-Que ¡No! ¡No! Y ¡No!- gritó Emmett dando vueltas por toda la habitación

Rosalie lo miró furiosa, estaba de pie con las manos hechas puños a ambos lados de su cuerpo y su rostro estaba que hervía de la rabia.

- ¡Eso es absurdo Emmett! Yo debo ir también- exclamó mi amiga histérica

Emmett la miró enojado, se cruzó de brazos y se tiró en la silla que se encontraba tras de él

-Pues entonces me voy a casar con jean y camiseta- refutó este con un puchero sin ademán de levantarse

-¡¿Me estas amenazando Emmett Cullen?!- preguntó entre dientes  Rosalie

Él la miró de reojo, pude ver el miedo en sus ojos pero se contuvo y le sacó la lengua a mi amiga. Ella empezó a refunfuñar y se tiró en la cama luego de sacarle tambien la lengua.

Miré a Edward que se encontraba a lado mío y observaba la escena espectante tanto como yo. Ambos decidimos guardar silencio luego de darnos cuenta que ellos no nos estaban prestando atención, así que estabamos con los brazos cruzados recargados en la pared

-Chicos llevan discutiendo al menos media hora y eso no les hace ningún bien a ninguno de ustedes, peor aún a los bebes- dijo Edward rompiendo el silencio que se había formado- creo que  debemos llegar a una solución razonable

Rosalie lo miró enfurecida soltando un suspiro audible

-Solo quiero ver lo que van a comprar…-susurró- también es mi boda ¿saben?- agregó intentando calmarse

Edward miró a Emmett alzando una ceja. Se aclaró la garganta y se acercó a él, quien tenía una mirada triste.

-Emmett la petición de Rose es bastante razonable, también es su boda…. ¿por qué no quieres que nos acompañe a comprar el smoking?

Emmett bajo su mirada como un niño reprendido, arrugó el seño e hizo ademán de no contestar. Edward se aclaró la garganta y él supiró frustrado.

-Esdemalasuerte- masculló entre dientes, ninguno de los tres le entendió nada

-¿Qué has dicho? Habla bien por favor- pidió Edward

Emmett se levanto y empezó a hablar mientras daba vueltas por toda la habitación. Lucía nervioso y enojado al mismo tiempo.

-Ok- empezó a decir mientras daba vueltas- ayer estuve viendo unas películas sobre el matrimonio por cable, ya que estaba solo de noche y nadie quería abrazarme- le dirigió una mirada molesta a su hermano- estaba solo en la cabaña, solo podía ver películas y me dí cuenta de algo muy importante en las películas que ví…- empezó a negar con la cabeza mientras no sabía como continuar

-Sueltalo Emmett- chilló Rose

-En las dos películas los novios ven los vestidos de novia de sus novias y al final no hubo boda- dijo exasperado- una de ellas la novias se caso con el hermano de su mejor amiga que recién conocía y en la otra película la chica se casó con un mesero- anunció con indignación- y todo eso pasó por que el novio vió el vestido de novia antes de la boda

-Pero Emmett tu no has visto mi vestido de novias, ni siquiera yo lo he visto- contestó Rose exasperada- Alice lo va a mantener en secreto estoy segura- afirmó

Edward soltó una risita y enseguida se aclaró la garganta. Todos lo miramos  sin entender nada.

-Y ahora tu crees que si Rose ve tu smoking no se va a casar contigo- concluyó Edward intentando parecer serio mientras se acariciaba el mentón

Emmett alzó las manos al cielo resoplando como si al fin alguien hubiese entendido su punto de vista.- Exacto- dijo más calmado.

Quería evitar reírme ya que a pesar de tener unas ganas incontrolables de matarme de risa, la escena resultaba demasiado conmovedora y  no sabía como actuar ante tal situación. Edward tenía fruncido el seño con una sonrisa en sus labios, probablemente estaba en el mismo dilema que yo. Rosalie estaba con los ojos abiertos como platos ante la confesión de su prometido. A continuación se cayo de espaldas muerta de la risa en la cama y ya sin poder evitarlo Edward y yo tambien nos unimos a sus risas.

-Eso no es divertido- refutó Emmett al vernos

Rosalie se paró de la cama y se dirigió hacia él para darle un gran beso en los labios. Tomo su rostro con sus manos y lo obligó a mirarla.

-Cariño, si hay una tradición que dice que él novio no puede ver el vestido de la novia porque es de mala suerte, pero en ningún lado dice que la novia no puede ver el smoking de su novio…- explicó con ternura- además yo quiero ver a mi sexy novio en smoking- agregó con una sonrisa

Emmett le sonrió y le dio un beso a ella en la nariz. La sentó en la silla donde el se encontraba y se paró enfrente de ella.

