"Estimado profesor" +18

Autor: Pampita
Género: + 18
Fecha Creación: 21/12/2011
Fecha Actualización: 25/01/2012
Finalizado: SI
Votos: 25
Comentarios: 108
Visitas: 138234
Capítulos: 33

Bella es una estudiante destacada, alejada de los problemas y la hija modelo que todo padre quiere tener. Edward es el nuevo sexy profesor, que tiene a todas las alumnas locas y compitiendo por su atencion... que pasara cuando entable amistad con una en particular, y especialmente cuando esa amistad sea algo mas?.

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Capítulo 10: Mi deseo se cumplio - BPOV

Bella POV

-     Bella – Dijo de la manera mas sexy que mi nombre puede haber sonado en los labios de alguien.

-     Edward – Dije de la misma manera.

 

Me acerque a el. Podía ver que el no se acercaría a mi. El era muy correcto, y sabia que no me besaría… si quería que mi deseo se cumpla, debía ser yo quien lo buscara… Acorte la distancia que nos separaba, y me acerque a el, pero no lo bese. El se quedo totalmente inmóvil, y solo cerro sus ojos cuando mi respiración se acerco a su rostro. Estaba a milímetros de besarlo. Mis labios se acercaron tímidamente a los suyos. Después de todo este era mi primer beso, y no tenia ni idea de lo que estaba haciendo. Mis labios se apoyaron sobre los suyos suavemente. Y el suspiro haciéndome sentir su respiración. Mis labios comenzaron a moverse sobre los de el, que aun permanecía totalmente inmóvil. Su labio inferior se abrió cuando el mio comenzó a moverse, y juntos comenzaron una hermosa danza… Nuestros labios habían nacido para estar juntos… nosotros habíamos nacido para estar juntos… Mi lengua apenas roso sus labios, y el gimió en mi boca, abriendo su boca dándome acceso. Algo que no me anime a llevar a cabo, pero el si se animo. Su cuerpo comenzó a tomar vida, y sus manos acariciaron el costado de mi rostro mientras el beso continuaba. Nuestras cabezas se cruzaban cambiando de posición, mientras nuestras lenguas se unían. De la nada me tomo de mis hombros y se separo bruscamente de mi.

 

-     No podemos – Dijo

-     Porque? – pregunte.

-     Porque soy tu profesor, y tu mi alumna.

 

Me sonroje y mire al piso, como hacia siempre, y el acaricio mi rostro.

 

-     Esta noche eres mi amigo, no mi profesor – Dije en tono de suplica –

 

El se acerco a mi, y me beso nuevamente. El beso era muy pasional, por lo que no recuerdo bien en que momento quedamos acostados en el sillón. Continuábamos besándonos, y sus manos acariciaban mi cuerpo. Su mano acaricio mi abdomen desnudo y me hizo estremecer. Aparentemente el lo noto porque no continuo con la tarea.

 

-     Detenme Bella – Susurro

-     No quiero hacerlo – Dije sincera.

 

El beso continuo profundizándose. Sus manos subieron por el contorno de mi vientre y llegaron a mis pechos, acariciándolos casi sin tocarlos. Su caricia era muy suave, y me llevaba al extremo… No tenia puesto corpiño, por lo que mis pezones erectos por la excitación eran mas que notorios… El tomo de manera maestra mi seno con su mano, ejerciendo algo de presión, pero no demasiada. Eso provocó que gimiera y me arqueara. Nos besamos nuevamente y lo tome del cuello acercándolo mas a mi, haciendo que nos giráramos, quedando el arriba mio. Comenzó a besar mi cuello, luego descendió hacia mis hombros y bajo las tiras de mi remera hasta que mi pecho quedo descubierto. El me miro con la mirada oscurecida separándose de mi, para luego acercarse nuevamente y llevarse mi seno a su boca. Me espalda se arqueo nuevamente y gemí. Podía sentir su miembro excitado en mi entre pierna, lo que me hacia mojarme por completo. Separándose de mi, me saco la camiseta, dejándome con el torso desnudo. Sentí un poco de vergüenza, pero tenerlo así, hacia que me animara a mas… Comenzó a descender por mi cuello nuevamente hasta llegar a mis pechos, donde beso a cada uno y continuo bajando. Llego hasta mi pantalón, el cual saco junto con mi ropa interior. Mi sexo estaba palpitante ante la proximidad de nuestros cuerpos. El siguió besándome, y cuando llego a mi ingle me tense.

