Bella POV

El despertador sonó a la mañana y no quería levantarme. Quise fingir una enfermedad, pero mi padre me saco la mentira y me obligo a ir. Ellos eran bastante comprensivos con migo, pero las obligaciones, eran las obligaciones y tenia que cumplirlas. Hoy Rose no pasaría por mi porque se había quedado con Emmet, y Alice era su coartada. Espere el autobús como hace muchas mañanas no hacia, y me subí en el. Cuando llegue a la escuela, sentía mariposas en el estomago. Tenia la primera hora con el, y no sabia como lo miraría a los ojos.

Alice y Rose brillaban por su ausencia, por lo que sola camine por los pasillos y fui hacia el aula. Me senté al lado de Ángela.

-     Hola Bella – Dijo con una sonrisa.

-     Hola Ang – Respondí.

-     Buenos Días – Dijo el profesor entrando a la clase.

El estaba como todos los días. No me miraba, ni me dijo nada, por lo que asumí que tal vez no había visto la solicitud. Me tranquilice un poco luego de esto, y la clase paso sin contratiempos. Cuando la campana toco, todas tomamos nuestros libros, y cuando estaba por salir, el hablo.

-     Sta. Swan – Dijo con voz dulce – Podría quedarse unos segundos?

Trague en seco y las manos comenzaron a sudarme. No dije nada, solo apreté los libros y me quede al lado de el en lo que todos comenzaban a despejar el aula.

-     Bella, sabes porque te pedí que te quedes?

Yo solo negué con la cabeza. Lo sabia, pero no quería decirlo.

-     Recibí anoche la invitación de amistad que me enviaste, y la he rechazado, por lo que quería explicarte.

-     No tiene nada que explicar – dije apurada y totalmente sonrojada.

-     Siéntate unos segundos, me gustaría que lo hablemos.

Me senté en el primer banco. Cruce mis piernas, se acerco a mi, y se apoyo en su escritorio.

-     He recibido muchas invitaciones de amistad desde que comencé a dar clases en esta institución, y en su mayoría son de mis alumnas. He rechazado todas y cada una de ellas, por lo que no seria correcto que acepte la tuya.

Me quede mirándolo extrañada… quería decir que quería ser mi amigo?

-     Porque quisiste agregarme? Fue un reto entre tus compañeras?

-     No! como cree! – Dije sonrojándome aun más de lo que estaba.

-     Entonces quieres ser mi amiga? – pregunto.

Dude unos segundos en hablar.

-     Se honesta con migo, Bella. No te juzgare. Lo prometo. Si quieres ser mi amiga, este es el primer paso

-     De acuerdo – Dije

Me acomode en mi asiento y comencé a hablar.

-     Mis Padres no me dejan tener celular – comencé hablando – y por eso cuando quiero hablar con alguna de mis compañeras generalmente lo hago por un chat que creamos las chicas de la escuela.

-     Si – Dijo el alentándome a seguir.

-     Bueno… Anoche entre al chat, y todas mis compañeras estaban hablando de Ud. Hablaban de detalles personales de su vida… - mire al piso por la vergüenza.

El estaba con una cara de sorpresa total.

-     De detalles personales de mi vida? Porque?

-     Bueno… creo que muchas de mis compañeras lo estiman a nivel personal – Dije sin poder levantar el rostro.

El seguía como en estado de shock por lo que le decía…

-     Y tu… como terminaste enviándome una solicitud de amistad?

-     Bueno… en ese chat una de mis compañeras comento que había visto fotos suyas en la red, y entre por curiosidad. Mi madre entro a mi habitación, y en los nervios no se que apreté… Cuando prendí la maquina, le había enviado la solicitud.

-     Quiere decir entonces que no querías ser mi amiga?

-     No, no es eso. Me encantaría ser su amiga. Solo que no quiero que piense que es una falta de respeto – Dije sonrojada.

-     Jamás lo pensaría – Dijo agachándose frente a mi en el banco.

