Epílogo:

Edward Pov:

Bella y yo tratábamos de aprovechar estas últimas dos semanas de vacaciones para estar juntos antes de ir a Seattle, ya que cuando comenzáramos la universidad no tendríamos tanto tiempo para nosotros.

Habíamos decidido ir por unos días a la casa de mis padres, en la playa, para luego volver a Forks y comenzar a preparar las cosas para ir a Seattle, ya que viviríamos allí y volveríamos a nuestra casa en Forks en las vacaciones.

Este era el tercer día desde que fuimos a la playa. Estábamos tumbados en la arena, a unos cuantos metros de la casa, frente al mar. Ambos teníamos gafas de sol ya que había sol, y hacía algo de calor. Ella llevaba puesto un vestido blanco hasta las rodillas. Se veía tan hermosa. Me apoyé sobre mis codos para acercarme a ella, le quité las gafas con cuidado y ella me miró. Sonreí y me acerqué más para besarla. Dejé un pequeño beso sobre sus labios.

-¿Bella?-
-¿Si?-
-Te amo- sonrió contra mis labios y luego, con sus brazos rodeó mi cuello.
-Y yo a ti-

Luego de estar besándonos durante un rato, caminamos durante un rato más por la orilla del mar, con nuestros dedos entrelazados.
-¿Volvemos? Quiero ducharme- dijo Bella apoyándose en mi hombro. Volvimos a la casa para ducharnos y para que Bella cocinara algo.

Al terminar de ducharnos, nos vestimos y ella comenzó a preparar la cena. Cuando terminamos de cenar, la ayudé a lavar los platos, y luego fuimos a tirarnos al sofá. Yo me quedé en el sofá, viendo un poco la televisión y me luego de un rato fui a acostarme. Abrí la puerta de la habitación con cuidado, para no hacer ruido. La luz estaba prendida, y ella dormía echa un ovillo sobre la cama. Sonreí al verla, se veía tan pequeñita y adorable. Cepillé mis dientes, luego me quité la ropa y me puse los pantalones que usaba para dormir. Apagué la luz y me metí en la cama, al día siguiente por la mañana volveríamos a Forks.

Desperté cuando sonó la alarma de mi celular. Abrí los ojos y me volteé hacia Bella, que seguía dormida. Me acerqué a ella tomándola por la cintura y la apreté más contra mí.
-Bella… Amor, despierta- susurré besando su frente.
-Mmm, tengo sueño… ¿Qué hora es?- dijo abriendo los ojos.
-Las ocho- hizo un puchero.
-¡Pero…! ¡Es muy temprano!- me eché a reír al ver su carita.

-Lo sé amor, pero debemos volver a casa y en unos días ya tenemos que ir a Seattle- me aparté un poco de ella y me senté en la cama. Ella se sentó mientras estiraba sus brazos. 

-Mmm... Prepararé el desayuno- dijo bostezando. La tomé de la cintura y la atraje hacia mí.
-Lo haré yo-
-Yo-
-De acuerdo, lo haremos ambos- se rió.
-Está bien-

Nos levantamos, acomodamos la cama y luego nos vestimos. Ayudé a Bella a preparar el desayuno, y cuando terminamos, fuimos a la habitación a buscar nuestras cosas para ponerlas en el auto.

Cada uno agarró su bolso, con una mano abrí la puerta y luego salimos. Caminamos hasta el auto y abrí el baúl, metimos los bolsos adentro y volvimos a caminar hacia la casa.

-Edward, ¿Has visto mi celular?- me preguntó desde la habitación cuando yo cepillaba mis dientes en el baño.
-No- contesté después de un minuto. Luego volví a la habitación.

-¿Lo encontraste, amor?-
-No- dijo haciendo un puchero. Sonreí.
-¿Dónde lo dejaste anoche?-
-No lo recuerdo... Espera, ¿Qué es eso?-
-¿El qué?- se agachó y metió un brazo debajo de la cama.
-Maldito teléfono, ¿cómo llegó aquí?- dijo mientras la ayudaba a levantarse. Dejó el celular sobre la mesita de noche. Me acerqué ella poniendo mis manos en su cintura e hice que se volteara para quedar frente a mí. La acerqué más a mí para besarla. Al principio me devolvió el beso, pero luego se apartó un poco de mí.

-Vamos, vamos- besé su frente sonriendo y luego la solté.

Terminamos de agarrar todas nuestras cosas, para luego caminar hacia la puerta de entrada. Tomé mi billetera y mi móvil que había dejado sobre el sofá, y me los guardé en el bolsillo de mis jeans. Tomé la llave del Volvo y salimos de la casa. Cerré con llave la puerta y comenzamos a caminar hacia el auto.
Ella se detuvo a mitad del camino.

-¿Qué pasa, amor?- me acerqué y la tomé de la mano.
-No quiero irme- suspiró, se zafó de mi agarre y se sentó en la arena. Me acomodé a su lado y la rodeé con uno de mis brazos, haciendo que apoyara su cabeza en mi hombro.

-Yo tampoco- besé su cabeza. Con mis dedos, levanté su rostro para besarla. Nos besamos durante un par de minutos.

-¿Sabes, Bella? Siempre pensé que terminaríamos así- susurré sobre sus labios, para luego apartarme un poco para mirarla a los ojos.

-¿Así cómo?-

-Con... Ya sabes-

-No entiendo, Edward- sonreí.

-Con... Algo más que... ¿Amistad?- se echó a reír.

-A veces pensaba lo mismo-

-Así que...-

-¿Así que, qué?-

-¿Más que una amistad?-

-¿Entre nosotros? Eso sucedió hace bastante-

-Es verdad... ¿Bella?-

-¿Sí?-

-Te amo, te amo, te amo- sonrió.

-Y yo a tí- dijo tirándose sobre mí haciendo que quedaramos recostados sobre la arena. Entonces, desde ese momento nos metimos en nuestra burbuja, en nuestro propio mundo.

                                                       FIN . 

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¡HOLA!  Bueno, este epílogo

está medio pedorro (trucho,

chafa, feo, aburrido o como lo

llamen en su país) Es que...

no tenía mucha inspiración,

pero quería terminar este fic

de una vez por todas así

puedo empezar con el otro. 

Bueno, les quería dar las

gracias por todos sus votos y

comentarios y por leer mi

historia :D Las que están

interesadas en leer el futuro

fic (?) yo les avisaré por

mensaje privado cuando

tenga los tres primeros

capítulos hechos así me lo

pueden activar para que

aparezca en la Sala Cullen.

Bueno chicas, gracias por

todito :)

Por cualquier cosa, mi mail

es:  solmio00@hotmail.com

Y para las que quieran

seguirme en twitter, yo soy:

@sol_twilighter

Ok chicas, me voy :') voy a

extrañar este fic, pero les

prometo que voy a tratar de

que

me llegue inspiración para

comenzar a escribir ;)

Good bye my little girls (?)

Las quiero y muchas gracias ♥