LA DAMA Y EL ¿CABALLERO? (+18)

Autor: bellsamy
Género: Drama
Fecha Creación: 19/02/2012
Fecha Actualización: 21/11/2013
Finalizado: SI
Votos: 34
Comentarios: 231
Visitas: 91366
Capítulos: 37

EN EL AÑO DE 1890, AÑO EN QUE LA ECONOMIA DOMINA LA VIDA, QUE LAS CLASES SOCIALES SON ESTRICTAMENTE NECESARIAS, EN DONDE LAS DAMAS SON SIMPLEMENTE COMPAÑIA Y LOS CABALLEROS DECIDEN LA VIDA.

NACE EL AMOR ENTRE RENE Y CHARLIE.

FRUTO DE ELLO VIENE AL MUNDO ISABELLA MARIE SWAN, A QUIEN LE ESPERAN GRANDES VIVENCIAS QUE LA HARAN DOBLEGAR SUS PENSAMIENTOS, SU SENTIMIENTOS Y AUNQUE ODIANDO AL CONDE EDWARD CULLEN TERMINARA AMANDOLO HASTA LA LOCURA.....

 LAS INVITO ESTE ES MI NUEVO FIC ESPERO LES GUSTE.... 

ES MI PRIMER FIC DE EPOCA!!!!  Y ESTA CON AUTORIA Y AYUDA DE VICKOTEAMEC

 PROTEGIDO POR REGISTRO DE DERECHOS DE AUTOR  SAFE CREATIVE

 Disclaimer: los personajes no me pertenecen, los personajes pertenecen a Stephenie Meyer

 

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Capítulo 12: DECIDIDO II!!!

HOLA MIS NIÑAS HERMOSAS HE REGRESADO AQUÍ LES DEJO UN NUEVO CAP GRACIAS A VICKO JEJEJE COMO SIEMPRE ESTE ANGELITO ME AYUDA!!

GRACIAS A TODAS POR SU APOYO!! ES GENIAL ENCONTRAR TANTOS COMENTARIOS!! ESTEN MUY PENDIENTES YA TENGO VARIOS CAP POR AHÍ EN REMOJO OSEA NO TARDARE MUCHO EN VOLVER A ACTUALIZAR….

 

ESPERO LES GUSTE COMO ESTA QUEDANDO LA HISTORIA Y  PS ME CONTINUEN APOYANDO CON SUS VOTOS Y SUS COMENTS! LAS AMO Y DISFRUTENLO ES PEQUEÑITO PERO YA VENDRAN OTROS!!

BESITOS DESDE COLOMBIA!!!!

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POV EDWARD

 

El rostro de la Señorita Swan se trasformó en un perfecta copia de un papel, tan blanco como la nieve.

-¿Se siente bien?- le pregunté preocupado.

-Sí, Lord Cullen. Debo pedirles me permitan retirarme, creo que ha sido una reunión con muchas noticias y deseo mantenerme en calma unas horas, nos veremos en dos días en la iglesia, Lord Cullen-  me respondió Isabella con una reverencia y salió de la habitación.

El mayordomo de la casa nos indicó la salida.

Mientras caminábamos hacia el carruaje, un silencio molesto se instaló entre mi padre y yo. Duramos así hasta que llegamos a la mansión. 

Cuando me disponía a subir a mi habitación mi padre no soporto más y habló.

-¿Acaso estás molesto conmigo por lo que sucedió en casa de Lady Isabella?- me preguntó.

-No puedo negarte que el hecho de que no me comentaras la situación me produjo cierto coraje; pero, ¿qué más da?, ¿no es eso lo qué quieres? ¿Que tenga una esposa? ¡Lo conseguiste, la tendré! Una dama distinguida, de alta sociedad; además, ella significa una excelente unión ante la sociedad. Es todo lo que tú y mi madre han soñado para mi ¿no es así?- dije con reproche.

-Edward, hijo, no debes tomar las cosas de ese modo. El matrimonio fue algo que se me ocurrió en el momento, quiero ayudar a Charlie, sabes que lo aprecio y sé que el haría lo mismo por mí. Además, Lady Isabella es una buena jovencita, tal vez algo engreída y altanera, pero tú sabrás como lograr que se enamore de ti, que complazca ese espíritu romántico y soñador que para ser hombre es escaso- trató de mediar.

Reí por su afirmación, si bien era un romántico empedernido, jamás me enamoraría de Isabella Swan. Eso nunca.

