Gracias a las Estrellas.

Autor: 012Victoria210
Género: General
Fecha Creación: 19/01/2010
Fecha Actualización: 27/09/2013
Finalizado: NO
Votos: 58
Comentarios: 180
Visitas: 224760
Capítulos: 36

TERMINADO

Tras un accidente, Bella se ve en la necesidad de acudir a la familia de Carlisle. Los Cullen, quienes seran en adelante su nueva familia. Alli se enamora, y aprende el significado de la frase "Sigue Adelante"  

Las cosas no siemore son como uno las planea. El destino es el que baraja las cartas, y nosotros somos los que jugamos. La vida podrá tener sus momentos alegres y cálidos, pero tambien dias tristes y no deseados.

"Yo jamás podre saber lo que el destino me deparará, pero hay algo de lo que estoy completamente confiada: El amor, todo lo puede"

Bella Swan

"Fruta Prohibida", en LunaNuevaMeyer

http://www.lunanuevameyer.com/sala-cullen?id_relato=575

http://www.fanfiction.net/u/2218274/

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 11: La Curiosidad Mato al Gato

Volvi!! feliz por sus comentarios y al tanto de sus posibles ganas de mandarme a Aro de visita

Gracias a todas por sus comentarios y votos, son geniales! por cierto, vi el trailer de eclipse, y creanme, casi me caigo de la silla de la emocion xD
Disfruten el cap!

 

¿Quién demonios era esa chica?

 

Aun no me había recuperado de la conmoción al ver lo que estaba frente a mis ojos. Edward estaba siendo abrazado, y besado por una chica con porte de súper modelo, mientras el solo se quedaba allí, sin hacer nada, sujetándola de la cintura y cerrando los ojos como si fuese a decaer en cualquier momento

Calma Bella, no tienes porque alterarte. Esa chica bien podría ser una amiga, como también  podría ser una prima lejana de Londres o algo por el estilo que había venido de visita, para luego regresarse por donde vino. Nada de qué preocuparse

Pero entonces, ¿Por qué todos reaccionaron como si fuese un espanto?

Alice aun seguía de pie a mi lado, y no había sido cambiada aquella expresión de su rostro, al igual que la evidente contrariedad de Rosalie. Si ellas estaban así, no quería ni siquiera imaginar cómo tendría mi cara en este momento.

La chica aun se encontraba abrazada a Edward, podrían ser segundos, minutos, horas, la verdad no le di la más mínima importancia. Solo estaba preocupada del propósito de esa chica para permanecer pegada como una garrapata al cuerpo de Edward, y los propósitos para que este no parpadeara siquiera

Luego de mil años luz de espera, Edward reacciono. Abrió los ojos de golpe y parpadeo varias veces, luego, se zafo del abrazo de la chica gentilmente mientras observaba su rostro detenidamente, y luego, completamente confundido, escuche su voz por primera vez en aquella mañana, y pareciese que no lo hubiera escuchado en años

 -Kate ¿Qué haces aquí? – le pregunto, aun noqueado, pero sin perder su tono cortes

-Hola Edward, yo… ¡Lo siento! – Se disculpo, no sé porque, mordiendo su labio inferior, mientras sus ojos se volvían algo llorosos – Yo… He regresado…. Bueno, mis padres y yo hemos regresado nuevamente a Forks – Le contesto titubeante, mientras juntaba sus manos en un gesto nervioso

-¿Vives en Forks? – le pregunto este sorprendido

-Si

Y como la primera vez que pise la puerta de la entrada, el ambiente se lleno tensión

-Ujum – carraspeo alguien a mis espaldas, supuse que se trataría de Rosalie, era un gesto muy típico de su personalidad. La tal Kate giro su cabeza y se percato de nuestra presencia, Edward repitió el gesto, y poso sus ojos en los míos, atrapándome en su mirada, y fue increíblemente dificl apartarla

Pose mis ojos en Kate, y me percate de su físico. Era alta, un poco más de lo que era yo, con un cuerpo típico de las súper modelos, ¡Vaya! Era la primera vez que veía a alguien tan hermosa como Rosalie. Su cabello era de color castaño muy claro, al borde del rubio, que le llegaba hasta los hombros en un bonito corte. Su tez era pálida, pero no tanto como la mía o la de los demás. Sus ojos, de un color almendrado y sus labios eran finos y rosados.

