Obligada a amar

Autor: Melii
Género: Romance
Fecha Creación: 28/06/2012
Fecha Actualización: 01/09/2014
Finalizado: NO
Votos: 30
Comentarios: 157
Visitas: 104641
Capítulos: 44

 OBLIGADA A AMAR

 

Me llamo Isabella Swan, pero todos me llaman Bella, tengo 22 años y siendo tan joven mi madre ya arruino mi vida por completo. Yo lo tenía todo, dinero, amor, felicidad y una familia muy unida. Pero mi familia quiebra, y pierde todo su dinero, quedándole solamente, mi casa y ahorros de una pequeña herencia. Al verse sin dinero, mi madre me ha hecho casar, enamorar, desenamorar, y lastimó lo que yo mas amaba en el mundo, mi novio Jacob. Ese hombre es Edward Cullen, un hombre de debo admitir que es muy apuesto, pero en fin, él junto con mi madre acabaron con la poca felicidad que me quedaba.

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Capítulo 38: Tres semanas y... mas avances

Capitulo modificado


Buenos y.. Que les pueod decir antes de uqe me maten??

Dios.. 84 días sin actualizar!!!

Lose quieren matarme peroe stuve ocpuadisima... y todavia estoy con ezamenes..

PERDON UNA Y MIL VECES POR ESTE GRAN RETRASO..

Pero espero que les guste este cap...

Las amo mucho racias por seguir del otro lado!!!

Habían pasado ya tres semanas desde que Bella había traído al pequeño Anthony al mundo.

Edward y Bella habían estuvieron cuidando de el durante esas tres semanas, casi sin separarse ni un segundo, a excepción del momento en que Charlie pedía que le llevaran a su nieto,  el era feliz viéndolo dormir, o intentar llevarse los pies a la boca, aunque pocas cosas podían hacer juntos todavía, de igual forma lo disfrutaba.

Por las noches Bella lo dormía y lo acostaba en su cama, sin Edward estaba vacía y sin su bebe mucho mas.

–Bella vas a terminar malcriándolo, acuéstalo en su cuna.

–No quiero que duerma en su cuna, duerme bien aquí, con migo.

–Hija, luego veras que no querrá dormir solo.

–Mama, es mi hijo si? Deja que yo decida donde debe dormir.

–Yo solo te advierto, luego se desacostumbrara a dormir solito.

–No me adviertas nada, dormirá con migo de todas formas.

–Trato de ser una buena abuela así que…

–Si tratas de ser buena abuela, al menos lo hubieses cargado una vez.

–Hija, sabes que he estado muy ocupada últimamente.

–Si, últimamente. Casi desde que tengo 5 años.

–Bella no seas así con migo.

–Mama sabes qué? No importa, mañana iremos con Edward a ver a Esme, desde que Tony nació lo único que hace es llamar y preguntar por él, las veces que vino a casa a visitarlo él ha estado dormido.

–Quieres decir que ella se interesa por mi nieto más que yo?

–Cualquier persona lo hace más que tu, y también es su nieto.

–Claro, solo por llamar y venir  a verlo un par de veces ya estas de su lado?

–Qué? Esto no es una guerra mama, quiere ver a su nieto nada más.

–Has lo quieras Isabella, tengo mucho trabajo como para discutir con tigo.

–Como siempre.

–Adiós, saluda a Edward de mi parte cuando lo veas.

–Y no saludaras a tu nieto? No querías ser una buena abuela?– Pregunto Bella cuando René se estaba yendo.

–Adiós Isabella.

Bella se sentó en el borde de la cama, y lentamente de acostó, cuidando de no mover mucho e colchón, aunque dudando de que su bebe se despertara, todavía no eran las tres de la mañana y no había a quien despertar.

Lo abrazo y lo llevo a su pecho.

–Sabes bebe, ella siempre fue así. Cuando yo era pequeña la única persona que se preocupo por mi fue el abuelo Charlie y mi nana. Pero no te tienes que preocupar por ella ahora, mañana te llevare a ver a  Esme, te hicieron una habitación en su casa, es grande igual que esta, todavía no la vi pero…– Sintió como se empezó a mover su hijo entre sus brazos.

–No creo que te importe mucho la habitación verdad? Ven con mami, vamos a llamar a papa, hoy no vino en toda la tarde y cuando vino a verte en la mañana estabas dormido…– Le acaricio la carita.– Igual que ahora.

Se levanto con él en brazos, agarro su celular y llamo a Edward.

–¿Bella?

–Si, esperabas otra llamada?

–No, yo solo... No esperaba que me llamaras a esta hora.

–Ho, estabas durmiendo, lo siento, no quería…–

–No estaba durmiendo, siento no haber podido ir a la tarde, tenía una cosa que hacer.

