LA DAMA Y EL ¿CABALLERO? (+18)

Autor: bellsamy
Género: Drama
Fecha Creación: 19/02/2012
Fecha Actualización: 21/11/2013
Finalizado: SI
Votos: 34
Comentarios: 231
Visitas: 91381
Capítulos: 37

EN EL AÑO DE 1890, AÑO EN QUE LA ECONOMIA DOMINA LA VIDA, QUE LAS CLASES SOCIALES SON ESTRICTAMENTE NECESARIAS, EN DONDE LAS DAMAS SON SIMPLEMENTE COMPAÑIA Y LOS CABALLEROS DECIDEN LA VIDA.

NACE EL AMOR ENTRE RENE Y CHARLIE.

FRUTO DE ELLO VIENE AL MUNDO ISABELLA MARIE SWAN, A QUIEN LE ESPERAN GRANDES VIVENCIAS QUE LA HARAN DOBLEGAR SUS PENSAMIENTOS, SU SENTIMIENTOS Y AUNQUE ODIANDO AL CONDE EDWARD CULLEN TERMINARA AMANDOLO HASTA LA LOCURA.....

 LAS INVITO ESTE ES MI NUEVO FIC ESPERO LES GUSTE.... 

ES MI PRIMER FIC DE EPOCA!!!!  Y ESTA CON AUTORIA Y AYUDA DE VICKOTEAMEC

 PROTEGIDO POR REGISTRO DE DERECHOS DE AUTOR  SAFE CREATIVE

 Disclaimer: los personajes no me pertenecen, los personajes pertenecen a Stephenie Meyer

 

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 35: PAZ

HOLA MIS AMADAS LECTORAS COMO HAN ESTADO!!! ESPERO QUE BIEN, LES TENGO UNA BUENA Y UNA MALA NOTICIA!!!

LA BUENA ES QUE ESTA VEZ SON DOS LOS CAP QUE SUBIRE LA MALA ES QUE EL ULTIMO DE ELLOS ES EL FINAL DE ESTA HERMOSA HISTORIA!!!

GRACIAS POR SU APOYO!! ESPERO SUS COMENTARIOS !! DE VERDAD!!!!! GRACIAS!!!

_____________________________________________

POV EDWARD

Annie y Victoria me observaron anonadadas.

-Llevadme ante Bella- exigí de nuevo con autoridad.

-Pero…- balbuceo Annie atónita.

-Creo que he recordado algo- Explique.

-¿Hablas en serio Edward?- pregunto Victoria impactada por mi explicación.

-Tal vez… recuerdo la muerte de Anabella, su funeral…- mi discurso fue interrumpido por un fuerte mareo y un sinfín de imágenes conectadas en mi cerebro.

Bella vestida de novia, luego en el suelo inconsciente frente a la casa de sus padres, en el barco,  nuestra casa, Alice, mi familia, la discusión del último día que nos vimos, la culpabilidad, el dolor de la discusión, el desespero.

Tras aquellas imágenes en mi mente, todo quedo negro, podía escuchar a lo lejos la voz angustiada de mis primas que me llamaban.

Trataba de gritar lo suficientemente alto para ser escuchado, pero el efecto era todo lo contrario, entre más deseaba gritar mi cuerpo más rígido se ponía y mi voz era menos audible.

Desesperado solo pude dejarme llevar por la inconciencia que me atrapaba insistentemente

****

-No he encontrada nada anormal- manifestó la voz de mi padre con una nota de preocupación.

-Pero lleva horas asi Carlisle, algo debe estar mal- Mi madre intervino.

-El solo dijo… llevadme ante Bella… dijo que había recordado algo… luego se desplomo, ¡no pudimos… hacer nada!- hablo Annie, por su tono de voz podría deducir que había estado llorando.

La forma en la que arrastraba las palabras en cuanto hablaba, el corte entre cada frase, ese tono de voz podría reconocerlo toda la vida.

Mi oído se agudizaba lo suficiente para escuchar alrededor de siete respiraciones diferentes, sus extrañas y distintas frecuencias, unas cansadas, otras con dificultad y una nerviosa e indecisa.

Mi cuerpo rígido necesitaba moverse, pero mi mente parecía no desear seguir mis órdenes.

Tratando de obligar a mi cerebro a trabajar lo suficiente para mover mi cuerpo, mi mente alerta solo podía percibir los roces de mi madre, el hipo de su voz inundada de una profunda tristeza y los pasos impaciente de mi padre.