A pesar de verla por primera vez, no pude evitar pensar que la había visto anteriormente… ¿Pero dónde?

-¡Chicos! Hola, no los había visto… - se apresuro a decir algo nerviosa, pero con una sonrisa en sus labios. Alice y Rose entraron a la casa, dejando sus maletas en una esquina de una pared, muy cerca de los muebles de la sala. Emmett y Jasper imitaron el gesto.

La primera en hablar fue Alice

-Hola Kate, ¿Cómo estás? – le pregunto acercándose a ella y dándole un abrazo y un beso en la mejilla. Kate esbozo una sonrisa despreocupada y alegre

-¡Alice! Estoy bien, gracias

-Kate, hola. Tanto tiempo sin verte… - le saludo Rosalie, pero el “tanto tiempo” lo resalto con un tono agrio. Kate la miro algo intimidada, ¿Y quién no? Rosalie era perfecta en hacerte sentir inferior. Pero me extrañara que se comportara de esa manera, Rose no era descortés (Bueno, en un principio lo fue conmigo) Pero en ese entonces era completamente justificado

-Rosalie, si… Bastante en realidad – le contesto está mirando hacia otro lado, hasta que su vista se topo con los chicos

-¡Emmett! ¡Jasper!

-Hey Brillantina, ¿Cómo te va? – le contesto Emmett con una sonrisa,. Esta soltó unas carcajadas

¿Brillantina?

-Hola Kate, un gusto verte de nuevo – Jasper le dijo educadamente

-Gracias, igualmente… - Luego se giro hacia mí y me miro con curiosidad – ¡Hola!, Lo siento… Creo que no te conozco, mi nombre es Kate, ¿Tu nombre es….? – dijo alzando su mano

-Bella – le conteste mientras estrechaba su mano

-Bella, un placer – me dijo con una sonrisa

-¿Dónde están Esme y Carlisle? – Pregunto Alice de repente

-ah, ellos me recibieron. Pero han tenido que salir por unos compromisos, me dijeron que les informara que llegarían en la noche y que lamentaban estar ausentes para su regreso.

-¿Hace cuanto que estas aquí esperando?

-No mucho la verdad. Solo una hora – contesto encogiéndose de hombros

-De acuerdo, vamos a desempacar todo. Les concederemos privacidad para que hablen, algo me dice que hay muchas cosas que aclarar – Explico Alice observando fijamente a Edward, quien no quitaba su mirada de Kate. ¿Quién necesitaba privacidad?

-Me parece bien – respondió Edward monótonamente, sin expresar ningún tipo de emoción en su voz – Hablemos en la cocina – finalizo alargando la mano caballerosamente para ayudar a levantar a Kate del asiento, esta la tomo tímidamente y se levanto. Luego ambos desaparecieron de mi vista

Un momento, ¿Por qué necesitaban privacidad? ¿Qué debían conversar que nadie debía escuchar? ¡¿Quién es esa chica?!

Entonces, lo recordé, sabía que la había visto en algún lado, y luego supe de donde…

Flashback

-¿Quién es ella? – Pregunte observando el enorme álbum de fotos Rojo sangre, con adornos dorados, una foto de una chica junto a él, mientras me encontraba sentada en unos de los Puff que Edward poseía es su habitación

Este se encontraba a mi lado, hurgando otros álbumes y organizándolos por fecha. Ya habían pasado más de dos semanas desde mi estancia en la mansión Cullen. Y Edward y yo estábamos tan aburridos, que lo único que se me ocurrió fue pedirle que me dejara conocer más a su familia. Así que me llevo hasta habitación, y saco de un enorme cajón de su escaparate, variedades de albumen de fotos, de vacaciones, navidades, o cualquier otra cosa de la familia Cullen.

