Opciones de vida (+18)

Autor: Sam15
Género: Romance
Fecha Creación: 22/07/2010
Fecha Actualización: 22/07/2010
Finalizado: SI
Votos: 37
Comentarios: 119
Visitas: 155196
Capítulos: 40

El había llegado, al menos eso era lo que me había dicho la encargada. No sabía lo que sentía y en estos días había sido tan feliz a lado de otro que no era precisamente mi prometido. Había perdonado ya todo el daño que me había hecho, a pesar de que sabía que había sufrido mucho no le daba ningun derecho a hacer lo que me hizo. Pero lo había perdonado por que ambos cometimos el error. Camine más deprisa en busca de lacabaña 23 y escuche unos ruidos extraños saliendo de la habitacion. ¿Me habría equivocado? Claro que no, la encargada me dijo que era la cabaña 23. Sin más abrí la puerta y los vi...

¿Vanessa?...dije en un susurro y ambos me vieron

Hola soy nueva aqui me llamo samantha y esto es algo que se le ha ocurrido a mi loca cabeza... espero que les guste. Los personajes son de Stephenie Meyer aunque he agregado algunos...

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Capítulo 31: Hay cosas que no se pueden separar

Me puse la blusa roja que Alice me había escogido, era bonita y pensó que estaría bien porque el color del equipo era rojo y blanco; mis jeans azul obscuro a la cadera eran lo suficientemente ajustados para que se me vean bien y pueda respirar. Me puse las zandalias rojas, que no eran tan altas.

Cuando me miré en el espejo concluí que mi cabello no debería estar suelto, así que alisé mi cabello y solo recogí la mitad con una liga de este dejando suelta la otra mitad. Me miré en el espejo y decidí usar algo de gloss. Tomé un bolso pequeño de color rojo a juego con mis zandalias y metí en ella solo lo necesario. Así ya estaba lista para el juego de baseball… y para ver al chico con quien se supone que estoy saliendo.

Me iba a preparar algo sencillo para comer antes de que Gabriel pase a recogerme. Según el reloj tenía una hora para comer algo, al parecer me arregle muy rápido. Ya que mi desayuno fue bastante surtido y variado –debido a una repentina ola de hambre que me abrumó a las siete de la mañana sacandome de mi cama- mi almuerzo debía ser ligero. Revisé la nevera y se me antojó yogurt, un vistazo más fue lo que necesité para inclinarme por frutillas.

Así que en el vaso más grande que encontré en mi cocina vertí el yogurt de vainilla, parecía tener capacidad de un litro. Estaba pensando de donde habría sacado ese vaso con un  balón de fútbol  pintado en el y reconocí que debía haber sido de Jacob, bueno si me lo pedía se lo devolvería. Para mi mala suerte el yogurt se terminó antes de terminar de llenar el vaso. Suspiré con pena y hasta me dieron ganas de llorar al notar que me había terminado el yogurt, estoy segura que sentí una lagrima decender por mi mejilla. Tendría que comprar más. Puse algunas frutillas en un plato hondo, cogí un tenedor y me dirigí a la sala.

-¿Qué puedo ver mientras tanto?-me pregunté en voz alta mientras revisaba mis películas, me incliné por Love Story, encendí el televisor, la puse en el DVD y empecé a comer.

Ya me había comido todo para cuando él protagonista estaba abrazando a su esposa muerta y había empezado a sonar la canción de Love Story de Shirley Bassey. Ya me había visto esa película más de diez veces y ya no lloraba al final de esta, pero  ese momento en particular…lloré como una magdalena

-¿Quéte está pasando  Bella Swam?-me pregunté en voz alta, fui a lavar los trastos sucios y fui a lavarme la cara que estaba muy roja y tomé un pañuelo. Cuando salía de mi habitación alguien tocó la puerta de mi departamento y al abrirla ví a un Gabriel sonriente, pero luego su sonrisa se esfumó al mirar mi rostro.

