EL BESO DE LA NOCHE

Autor: andrea_Black
Género: + 18
Fecha Creación: 30/07/2012
Fecha Actualización: 26/10/2012
Finalizado: SI
Votos: 23
Comentarios: 64
Visitas: 46361
Capítulos: 45

**********FIC FINALIZADO!!!! ANIMENSE A ENTRAR**********

¿Cómo enamorar a alguien que no es capaz de recordarte? ...¿Como enamorarte de aquel enemigo al que estás destinado a matar?...¿Como poner todas tus últimas esperanzas de sobrevivir en aquel ser que ha matado a tantos de tu especie?

Jamás recordaría su tacto. Su beso. Su nombre… Su cuerpo sólo calmaría al de él por unos pocos minutos. No haría nada por aliviar la soledad de su corazón, que anhelaba que alguien lo recordara.

 Jacob Wolf Black es un cazafor oscuro, cuyo don es la amnesia para todo ser que lo haya visto. Después de 5 minutos nadie lo podrá recordar.

 Renesmee Cullen es una semi-vampiro con los dias contados, con una muerte lenta y dolorosa que la espera al cumplir 27 años.

...Esta es una historia basada en la saga Dark Hunter de la escritora Sherrilyn Kenyon...

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 21: CAPITULO 20

Jacob tomó una espada de la pared mientras al mismo tiempo, el Vampiro que estaba en el porche extraía dos dagas enormes de adentro de la bolsa aisladora de la pizza.

El Vampiro le arrojó una daga a Seth, luego giró para librar combate con Jacob. Seth se tambaleó hacia atrás, su rostro estaba pálido mientras caía al piso.

Renesme estaba de pie e iba hacia Seth cuando Kat la atrapó.

—Piensa en el bebé. Quédate quieta.

Ella asintió mientras Kat saltaba por encima del sofá para ir a ayudar a Seth.

Renesme tomó otra espada de la pared, preparada para la batalla en caso de que fuera necesario.

Afortunadamente, Seth estaba de pie nuevamente, sin ningún daño, para el momento en que Kat lo alcanzó. La pizza, por otro lado, estaba arruinada. Gracias a dios, la caja había desviado la daga.

Jacob y el Vampiro continuaron luchando en el porche.

—Mierda –jadeó Seth, corriendo hacia Renesme con Kat detrás—. Hay una asquerosa cantidad de ellos encaminándose hacia la casa.

—¿Qué? –preguntó Renesme, mientras sus rodillas se aflojaban ante esa idea.

Jacob mató al que estaba en el porche y cerró la puerta de un golpe.

—Maldito sea el infierno, Seth, ¿estás bien?

Seth asintió.

Jacob cruzó la habitación y de cualquier modo lo inspeccionó, luego lo atrajo a sus brazos y lo abrazó fieramente.

—Hey, apártate de mí, homosexual —Seth se erizó—. Me estás dando asco. Si quieres abrazar algo, abraza a Renesme.

Ella vio que Jacob apretaba los dientes un instante antes de dejarlo ir casi completamente. Mantuvo una mano fuertemente cerrada sobre el hombro de Seth, mientras se agachaba para mirar al chico a los ojos.

—Atiende la puerta una vez más, Seth Black, y te arrancaré tu tonta cabeza. –Empujó a Seth hacia el pasillo—. Ve a bajar los escudos.

—tenemos persianas de seguridad hechas de metal y a prueba de balas. No sé qué están tramando los Vampiros, pero no quiero que tengan la posibilidad de arrojar un cóctel Molotov o alguna otra cosa a través de una ventana.

—Bien pensado –susurró Kat.

Toda la casa se estremeció mientras Seth hacía descender las persianas de acero.

Jacob estaba temblando de furia mientras llamaba a los de seguridad para comprobar cómo estaban.

—¿Hola?

La voz no sólo era desconocida, sino también gravemente acentuada. Concedido, los guardias jamás lo recordaban, pero Jacob conocía a cada miembro de la fuerza de seguridad que el Consejo había enviado para proteger a Seth.

Jacob tenía una mala sensación.

—¿Quién habla?

—¿Quién crees que es, Cazador Oscuro? Mis saludos a quien sea que encargó la pizza. Disfrutamos el bocado de medianoche.

Jacob apretó con más fuerza el teléfono.

—¿Dónde están mis guardias?

—Oh, uno está justo aquí, pero no se siente muy hablador. La muerte tiene un modo de hacer que incluso la gente más conversadora sea bastante callada. Y en cuanto al otro… él está… oh, espera, ahora está muerto. ¡Mis chicos recién terminaron con él!

