Unas voces lejanas nos alertaron a Jake y a mí. Eran sobre las dos de la tarde pero a ninguno de los dos nos apetecía movernos solo queríamos disfrutar el uno del otro.

-¡Déjame en paz Edward, o juro que no respondo de mis actos!-¿Era la voz de mi madre?Estaban lejos así que era difícil decirlo con seguridad.

-¿Bella?-dijo Jake igual de estupefacto que yo.

-¡Bella Cullen Swan,no hemos terminado de hablar así que vuelve ahora mismo!-miré a Jake asustada pues ese era mi padre,y jamás lo había oído levantar la voz.

Jacob se levantó y se colocó la camisa en lo que yo lo seguía quitándome el pijama a toda prisa para luego salir por la puerta de la cabaña. De repente,apareció mi madre a unos cinco metros de la casa y parecía enfadada.

-Dile a tu padre que ni se le ocurra seguirme.-me dijo severa.

-¡Eh,eh!¿Qué ocurre?-dije al tiempo de ver como saltaba el río y se perdía por el linde del bosque.

Detrás, apareció mi padre con el rostro desencajado por la furia.

-MUY BIEN.-gritó al bosque.-¡VETE,ES LO QUE SIEMPRE QUISISTES!¡POR ESO NO QUERÍAS CASARTE CONMIGO!

Jacob y yo nos quedamos asombrados de que papá dijera tal mentira, sabíamos que mamá lo amaba con locura.

-¡Edward!-le reprendió Jacob.

-¡SERÁS IMBÉCIL!-gritó ahora más cerca mi madre.

-Papá,¿Os podéis calmar?-pedí agarrando a mi padre del brazo.-¿Qué ocurre?

En ese momento mi madre volvió a cruzar el río y dijo:

-Ocurre...-dijo furiosa.-que tu padre se cree que puede venir aquí a decirme que hacer o que no hacer...

-En realidad lo que te ocurre es que el mal genio se amplificó en tu naturaleza vampírica. Eso es lo que te ocurre.-dijo señalándola mientras mi madre se adelantaba un paso.

-¡Parad!-dije gritando cogiendo a mi madre del brazo.-¿Podéis dejar de comportaros como dos niños pequeños,por favor?

-Él empezó.-dijo altiva mi madre.

-¿¡Qué!?-dijo mi padre sorprendido.-¿¡Quién mintió a quién primero!?

-¿Acaso no te hubieses puesto hecho una furia?Además es su privacidad.-dijo señalándome mi madre.

-Es mi hija,tan tuya como mía.-dijo mi padre.-Y no soy un monstruo insensible,sé que tiene su relación y que es inevitable que pase eso entre los dos.

-¿De qué hablan?-susurró Jake perdido en mi oído.

Puse los ojos en blanco.

-De tí y de mí...-dije  mirando como seguían discutiendo.-Al parecer papá le ha echado en cara a mamá que no le contó que tú y yo...bueno no somos santos,¿Entiendes?

En su boca se formó una “O” señal de que lo había pillado.

-¿Cómo te atreves a decir eso delante de mi hija?-dijo mi madre.-¡Soltar semejante blasfemia solo porque estamos discutiendo!.

-¿¡Qué blasfemia Bella!?-dijo sujetándose el puente de la nariz.

-¡No sé quizás el hecho de decirme que me casé contigo por interés!-dijo sarcástica mi madre.-No es la primera vez Edward y sabes lo mucho que me duele que desconfies de mí.-parecía muy dolida.

-Está bien...-dije.-Vale ya.-Solo se me ocurría una opción para que se calmaran y era que se separaran unos días y que después hablaran tranquilamente...Es lo que siempre hacía el abuelo Carlisle con Emmett y Rosalie.- Comportaos como personas adultas.

-Lo siento.-dijeron al unisono.

-Bien,ahora Jacob llévate a mi madre de aquí...yo me llevo a papá,nos vamos de caza todos nos relajamos y pasamos unos días reflexionándo.

-Es lo mejor.-dijo mi madre y mi padre se encogió pues no quería separarse de ella.

-De acuerdo...-dijo Jacob pensando en que estaríamos unos días sin vernos. “¿Y nuestro día?”

Suspiré pues hacía mucho tiempo que no habíamos estado solo. “Te recompensaré.” dije mientras le acariciaba la mejilla.