-Por lo que tengo entendido si nos vamos a casar tenemos que tratarnos como iguales ¿verdad amor?- esperó hasta que ella asintiera- así que no quiero arriesgarme y si dicen que es mala suerte ver tu vestido de novia, también es mala suerte que veas mi smoking- Rosalie estuvo a punto de refutar pero él negó con la cabeza- si me quieres todo lo que dices quererme me vas a dejar ir a comprar el smoking, mientras tú haces otras cosas

Era el discurso más largo que le había escuchado decir a Emmett, pero me quede estupefacta ante sus explicaciones, luego de un momento ví que Edward tenía la misma expresión que yo tenía. Rosalie lo consideró un minuto y sonrió a su prometido. Se paró de la silla y le dio un abrazo.

-Esta bien Emmett no voy a arruinar la boda pero tampoco te voy a dejar ir solo- dijo mi amiga encogiendo se hombros- aunque no te niego que me resulta absurdo que creas eso y hayas transformado una costumbre.

-Yo lo acompaño- se ofreció Edward- recuerda que tengo los detalles de Alice en este papel- dijo sacando de su pantalón un papel blanco doblado en un cuadrito

Rosalie asintió y cuando estabamos despidiendonos de los chicos sonó el movil de Edward.

-Hola Alice- saludó él y guardó silencio por un minuto- no, aún no, vamos a ir él y yo a comprar el smoking, ellas van a quedarse.

Se escuchó un ¡¿Qué?! Y luego Edward empezó a explicar las razones de Emmett se escuchó estallar a Alice en risas. Despues de eso se calmo un poco y habló con Edward.Este alzó una ceja y me miró dudoso.

-¿Estas segura?- preguntó a Alice, luego escuchó lo que ella le decía y se acercó a mí extendiendo su mano con el movil- quiere hablar contigo- me dijo con una sonrisa divertida

Tomé el teléfono dudosa, no sabría que estaba planeando Alice pero Edward intentaba contener la risa.

-¿Alice?- pregunté nerviosa.

-Hola Bella- me dijo feliz- tengo planes para ti el día de hoy- anunció rápidamente

-Supongo- dije nerviosa recalcando la palabra- que no he de poder negarme- en respuesta escuché una risita.

-Necesito que acompañes a Emmett a comprar el smoking, necesito visión femenina ¿me comprendes?, yo quiero mucho a mi hermanito pero aveces tiene ideas un poco descabelladas y es necesario que vaya una mujer…

-Pero tú sabes que la “moda”- dije haciendo incapie en la palabra- no es mi fuerte

Soltó un suspiro audible

-Lo sé Bella, por eso te vas a llevar el blackberry de Edward- me explicó-  así me pasas fotos de Emmett con los smokings puestos y Eddie se quedará con tu movil ¿me has entendido?- preguntó impaciente

-Mi celular tiene cámara, no es necesario quitarle su celular- empecé a decir pero me interrumpió

-Bella no te ofendas pero tu celular es de otra era…- me dijo impaciente y luego murmuró algo de un i-phone tan rápido que creo haber escuchado mal- necesito alta calidad en las imágenes, no me lo hagas dificil o me vas a obligar a hacer algo drástico- amenazó- y estoy segura de que Edward me va a ayudar si se lo pido

Sentí un frío recorrer mi espalda por su amenaza, así que terminé aceptando sin rechistar. Rosalie se tomo bien la noticia, ella  y su cuñado iban a pasar la mañana en la piscina del complejo.

-Bueno aquí está mi movil- dijo Edward con pena extendiendome su celular- si hay alguna opción que no entiendas Emmett sabe usar este trasto mejor que yo

-Ok- le dije tomando mi celular y saqué del bolsillo mi motorola- aquí esta el mío

Él lo tomó y lo guardó en el bolsillo de su bermuda. Me regaló una sonrisa y se despidio de nosotros. Guardé su celular en un bolso que encontré entre mis cosas y hacía juego con las zandalias que llevaba puestas.

Emmett y yo nos dirigímos al jeep, me abrió la puerta del copiloto, después de un intento frustrado al intentar subirme, golpearme la cabeza y escucharlo soltar unas carcajadas, me ayudó a subir al jeep.

-Así que mi querida madrina de bodas- dijo alzando las cejas- ¿a dónde vamos?

Le sonreí y saqué la tarjeta que nos había dado Rose antes de salir.

-Se supone que a este sitio- le dije extendiendole la tarjeta- debemos preguntar por el amigo de Tyler, él es el dueño de la boutique

Tomó la tarjetita y empezó a conducir rápidamente hacia la dirección que indicaba la tarjeta. En el camino el me veía de reojo y se sonreía, parecía la expresión de un niño pequeño emocionado. Me aclaré la garganta.