 

-     Pasa algo pequeña? – dijo con la voz extremadamente ronca.

-     Pues… - dude

-     Dime – Dijo

-     Nunca estuve con un hombre – Dije sonrojándome.

-     Quieres que nos detengamos?

-     No – Dije rápidamente – Solo quiero que lo sepas por si a caso no sea lo que esperas…

 

El solo rio.

 

-     Tu solo relájate – Dijo besando mi vientre nuevamente.

 

Su rostro se hundió en mi intimidad y sentir su respiración previamente a lo que estaba por hacer, me estaba volviendo loca. Su lengua paso por los pliegues de esta, y primero hizo que me exalte de los nervios, pero luego cuando me relaje, comencé a sentir un placer indescriptible. Sus caricias, sus besos, todo lo que estaba sintiendo era algo totalmente nuevo para mi. No sabia como me sentía, no sabría que era lo que tenia que esperar, pero estaba totalmente segura que no se podía poner mejor por lo que sentía mi cuerpo. Cerraba mis ojos, arqueaba mi espalda y me estaba dando cuenta de lo equivocada que estaba, podía ponerse mejor, de hecho sentía que ese placer crecía y crecía. Había escuchado lo que era un orgasmo, pero no sabia que esperar. Sabia que era el tope del placer, pero pensé que era lo que ya estaba sintiendo… que equivocada que estaba ya que cuando sus labios comenzaron a succionar alguna parte de mi intimidad, comencé a sentir una urgencia, algo que me desespero y me inquieto. No podía mantener mis músculos quietos, Sentía la necesidad de acompañar sus movimientos, y de repente la explosión de placer me llego. Era totalmente nuevo. Indescriptible. Rápidamente subió por mi pecho hasta llegar a mis labios, y me beso, lo que fue extraño, pero no me detuve a pensarlo. Comenzó a desprenderse la camisa, lo cual yo ayude a realizar. La verdad estaba actuando como nunca antes lo había hecho. Esta situación, sexo, mi profesor… Se sentía tan incorrectamente bien. De repente la puerta de entrada se abrió, trabándose en el pasador que afortunadamente había puesto. Edward se incorporo rápidamente. Mi corazón latía fuertemente. Estaba nerviosa.

 

-     Señorita Bella – Se escucho la voz de Sue.

 

Edward estaba prendiéndose su camisa nuevamente, y yo me ponía nuevamente la camisa y el short que me había sacado. Cuando estaba lista, Edward murmurando me hablo.

 

-     A donde me voy? – pregunto.

-     Ve al baño. Si llega a entrar le diré que es Alice quien esta, no te preocupes – Dije queriéndolo calmar ya que se veía totalmente exaltado.

 

Me dirigí a la puerta a abrirle a Sue, cuando vi que Edward se había metido al baño.

 

-     Sue, que haces aquí? – pregunte queriendo sonar calmada.

-     Niña, vine porque recién Salí del hospital con mi marido, y venia a ver como estaba.

-     Estoy bien Sue. Como esta tu marido – pregunte nerviosa.

-     Pues no muy bien. Mi hijo se lo llevo a casa…

-     Y porque viniste? Alice esta con migo, no te preocupes. Estamos viendo unas películas… - Dije queriendo sonar tranquila, y por alguna razón me salió bien.

-     Esta segura? – pregunto.

-     Por supuesto – Dije emocionada – Tu solo preocúpate por tu marido…

-     De acuerdo – Dijo despidiéndose.

 

En el segundo que salió de mi casa, me fui al baño y golpee la puerta.

 

-     Soy Bella – Dije viendo que no abriría.

 

El abrió y su expresión era extraña…

 

-     Paso algo? – pregunte.

-     Claro que paso… Casi nos descubren… esto esta muy mal – Dijo nervioso.

 

No puedo explicar la decepción que sentí en ese momento… como estaba retractándose de lo que había pasado…

 

-     Estas arrepentido? – Dije dolida.