-Ven conmigo.-dije entrando en la casa.-Y vosotros dos mientras id a casa y coger lo necesario,nos vemos aquí en 10 minutos.

Los dos desaparecieron cada uno por su lado,para evitar encontrarse,cerré la puerta y encaré a Jacob.

-Jamás los había visto así...-dijo Jake poniéndose la mano en la frente.

-Es cierto...-dije asombrada y preocupada.-Espero que estar separados los sirva.

Se acercó a mí y me estrechó entre sus brazos.

-Seguro que sí,no son capaces de estar separados.-dijo inspirando mi aroma.-Te voy a echar mucho de menos,Ness.

-Y yo a tí...-dije suspirando.-No será mucho tiempo,después nos encerraremos a cal y canto en la cabaña y pobre de el que se atreva a molestar.-dije sonriendo.

-Tú lo has dicho...pobre.-dijo mientras me besaba con pasión. Tuve que separarme pues oí como mis padres habían llegado y estaban esperando fuera en un incómodo silencio.

Cogí mi mochila y salí a enfrentarme a mis padres que permanecían quietos sin mirarse.

-Bien.-Ambos me miraron y me puse en frente de los dos.-Nos vamos,Jake acompaña a mamá y yo me voy con papá. Nos veremos aquí el lunes a primera hora cuando todos estén más relajados.¿Entendido?

-Vale.-dijo Jacob mientras se acercaba.-Nos vemos. Te quiero.-me dió un casto beso en los labios y se fue a despedir a Edward.

-Y yo a tí.-Le sonreí y me acerqué a mamá.-Cuídate y no te preocupes.-Ella me abrazó y sentí como temblaba su cuerpo por los sollozos.

-Nos vemos,te quiero hija.-dijo dándome un beso en la mejilla.Sentí como extendía el escudo hacia mí“Cuidalo Renesmee...”. Asentí y cuando Jacob se acercó convertido en lobo salieron disparados como alma que lleva el diablo sin mirar atrás.

Me giré y ví a mi padre sentado con las rodillas en su pecho en la roca saliente del río.

-Eh...-me acerqué abrazando su espalda.-Tranquilo.

-¿Cómo he podido decirle eso?-sabía que se refería a lo que le había dolido tanto a mamá.

-No te preocupes.-me senté a su lado.-Ella te perdonará...

-Lo sé...-reconoció.-Pero ¿Es que no voy a parar nunca de hacerla daño?Todo lo que ha pasado desde que me conoció,mi huída,mi regreso,mis celos,mi egoísmo...Y aún así no paro.

-Te consumieron los nervios papá,suele pasar.-dije acariciando su cabello.

-Esa cara de...indiferencia que puso cuando se ha dado la vuelta al irse...Me consume hija.-dijo enterrando su cabeza en sus propias rodillas.

-Nunca habíais dicutido así de fuerte...-le reconocí y él sonrió un poco.

-Sí,que lo hemos hecho...Cada vez que sacábamos el tema de la dichosa transformación.

-¿Ella aún era humana,cierto?-dije curiosa.

-Muy humana,además de adolescente y guiada por sus hormonas.-dijo mientras visualizaba a mi madre humana y con el ceño fruncido porque estaba molesta. Al parecer, a mi padre le hacía gracia ver a mi madre así,según él parecía un gato enfadado.

-¿Qué te parece si vamos a cazar algo y seguimos hablando?-dije mientras se me ocurría una idea en mi cabeza.

-Claro vamos...-dijo poniéndose de pie y intentando sonreírme.

-No tienes que sonreír...-dije mirándolo.-Sé que estás mal,y que hasta que no vengas el lunes por la mañana no lo vas a hacer de verdad,entonces¿Para qué esforzarte?Haz lo que quieras en este tiempo llora,destruye el bosque...lo que sea pero desahógate.

-Gracias por entenderme.-dijo y salió a correr.

-No hay de qué...-dije mientras lo seguía.

Después de cazar y darnos cuenta de que estábamos cerca de Portland nos paramos en un claro en el que montamos la tienda de campaña que papá,siempre tan considerado, se llevó para que pudiera dormir.

-Bien,Renesmee,¿Qué es lo que ronda por esa cabecita?-dijo pues había estado evitando pensar en ello todo el día.