-¿Sucede algo Emmett?- pregunté con una sonrisa

-Bien- dijo con una sonrisa- quiero preguntarte algo…-confesó con una sonrisa- pero no se si me vas a contestar- agregó

Sonreí ante su respuesta

-Bien ponme a prueba- le dije sonriendo aún- suelta la pregunta

Él lo consideró un momento, apretó fuertemente sus labios y luego negó con la cabeza.

-Mejor hagamos un trato- me ofreció y lo miré con duda- lo que digamos aquí va a ser total secreto y nadie debe enterarse de lo que hablamos ¿Trato?

Suspiré mientras miraba la mano que había extendido hacia  mi para que la tome. La tomé, asentí y le di un fuerte apretón.

Estaba esperando la bomba de preguntas pero el decidió guaradr silencio hasta que llegamos a la boutique. Bajamos y cuando iba a abrir la puerta para entrar él me detuvo.

-Ayer en la noche…- empezó a decir y me tensé- estabas en la playa con Edward- me dijo con una sonrisa retirando su mano- tienes tres minutos para salir del shock y para contestarme- me advirtió y me guiño el ojo teatralmente- vamos mi pequeña madrina de bodas- concluyó

Me guió hasta dentro de la boutique y luego de un rato vino hacia nosotros un hombre de aspecto agradable cabello castaño, lucía de veintitres años aproximadamente. Se presentó ante nosotros se llamaba Riley, luego de explicarle lo sucedido con la boda y el problema en el que nos encontrabamos,le entregamos las instrucciones de Alice,  él decidió ir a buscar una cinta metrica, modelos de telas y conjuntos mientras nos condujo a un cuarto privado.

El cuarto era blanco tenía un ventanal enorme del lado oeste de la habitación cubierto por finas cortinas blancas, la cara este estaba llena de espejos y había una pequeña tarima de madera. A los lados había unos muebles. Me senté en un muble amplio y él se sentó a lado mío.

-Ok- dije resoplando- si, ayer efectivamente estuve con Edward…pero no es nada fuera de lo común solo estuvimos conversando

-Yo nunca insinué lo contrario- dijo sonriendo- pero veo a mi hermano muy feliz luego de hablar contigo… me gustaría saber que hay entre ustedes- comentó poniendose de pie para pararse en la tarima y mirarse en los espejos

-¿Crees que estoy gordo?- preguntó mientras se miraba en el espejo

-No lo sé… es dificíl de decir- dije sumida en mis pensamientos

-Osea que si estoy gordo- chilló Emmett con una cara de preocupación

Lo miré incrédula mientras me reía.

-Emmett no me refería a eso- dije entre risas- me refería a lo que siento por Edward- confesé luego de un rato

-Ya veo…- dijo él sentandose a mi lado de nuevo- pero no soy tan bobo…algunas veces aunque no lo creas este cerebro mío funciona- comentó haciendome reír-  intenta explicarmelo- presionó

Pasé una mano por mi cabello y empecé a mira mis dedos.

-Me siento feliz, como si algo volara en mi estomago- explique mientras movía mis manos intentando explicarme- pero me asusta mucho, me da miedo sentirme así…me aterra- le confesé- pero por otro lado me voy a casar en dos meses Emmett y me hace sentir culpable saber que mi relación con Jacob no funciona por mi culpa- cuando terminé de hablar sentí que una lagrima traicionera bajaba por mi mejilla e intenté quitarmela

-No sé si sea… como decirlo…-murmuró mientras pensaba- apropiado –dijo luego de un rato- pero cuando él habla contigo, se le iluminan los ojos y sonríe…no lo he visto nunca así y yo he comparado sus reacciones con las mías cuando veo a Rose y se parecen mucho..talvez me entrometo pero de verdad me gusta verlos juntos…

-Creo que ambos podemos ser amigos- le dije a Emmett con una sonrisa

En ese momento entró Riley con varias telas de colores blancos pero en distintas tonalidades. Le pasó a Emmett un par de pantalones, unos sacos, unas camisas y unas prendas que no sabía bien que eran. Riley le indicó un camino que no había visto tras los espejos donde estaban los probadores. Luego de un momento Emmett salió con un smoking de tono blanco lechoso, se paró en la tarima y saqué el movil de Edward para toamrle una foto antes de que Alice me llamara. Cuando vi el fondo de pantalla que tenía su celular me quedé tensa. Era una foto tomada desde un balcón, se parecía mucho al paisaje que ambos habíamos visto el día del desfile.

-¿Pasa algo mi querida madrina de bodas?-preguntó Emmett alzando una ceja mientras Riley le acomodaba la corbata- o no sabes usar un blackbery- dijo sonriendo

Busqué rápidamente la camara y le saqué la lengua.

-Muy bien Emmett posa para la foto- dije mientras tomaba tres fotos, una enfrente, otra de perfil y la ultima de espaldas. Selas envié a Alice rápidamente. Luego de tres minutos empezó a sonar el celular.