-Ojalá esa dama tuviera el corazón que busco, jamás podría enamorarme de alguien como ella- afirmé.

-Espero que te equivoques, hijo,  y que Isabella Swan sea la dama que tanto has buscado.

-Espero que no- dije riéndome y subiendo las escaleras.

Entré en mi habitación, me refugié en mi libro de poesía, aquel que tenía desde los 8 años y en el que escribía constantemente. Ese era uno de mis más grandes secretos, era mi tesoro más preciado.

Tome la pluma, inspirado, pensando en el odio que había despertado hoy Isabella Swan escribí:



 Podrías ser tú el demonio que viene a cambiar la luz de mi  ilusionado corazón,

 Tú, que vienes a destruir todo por cuanto lucho y todo por cuanto deseo vivir.

Debes ser tú quien frustra los deseos más profundos de mi corazón, el amor más acertado 

y las palabras más hermosas. Esas, que jamás para ti serán expresadas.

Aún no comprendo la arrogancia de tu ser, la frialdad que rebosa en ti cada vez que tu rostro analiza el mío,

Cada vez que tu risa se convierte en un muro frío y duro de odio... al oír mi voz.


 Solté la pluma y leí con atención. Sabía perfectamente para quien iba dirigido ese poema, pero me resultaba extraño el por qué me cuestionaba sobre lo que sería ella en mi vida.

Por más emoción que pudiera sentir al verla, nuestro matrimonio no simbolizaba ninguna felicidad para mí. 

Cambié de página, leyendo uno que otro poema que había escrito anteriormente y así seguí hasta que me dormí.

 

 A la mañana siguiente Peter, unos de los sirvientes de mi padre, llegó en mi búsqueda; mi padre me esperaba en su estudio, teníamos que discutir algunas cosas sobre mi futuro matrimonio.

-Buenos días, hijo- me saludó mi padre en cuanto atravesé la puerta de su estudio.

-Buenos días- respondí.

-Espero que hayas tenido una placentera noche-

-No fue tan placentera como otras, pero me permitió digerir un poco más la situación-  dije.

-Espero que estés de mejor humor que ayer, porque vengo de casa de Lady Swan, tenía que concertar algunos detalles antes de la boda, y tu madre ha insistido para ir con  tu prima Natalia de Lancee a organizar lo pertinente con el vestido. 

-¿Hay más noticias?- pregunté intrigado.

-Debido a su compromiso tan inesperado, mi querido hermano Edmund le ha permitido a Lady Swan quedarse con Alice. Claro, siempre y cuando estén casados. Lady Swan me ha pedido expresamente que en vez de venir a vivir con nosotros, seas tú quien se instale en su mansión. Por lo menos mientras llega su padre y ella puede dejarle a Alice a su cargo- me informó.

-¿Qué?- pregunté inevitablemente -¿Debo vivir en la casa Swan porque ella así lo desea?, ¿acaso no debo ser yo quien escoja donde viviremos?-

-Ella me lo solicitó como un favor personal. Argumentó que hubiese preferido discutirlo contigo, pero su tiempo es limitado-

Permanecí en silencio, sentía mucha rabia. La niña caprichosa había logrado robarse mi soltería, mi deseo de amar y ahora me robaba mi puesto como hombre.

-Edward, hijo, quiero pedirte que le concedas ese deseo. Por lo menos hasta que Lord Swan vuelva, eso les daría tiempo a los dos para tomar la unión con calma, y ahí, ten por seguro, que no vendrás con nosotros. Pondré a tu disposición una mansión tan grande como ésta para tu propia familia- me rogó mi padre.

¡Qué ironía!, lo que tendría con ella jamás seria una familia, de eso estaba totalmente seguro.

-¿Qué más me queda? Decidle que accederé a su petición, pero ella deberá realizar un viaje conmigo después de la boda- informe a mi padre.

Si ella tenía la intención de arruinar mi vida, yo también le daría un poco de su propia medicina y sabía qué evitaría ella más que nada. Claro, era una dama, y como tal, la intimidad debía ser su punto débil.

Aunque no pensaba hacer más que ponerla incómoda, no puede evitar pensar en lo hermosa que sería vería desnuda.

-¿Qué te sucede? Edward Cullen, ella es tu peor pesadilla- me reprendí mentalmente.

-¿Sabes, padre...? a veces, eres demasiado noble para ser un Marqués- le dije riendo.

Capítulo 11: DECIDIDO!! Capítulo 13: PREPARATIVOS I

 
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