juego de novios

Autor: qaarlaswan
Género: Romance
Fecha Creación: 12/07/2011
Fecha Actualización: 14/07/2012
Finalizado: SI
Votos: 41
Comentarios: 190
Visitas: 136583
Capítulos: 34

 

Todos los personajes pertenecen Stephenie Meyer, y la historia es de J D N

Esta historia a llegado a mi a través de un email, a otros se la contaron, pero es una que muchos se saben aun asi quise darle mi punto de vista, y hacerlo mas extenso, dia a dia,

HOLA

 

mis otro fic:

 

-destinados a estar juntos:

- http://www.lunanuevameyer.com/sala-cullen?id_relato=1574

 

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Capítulo 6: dia 5

Dia 5:

Por be

Unas punzadas en la parte trasera de mi cabeza me despertaron, abrí los ojos lentamente, y trate de respirar profundamente, pero no pude, algo lo impedía, me senté en la cama e intente hablar, solo unos murmullos roncos salieron de mi boca, con dificultad. ¡Perfecto, estoy enferma! Pensé.

Mire el reloj de mi mesita y eran las 6 de la mañana, ya no me podría dormir,  intente levantarme pero no di ni dos pasos, cuando mi recamara comenzó a dar vueltas.

-ok, estoy muy enferma-murmure sentándome en mi cama, me volví a recostar, las punzadas ahora eran en toda mi cabeza. Me levante  mire por la ventana, Charlie ya no estaba, es sábado se fue a pescar.

Me recosté de nuevo, y marque el número de Emmett.

-¿Qué quieres?-dijo medio dormido.

-estoy enferma-logre decir.

-esta bien, ay voy-y colgó.

Emmett estaba empezando su carrera de medicina, pero algo tubo que aprender en su primer año ¿no?

Entro a mi recamara, prendió la luz.

-valla, belli que mal te vez-comento con una risita.

-muérete-murmure.

Se sentó a mi lado, y me toco la frente-tienes fiebre-dijo ya preocupado-haber habré la boca-le ice caso metió un dedo en mi boca, me dio un poco de asco pero me contuve no quería vomitarle encima-tienes ampollas en la garganta, ¿te duele la cabeza?-asentí.

-tienes hinchada la garganta y una gripa muy fuerte, no te preocupes no es nada que no se solucione con un poco de medicina.

-valla…si…aprendes…algo-me aclare la garganta, pero fue mala idea, me dolió horrible.

-aunque no lo creas-me siguió el juego-ahora solo tenemos pastillas para la fiebre, tendremos que esperar para que abran la farmacia.

-dame algo para la cabeza-pedí.

-ahora vuelvo.

10 minutos después, regreso con un te caliente y un par de aspirinas.

Después me dejo descansar un rato, en el cual me quede dormida.

El sonido del celular me izo despertarme.

“hola bella, ¿que quieres hacer hoy? Ed.”

 Tecle rápido “Cullen, estoy enferma, no creo poder hacer nada, Be”

Segundos después me contesto “voy para allá. Ed.”

Mire de nuevo el reloj, ahora eran las 11 de la mañana.

Mi puerta se abrió lentamente, dejado ver un par de cabezas.

-¿como te sientes?-me pregunto Jasper, mientras besaba mi frente.

-algo enferma-bromee con mi voz ronca.

-Ay belli, bonito día escoges para enfermarte-dijo Emmett sentándose a mi lado, y rodeando mis hombros con su brazo- papa llegara hasta en la noche, y mama no esta, tendré que cancelar mi salida con rose-se quejo.

-Emmett-lo regaño Jasper-no le creas, si me despertó muerto de preocupación-me dijo Jasper mientras reíamos y Emmett se avergonzaba.

-eres mi hermanita-murmuro Emmett.

-gracias-dije abrazándolo.

-¿y yo soy de piedra?-pregunto Jasper indignado.

-no-murmure, le deje un espacio a mi lado y se sentó, le di un beso en la mejilla.

-tontos, los quiero-dije y al final, mi voz sonó como disco rayado. Creo que no debía hablar.

-nosotros a ti-me dijo Jasper.

-abrazo de oso-anuncio Emmett, antes de  abrazar a Jasper también y quedar prácticamente encima mío.

-¡Emmett!-se quejo Jasper.

-no me dejan expresarme-dijo levantándose-bien belli, aprovecha el día de hoy, somos tus sirvientes ¿que quieres de almorzar?