La chica de la foto era muy hermosa, aparentaba tener 15 o 16 años. Edward estaba a su lado, y pasaba su brazo sobre su hombro. La foto parecía tener unos tres años, ya que Edward se mostraba más joven de lo que era ahora. Ambos sonreían y estaban en, lo que parecía ser, la escuela. Por los casilleros que estaban a sus espaldas

-¿Quién? – me pregunto este acercándose hasta mi para observar la foto

-Ella, la chica – le dije señalando con el dedo a la muchacha de la foto - ¿Quién es? ¿Algún familiar? – pregunte con curiosidad

-Es…. – se mostro pensativo por un momento – Bueno, algo parecido…

No dijo nada más. Así que me encogí de hombros, restándole importancia a la extraña de la foto, y pase la pagina para ver una foto donde todos los chicos estaban notablemente “Prendidos”

Jasper tenía a Edward tomado del cuello y le frotaba la cabeza con el puño, Edward parecía estar muy molesto, solté una risita. Rosalie y Emmett se daban un apasionado beso, y supuse que la que estaría tomando la foto seria Alice

Típico

Fin del Flashback

 

La curiosidad y la desesperación me estaban matando. O acaso eran… ¿Celos?

¿Celosa yo de que Edward se fuera a conversar a solas con esa chica de portada revista?

Si, estaba muy celosa, y los celos me estaban matando

Cuando todos tomaron sus cosas y comenzaron a subir las escaleras para relajarse o desempacar, yo me aleje, muy discretamente de ellos, y camine hasta la cocina

Por supuesto que no me atreví a entrar, no debería entrometerme en una conversación ajena. Pero si me permitía escuchar. Así que me pegue hacia la pared derecha de la entrada de la cocina, espiándolos, atenta a cualquier movimiento que pudiera delatarme

A mi mente llego la frase “La curiosidad mato al gato”. Pero en ese momento no me importo en lo absoluto, solo necesitaba saber las razones para que esa chica estuviera presente. Demonios, los celos estaban poniéndome paranoica, ya faltaría poco para referirme a Kate como una “Intrusa”

-Kate, ¿Hace cuanto que llegaste? –Escuche a Edward preguntarle

-Hace tres días – respondió está firmemente.

-¿Por qué has vuelto? – Le preguntó cortante. Como desearía en este momento poder ver su expresión. Jamás, desde que lo conocí, lo había escuchado tan seco o cortante, (Claro, omitiendo el detalle de mi pequeña perdida en la Push, pero eso era otra cosa). No se parecía en nada a mi Edward optimista, alegre, cálido…. ¿Qué le pasaba?

-Mi padre ha fallado con el proyecto que tenía en mente, así que volvimos a Forks.

Un silencio se apodero del ambiente. Edward permaneció callado durante un momento, y luego de 10 segundos, hablo

-¿Por qué estás aquí? – pregunto de nuevo

-Ya te dije la razón

-No hablo de eso. Me refiero a…,¿Qué haces aquí? – Le pregunto algo frustrado, casi podría jurar que estaría estresado hasta el tope

-Edward… Yo… es que, necesitábamos hablar- le dijo titubeante

-Pensé que ya lo habías dejado todo claro, no tenemos nada de qué hablar

-Sí, si tenemos, Edward, vine a disculparme y a decirte mis razones por no haberme contactado contigo todos estos meses, y las razones por decirte lo que te dije

-“Razones” –Dijo ácidamente, mientras soltaba una risita sarcástica – No creo que haya razones lo suficientemente justificables para que hayas hecho lo que hiciste. Sabias perfectamente lo que sentía por ti. A ti no te importaron mis sentimientos

 ¿Sentimientos?

-¡Claro que si me importo! – Le respondió con voz temblorosa, al borde de las lágrimas-  ¡Edward! Lo hice para no hacerte daño, no quería que te sintieras atado… Nuestra relación no habría funcionado a distancia

¿Relación?

-¡¿Y por eso te juntaste con el primer idiota que se te cruzara?! – exploto Edward

-¿Co-como sabes eso? – Pregunto tartamudeando

-No importa como lo sepa. Lo único que sé es que no te importe, Kate. Si me hubieras querido, no te hubieras ido y no me hubieras apartado a un lado. Y lo más importante, si me hubiera querido, no te habrías juntado con otro a solo semanas de haber terminado

¿Terminado?

