Hola Bella.- grito emocionada, abrazándome.- ¿Como están los tesoros de la tía?- pregunto a mi barriga con tono de niña pequeña.

-Hola Alice, pasa.- la invite

-No puedo, Jazzy me espera en el auto. Por cierto, se que prometimos venir hoy a cenar contigo y Rose pero es nuestro aniversario, y en realidad no sabia que el tenia nada planeado, pero así es, entonces no puedo.- su explicación era algo enredada y apresurada

-Bien Alice, feliz aniversario.- celebro con ella

-Gracias, adiós.- deposito en beso en mi mejilla y salio por corriendo hacia el auto

-¡HOLA BELLA!-grito Jasper desde el auto. Conteste con la mano, antes de que el auto se alejara

-Bueno Bella, como todos los días estas sola y sin nada que hacer.- estaba apunto de cerrar la puerta cuando una mano me lo impidió

-No estas sola, aquí estoy yo.- el inconfundible olor a rosas de Rosalie me inundo por completo.

-Hola Rose.- me voltee para saludarla con la gran alegría que sentía porque estuviera allí para acompañarme.

-Hola pequeña.- me abrazo cariñosamente.

-Hola.- escuche una voz infantil

-Hola lindo.- me agache para abrazar a Derek que parecía tener miedo

-¡BELLA!.- grito el niño feliz al reconocerme. Me abrazo con fuerza, aforrándose a mi cuello. Pase mis brazos por su espalda para traerlo conmigo cargado.

-Bebe.- dijo acariciando mi vientre inflado y mirando a Rose

-Si amor sus bebes.- le afirmo su madre.

Los acompañe hasta la habitación de huéspedes de la casa, y allí los deje para que se instalaran.

Desayunamos juntos, y luego Derek vio las caricaturas el resto del dia.

Era la hora del crepúsculo y Derek dormía placidamente en el sofá con su manta favorita abrazada, mientras transmitían sus cómics favoritos.

-Oh por Dios Bella yo te traje un regalo.- Rose se paro de una de las sillas de la cocina y se encamino a la sala para subir corriendo la escaleras

-Toma.- regreso demasiado rápido con un bulto cuadrado envuelto en papel plateado. Desgarre el mismo y me encontré con un libro de portada negra y una manzana en las manos de alguien. Crepúsculo, el libro en el que se basaba la peli que vi con Alice, y el que había pensado comprar, me lo había regalado Rose. Estaba agradecida con ella, porque así dentro de tres días cuando se fuera, tendría que hacer.

-Gracias Rose, esto es lo que necesitaba un libro.- me enderece y la abrace.

-Me lo imagine, a mi también me dio por leer mucho en el embarazo. Leí mucho Pablo Coelho, y llore mucho también. Como extraño esa etapa de mi vida, me encantaría estar como estas tu ahorita, y lo que mas me duele es que Emmet también lo desea y yo por entupida no puedo tenerlo.- sus tono se volvió algo melancólico mientras miraba al vacío.

-¿Por que?- pregunte. Se sentó frente a mi y suspiro.

-Hice una estupidez que casi me costo la vida. Aun agradezco a Dios que al menos me dejara tener a Derek, porque sino no se que hubiera pasado conmigo.- estaba mas que enredada pero no quise preguntar.

-Recuerdo que estaba muy enamorada en la secundaria. Royce era sin duda lo mejor para mi y yo me creía lo mejor para el. Las hormonas siempre han sido un dilema para nosotras las mujeres en esa etapa, aunque con los hombres también es un problema. Yo se que Royce no era así, solo fue un momento de calentura mezclado con los comentarios de sus amigos. Todos sus amigos lo había hecho con sus respectivas novias, menos el. Yo solo quería hacerlo feliz, todo lo que pudiera, y al parecer quedar bien con sus amigos era parte de sus felicidad. No me he de quejar de esa noche, fue mágico. El podría quedar bien con sus amigos, por lo tanto seria feliz, y así yo también, todo era perfecto, o eso creía yo.