-cereal-murmure.

-bien ahora te lo traigo-salió de mi recamara.

-Jasper-murmure-¿podrías recoger mi ropa del suelo?

-claro-se levanto y comenzó a tirar todo al cesto de la ropa-¿desde cuando tan ordenada?-me pregunto con una sonrisa picara.

-desde siempre-mentí.

-si bella, te creo-dijo burlonamente.

Antes de replicar alguna cosa, el timbre sonó, oí como Emmett abría y saludaba a la visita.

Después los pasos subiendo la escalera y un león de peluche apareció en mi puerta, seguido de Edward.

-ahora comprendo-murmuro Jasper antes  de salir, de mi recamara no sin antes darle palmadas en la espalda  a Edward, un poco fuertes.

-hola Swan-dijo entrando, y sentándose a mi lado.

-hola- murmure.

-ten-me ofreció el peluche.

-gracias-lo tome y lo abrace era esponjoso muy cómodo, de un tamaño considerable, ni muy grande ni muy pequeño, y olía a Edward-huele a tu colonia-susurre.

-si, bueno-parecía avergonzado-digamos que se dio un baño en colonia-dijo riendo.

-me gusta-sonreí.

-¿Cómo te sientes?-me pregunto preocupado.

-mal, creo que la mojada de ayer no fue buena idea-susurre.

-debimos esperar-me reprimió.

-lo se.

Me recosté un poco, y el también, rodeo mi cintura con sus brazos  apoye mi cabeza en su pecho y pude sentir su respiración en mi cabeza, pero no dure mucho así, me senté rápidamente, al momento que un ataque de tos me invadía. Edward me sostuvo y me dio pequeñas palmadas en la espalda.

-gracias-susurre, recostándome de nuevo.

-¿ya tomaste medicina?-me pregunto preocupado.

-no, Emmett no tarda en traerla-le dije.

-voy a decirle que se de prisa-se levanto y salió de mi recamara.

Tome el león de peluche y lo olí, olía deliciosamente rico, era como tener a Edward en mis brazos. Ahora sabia con quien dormiría todas las noches. Sonreí.

Oí como la camioneta de Emmett arrancaba, y luego Edward entro a mi habitación.

-Emmett, fue a la farmacia, ten-me dio un plato con cereal- y mi papa no tarda en llegar-anuncio.

-no es necesario-dije con lo voz ronca.

-si, lo es, escúchate ni hablar puedes, además ya viene en camino.

-ya que-resople, aunque por dentro sonreía por como se preocupaban por mi.

 

….

-inhala, bien ahora exhala-me decía Carlisle, poniendo el estetoscopio En mi pecho y después en mi espalda.

-ahora abre bien la boca, y no metas la lengua-me dijo sonriendo, me metió un palito de madera y me examino con una pequeña lucecita.

-muy bien bella al parecer solo….-

-¿Qué tiene?-lo interrumpió un muy preocupado Edward, mis hermanos se rieron discretamente.

-si me dejaras hablar lo sabrías-le dijo su padre, Edward agacho la cabeza sonrojado.

-lo siento-murmuro.

-pues solo tienes una gripe muy fuerte, nada que un buen caldo de pollo, y analgésicos no quiten-me dijo sonriendo-ahora nos dejarían a solas-les dijo a mis hermanos y a Edward.

-¿para que?-pregunto Edward.

-¿bella, quieres que te inyecte enfrente de Edward?-me pregunto ignorando a su hijo. Negué con la cabeza, se giro hacia Edward-adiós.

Edward salió resignado de la recamara.

-agujas-murmure.

-¿aun le tienes miedo?-me pregunto con una pequeña sonrisa.

-no-mentí-es solo que duele.

-tranquila solo piensa algo bonito y recuéstate boca abajo.

No tenia contadas las veces en las que Carlisle batallaba con migo a la hora de una inyección o vacuna. Pero sin duda eran muchas.

Tome el león y lo abrase, inhalando su aroma, solo sentí un pequeño pinchazo.

-listo, vez ahora no gritaste.

-gracias.

-ahora, debes estar en cama todo el día, eso ara que te recuperes mas rápido, nada de helado ni cosas frías, mantente caliente, dile a Edward que te abrase-dijo sonriéndome y guiñándome un ojo, algo me decía que Esme era algo comunicativa-¿entendiste?-asentí con la cabeza.

-bien me tengo que, ir si te sigues sintiendo mal, no dudes en llamarme.