-¡Edward! Eso fue un error, ¡Lo sé!, lo admito, sé que me comporte de manera inmadura y estúpida. No solo por haberte dejado, sino también por lo de Felix…. Es que… - hizo una pausa, y sollozo fuertemente - ¡Dios! Soy tan patética.. ¡Lo hice para olvidarte! ¿Qué más podría hacer? Estaba dolida… y yo… ¡Se que hice mal! Y por eso estoy aquí, vengo a pedirte, o suplicarte que me perdones, que me perdones por haberte herido como lo hice, porque yo… ¡Yo aun te amo!– dijo y luego sollozo nuevamente

¡¿Qué?!

Un momento… Edward y Kate, ellos… ¿Estuvieron juntos? ¿Se amaban?

¡Cielo Santo! ¿Cómo pude ser tan boba?

Eso significaba que.. ¡Edward aun la amaba!

Cubrí mi boca con mis manos, para evitar que se escuchara el pequeño gemido de sorpresa que saldría de mis labios

 

 “La curiosidad mato al gato”

-¿Amarme? ¡Tienes que estar jugando! Tu solo estas aquí por culpa, o eso supongo yo – le contesto Edward en tono incrédulo – Tú solo estas aquí por eso, y además de que tus padres se han mudado nuevamente a Forks, eso significa que, de no haber sido por eso, ni te enterarías de que aun existo, y nunca volverías aquí para decirme nada

-¡No! De alguna manera iba a volver… Trate de olvidarte, pero no pude. Y esta oportunidad me pareció la perfecta para enmendar mis errores, y tratar de hacer que todo fuese como antes lo era

Kate no obtuvo respuesta. Seguramente Edward estaría meditando

¿Meditando? ¿Meditando qué? ¿El hecho de volver con ella?

Mi corazón se oprimió con ese pensamiento, y las lágrimas se acumulaban en mis mejillas. Pero las retuve, no podía llorar, estaba cansada de eso

-Edward, cuando dijiste “Lo que sentías por mi” ¿Es cierto? ¿Ya no me quieres? – Le pregunto con voz rota, hipando, y sollozando.

Como la vez anterior, no obtuvo respuesta alguna

¡Demonios Edward! ¡Respóndele! ¡Me estas volviendo loca!

Y antes de mi cerebro lo procesara, alguien me jalo de la mano y me arrastro hasta las escaleras tan rápidamente, que adivine de inmediato de quien se trataba

-¡Bella! ¿Qué rayos estás haciendo? – Me pregunto Alice, mientras seguía jalando de mi mano hasta llegar a mi habitación, para luego cerrarla con pestillo

-Yo… ahmm – No pude responderle nada, no había ninguna excusa convincente que pasara por mi cabeza

-¿Qué hacías espiando a Edward y Kate? – Que ironía, la propia Alice, regañándome por estar espiando. Como si ella no lo hiciese todo el tiempo

-Yo no estaba espiándolos… - Alice resoplo y rodo los ojos

-Si claro, y yo soy una mujer lobo

-Bueno… “Espiar” es una palabra muy exacta, podría decirse que... Tenía algo de curiosidad, pero nada más, no pensaba quedarme mucho tiempo

Alice se quedo callada durante un momento e hizo una mueca con la boca. Se recostó en mi cama y puso sus pies en la almohada, con un gesto pensativo, mirando hacia el techo

-Alice… ¿Quién es Kate? – le pregunte sin rodeos, necesitaba aclarar mis sospechas, necesitaba oírlo de la boca de Alice. Esta me miro a los ojos y se mordió el labio inferior

-Bueno, ella es… la ex de Edward

Esa respuesta no me sorprendió, estaba más que esperada. Pero a pesar de eso, me mantuve firme, dispuesta a sacarle toda la información que pudiera

-¿Y por que terminaron? – le pregunte, quería saberlo con urgencia

-Bueno, no sé si soy la indicada para decírtelo, no se di Edward lo quisiera – me contesto insegura

-Al diablo lo que piense Edward, quiero saberlo – Mi voz sonó un poco más alto de lo que deseaba

-Bu-bueno, veras… Ella se fue hace ocho meses, por el trabajo de su padre, el es un gran doctor, al igual que Carlisle, y le ofrecieron un empleo en Canadá. Tuvieron que marcharse, por eso ella y Edward terminaron – Hizo una pausa - Éramos amigas. Nos llevábamos muy bien, y era una gran compañera de compras. Pero las cosas ahora han cambiado un poco…

-¿No hay más? – le pregunte frunciendo el seño, según la conversación que escuche en la cocina, algo me decía que faltaba mas

-No sé si decírtelo, como te lo dije, no creo que a Edward le guste – dudo muchísimo que Alice me lo diga, pero aun tenía dos dudas en mente, que estaban chocando en mi cabeza

-¿Cuánto tiempo estuvieron juntos?