Algo en mi cuerpo dejo de ser igual, algo no estaba marchando bien, y pensé que era una extraña enfermedad de la que me curaría con unos días, pero no fue así. Mi enfermedad solos se curaría en 9 meses. A pesar de que a mis 17 no esperaba que esto me ocurriera, no todo fue tan gris. Estaba contando con Royce para este camino, pero parece que estaba sola.

Recuerdo claramente que me dijo el día que le confesé que estaba embarazada: "Bueno fue divertido, yo disfrute salir contigo y me sentí bien cada vez que mis amigos me veían contigo, la chica linda del instituto, pero bueno la vida es así, las cosas cambian y yo tengo una vida, y esa si no voy a permitir que cambie". El tenía el futuro asegurado como economista de Harvard así que no tenia tiempo para albergarnos a ninguno de los dos en su vida.

Sola como estaba-mi madre había muerte unos 3 años atrás-mi papa siempre luchando para sacarnos adelante y Jasper en su burbuja personal, no tenia muchas opciones. 

Cuando les conté lo que me ocurría, mi padre solo pensó en matar a Royce, y a so se dedico durante el 1er mes de mi embarazo, a perseguirlo para matarlo por cobarde

A una semana de mi primera consulta, recuerdo que estaba destrozada. Mi padre solo pensaba en conseguir a Royce, que parecía que se lo había tragado la tierra, y mi hermano menos hablaba. Hable con una amiga y ella me presento una serie de opciones, que iban desde dar en adopción hasta conservarlo, pasando por acabar con esto.

Ella me acompaño a una clínica oculta por la fachada de un galpón esa tarde de verano. Entre con algo y salí sin nada, mareada y confundida, con lagrimas en los ojos y deseando que Dios y esa criatura algún día me perdonaran.

Parte de la misión de esos "médicos"-dibujo comillas en el aire.- fue darme un informe que mostrara mi perdida como un aborto espontáneo

La semana siguiente, cuando me toco mi consulta, llegue a la casa avisando que había perdido el niño. Aunque no lo dijeron, tanto mi padre como mi hermano respiraron de tranquilidad pensando que eso era lo mejor, sin saber que había sido yo la que había hecho semejante locura

Aunque no somos gemelos, Jasper y yo tenemos la conexión digna de los mismos. Esa noche después de la cena me fui a mi cuarto, afligida porque lo que había pasado. Jasper llego esa noche a mi puerta y me pidió entrar

"Algo mas paso Rose. Entiendo que te afecte que lo perdieras, pero algo mas ocurre, yo lo se"- me dijo Jasper

El único aparte de Emmet y ahora tu que lo sabe es Jasper. Esa noche le conté todo y llore en su hombro.

Se que no tengo escusa para lo que hice y que fue un error terrible, pero yo era joven y tonta Bella. Estaba desesperada tratando de encontrar una salida a mi problema y al que le había generado a mi familia. Aunque el problema me quedo. Producto de eso que me hicieron, quede en una condición especial, que solo me permitió tener un hijo y con el riesgo máximo de perdida, aunque no fue así, y ahora tengo a mi angelito, pero no puedo tener a nadie mas.- las lagrimas comenzaron a brotar de los ojos de Rosalie. Me acerque y la abrase para reconfortarla

-Soy una estupida. Pero es que Bella yo era joven, estaba sola, preocupada, dolida y joven. No es escusa pero es la única cosa que me digo y medio me reconforta.

-Tranquila Rose, mi intención no es juzgarte, claro que no, o soy quien para hacerlo.- dije. No tenia mucho mas que decirle, porque nada seria digno del momento sin que sonara a crítica.

No era nadie para criticar ni opinar a ningún nivel con respecto a lo que había hecho Rose. Yo particularmente no lo hubiera hecho, pero no la juzgaba de igual manera, porque en la desesperación se hace cualquier cosa.

Solo tenia una cosa segura: Siempre apoyaría a Rose y ahora que la conocía entendía alguna de las muchas reacciones sobre protectoras con Derek, o esa tan privada y especial relación que mantenía con Emmet.