-Papá,no te enfades con mamá por ocultarte las cosas,si es así es que se lo he pedido yo...-dije mientras me miraba interrogante.-No es fácil...lees la mente y aunque te cuento todo y lo sabes,hay cosas que preferiría que quedaran en la intimidad.

-No te entiendo a dónde quieres llegar.-dijo curioso.

-¿Qué pasaría si Charlie supiese a todas horas de la vida sexual que lleváis mamá y tú?-dije sin miramientos.

-Me moriría de la vergüenza...-dijo encogiéndose de hombros pues era algo obvio.

-Bien,pues piensa que Jacob debe sentir lo mismo...¿Entiendes?-dije muerta de vergüenza.

-Empiezo a comprender...-dijo mientras leía mi mente.-Pero no debes sentir vergüenza conmigo Renesmee...Es lo más normal del mundo, y lo digo yo que lo he practicado con una humana.

-¿Te fue difícil?-dije imaginándome lo duro que podría llegar a ser.

-No tanto como esperaba...-dijo orgulloso.-Tu madre me había trastornado por completo antes y había casi superado la sed por su sangre.

-¿Por qué no esperasteis a que mamá fuera vampira?-dije curiosa.

-Porque fue una condición que impuso si quería que me casara con ella.-dijo avergonzado mientras yo reía.

-Solo a mamá se la ocurren esas cosas.-dije mientras me acompañaba riéndose también.

-Sí,pero tenía claro lo que quería,y eso era pasar toda la eternidad conmigo. Por eso también aceptó casarse. Fue lo más maravillo que un hombre puede desear y es que la persona que más quieres te acepte y quiera pasar todo el resto de tu vida contigo,más allá de los celos,otros sentimientos encontrados...-dijo perdido en sus pensamientos.

-¿Cómo supisteis que mamá estaba embrazada de mí?-dije pues nunca lo supe.

-Llevé a tu madre a la isla Esme,tú no la conoces pero es una isla que Carlisle regaló a tu abuela Esme...-dijo mientras yo abría la boca ¿Se puede comprar una isla?Al parecer mi abuelo,sí.-Allí mantuvimos relaciones y pasamos las mejores tres semanas de mi vida por aquel entonces.-dijo acordándose de mí.

-¿Qué pasó luego?-dije curiosa.

-Pues que tu mamá empezó a ponerse enferma y Carlisle enlazó los síntomas con los de una embarazada.-dijo serio.

-¿No era lo que esperabas cierto?-dije medio dolida al leer sus pensamientos.

-No...eso es cierto.-dijo negando con la cabeza.-Jamás me hubiese imaginado que tendría una hija tan perfecta como tú. Al principio no te aceptaba pues pensaba que eras como yo...un ser despiadado que lo único que querías era sangre y poco a poco ibas acabando con las energías de tu madre y eso me desesperaba más.-dijo apenado viendo como lo miraba pues recordó el aspecto que tenía mi madre.

-¿Eso se lo hice yo?-dije comparando a la humana bella y sana que era mi madre con la imagen que me ofrecía mi madre.

-No...-dijo secando una lágrima que había en mi mejilla.-Era su parte humana la débil porque tú eras algo más fuerte que ella,hasta que bebió sangre humana.-¿Qué mamá qué?-Sí así es para salvaros a las dos,poco después empecé a leer tus pensamientos. Renesmee pensabas en todo momento en no hacerla daño al moverte,casi ni lo hacías hasta que no pudistes más y comenzó el parto.

Una serie de imagenes desagradables comenzaron a verse en la mente de mi padre y ví mi nacimiento,como mi madre se moría,su conversión,la imprimación de Jacob,como nos defendió Jacob ante su manada dispuesta a matarnos...todo.

-Es hermoso...-dije con lágrimas en los ojos.

-¿El qué?-dijo mi padre secándome las lágrimas.

-Lo que hizo mamá,sacrificarse...Sabía que podía morir y aún así...

-Ahora ya sabes la historia completa,sabes que tus padres te quieren que te lo ocultamos por no dañarte como lo estamos haciendo,que Jacob te ama más allá de la imprimación y que debes quitarte esa carga porque es nuestra responsabilidad llevar nuestros errores a la espalda y que tu no tengas que llevar ninguno.

-Lo sé...-dije por fin convencida de ello.