-Hola- dije con la voz pesada y acongojada, intenté poner mi mejor sonrisa para mejorar la impresión que le había dado- ¿quieres pasar?- le pregunté antes de que me diga algo

-¿Qué te ha sucedido?-preguntó poniendo ambas manos sobre mis mejillas que se sentían muy calientes aún- ¿Te sientes mal? ¿Alguien te ha hecho algo?-preguntó mirandome muy preocupado

-Nop-dije negando levemente- acabo de ver Love Story- le expliqué y él se relajó un poco- aunque me pudiste haber visto igual o peor si hubiera visto Romeo y Julieta – luego de eso se suspiró aliviado, me dio un beso en la frente, otro  en la naríz, en mis mejillas y uno en la boca

-Me asustaste-murmuró cerca de mi rostro- no vuelvas a hacer eso nunca- pidió e intenté sonreirle de la mejor manera posible

-Lo siento- dije sonriendo, era lindo que se preocupe por mí y de alguna forma su presencia me hacía sentir más tranquila.- dejame arreglarme un poco y salimos ¿vale?-le pregunté y él asintió

Le di la espalda e iba directo a mi cuaro cuando recordé mis modales. Me volteé y le sonreí.

-Toma lo que quieras de la cocina- dije y él sonrió

Luego de eso me dirigí a mi cuarto, me senté en el banquillo frente a mi tocador y me revisé en el espejo, aún estaba algo roja y mis ojos se habían hinchado. Hice mi mejor intento por mejorar mi aspecto y cuando noté que ya no podía hacer nada más salí de mi habitación.

Al llegar a la sala ví a Gabriel sentado mirando el arreglo de rosas y la rosa que él me había dado el día de ayer, lucía preocupado. Cuando caminé cerca de él notó mi presencia.

-Ya podemos irnos- le informé, él se levantó del sofá y me sonrió como siempre

-¿Vas a apostarle al equipo ganador?-preguntó mirando mi blusa roja mientras salíamos del departamento, me encogí de hombros

-¿Me creerías si te digo que ha sido lo primero que he sacado de mi armario?-pregunté tranquilamente

Él se lo pensó lo que me pareció un minuto mientras tomabamos el ascensor y luego arrugó el seño. Me miró enarcando una ceja solo sonreí.

-Así que te gusta el baseball…-murmuró esceptico mientras abría la puerta del copiloto de su BMW, entré al automovil sonriendo aún- nunca habría agregado eso a tu lista de gustos- comentó cuando me subí y cerró la puerta

Pasó frente al automovil y se subió a este, que por cierto era muy bonito por dentro. Encendió el vehículo y empezó a conducir al estadio.

-Nunca he dicho que me gustara el baseball- le comenté luego de un rato- y esta blusa es sencillamente la primera que encontré en mi armario…-eso no era mentira Alice la dejo en frente de toda la ropa para que solo la tome, así que en teoría yo decía la verdad

-Es una buena coincidencia entonces - dijo sonriente-  no te gustan los deportes- no era una pregunta, asentí- ¿nunca has ido a un partido de… cualquier cosa?-preguntó mientras se detenía frente a un semáforo

-Claro, tu sabes en la secundaria Jacob jugaba fútbol americano…, basketball…  y yo tenía que ir a apoyarlo a los partidos -admití- además en esa epoca Rosalie era porrista y bueno tambien me obligaba a acompañarla… hace algún tiempo tuve que acompañar a un partido a Jacob, Rosalie o incluso una vez Emmett me llevó a un partido de baseball solo para pasar el rato…

-Así que conoces desde hace mucho a Rosalie y a… ¿Jacob?-claro él no sabía nada de Jake

Según mis recuerdos los cuales eran muy buenos Jacob era un super-deportista y era capitán del equipo, siempre estaba presente en todo el alboroto de las fiestas estudiantiles y demás actividades escolares. Siempre fuimos amigos pero eramos de mundos muy distintos yo no fui ni la más popular ni la más tonta del colegio, siempre fui una simple normal, un cero a la izquierda, la chica que se sienta junto a ti y no la notas. Por lo tanto no fui la única en sorprenderme cuando Jake se me declaró, todo el mundo –al menos en la preparatoria- queria que mi cabeza rodara, las chicas por considerarme poca cosa y los hombres porque no sabían lo Jake había visto en mí.