–No importa, hemos pasado toda la tarde viendo películas con Charlie.

 –Si quieres, en realidad si me dejas, puedo ir mañana a primera hora.

–En realidad, yo… buenos, estaba pensando en que vinieras ahora… Si es que no tienes más nada que hacer claro.

–Son las 10 de la noche que otra cosa podría hacer, mejor que estar con ustedes.

–Bueno, te espero entonces?–

–Si Claro.

–Recuérdale a Esme que maña…

–Mañana vendremos a visitarla, En realidad ella esperaba que te lo recordara a ti.

–No me olvidaría de visitarla.

–Lo sé, ella solo está impaciente por ver de nuevo a su nieto.– Dijo Edward mirando a su madre.

– Y no la culpo, quien no?

–Espérame si? Estaré allí en un rato.

Ambos colgaron luego de hablar oros 5 minutos y volver a despedirse unas 5 veces más.

–Mama iré a la casa de Bella.

–Bien, Adiós cariño.

–Solo eso? Abrígate, cuídate, nada?

–Edward, solo dile a Bella que traiga mañana a mi nieto y encárgate de que no se olvide.

–No lo hará.

–Bueno, hijo adiós, que duermas bien, y si tesoro ve con cuidado…– Dijo Esme besándole la frente.–… Para asegurarte que Bella traiga a mi nieto mañana.– Dijo mientras se iba, contenta de que mañana vería a su nieto.

Edward se rio de su madre mientras agarraba una mochila con una muda de ropa y salía de la casa.

–Ya te estabas tardando, estaba comenzando a dormirse nuevamente.

–Que hace despierto a esta hora Bella?

–Se despertó luego de que te llame por teléfono.

–Puedo alzarlo?

–Ni deberías preguntarlo.

–Es tan pequeño, ven lo dormimos juntos?

–Claro vamos.

Ambos caminaron hasta la cama y Edward lo dejo en medio de la gran cama. Pero Tony al sentir que el calor de los brazos que lo envolvían se había ido comenzó a hacer pucheritos y a hipar, a punto de llorar.

–Ay, no bebe, no llores, mira acá esta mama y papa.– Dijo Edward acostándose a su lado.

Paso un brazo por alrededor el bebe y lo atrajo hacia él, pero eso no fue suficiente para Tony y  empezó a removerse inquieto.

–No sé como acomodarlo Bella.

–No lo estás haciendo mal sabes?

–No esta cómodo, claro que lo hago mal.

–Deja que se acomode solo.

Edward corrió su brazo más cerca de su cuerpo, quedando Tony casi encima del.

Poco a poco comenzó a calmarse.

–Lo ves.

–Se dormirá así?

–Al menos lo has calmado.

–No me ayudaste.

–Porque sabía que podrías hacerlo, eres su padre no?

– Claro.

–Bueno y ya ves como si podías, no tengas tanto miedo Edward, yo tampoco sé cómo ser madre ni si hago las cosa bien, tienes dos hermosos padres, sigue su ejemplo.

–Tengo miedo de hacerlo mal, si esta incomodo y mañana se levanta con algún dolor.

–Me extraña, sabes que el te hará saber si esta incomodo.

–Si pero…

–Nada, el está bien…–Dijo mirando a su bebe–…Al menos yo estaría cómoda estando ahí.

–Podrías estarlo todas las noches si viviéramos juntos.

–Edward ya hablamos de eso.

–Tienes razón lo siento.

–Cuando sea más grande y podamos venir todos los días a ver a mi padre entonces si viviremos juntos.

–Pero Bella ya tiene tres semanas.

–Edward, no quiero viajar todos los días con él en un coche, es algo peligroso.

–Tienes razón.

–Bien, entonces hay un lugar para mi ahí?

–No lo creo parece haberse adueñado de mi.

Bella rio en voz baja.

–René dice que no es bueno que duerma todas la noches con migo.

–Y no lo es.

–Edward tu también…

–Pero eso no cambia que lo debes dejar de hacer, se que lo seguirás haciendo.

–Sí.

–Bien entonces, cual es el problema?

–Dice que después será más difícil hacerlo dormir solo.

–Bella tu eres la madre no René, y los que no dormirán tratando de dormir a su hijo, seremos nosotros no ella.

–Tienes razón. Creer que costara hacerlo dormir cuando sea más grande?

–Bella tiene tres semanas, y aun dormirá acá si él quiere, no me gustaría verlo dormir en un cuna.

–Es donde debe dormir.

–Se supone.

Ambos se quedaron callados por un rato.

–Bella.

–Qué?

–Yo… he… Me llamo el director del hospital.

–Debes volver?

–Si.

–Cuando lo harás?– Pregunto Bella sentándose en la cama con cuidado de no moverla mucho.

–No lo hare.

