Corrí varios kilómetros,no medí la distancia pero tuvieron que rondar los veinte o treinta. Cuando recuperé el control de mi misma,paré.

Volví la vista hacia los lados y me dí cuenta de donde estaba...En la pradera donde mi madre y yo habíamos hablado hacía varios meses atrás.

Una rabia que jamás había sentido recorrió cada milímetro de mi cuerpo y grité tan fuerte como pude atizando un golpe al árbol tumbándolo del mismo,me sentí tan bien que repetí lo mismo varias veces y me paré al darme cuenta que había quedado destrozada la pradera a mi paso,mientras un sollozo arrancaba de mi pecho.

¡No!Debía salir de allí,ya habría tiempo de derrumbarme,me limpié las lágrimas y corrí de nuevo.

¿Dónde iba ahora...?¿Cuál era mi sitio?

Una luz captó mi atención, me di cuenta de donde me encontraba...En el centro de salud de New Hampshine allí trabajaba el abuelo Carlisle...

¡Carlisle...!Él podría ayudarme y podría salir de aquí con más facilidad...Después de todo el abuelo no tenía nada que ver con el hecho de que ellos me hubieran engañado. Limpié el resto de mis lágrimas y caminé hacia la entrada mientras respiraba hondo...

-¿Necesitas algo...?- dijo una voz a mis espaldas.-No tienes buena cara.

Me di media vuelta y lo vi...Un chico joven me ofrecía su ayuda,por su indumentaria supe que era médico. Sonreí como mejor pude.

-No gracias,solo buscaba a mi tío.-dije recordando la fachada que teníamos montada para los humanos.

-¿Nessie?-preguntó el abuelo extrañado hundiéndome por llamarme como lo hacía Él.

-¡Mira!Lo encontré.Gracias eh...-miré su placa.-Doctor Smith.

-Llámame Tylor,por favor.-dijo sonriendo.-Un placer, Nessie.

-Renesmee,me llamo Renesmee.-dije seria,él solo asintió.-Adiós.

Caminé hacia el abuelo y le abracé fuerte...

-Nessie,vamos a mi consultorio.-me guió hacia el depacho con un brazo sobre mis hombros,me hizo entrar y cerró tras de mí la puerta.

-Abuelo, necesito tu ayuda...-dije suplicante.

-¿Qué pasa Nessie...?-preguntó tocando mi mejilla.

-No me llames así...-dije tirante.-Ya no...

-Está bien tranquila...-dijo preocupado.-Cuéntame Renesmee.

-Quiero irme.-dije sin rodeos.-No quiero estar en casa,ni cerca de aquí. Quiero irme lo más lejos posible.

-¿¡Qué!?-dijo extrañado.-No Renesmee,no se huye de los problemas.

-No huyo de los problemas...-dije entre lágrimas.-Huyo de ellos.

-¿De ellos?¿Quienes son ellos?-preguntó curioso. Explícame exactamente que es lo que ha pasado.

Yo no tenía fuerzas para hablar así que solo me acerqué y le toqué la mejilla mostrándole todo lo que había pasado...La conversación,mis padres y Jacob suplicándome,el prado...Todo

-Oh no...-dijo defraudado. Yo me mantuve callada y él se tocó la barbilla pensando.-¿Y tu padre te ha dejado marchar...-dijo impresionado.

-¿Entiendes por qué me quiero ir...?-dije cayendo en la silla.

-Déjame pensar...-pasaron unos minutos y me miró.-Está bien, pero,prométeme una cosa...

-¿Cuál?

-Que volverás.-dijo poniéndose a mi altura.-Esta es tu familia.

-Dame unos meses...

-Los que necesites.-Se volvió a unos cajones y sacó documentación,tarjetas de crédito y las llaves de su coche.-Aquí tienes.

-Gracias abuelo...-dije abrazándolo.-nos vemos pronto. Te echaré de menos.

-Y yo pequeña...Ten cuidado.-dijo devolviéndome el abrazo.

Salí del hospital y busqué el coche del abuelo,no fue difícil...

Me monté, metí gas al coche y me fui sin mirar atrás.