Para terminar de volver más loca mi vida en el instituto la chica más popular y con quien todos deseaban salir, no tenía un grupo de subditas. Me tenía a mí como su mejor amiga y aunque todas las chicas intentaban unirse a Rosalie ella casi no les prestaba atención. La mayoría de chicos que se acercaron a mí antes de Jake, solo me pedían una cita con Rosalie y eso era muy deprimente para una adolescente. Más que todo ella siempre estuvo ahí conmigo, siempre y lo sigue estando, no podía estar más agradecida con ella. Aunque claro siempre fue del club Anti- Jacobs, intentaban llevarse bien por mí, aunque aún recordaba circunstancias chistosas.

Jasper quien en esa epoca era un total nerd tambien estaba unido a nosotros, era horrible como las chicas despreciaban a Jasper y los tipos pasaban molestandolo, lo que cambió cuando Jacob dejó claro que quien se metía con Jasper se metía con él, solo un par de idiotas intentaron molestarlo luego pero ese par habían terminado de babeza en los contenedores de basura de la cafetería. Pero su hermana y yo lo apoyabamos, si alguien en el instituto viera a Jasper Hale en este momento no creería que fuera él. Rosalie intentaba integrar a su hermano al instituto, ella lo vestía a la última moda e incluso trataba de hacerles diferentes cortes de pelo, pero para las chicas el segúia siendo un ratón de biblioteca. Lo único que Rose no pudo remplazar fueron las enormes gafas de Jasper, él estaba muy ciego de verdad, no veía nada y los lentes de contactos de medidas tan altas no llegaban a Forks. Su regalo de graduación fue pedir una operación laser para sus ojos.

Era gracioso recordar la vida en el instituto de Forks, aunque luego de que cumpliera dieciseis años y terminó mi desarrolló corporal he de admitir que al menos las personas supieron mi nombre aunque eso no quitaba el hecho de que era muy torpe. Tambien recordaba a otras personas que pasaron juntos a nosotros-mi prima Vanessa, un antiguo novio de Rose, una chica llamada Angela, un chico llamado Rick y otro más- pero siempre fuimos los cuatro muy unidos, no hubiera sobrevivido al instituto sin ellos, si tuviera que hacer una lista de las mejores personas del mundo, sin duda esos tres estarían en lo más alto... aunque ahora podría agregar a los Cullen y a Gabriel…ups… eso me recordaba que no estaba sola.

Gabriel se aclaró la garganta no lo había estado escuchando, le sonreí apenada.

-¿En qué piensas? Te desconectaste del mundo- dijo mirandome de reojo, me reí negando- ¿se puede saber qué es tan interesante?-preguntó curioso

-Recordaba la preparatoria- confesé y sonreí a medias

-¿Buenos tiempos?-preguntó sonriendo mientras tomaba una curva

-No- negué inmediatamente y sonreí más ampliamente- buenos amigos- dije finalmente

-Hay una historia tras eso – concluyó al ver mi expresión, asentí- ¿puedo escucharla?-preguntó luego de un rato

Lo consideré un momento y acepté. Me fijé que aún nos quedaban al menos treinta minutos en la carretera así que empecé a narrarle parte de mi vida.

-Así que ese Jacob es…-dijo él mientras pensaba la palabra correcta, enarqué una ceja- tu sabes… ¿tu ex?-preguntó haciendo una mueca rara

Empecé a reírme y él me vio sin entender el porqué de mi risa. Me encogí de hombros.

-Jacob…-empecé a decir- es más que mi ex, mucho más que eso definitivamente- concluí y frunció el ceño- es mi amigo, sobretodo sigue siendo mi amigo- explique y el relajó su postura

-Osea que el arreglo de rosas… ¿lo pudo haber mandado ese Jacob?-preguntó ligeramente esperanzado- tu sabes por tu cumpleaños-murmuró

Lo consideré un minuto y finalmente negué. Aunque me hubiese gustado saber quién me mandó el arreglo y si hubiese sido Jake fuera un peso menos en mi conciencia. Gabriel seguía esperando una respuesta de mis labios.