-No tienes idea de cuanto a cambiado Jacob por tí.-dijo mi padre.-Hija es vuestro destino estar juntos,él te ama por encima de todo y eso solo hay que verlo. Tu madre y yo te queremos por encima de todo y tuviste que llegar tú al mundo para que los tres nos dieramos cuenta de lo que es el amor de verdad. Nunca olvides eso,tú pusistes las cosas en su lugar...si tú te vas todo es un caos. Siempre he leído en tu mente que nosotros somos tus pilares pero en realidad el pilar,nuestro sustento eres tú...y siempre serás tú.

No pude más y abracé a mi padre,por fin me sentía liberada. Sabía cuál era mi lugar y era al lado de mis padres,de mi familia,de Jacob...porque yo era por lo que sufrieron tanto pero por fin comprendí que era porque también los daba la felicidad.

Esa noche volví a ser la misma Renesmee Cullen de hace unos meses atrás,esa noche volví a ser de verdad Nessie.

Después de tres días en los que deseaba ver a Jacob y a mamá nos fuimos de Portland para llegar a tiempo a casa.

-¿Nervioso?-le pregunté a papá mientras corriamos.

-Como si fuese la primera vez que discutimos...-dijo serio.

-¡Vamos papá es mamá,seguro que tiene que estar como tú?-dije y vió que tenía razón.

Horas después cuando estábamos llegando al río los vimos venir corriendo frente a nosotros, no habíamos cruzado el río y mamá ya estaba abrazando a papá.

-Perdóname Edward...Te amo.-dijo y sin más papá la besó.

Sonreí y los dí algo de intimidad, así que salté el río donde Jacob me esperaba sonriente.

-Creo que hicimos un buen trabajo.-dijo no le contesté solo lo besé hasta que alguien carraspeó a mis espaldas y me separé para ver a mis padres abrazados a dos metros de dónde nos encontrabamos.

-Jacob ¿Me dejas abrazar a mi hija?.-dijo mamá mientras me iba hacia ella y la abrazaba fuerte.

-Gracias mamá,gracias por todo.-dije con lágrimas en los ojos.

-¿Qué tienes que agradecerme tú a mí,eh?-dijo yo solo acaricié su mejilla y le transmití todo lo que pasó el fin de semana,la historia,mi cambio...todo.

-Mi niña...eres mi hija,si no hubiese hecho eso por tí, ¿Por quién lo haría?

-Sois los mejores...-dije abrazando también a papá y llamando la atención de Jacob con la mano para que él también se uniera.

-Vale.-dijo Jacob.-Esta es la prueba definitiva de que ya no me oléis tan mal...

Todos nos reímos y me recordó a los momentos que habíamos pasado antes de que ocurriera todo hace unos meses.

-Bueno hija...-dijo papá.-Nosotros nos retiramos,supongo que tendrás tantas ganas de estar a solas con Jake como yo con tu madre.-lo dijo mientras agarrába a mamá por la espalda y ésta se estremecía.

-Vale...-dije sonriendo.-Supongo que estaréis ocupados un par de días...

-Supones bien hija.-dijo mamá riéndose mientras nos daba un beso en la mejilla y otro a Jake mientras le decía.-Cuida de ella Jake.

-Siempre lo hago amiga.-dijo correspondiéndo al abrazo que le demandaba mi padre y le dijo.-Cuida de ella,hermano.

-Siempre lo hago,hermano.-dijo con una sonrisa y me daba un beso en la frente.-Adiós hija.

-Hasta luego,cuidaros.-dije mientras se iban pero mamá se dió la vuelta.

-Gracias por lo de estos días.-dijo y después salieron a correr desapareciendo entre los árboles mientras Jacob y yo reíamos entrando en casa.

-Un día feliz el de hoy.-dijo mientras soltaba la mochila y se me ocurría una idea.

Tomé a Jacob de los hombros y lo empujé rudamente contra la pared.

-Y tanto.-dije juguetonamente.-Bien,¿Por dónde lo dejamos antes de que llegaran mis padres el otro día?

-No tengo ni idea.-dijo siguiéndome el juego.-pero propongo algo.

-¿El qué?-dije sonriendo.

-Que comencemos de nuevo.-dijo medio en broma.

-Me gusta la idea señor Black.-dije acercándome a sus labios y fundiéndonos en un beso que mataría de un infarto a un humano.

Por fin,por fin podría ser feliz encontré el equilibrio y crucé la línea,y atrás quedaba el rencor,los celos,el dolor y el engaño porque ahora tocaba ser feliz.