BUENO COMO LES DIJE EN EL ANTERIOR CAP ESTE ES EL FINAL!!! ESPERO LES GUSTE Y NO QUEDEN FRUSTRADAS!!!! LO SE ES HORRIBLE QUE SE ACABEN LAS COSAS!!! APESAR DE TENERLAS MUY ABANDONADAS, POR MULTIPLES OCUPACIONES TUVE QUE HACER UN CAMBIO Y PUES ESTO HA LLEGADO AL FINAL!!!

LAMENTO TANTA ESPERA, TANTO TIEMPO SI ACTUALIZAR, PERO DE VERDAD LES AGRADEZCO EL APOYO, LA PACIENCIA Y CADA COMENTARIO SINCERO QUE DEJARON EN TODO EL TIEMPO QUE ESTUVE ESCRIBIENDO,  GRACIAS A MI HIJA JULIETA!! MIA ADORACION!!! MIS HERMANAS MAYA Y DANNY LU LAS AMO!!! GRACIAS A USTEDES JAMAS ME DESANIME, A MI TIA SIL MI MAS FIEL LECTORA A KIMBERLY, MARTHA, KAROLAY, MELI Y MUCHAS OTRAS QUIENES SUS COMENT ESTAN ENTRE LOS 224 RECIBIDOS HASTA HOY PERO MI MEMORIA NO DA PARA RECORDARLOS(PERDON POR ESO DE VERDAD NO LO TOMEN A MAL), CADA UNA DE LAS QUE ME APOYARON EN ESTA LOCURA GRACIAS!!!!!! DE VERDAD NO SE CON QUE OTRA PALABRA DECIRLO PERO ESTOY MUY AGRADECIDA POR TODA SU ATENCION EN MIS ESCRITOS

CON ESTE CIERRO UNA ETAPA MUY IMPORTANTE!!! Y POR AHORA QUIERO CONTARLES QUE NO VOY A ESCRIBIR MAS POR UN TIEMPO!!! PERO ESPERO VOLVER ALGUN DIA!!!

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LAS ADORO Y QUE DIOS LAS BENDIGA!!!! 

OHHH LO OLVIDABA!!! SORPRESA PROMIXO FIN DE SEMANA EPILOGO CON UNA SORPRESA GRANDISIMA!!!!!

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FINAL

POV BELLA

Sentir a Edward a mi lado es la sensación más hermosa del universo, sus brazos enredados con los míos, su respiración acompasada y tranquila en mi oído y sus manos en mi vientre hacen de esta una de las mejores mañanas de mi vida.

Ocho meses habían pasado desde que Edward había recuperado sus memorias, mi vientre había crecido paulatinamente junto al desarrollo de mi bebe.

Mis padres venían cada tres días a visitarnos a Alice y a mí; mi niña, quien desde que se enteró que tendría un primo, no me ha dejado sola ningún día.

Hoy planeamos quedarnos en casa, ya que los últimos días me había sentido muy cansada.

Desde el día que Edward recupero sus memorias, habíamos vuelto a la casa todos, Nana Maya se nos unió pocos días después dado que un familiar muy cercano falleció y por esto no pudo estar junto a Edward después del accidente.

Mi Nana Sil me ha consentido todos estos últimos meses, con comida, paseos y aunque siempre termina muy cansada, trata de mantenerse al ritmo de mis deseos y locuras; junto con Alice, quien corre de aquí para allá,  buscando telas y cosas para los aposentos del nuevo bebe.

 Un ligero dolor en el vientre hace que me retuerza de dolor.

Respiro profundamente y trato de moverme  demasiado para no despertar a Edward.

Trato de adivinar la hora, aún no amanece, tal vez sean las tres o cuatro de la madrugada, no lo sé con exactitud, aún entra luz por el gran ventanal de nuestra habitación, pero no lo suficientemente fuerte para deducir que la luna está en su mayor esplendor.

Me deslizo con suavidad por las manos de mi marido, tratando de no ocasionar ningún movimiento busco.

En cuanto me deslizo Edward se acomoda hacia el lado contrario y no se despierta.