-No- dije muy segura- Jacob me llamó un momento e incluso me envio un mail…pero él me dijo que no había tenido tiempo de comprarme nada por todo esto de la cancelación de los cheques de la boda –explique y solte un suspiro audible- además Jacob nunca me ha dado flores para mi cumpleaños…él me daba rosas cuando había hecho algo malo y me las daba en persona

-¿Cancelación de cheques de la boda?-preguntó Gabriel mientras entrabamos al parqueadero del estadio, asentí - ¿se iba a casar? ¿Con quien?- preguntó indiferente mientras aparcaba

 Me quité el cinturón de seguridad y abrí la puerta del auto para salir, pero antes me volteé y sonreí a Gabriel.

-Conmigo- murmuré, salté fuera del carro y cerré la puerta del BMW

Gabriel salió rápido del carro y me miró sorprendido como si hubiese confesado tener dos hijos. Entrecerré los ojos.

-¿No te lo dije?-pregunté mientras trataba de recordar las últimas semanas, él negó y me encogí de hombros- supongo que lo he olvidado- murmuré y empecé a caminar a la entrada

-¿Olvidaste que te ibas a casar?-preguntó incrédulo, estaba pálido- eso no se olvida facilmente como tu cumpleaños… ¿cómo te olvidaste de eso?

Solté una carcajada, de verdad estaba muy despistada últimamente.

- Solo lo olvidé…además Jacob y yó rompimos hace como un mes y medio…casi dos meses, hemos estado cancelando los cheques y las reservaciones-comenté- supongo que no creí necesario decirtelo…ahora creo que si debí de hacerlo

-Probablemente hubiese sido menos impactante-reconoció y sonrió- ¿Cuándo era la boda?

-Creo que todas las fechas estaban para…-estaba haciendo cuentas en mi memoria-  hace una semana… creo que elegimos esa fecha para pasar mi cumpleaños en la luna de miel….

-¿Rompieron en Hawaii?-preguntó mientras le daba su credencial al guardia de seguridad y nos dejaba pasar - Él era tu novio en Hawaii- no era una pregunta

-Si –contesté y él asintió- pero yo no estaba saliendo con él cuando fui al spa… para ese entonces ya habíamos terminado y yo salía con alguien  -él me miró raro- es una larga historia-murmuré luego de repasar los hechos, él asintió para que continue- muy larga- repetí para que comprenda que no iba a tocar ese tema en este momento

-Podría escucharla –dijo mirandome mientras caminabamos a unas escaleras, entrcerre los ojos y empecé a negar- tal vez en otra ocasión-comentó soltando un suspiro

-Seguro- dije aunque no me gustaría tocar ese tema por un largo tiempo, esperaba que lo olvide

Luego de subir las escaleras entramos a una habitación con algunos ascensores. Subimos a un ascensor y en treinta segundos ya habíamos llegado a un pasillo largo. Se podía escuchar a la multitud gritar, entramos a la última habitación y ahí estaban mis amigos ya esperandonos.

-Hola-saludé a  todos en voz alta- ¿cómo estan?-pregunté sonriendo

Me acerque a saludar con un beso a todos mientras Gabriel los saludaba también, Esme y Carlisle me dieron un abrazo muy paternal. Emmett, Jasper y Carlisle llevaban la camiseta de su equipo, los tres se veían muy entusiasmados. Saludé a mis amigas pero apenas las ví se revolvió mi estómago. Alice y Rosaliese veían preocupadas, sonreían nerviosamente. Algo no iba bien ahí.

-¿Qué han hecho?-pregunté preocupada

-Bella lo que pasa es que Rose fue a almorzar en el apartamento de Jasper… y yo pasé la noche ahí…-murmuró Alice muy roja- eso te lo explico en otro momento –dijo más para sí misma, me sonreí- bueno Emmett fue a ver a Edward – sentí una punzada en el pecho- que estaba solo en su apartamento porque Heidy fue a visitar a su madre con Thony…entonces él tonto este de mi hermano –dijo señalando a Emmett quien estaba hablando con Carlisle y Jasper- se le ocurrió….

Alguien abrió la puerta de la habitación y mis amigas se pusieron pálidas.