….

Estar enferma tenia sus beneficios, durante toda la tarde, entre Jasper y Emmett se ocuparon de darme de comer, y de cumplir mis antojos, mientras que Edward, me mantuvo abrazada y me mimaba, como si fuera una niña pequeña.

Poco antes de las 6 de la tarde, llegaron Alice y rosalie, y Edward a regañadientes tobo que sentarse en la mecedora que tenia en mi recamara.

El día de hoy me salve, Alice desistió de su interrogatorio y se limito a hacerme compañía y a contarme los planes que habían para ya cercana fiesta de cumpleaños de Emmett.

Poco después, los 4 salieron con la escusa de ir por unas películas, dejándonos a Edward y a mí, solos se acomodo de nuevo a mi lado, rodeando mi cintura con sus brazos, mientras yo recargaba mi cabeza en su pecho.

-¿te sientes mejor?-me pregunto acariciando mi mejilla, la piel de mis brazos se puso como gallina.

-si-dije menos ronca y respirando mejor.

-me alegro.

-¿no te has aburrido?-le pregunte-llevas aquí todo el día.

-¿quieres que me valla?

-no, claro que no.

-pues no Swan, estando contigo es imposible aburrirme.

-soy divertida-inquirí.

-no precisamente.

Me gire para ver la sonrisa que supuse estaría en su rostro, pero estaba demasiado cerca, sus labios quedaron a escasos centímetros de los suyos.

Cerré los ojos e inhale su aroma. Mi corazón no daba más de gusto, por fin dijo mi cabeza, sonreí un poco.

El sonido de la alarma de la patrulla de Charlie, me izo brincar, abrí los ojos y Edward también había brincado.

-no puede ser-murmure algo molesta y algo desilusionada.

-bella-susurro.

-no me digas nada-susurre.

Me senté un poco mientras oía como mi padre subía las escaleras toco mi puerta y luego entro.

-¿Cómo te sientes?-pregunto acercándose a mi, y besando mi frente-ah, hola Edward-dijo cuando noto la presencia de mi novio.

-Charlie- Edward le tendió la mano, y Charlie se la estrecho.

-¿te duele algo?-insistió.

-no, tranquilo, solo un poco débil y todos los síntomas de la gripa, nada grave.

-menos mal, como nos hace falta tu madre-dijo triste.

-ya pronto volverá-dije sonriendo.

-eso espero, bueno ¿ya cenaron chicos?-pregunto ya mas animado, asentimos con la cabeza.

-en la mesa hay pizza-anuncio Edward.

-creo que iré a ver que tal sabe-bromeo y salió de mi recamara.

Edward tomo mi mentón con su mano y giro mi cabeza hasta que estuvimos frente a frente, se inclino cerrando los ojos, pero yo me gire. Bufo.

-¿bella?

-estoy enferma, no quiero contagiarte-le dije alejándome un poco.

-eso a mi no me importa-respondió.

-no, estoy enferma-insistí.

-esta bien, tu ganas, será mejor que me valla-dijo levantándose.

-lo siento-le dije levantándome pero el suelo comenzó a dar vueltas de nuevo, y Edward alcanzo a detener mi impacto con el suelo.

-recuéstate-me dijo dulcemente-tienes que mejorarte.

-no quiero que te vallas enojado-murmure.

-no lo estoy-me sonrió, y no pude notar rastro de enojo en sus ojos-pero tienes razón, eh estado aquí todo el día, y aunque mi mama sabe donde estoy, no me quiero ganar otro castigo.

-esta bien-murmure-que descanses.

Me abrazo y le respondí.

-te quiero-susurro antes de besar mi oreja.

-yo más-le dije sonrojada.

-mañana temprano estaré aquí-prometió mientras habría la puerta.

-adiós.

Cuando escuche su auto arrancar, me recosté abrazando el peluche y en pocos minutos me quede profundamente dormida.

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hola!!!!!! :)

gracias por sus votos y comentarios!!! me encanta leerlos :)

bien pues si, intentare subir dos capis el mismo dia.

espero les alla gustado.

 u.u no podre subir esta semana, pues en un rato mas salgo de vacaciones y regreso hasta el viernes, lamentablemente mi compu no esta invitada :(

intentare escribir algo en mi cel estos dias.

 

nos vemos la proxima semana

 

by.qarla

 

 

Capítulo 5: dia 4 Capítulo 7: dia 6

 
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