–Qué? Edward se que te gusta lo haces, porque no volver?

–No quiero hacer lo que mi padre hiso una vez.

–Pero yo jamás te dejaría a ti o a Tony.

–Lo sé, pero mi padre nunca estuvo cuando se lo necesito y  yo no quiero eso, quiero estar siempre para ustedes dos.

–No podría cargar con el hecho de que dejes tu trabajo por nosotros.

–Tú dejaste tu empleo en el hospital también.

–Si, pero es distinto.

–Que hay de distinto?

–Que…

–Lo ves? No hay nada, no volveré a no ser que sea con ustedes dos.

–No me quiero ir tan lejos otra vez, le dolería mucho a Charlie, no puedo alejarlo de su nieto.

–Y es por eso que no volveré Bella, estarán bien con el pediatra que ya había, no les afectara mi ausencia un tiempo más.

–Y si cuando vuelves ya no te quieren tomar?

–Lo harás, no hay muchos médicos en Forks.

–Lo siento Edward.

–Ey, no te disculpes, es mi decisión. Te besaría ahora mismo si pudiera levantarme.

–Quizás yo pueda hacer esto– Dijo Bella agachándose con cuidado de no mover mucho la cama ni despertar a su bebe, besando a Edward.

–Me arrepiento de todo lo que hice Bella, espero que algún día puedas entenderme y perdonarme.

–No lo voy  a entender, pero si te puedo perdonar, los dos cometimos estupideces en este matrimonio no?

–Tienes razón.

–Bueno ya es tarde y este bebe ya durmió casi todo el día, no me extraña que ni bien cerremos los ojos comience a llorar, ya verás.

–Al menos lo vi despierto, hace dos días que duerme justo cuando yo llego.

–Eso es porque no vienes muy seguido.– Dijo Bella sin pensar lo que había dicho.–Lo siento.

–No importa, tienes razón, vengo poco tiempo, yo lo siento.

–Creo que cambiare de opinión

–Sobre qué?

–Quizás, pero solo quizás, podríamos ir mañana en la mañana a ver esa casa que tanto querías mostrarme.

–Lo dicen en serio?

–Si porque no?

–Bueno, es que yo…mmm…

–Ya la compraste?

–No como crees

–Edward.

–Solo la señe para que nadie la comprara.

–Ay Edward.

–Si no te gusta la podríamos alquilar o vender o dejársela a Tony para cuando sea grande.

–No es que no me vaya a gustar, lo dudo, peor la compraste sin mi permiso?

–Lo sé, quería que sea una sorpresa, hace unos días que estoy con eso, y digamos ya empecé a... hacerle un par de cambios. Es por eso que he estado viniendo menos tiempo a  verlos.

–La estar remodelando.

–Si, un poco

–Mira, conociéndote, le debes estar poniendo guata a todas las paredes, el piso, el techo, y los muebles para que no le pase nada al bebe.

–Tampoco para tanto Bella.

–Se que lo harías.

–Ya, te vas a acostar?

–Si, ya voy, iremos mañana?

–No

–Porque?

–Le prometimos a Esme pasarla a visitar.

–Te equivocas, le prometimos a Esme que mañana le llevaríamos a su nieto y sabes lo que eso implica.

–Bueno, mañana te llevare, no queda muy lejos de la casa de nuestros padres, la busque en una zona cercana.

–Donde queda específicamente?– Pregunto Bella acostándose debajo de las sabanas y tomando s u hijo para que Edward pudiera acostarse bien.

–Bueno queda en Central Park West.

–Edward es una broma?

–No.

–Esa casa debe haber salido…

–Sabes que no me importa el precio.

–A mi sí.

–Hace unos días hable con Clara y ella me dijo que las cosas allí iban de maravilla, Alec y Jane se están encargando de todo y esta mas que bien Bella, creo que puedo darme el lujo de comprar ese loft.

–Un loft Edward? Que tiene terraza propia también? Por favor.– Dijo Bella con sarcasmo.

–De hecho la tiene y con piscina.

–No lo puedo creer.

–Créelo, ahí es donde viviremos.

–No será por mucho tiempo, o debiste gastar.

–Bueno cuando volvamos a Forks podemos conservarla para cuando vengamos de vacaciones o de visitas.

–Durmamos por ahora y luego veremos que hacemos, acuéstate bien.

Edward se acomodo bien y acaricio la pequeña carita de su bebe.

–Gracias Bella, es lo más lindo que me podrías haber dado.

–Y abra más.

–Mas? Quieres tener más hijos?

–Claro, no me podría conformar con uno solo, será el hermano mayor.

–Gracias.

–Hasta mañana Bella.

–Hasta mañana Edward.

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Capítulo 37: Avances Capítulo 39: Todo como antes

 
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