-Hola Bella- dijo una voz muy familiar detrás de mí y me empecé a marear

Ví todo negro y me desperté entre unos brazos muy familiares, me sentía tan bien ahí, era como si esos brazos hubiesen estado fabricados para protegerme. Solté un suspiró y abrí lentamente los ojos. Había demasiadas caras alrededor mío. Carlisle sostenía mi muñeca entre sus dedos mientras miraba el reloj de su mano. Me estaba tomando él pulso.

Me senté y los brazos alrededor mío no me soltaban aunque me senté. Pasé una mano por mi rostro para aclarar mis ideas. Alice y Rosalie estaban muy cerca de mí. Esme estaba detrás de ambas. Jasper y Emmett estaban junto a Carlisle y frente de mí estaba Gabriel. Genial.

-¿Te encuenteras bien?-preguntó Edward detrás de mí, se oía muy preocupado. Asentí.- tengo que dejar de aparecerme de sorpresa-murmuró  cerca de mi oído con una pizca de humor, en realidad se oía triate- ¿no sientes una sensación de deja vú?-preguntó en voz tan baja que solo yo pude oírlo, sonreí

-Tu pulso está bien, eso no parece un desmayo muy normal-dijo Carlisle examinando mi rostro- tienes los parpados algo hinchados ¿Has tenido fiebre?-preguntó como un profesional

Me removí levemente y Edward se acomodó detrás de mí.Parecía que no quería soltarme, bueno en realidad yo tampoco quería moverme, pero tenía que. Nadie pareció notarlo.

-He estado viendo Love Story antes de venir- le expliqué a Carlisle quien esperaba una explicación más razonable- bueno me he puesto melancólica con la trama de la película

-¿Estos desmayos han sido seguidos?-preguntó

-No, es la primera vez que me desmayo en mucho tiempo -comenté encogiendome de hombros- creo que no ha sido nada

-¿Nada?-preguntó Alice exaltada, le sonreí para que se calme, relajó su postura

-Los mareos no son por nada Bella… ¿algún otro sintoma?-pregunto Carlisle

-No- dije tranquilamente

-Necesitas hacerte unos examenes para decartar algún tipo de infección- dijo mientras sacaba una rceta médica de su pantalón, él siempre iba preparado- visita mi consultorio esta semana- pidió y asentí, aunque sinceramente no creía tener ganas de ir al doctor

Todos se calmaron y Edward estaba ayudandome a parar cuando Gabriel intentó ayudarme tambien. Miré a Alice quien reacciónó de inmediato.

-Chicos alejense- pidió ella-  Nada mejor que una amiga en momentos de desmayo-murmuró sonriente mintras me ayudaba a incorporarme

Cuando estuve de pie ya todos estaban tomando asiento para ver el partido excepto nosotros, incluyendo a Gabriel y a Edward.

-Ven Bella te acompaño al baño necesitas arreglarte un poco- murmurói Alice mientras me empujaba fuera de la habitación, ambos chicos se movieron al mismo tiempo y Alice les dio una mirada desafiente- Vamos al baño de damas caballeros- recalcó y me ayudó a salir de ahí

-Hay un baño aquí- dijo Gabriel y Alice le dio una pequeña sonrisa- pueden usarlo

-Necesitamos un tiempo a solas-explicó ella con una voz muy dulce, ambos iban a protestar- cosas de mujeres- explicó ella y ambos estuvieron al pie de la puerta- chicos vayan a ver a la bola que gira… o un touch …lo que sea- dijo ella impaciente- necesito ir con Bella

-¿Bola curva?-preguntó Edward

-¿Touch Down?-preguntó Gabriel, al parecer ambos estaban reacios a dejarnos ir

-Escuchenme bien estoy en mis días difíciles del mes y si no regresan   a esa habitación   voy a meterle sun tampón en un sitio … se van a rrepentir- dijo con una mirada que ocasiono que se me erizaran los vellos de la nuca, en menos de cinco segundos la puerta de la habitación estuvo cerrada

Si alguien decía que Alice Cullen no podía sustar a un par de hombres, esa persona se podía tragar sus palabras, o mejor aún ella podría hacerselas tragar.

Alice me guió hasta los baños de mujeres que se encontraban cerca de las puertas del ascensor. Cuando entramos  ella fijó la puerta principal para que nadie pudiera entrar.