-Cuatro años

Cuatro años

Demasiado tiempo. Cuatro años era la viva prueba de que tenían una perfecta relación, y que eran las personas más felices del mundo. Cuatro años, ¿Qué no sucedió en esos cuatro años?

Aun faltaba lo más importante

-Alice…. – le llame entristecida, pero luchando por qué no se  diera cuenta - ¿Se amaban? ¿Edward la amo? – pregunte, agarrando fuerzas para la respuesta

Alice me miro con ojitos asustados, esa típica cara de culpabilidad que solo ella poseía. Se mordió el labio e inhalo, para luego contestarme

-Si – dijo firme – Edward la amo, y mucho

Luego de eso, no pude retener las lágrimas. Salieron de mis ojos para escurrirse por mis mejillas, como la cascada de un rio, para luego, derramarse sobre el suelo

Alice se levanto rápidamente y me tomo en brazos, luego me ayudo a sentarme sobre el colchón, mientras daba leves palmaditas en mi espalda

-Bella, Bella, … - me decía esta - ¿Lo amas, cierto?

-Más que a nada en el mundo – le dije con voz rota, y un nuevo sollozo salió de mi pecho, sentía como me desgarraba por dentro

¿Cómo podría Edward amarme, si siempre amo a esa chica? Una relación de cuatro años no desaparece de repente, y mucho menos se olvida con la llegada de tu ex. Edward todavía siente algo por ella, eso era más que confirmado

Cuando al fin logre controlarme, me separe de Alice y le di una pequeña sonrisa, pero a la vez, una advertencia

-Alice, hazme un favor. No se te ocurra decirle nada a Edward – abrió la boca para protestar, pero no se lo permití - ¿Por favor? No quiero que se entere. Bastante tiene con esto, y por favor, no te metas en este asunto.

-Bella. Según mi intuición, ustedes tienen algo que aclarar – me dijo levantando una ceja… ¿Por qué todos siempre están al corriente de lo que me pasa? Pareciera que leyeran mis pensamientos

-Sí, si tenemos. Pero esperare un momento – Me recosté sobre la cama, a su lado. Y me dedique a juguetear con mi cabello, enrollándolo con los dedos

-¿Y….? – me insinuó está expectante

-Y… ¿Qué?

-¿No me lo vas a contar?

Y, como siempre. Dio en el clavo

-Contar… ¿Qué cosa? No hay nada de contar – le dije apartando la mirada, pero hasta para mi sonó muy falso. Y la sangre acumulándose en mis mejillas era la viva prueba de la mentira

Maldito y traicionero rubor. Como te encanta delatarme

-Bella, dime, o te juro por mi nombre que le diré a Edward…

-¡Esta bien! – Le dije exasperada – Bu-bueno… lo que pasa es que….

-¿Qué….? – me siguió está moviendo la cabeza y mirándome con esa curiosidad pintada en su rostro

-Que… el y yo…

-Que el y tu….

-No-nosotros, bueno…

-¡Bella!

-¡De acuerdo! ¡Edward y yo nos besamos! -  le grite para luego, como una típica costumbre de mi parte, cubrir mi rostro con la almohada -¿Feliz?