 

El se detuvo, ya que estaba caminando por todo el hall frente al baño.

 

-     No pequeña… Es casualmente porque no me arrepiento de que te digo que esto esta mal.

-     Pero yo te quiero – Dije al borde de las lagrimas.

-     Y yo a ti peque… pero eres mi alumna. Eres la hija del colega de mi padre. Eres menor de edad!

-     Eso es lo que te importa? – pregunté – la edad?

 

El solo miro para un costado, ya que creo que no podía mirarme a los ojos.

 

-     Pues, puede que cronológicamente tenga 16 años, pero a veces siento que es mucho mas…

-     Eres la mujer mas madura que conozco, créeme que no pareces de 16, pero lamentablemente es la edad que tienes…

-     Y que me estas diciendo? Que tengo que olvidar que esto paso? – Dije al borde de las lagrimas.

-     Creo que seria lo mejor – Dijo Edward.

 

Me aleje de el, y me fui de nuevo a la sala.

 

-     Para eso viniste? Para arruinar aun mas mi cumpleaños?

-     Lo siento – Dijo queriéndome abrazar.

-     No! – Dije alejándome – Vete.

-     No – Dijo tomándome del rostro – no quiero estar enojado con tigo.

-     Pero entonces que me estas diciendo? Que quieres de mi?

-     Quiero estar con tigo, pero tengo miedo – Dijo – Si esto se hace publico, o si algo sale mal, no solo perdería mi empleo, iría a la cárcel…

 

Sabia que iría a la cárcel, y no quería que eso le pasara.

 

-     Entiendo lo que me dices, pero no quiero dejar de verte.

-     Y no lo harás – Dijo abrazándome.

 

Nos sentamos en la sala, abrazados. Eventualmente me besaba, acariciaba mi espalda. Cuando lo besaba, el cortaba el beso antes de que pudiera profundizarlo, por lo que luego de varias veces que lo hizo me irrito…

 

-     No volverás a tocarme, no es así? – Dije triste.

 

El acaricio mi rostro tiernamente.

 

-     Sabes que no es a lo que me refiero – Dije apartando su mano.

-     Necesito que me entiendas – Dijo abrazándome.

 

Me quise zafar, pero no me dejo. Se quedo allí, acariciando mi espalda. Sabia que había perdido esta batalla. No quería estar sin el, asique aceptaría cualquier cosa… Se quedo con migo, y hablamos de mi vida, de mi cumpleaños… Llore cuando hablamos de Alice y Rose porque lo olvidaron… pero principalmente estaba feliz porque estaba con el, y juntos. Era todo lo que me importaba.

 

-     Debo irme – Dijo bien entrada la noche.

 

Sabia que debía irse con su novia, y me dolía...

 

-     Que pasa? – pregunto cuando noto que cambie la cara.

-     Es solo que… - Dude

-     Dime – Dijo besándome tiernamente.

-     Pues… Tu novia te espera en tu casa no?

 

El miro a un costado.

 

-     Si – Dijo, partiéndome el corazón.

 

No sabia como plantearle si nos veríamos de nuevo, si de ahora en mas cuando nos viéramos estaríamos juntos, o que pasaría…

 

-     Quédate un poco mas…

-     Cuanto mas? – pregunto juguetonamente…

-     Hasta que me duerma… - Dije.

 

Subimos a mi cuarto, y nos recostamos en mi cama. Me abrazo tiernamente y comenzó a cantarme una nana. No se en que momento me quede dormida…

 

Desperté a la mañana sola, con una nota en la cabecera de mi cama que con perfecta caligrafía decía “Feliz cumpleaños mi Bella”. Sonreí como boba y guarde la nota en mi mesa de noche. Me levante y me fui a bañar. Mientras estaba en la ducha, imágenes de la noche anterior vinieron a mi… como me toco, como me acaricio… me sentía totalmente feliz. Si no fuera por el hecho de que estaba sola en el día de mi cumpleaños, hubiera sido el mejor día de mi vida.

 

Capítulo 9: Mi mejor amigo - BPOV Capítulo 11: Cumpleaños de Bella - EPOV

 
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