-Ni Rose no yo sabíamos que Emmett traía a Edward- dijo cuando aseguró la puerta iba a hablar pero ella alzó un a mano para que la deje terminar de hablar – Emmett fue a almorzar con Edward, porque Heidy se había ido un par de días con su mamá y se llevó a Thony, la van a operar el viernes de esta semana, entonces Edward quedó solo y a Emmett se le ocurrió…

-Invitarlo a ver el partido –terminé su frase, ella asintió

-Pero en cierta forma no es su culpa ya que ni Rose ni yo que somos las únicas que saben que van a salir o que estan saliendo, no se los hemos dicho a nadie…y como Rose fue a almorzar con Jasper y yo estaba ahí nos adelantamos al estadio y hace como diez minutos antes de que tú llegases llegaron y bueno…-seguía hablando apresuradamente

-Ok, tranquila…-dije para que se calme- iba a pasar de todas formas, en cualquier momento… - me encaminé a los lavamanos y empecé a lavarme las manos conciensudamente con jabón, necesitaba hacer algo- Edward luce triste- murmuré pero Alice pudo oirme

Cuando lo ví al salir de la habítación ví que le había crecido ligeramente la barba, normalmente Edward siempre se rasura. Y su mirada era triste, me dolío verlo así…aunque mi rostro probablemente estaba en las mismas condiciones

-Él te extraña- dijo Alice mirandome por el espejo- además está preocupado por la operación de Heidy… es algo complicado

Luego de que Alice retocara mi maquillaje y el suyo, nos encaminamos a la habitación. Había un asiento vacío para Alice junto a Jasper y tres asientos vacíos así que probablemente me iba a tocar sentarme entre Edward y Gabriel. Menuda suerte.

-¿Te sientes mejor?-preguntó Gabriel acercandose a mí y examinar mi rostro. Edward nos estaba viendo.

-Si- dije bajando la mirada y tratando sonreir- estoy bien

Cuando me iba a sentar me fijé que Alice había logrado cambiar los lugares habían tres sillas junto a ella. Supongo que yo debía estar entre ambos o entre Alice y uno de ellos. No sabía que hacer.

-Ven Bella sientate junto a mí-pidió mi amiga sonriendo, cuando me senté junto a ella tomó una de mis manos entre las suyas

Gabriel se sentó junto a mí y Edward junto a él. Probablemente eso era malo pero hubiese sido peor si yo hubiese estado entre ambos. Gabriel tomó mi mano libre y la besó. Alice intentó sonreír y yo la imité torpemente.

-Disculpa –dijo Edward a Gabriel- ¿dónde esta la barra?-preguntó él

-Junto a la nevera-explicó Gabriel señalando la dirección- ¿te sirvo algo?-preguntó por educación. Edward le dio las gracias y se levantó de su silla.

Él resto del partido constó de muchos gritos de parte de Emmett, Jasper y Carlisle se le unieron luego.  No sé quien ganó, pero supongo que debío ser el equipo favorito de ms amigos ya que lucieron sumamente felices. Edward y Gabriel estuvieron hablando de cosas de trabajo de cada uno y del baseball. Tambien sé que Edward visitó dos veces más la barra. Alice intentó mantenerme hablando de cosas que ni recuerdo para lucir entretenida en otra cosa mientras ellos hablaban.

-Buen partido ¿eh?-preguntó Emmett entusiasmado a Edward y Gabriel

-Ganaron- asintió Edward- eso los lleva a la delantera en el siguiente partido- comentó como si hubiera visto el partido entero, Emmett asintió sonriente

-Debería llamar a mi padre para comentarle los resultados- murmuró Gabriel sacando su teléfono celular alejandose de ellos- ¿Vienen a la fiesta verdad?-preguntó de repente

-¡Claro!- exclamron Emmett y Jasper contentos saltando

-¿Vienes Eddie?-preguntó Emmett con una gran sonrisa

- Tal vez- contestó Edward mientras se bebía una botella de agua, suspiré al menos había dejado la botella de cerveza que tenía

Miré a Alice para buscar apoyo moral, no podría ir a una fiesta en este momento, no tenía animos. Además sospechaba que iba a haber un gran alboroto en esa fiesta.