Esta no me contesto al instante, y por un momento tuve miedo de que le hubiera pasado algo, pero, siendo Alice, por supuesto, estaba perfectamente

-¡Ahhh! ¡Bella! ¡Tú y Edward se han besado! – grito a todo pulmón, yo le tape la boca y le lance una mirada de amenaza

-¡Shhhh! Nadie debe escuchar esto

Tarde, sentí unos golpes tocar la puerta

Alice y yo nos miramos con ojos como platos, y luego trague en seco. Alice se levanto de la cama con inseguridad, y camino a pasos lentos hasta la puerta, la cual, seguía siendo golpeada sin parar. ¿Sera Edward? ¿Estará molesto conmigo por decirle a Alice? ¿O Emmett? El tocaba siempre la puerta de esa manera

Por favor, que se trate de Emmett, que sea Emmett… ¿Y si era Kate? Si así fuese, madre rollo se formara en esta casa

Alice se detuvo al tocar el pestillo con su mano, suspiro, y luego quito el seguro. La giro lentamente, y luego de eso, alguien entro a la habitación con la fuerza de un tornado. Y gracias al cielo, que milagrosamente escucho mis suplicas, no se trataba de Edward

-¿Dónde? ¿Cuándo? ¿Cómo? – Comenzó Rosalie a atacarme con sus indiscretas preguntas, mientras se acercaba has mi y eufóricamente se sentaba sobre la cama con todo su peso, haciendo que esta temblara -  ¿Te gusto tu primer beso? ¿Besa bien? ¿De piquito o latazo? ¿Cuánto…

-¡Para! ¡Son muchas preguntas! Rosalie, ¿Cómo diablos escuchaste?

-¿Acaso no te había dicho anteriormente que mi oído es bonico? Lo se todo. Nadie a parte de mi se ha enterado – dijo con una sonrisa de suficiencia

-Ya… - suspire con alivio

-Pero no te salvaras de esta. Dinos ¿Cuándo fue? ¿Cómo no nos dimos cuenta? – pregunto Alice sentándose al lado de Rosalie

-Bueno, la verdad nunca pudieron haberlo sospechado, fue ayer, en la noche, ustedes ya se habrían acostado a dormir. Fue en la piscina…

-¡En la alberca! ¡Qué romántico! – exclamo Rosalie juntando las manos

-Si…

 

-Bueno, debes decírnoslo todo. Oh, por cierto, también he escuchado que lo amas, no te preocupes, tu secreto está a salvo conmigo

-¡Rosalie! ¿Sabes que es de mala educación escuchar conversaciones ajenas? – Repetí lo mismo que me había dicho Alice anteriormente, y luego comencé a reír junto a ella

Alice y Rosalie se enfrascaron en un debate de quien besaba mejor entre Jasper y Emmett, mientras yo solo me limitaba a mirarlas. Ambas eran muy graciosas, y eso era lo que me mantenía de buen humor por el momento

Pero no me salía de la cabeza la conversación que había escuchado abajo… ¿Qué había pasado? ¿Qué le hizo Kate a Edward para que este se sienta tan afectado?

Lo que más me dolía, era el no saber absolutamente nada. No podría saber si las palabras de Kate eran ciertas, si de verdad ella aun lo amaba. Y se me revolvía el estomago al pensar en Edward, posiblemente todavía existiera en él el amor de hace meses. Kate le estaba ofreciendo a Edward la oportunidad de rehacer su vida juntos, y continuar. No me extrañaría para nada que Edward aceptara su petición, ya que, si duraron tanto tiempo, podrían hacerlo nuevamente…

Si antes tenía inseguridades de sus sentimientos hacia mi tras aquel beso, imagínense como me siento por la llegada de su ex-novia a Forks. Es imposible sentirme más insegura, mi autoestima estaba por los suelos

¡Dios! Lo que mas quería en estos momentos es buscar una pala, hacer un hoyo en el suelo, y enterrarme viva hasta que todo pase

Bueno, No tengo tanta suerte, posiblemente la pala nunca aparecería, o el suelo se rehusaría a moverse…


¿Tremenda mi forma de finalizar el cap verdad? es la manera perfecta de acabar un cap (Notese el sarcasmo)
No, en serio, se que al final fue un asco y te deja con la intriga xDxD... y bueno, es que la verdad se me acabaron las ideas, y ademas me gusta torturarlas un poco jijiji xD...
Uf! mejor me voy, tengo que ponerme a estudiar ... Malditos profesores
Cuidense, portense mal (xD) y no dejen de soñar con Edward
Vicky

Capítulo 10: Confusiones Capítulo 12: Colision

 
14439462 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10757 usuarios