Camino hacia el cuarto de baño, despacio, otra punzada me atraviesa, esta no me permite respirar por alguno minutos.

Me tengo contra una pared y acaricio tranquilamente mi vientre, en ocasiones anteriores me ha pasado esto, asi que solo le hablo a mi bebe, tratando de calmarlo, su movimiento hace que mi cuerpo se arquee.

Respiro con dificultad.

Una nueva punzada me atraviesa y me desprevenida, haciendo que no pueda mantenerme en pie.

Casi lloro por el dolor, pero más que el dolor, mi corazón se llena de angustia ante la perspectiva de perder a mi hijo.

Respiro más rápido, tan rápido que el aire no me llega completamente a los pulmones, no puedo hablar solo puedo sostener mi vientre y comenzar a rezar para que nada malo suceda.

-Ed…- balbuceo débilmente.

-Bella… ¿en dónde estás?- me llama Edward desde el borde de nuestra gran cama matrimonial.

No es mucho lo que logro articular, un quejido acompañado de un llanto incontrolable.

Logro escuchar los rápidos pasos de Edward atravesando la estancia y me quejo ante las continuas punzadas que me atacan.

-¿Estas bien cariño? ¿Te duele algo?- exclama Edward angustiado.

-Mi…vientre…- balbuceo angustiada.

-¡NANA!- grita Edward desesperado mientras el dolor se apodera de mí.

Puedo oír los gritos de Edward, las voces de Nana Sil y Nana Maya.

Edward me toma en brazos y me lleva a la cama.

-Respira cariño, mi padre viene en camino, tú y nuestro hijo van a estar bien- escucho a Edward débilmente.

-El bebe viene ya mi señor- dijo Nana Sil angustiada.

Todo sucedió en un abrir y cerrar de ojos; no sé en qué momento llego mi suegro, mi suegra y mis padres.

Podía oír a mi madre y a mi suegra gritar, mi suegro pedía cosas y Edward con sus manos en la cabeza y paseando de un lado a otro.

-Isabella necesito que respires profundamente y pujes cuando yo te lo indique- me indica mi suegro.

Asiento asustada.

Mi madre toma mi mano derecha y mi suegra pone una toalla húmedo en mi cabeza, esto alivia un poco la presión.

-Respira mi niña, ya pasará- me dice mi madre.

-Puja- exige mi suegro.

Respiro y cumplo la petición de mi jefe, lo hago con toda la fuerza y pensando en lo importante que es haga esto bien, por mi bebe.

-De nuevo- exige más autoritario.

Respiro 1...2...3… pujo…respiro…1...2...3… pujo…

-¡Ahhhh!- grito de dolor, pero al mismo tiempo puedo escuchar un dulce y fuerte llanto que invade la habitación.

Observo entre la capa de lágrimas que cubre mis ojos, ese hermoso ser que mi suegro tiene en sus brazos.

-Es una hermosa niña- dijo mi suegro entregándosela a mi hermoso esposo.

Los observo atenta y con una sonrisa radiante.

Edward se acerca emocionado, se baja a mi altura y me muestra a nuestra hija, me da un beso en la frente y otro en los labios.

-Gracias- me dice besándome nuevamente.

-Gracias a ti por hacer mi vida más perfecta- le digo tomando a mi hija en brazos.

- ¿Como la llamaran?- pregunto mi Alice, asomándose tiernamente por la puerta.

Todas las miradas se centraron en ella.

Con pasos tímidos entro en la habitación, acercándose a mi hija.

Le sonrió emocionada.

-No…sé si están de acuerdo pero quiero llamarla Anabella Cullen- digo nerviosa ante mi propuesta.

-¿Cómo mi mami?- pregunta mi niña con ojos ilusionados.

Asiento feliz.

-Me encanta el nombre amor mío- me dice Edward besando la frente de mi pequeña.

-Anabella Cullen bienvenida a este mundo, mi pequeña princesa- le dice Edward entregándosela a su padre.

-Ahora tú debes descansar para recuperar fuerzas- me dice mi suegro.

Me recuesto en la cama y cierro mis ojos feliz, ante la vida futura que me espera.

-FIN-