—Vas a pagar por eso.

—Bueno, ¿entonces por qué no sales y me alcanzas la cuenta?

—Estoy en camino.

Jacob colgó y se dirigió hacia la puerta, resuelto a sesgar a Aro.

Kat lo atrapó antes de que pudiera llegar a la puerta.

—¿Qué crees que estás haciendo? –le preguntó indignadamente.

Él la miró furiosamente.

—Voy a terminar con esto.

Ella lo miró con una ceja arqueada.

—No puedes. Te matará en cuanto salgas de aquí.

—¿Entonces qué quieres que haga?

—Protege a Seth y a Renesme. Regresaré enseguida.

Kat salió de la casa como un rayo.

Se concentró en la energía de Aro y lo encontró en el cuerpo de guardia. Dio un respingo al ver a los dos hombres muertos en el piso. Había al menos una docena de Vampiros afuera, abriendo cajas y preparándose para un ataque.

Sólo cuatro Vampiros estaban dentro del edificio. Aro, Alec, Caius, y Marcus.

Marcus levantó la vista de los monitores y se puso pálido.

—¿Cómo entraron aquí? –demandó Kat.

—Los guardias salieron cuando comimos al repartidor de pizza, e intentaron detenernos. Los arrastramos adentro luego de que estaban muertos.

Sus palabras y la ausencia de respeto por lo que habían hecho la enfermó, pero no tanto como ver al demonio que estaba con ellos en uno de los monitores.

Así que Didime había cambiado las reglas sobre ella. Maldición.

—Eres tan malvado –dijo con los dientes apretados.

Él sonrió, como si las palabras lo elogiaran.

—Gracias, amor, me enorgullezco de eso.

Kat abrió el portal de regreso a Kalosis.

—Es hora de que se vayan a casa.

Aro observó la abertura, y entonces rió.

—Me temo que no, dulzura. En este momento, le agrado más a mamá que tú. Así que puedes meter ese portal en tu muy atractivo trasero. Yo y mis chicos tenemos trabajo que hacer. Te unes a nosotros o te vas.

Por primera vez en su vida, Kat sintió un temblor de miedo.

—Tienen que irse. Esas son las reglas. El portal se abre y ustedes tienen que atravesarlo.

Aro se adelantó, sus ojos eran siniestros y fríos.

—No, no tenemos que hacerlo.

El portal se cerró.

Ella jadeó al comprenderlo. La Destructora le había dado una llave a él también, y lo había puesto al control.

Aro se paró tan cerca de ella, que la hizo estremecer.

—Es una pena que te proteja tanto. De otro modo, te hubiese saboreado siglos atrás.

Ella lo miró furiosa.

—Aparta tu mano de mí, o la pierdes.

Para su sorpresa, él obedeció, pero no antes de besarla rudamente.

Kat chilló y le dio una bofetada.

Él rió.

—Ve a casa, pequeña. Si te quedas aquí, podrías salir lastimada.

Con el cuerpo temblando, Kat regresó a la casa. Renesme estaba en el centro del living mientras Jacob se armaba con elementos de un armario que había contra la pared.

—¿Qué tienes que pueda usar? –le preguntó Kat, uniéndose a él junto al mueble.

Jacob la miró extrañamente.

—Asumo que las cosas no salieron bien.

—No. De hecho, necesitamos asegurar con listones las ventanas. Las cosas están a punto de ponerse realmente feas.

Seth llegó corriendo a la habitación, con la cabeza cubierta por un casco de fútbol americano.

—¿Qué diablos sucede contigo? –le preguntó Kat al verlo.

Jacob lo observó y frunció el ceño.

—¿Ahora usas el casco?

—Sí –dijo Seth mientras metía una almohada en el frente de sus pantalones—. Ahora uso el casco. En caso de que ninguno de ustedes haya prestado atención, nuestros pequeños Vampiros están ocupados en el césped.

—Lo sabemos.

—Ah –dijo Seth mientras iba hacia el armario y extraía una chaqueta antibalas—. Entonces, tengo una pregunta. Sé que las persianas resisten el fuego y las balas. ¿Cómo funcionan contra un proyectil y dinamita?

Antes de que Jacob pudiera responder, una explosión sacudió la casa.

__________________________________________________

omg chicas los han encontrado!!!!! no se pierdan los siguientes capitulos para que descubran un nuevo drama

Capítulo 20: CAPITULO 19 Capítulo 22: CAPITULO 21

 
14443837 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10760 usuarios