Su mirada era honesta. Me transmitió mucha paz, por lo que le sonreí, y el devolvió el gesto.

-     Asique… tus compañeras hablan de mi en los chats? – Dijo con una sonrisa picara…

-     Si – Dije riéndome igual

Nos quedamos hablando unos minutos más hasta que el timbre sonó nuevamente para ingresar a la próxima clase. El escribió una nota de disculpas por llegar tarde a la siguiente clase y me la entrego.

-     Lamento haber hecho que te perdieras de tu receso.

-     Esta bien… Alice y Rose no vinieron, por lo que hubiera estado sola…

-     Rose… - dijo con una mueca extraña – sabes porque no vino?

Mire al piso nuevamente.

-     Esta con emmet no?

-     Si – Dije levantando el rostro y mirándolo.

El bufo audiblemente, y tomo su cartera. Los pasillos estaban desocupados porque todos habían entrado a la siguiente clase, por lo que caminamos lentamente mientras hablábamos.

-     No le gusta que Emmet salga con Rose? – pregunte.

-     Creo que significara un conflicto de intereses – dijo serio – ni hablar que mi hermano podría ir preso. Rose es menor de edad.

-     Los únicos que estamos involucrados, no diremos nada. Su empleo no correrá riesgos – Dije mirándolo seria.

-     No es mi empleo lo que me preocupa – Dijo.

-     Entiendo – Dije mirando al piso de nuevo.

-     Lo que pasa es que ellos no hacen mucho por ocultarlo. Odiaría que digan que hago preferencias con ella por ser novia de mi hermano, o peor, que lo denuncien. Creo que yo también estaría implicado al ser ella mi estudiante…

-     No lo creo – Dije – pero no se preocupe. Si no, puede hablar con ellos y aclarar todo…

-     Me siento un viejo que no quiere que otras personas sean felices – dijo riendo.

-     Entonces no lo sea, y confié que su hermano no lo hará quedar mal – Dije riéndome.

-     Gracias – Dijo

-     Porque?

-     Por escucharme

-     Es agradable tener alguien con quien hablar… - Dije riendo.

-     Si… Gracias… ya te considero mi amiga…

Tomo una hoja y escribió en ella algo y me lo entrego. Este es una dirección de correo electrónico que uso para mantener contacto con mis compañeros de la escuela… cuando quieras, puedes escribirme allí, y yo te contestare… así al menos seremos amigos sin que nadie se entere…

-     De acuerdo – Dije riendo y estrechando el papel entre mis manos…

El se alejo de mi lentamente y yo me quede como boba mirándolo… me sentía bien… al menos mi día no había sido tan malo como pensé que seria ya que Alice y Rose habían faltado a clases.

Las clases terminaron mas rápido de lo que hubiera sido en un día normal. Cuando llegue a mi casa me conecte con Rose y comencé a preguntarle porque no había ido a la escuela. Aun me castigo a mi misma por haber hecho esa pregunta. Mis “puritanos” oídos no estaban acostumbrados a escuchar la palabra “Cogida” y “orgasmo” tantas veces en una oración, pero mi sorpresa fue aun peor cuando me entere de que Alice andaba por esos mismos caminos… Aparentemente su falta en la escuela estaba aun mas relacionada a la de Rose… Jasper y Emmet se hicieron grandes amigos, y la noche anterior salieron los cuatro y se quedaron todos en la casa de Alice…

Por un lado me sentía feliz por ellos, pero por el otro, no dejaba de sentirme que me dejaban de lado. Los días pasaron, y Alice y Rose estaban en un mundo paralelo. Si bien en la escuela estábamos juntas, cuando daba la campana de salida, cada una se absorbía en su mundo y se olvidaban de que existía… Me sentía mal? Seguro. Podía recriminarles? No, no podía. Tal vez yo hubiera hecho lo mismo en sus lugares. Era el momento de jugar mi papel de amiga y entenderlas y apoyarlas. Ellas no tenían la culpa de mi falta de vida social.