-Hola Alice- saludé

-Bella el saco me encanta, pero necesita unas puntadas en los costados y en los hombros … quiero un pantalón más suelto y necesito otro color y esa corbata no me covence…

Seguía hablando atropelladamente y la verdad es que no entendía muy bien de qué hablaba.

-Alice- le dije después de que se calló

-Dime Bella

-No he entendido mucho de lo que me has dicho, mejor y te paso a Riley-recomendé y ella accedió

Ël tomo el teléfono y luego de un rato el mismo tomaba las fotos y se las enviaba a Alice. Emmett entraba y salía delprobador su rostro me mataba de la risa.

Así que luego de al menos cien fotos más y de veinte cambios de ropa. Ya habíamos decidido como luciría Emmett, Riley le prometió a Alice ponerse a trabajar inmediatamente en la ropa de Emmett. Tendríamos que regresar el día lunes para que se vuelva a probar la ropa. Alice nos dio carta blanca con respecto a los zapatos y las medias, solo nos dijo los tonos que debíamos escoger y los que devíamos evitar.

-No sabía que escoger un smoking nos llevaría cinco horas- murmuró Emmett mientras veía las medias en los estantes

- ¿Alguien se está arripintiendo?- pregunte entre risas

Bufo y empezó a reirse.

-Para nada- me contradijo- ya quiero ser el Sr. Hale

Solté una risa y él me miró con cara de pocos amigos.

-Rosalie va a ser la Sra. Cullen y tú vas a seguir siendo Emmett Cullen- le expliqué

-No es justo- murmuró- la novia se lleva toda la diversión, tira el ramo, se saca la liga y nada para el novio- dijo indignado

-Bueno creo que tú eres el que le saca la liga- le dije sonriendo- además te quedas con la novia ¿qué más puedes pedir?

Luego de un rato sonrió y asintió.

-Me gusta la idea de la liga, pero tu tambien te vas a casar y no te he visto como nosotros- murmuró- de hecho no he sabido nada de tu novio…-me miró y me tensé ante su comentario- ¿está todo bien con ustedes?

-No Emmett pero ya estoy metida de cabeza en esto y…- el me metió una media en la boca y lo miré con una expresión extraña, él sonrió en modo de disculpas

-Lo siento- dijo sacandome la media de la boca- pero no me gusta oirte hablar así, ya se que eres mi madrina de bodas, una de las mejores amigas de mi futura esposa y una muy chistosa y encantadora amiga pero la verdad aveces dices tonterías…es como si fueras parte de mi familia…eres como mi otra hermanita-anunció alegre- y no quiero que ninguna hermanita mía se case sin ser feliz…así que tienes mucho que pensar antes de tomar ese paso jovencita

-Es algo tarde-murmuré

-Nunca e starde para nada y te voy a contar un secreto pero no se lo vas a decir a nadie ¿entendido?- pregunto y asentí- desde ese día en el que te fuiste de la casa de mis padres y viste por última vez a Eddie… en los siguientes dos años no dejaba de preguntarnos a todos sobre ti… creo que él siente algo muy profundo por ti

-¿De verdad?- pregunté y el asintió

-Siempre quizo volver a hablarte para disculparse pero Alice, Rose y yo le decíamos que aún no era el momento… él se destrozaba cada vez que le decíamos eso…eres como mi hermanita y Eddie es mi hermano, sé que hay algo entre ustedes….me gustaría que fueran felices en verdad

Le sonreí y sentí que los ojos se me iban  llenando de lágrimas. Lo abracé fuerte por la cintura y el me dio un beso en la frente.

-Tú tambien eres mi tonto y lindo hermano mayor- le dije en  su pecho- y te prometo pensarmelo de nuevo ¿ok? Pero no te prometo nada extremo

-Y con Edward…-empezó a decir pero lo callé

-Con Edward veremos como se dan las cosas pero estoy dispuesta a llevarme aún mejor con él ¿si?

Él asintió con la cabeza, compramos las medias y los zapatos, salimos de esa tienda y los ojos de Emmett casi se le salen de su orbitas. Miraba una tienda que se encontraba en una esquina al cruzar la calle.

-Bella

-¿Sí?-pregunté preocupada

-¿Qué tan rápido corres?-pregunto aún viendo el establecimiento

-Aveces me caigo- confesé

Él asintió,  me cargó sobre su hombro, yo chillé para que me bajara y lo ví corriendo rápidamente.

-¡¡Bajame Emmett!!- chillé

-Cuando lleguemos- me dijo

-¡¡¡¿A dónde?!!!- chillé

-¡A esa tienda, es que hay oferta de tangas, se estan acabando y necesito muchas para la luna de miel!

En ese momento pense que talvez la locura de compras compulsivas no era solo de Alice Cullen…era de familia.

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Espero que les gusten estos capis y ruego poder volver a tener internet pronto...

Besos.Sam