-No…llores- balbuceé tras el costoso esfuerzo de hacer responder a mi cerebro adormecido.

Trate de parpadear lo suficiente para mantener los ojos abiertos pero el adormecimiento me doblegaba.

-Estáis seguros que recordó algo- Dijo una voz femenina que no pude reconocer de inmediato.

-Que hacéis aquí Isabella- hablo mi padre con tono severo.

En cuanto pronuncio el nombre Isabella todo encajo en mi mente, esposa…mi hijo… el caballo… ¡está muerto!… ¡no está vivo!… me lo dijeron en el hospital…

Todas parecían palabras al azar y sin sentido, pero cada una de ellas cobro vida en mí…

-Tenía que comprobar que realmente no recordara aún, sabe usted la  desesperación que me embarga justo ahora- reclamó Bella dolida ante la severidad del tono de mi padre.

-Si amor mío lo he recordado tono- dije enérgicamente abriendo los ojos de golpe, sobreponiéndome al sopor que amenazaba con continuar torturándome.

-¡Edward!- exclamaron todas las voces al unísono.

Sorprendido por la fuerza proporcionada por la presencia de Bella, me tomo unos minutos recuperarme totalmente.

Analice cada persona en la gran habitación, mis primas, mis padres, Emmett, Natalia y Bella,  reconocer el lugar, fue un poco más difícil… mi gran habitación en casa de mis padres.

Siete personas me observan atónitos, pero mi mirada se centró en Bella, quien impactada por mi declaración, tenía  sus pequeñas manos en la boca con expresión confusa.

Trate de levantarme, pero unos fuertes brazos me lo impidieron, giro mi cabeza para protestar ante la prohibición y me encuentro con el rostro cauteloso de Emmett.

-No te levantéis aún, no tientes a la suerte- me dice en tono divertido, muy característico en él.

Emmett, se aleja paulatinamente, ante mi asentimiento débil, me observa de cerca, imagino, que esperando una recaída de mi parte.

El siguiente paso de Bella, ninguno lo imagina, me observa y una sonrisa invade su rostro; los rastros de viejas lágrimas son reemplazados por unas nuevas, pero estas parecen más de felicidad, corre, acabando con el espacio que nos separa y sin más se lanza sobre mí.

Sin dificultad alguna la recibo inconscientemente en mis brazos, y la acuno de forma perfecta en ellos, parte de su cuerpo esta sobre el mío, sus delgadas piernas cuelgan en parte en la gran cama.

Un beso es parte de su abrazo efusivo y necesitado.

La alejo con dulzura y la observo por varios segundos, contemplando la totalidad de su rostro.

Limpio las lágrimas con mis labios y la beso de forma desesperada y emocionada.

Un carraspeo intermitente pero lo suficientemente insistente hace que volvamos a la realidad.

Bella oculta su rostro en el mío con vergüenza, sus mejillas totalmente sonrojadas.

Observo a los espectadores y ya tan solo hay 3 personas allí, mis padres y Annie.

No sé muy bien el momento exacto en el que mi familia se alejó, pero la felicidad de sentir a Bella en mis brazos de nuevo me nublo hasta el punto de olvidarme de los presentes.

-Los dejamos- dice mi madre observándonos con ternura.

-Vendré en unos minutos a revisarte- dice mi padre abrazando a mi madre y sonriendo- ¡oh lo olvidaba!, Isabella debes comer, asi que Edward esta en tus manos obligarla a comer, lleva varios días sin comer nada-  Exclama mi padre, con un brillo de malicia en su rostro.

Observo a Bella severo.

Ella se encoje y me sonríe de forma inocente.

-Isabella Marie de Cullen, te has rehusado a comer los últimos días por culpa del bastardo de tu marido- le dijo serio.

Ella solo se sonroja, luego levante su rostro.

-Lo siento, sé que tengo que pensar en nuestro hijo, pero decidme, como pensar en seguir adelante, cuando era una extraña en tu vida, y por mi culpa habéis tenido este accidente- me dice con tono melancólico, una gruesa lágrima se desliza por su sonrojada mejilla.

La limpio con un beso.

-Perdonadme mi bella dama, prometo firmemente no volver a causarte ningún dolor en el futuro- prometo  fervientemente y sello mi promesa con un dulce pero exigente beso.

 

Capítulo 34: ¿OLVIDO? Capítulo 36: FINAL

 
14440138 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10758 usuarios