-¿No vas a ir?-me preguntó preocupada

-No tengo animos ni para licor ni para música- dije mirandola cansada

-Situación complicada- dijo Rosalie detrás de mí- ¿no vas a venir?-preguntó acercandose a nosotras, negué- te acompañaría pero tengo miedo de que a ese par se les pasen las copas de tanto entusiasmo- murmuró señalando a Emmett y Jasper quienes brincaban de un lado a otro coreando una barra

Nos levantamos para poder salir de la habitación cuando Gabriel llegó. Nos miró a todos sonriendo.

-Mi papá está bastante entusiasmado- dijo a todos- va a ver el partido por cable, él invita las bebidas en la fiesta- anunció Gabriel. Emmett y Jasper empezaron a gritar de nuevo.

 Se acercó a mí y me tomó de la mano. Le sonreí.

-¿Vienes a la fiesta?-preguntó esperanzado

-Creo que no estoy de animos- contesté- no sería buena compañía- murmuré

Edward me estaba mirando, lucía preocupado, molesto, triste y otras emociones que no pude definir.

-Quiero ir a mi departamento y cenar algo, ver una película y dormirme- le dije a Gabriel- estoy cansada

-¿Estás segura de que te sientes bien?-preguntó Gabriel

-Sí- contesté, lo cual no era mentira al menos no del todo ya que Gabriel quería saber mi estado físico, no el emocional –llevame a mi deoartamento- pedí y el asintió

Le entregó algo a Emmett creo que era una credencial y una dirección. Le explicó como llegar y qué decirle al guardia de seguridad del lugar. Dijo que los alcanzaba luego.

Nos subimos a su automovil y empezó a conducir rumbo a mi departamento. No quería hablr por el momento, me sentía muy mal por lastimar a Edward.

-Sabes- empezó a decir Gabriel llamnedo mi atención- ese tipo Edward me cayó bastante bien- comentó con una sonrisa- gran tipo, me dijo que tenía un pequeño

-Es un bebé adorable-comenté mirando a través dela ventana- se parece mucho a su papá

-¿Lo conoces desde hace mucho? ¿Es tu amigo?- preguntó

-Lo conozco lo suficiente – respondí a su primera pregunta- y lo quiero muchísimo

-Los Cullen son muy buenas personas… me cayeron muy bien –dijo luego

- Son unas delas mejores personas que he conocido… son como una familia para mí- le expliqué

Luego llegamos a mi departamento casi a las siete de la noche, me acompaño hasta la puerta y me dio un pequeño beso en los labios.

-¿Estás segura que no quieres que me quede?-preguntó cuando estaba por irse

-Voy a estar bien- respondí y entré a mi departamento

Me dí un rápido baño, ya que no estaba de animos para una ducha larga, me puse mi pijama y fui a buscar algo de comer a la cocina cuando sonó mi celular. Era un número privado.

-Diga- dije

-Hola Bella ¿cómo has estado?-preguntó Jacob

- Hey Jake –saludé- ¿comó has estado tú?- evité responderle, mientras ponía a cocinar pasta

-Bien, bien, ya cancelé el último cheque- me contó- estaba aquí saliendo del estadio y me parecio ver a una chica bastante parecida a ti con un chico desconocido- comentó como si nada

-¡Uhy que tonta!-murmuré mientras ponía a calentar  albondigas pre-cocidas en el microondas- debí invitarte, te prometo que en otra te invito…también estaban los Cullen- le conté

-Si ya lo sé me encontre con ellos luego de verte salir… ¿Cómo que invitarme? ¿Quién era el tipo del BMW?-preguntó

-Ummmm… pues un amigo que de casualidad su padre es dueño del equipo que jugó hoy… nos invitó y se me olvidó incluirte… lo siento soy una despistada- me excusé mientras sacaba zumo de limón y le ponía hielo a un vaso

-Me podrías compensar almorzando conmigo mañana- propuso, lo pensé un momento- ¿qué? No me vas a decir que crees que no puedes salir con tu ex ¿tan mal novio fui?

-¿Quieres que te conteste?-pregunté entre risas- dime donde y a qué hora

-Ok, olvida los últimos dos años-murmruó riendo- ¿qué te parece en ese restaurante italiano que queda cerca de tu trabajo?-preguntó

-Claro- dije mientras sacaba las albondigas del microondas- ¿A las tres?-pregunté

-Si perfecto- coincidió él- ¿me vas a contar sobre tu amigo mañana?

-Estamos saliendo-confesé y él empezó a hablar – pero recien llevamos saliendo un par de días Jake… mañana te cuento

-Bien nena cuidate y sueña conmigo- dijo con una voz chistosa

-No quiero pesadillas Jake- dije entre risas, me encantaba hablar con Jake y colgué

Serví la pasta con un par de albóndigas y algo de pasta de tomate. Me senté a ver una película de Jim Carrey para reirme un rato. Ya había terminado mi comida cuando el celular volvió a sonar. De seguro Jake iba a seguir molestando. Ví que era un número privado.

-¿No tienes nada que hacer más que molestar Jacob?-contesté riendo pero nadie contestó

-Hola- dije de nuevo y nadie contestó

-Bella- dijo él, mi corazón empezó a latir desbocado- ¿quieres subir a la terraza de tu edificio un momento?-preguntó, sonaba como si hubiese continuado tomando

-Si, Edward escuchame subo en tres minutos, dejame cambiarme- dije apresuradamente

-Te espero- murmuró y luego cerró

Me enfundé unos jeans y la misma camisa roja que había usado en el partido. Subí al ascensor y lo puse en el último piso. Luego cogí en tramo de escaleras que llevaban a la terraza y ahí estaba é acostado en el suelo con los brazos cruzados tras su cabeza

-Hola Edward- murmuré

-Hola… sientate porfavor- pidió

Me senté junto a él y abracé mis rodillas con mis brazos. Él estaba mirando el cielo, solo se podían ver algunas estrellas.

-¿Cómo has estado?-me preguntó de repente rompiendo el silencio

-Me he esforzado por estar bien-admití- ¿cómo estas tú?

-Intentandolo tambien- me contestó- te he extrañado muchísimo

-Yo tambien- confesé- ¿cómo está Thony?-pregunté

-Me dice papá, no sabes lo bien que me siento cuidandolo es un niño muy listo

-Se parece a su papá- concordé

-Al menos algo que he hecho bien- murmuró- sabes que me pregunta por ti… no sé que responderle

-Dale un beso de mi parte dile que es un niño muy lindo- suspiré y puse mi cabeza entre mis rodillas

-Gabriel está saliendo contigo- no era una pregunta

-Si, él es un buen amigo… me pidió una oportunidad…-no sabía que más decir

-Es un buen tipo-murmuro luego de una larga pausa-  parece que le gustas mucho…-comentó soltando un suspiro- me siento mal si no sé nada de ti –confesó en un susurró

-Yo tambien, podríamos ser amigos…parece que por más que queramos no vamos a dejar de vernos

-Algo parecidos a amigos Bella, nosotros no nos vemos como amigos…podríamos no darle una definición…solo voy a estar ahí cuando me necesites y cuando no tambien, necesito saber de ti para poder respirar…aunque me duela entararme de cosas, es mejor eso a no saber nada

Me recosté junto a él y ví el cielo.

-Si yo tambien necesito saber de ti-dije y una de sus manos tomó la mía- esto se parece a cuando nos recostabamos en las piedras de la playa, se siente bien

-¿Sabes que te amo verdad?-preguntó

-No podría olvidarlo nunca, yo tambien te amo- le recordé- recuerdas en el desfile tu me dijiste que quizas en otra epoca nos conocimos y tuvimos un final feliz…

-¿Crees que sea así?-preguntó- ¿Crees que en otra epoca lo hicimos bien y terminamos juntos?

-Quiero tener la esperanza, en que sí- dije apretando sus dedos entre los míos

Así nos quedamos por horas en silencio mirando el cielo tomados de la mano, intentando encontrar estrellas en el cielo. No me había sentido tan bien en algún tiempo.

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No me maten!!! porfas.... besos

Sam

Capítulo 30: Oportunidad Capítulo 32: Complicaciones

 
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