Capítulo 21:

No pude ver a Edward el domingo, me acordé (un poco tarde) que el lunes tenía un examen de Biología, así que me quedé en mi habitación a estudiar. El lunes, Edward pasó por mí para ir a la escuela.

Cuando llegamos, éramos unos de los primeros en llegar, entonces esperamos unos minutos en el auto porque llovía. Cuando empezaron a llegar más personas bajamos del auto, y corrimos esquivando los charcos de agua del piso hasta llegar a la puerta.
Por desgracia la primera clase que tenía era Biología, me sentía un poco nerviosa por el examen, pero se me hizo bastante fácil y fui una de las primeras en terminarlo.

El resto de las clases pasaron muy rápido, y sin que me enterara de alguna novedad. Cuando terminó mi última clase, la de Lengua, me quedé hablando con el profesor unos minutos respecto a un trabajo. Edward me había dicho que me esperaría en el auto. Salí de la escuela y recorrí con la vista el estacionamiento hasta encontrar el auto y comencé a caminar hacia él, aún llovía un poco.
-Bella- Escuché que me llamaban. Miré para todos lados hasta que lo vi a Riley. A los saltos, me acerqué a él.
-Riley, hola-
-¿Cómo estás?-
-Bien, ¿tú?-
-Eh, bien- Escuché el ruido del auto de Edward acercándose. Lo miré y le hice señas para que me esperara.
-Bueno, yo… debo irme- Dije señalando el auto. Lo notaba algo nervioso.
-Bueno, nos vemos mañana- Acerqué mi rostro al suyo para besar su mejilla, pero cuando iba a hacerlo; movió su rostro y me besó en la boca.
-¡Hey! ¿Qué diablos haces?- Dije dándole un empujón, pero con mi fuerza no lo moví ni cinco centímetros. En menos de 10 segundos Edward estaba a mi lado.
-Espérame en el auto-
-Yo…Edward…-
-¡Dije que esperes en el auto!- Lo miré a él y luego a Riley. Comencé a caminar hasta el auto, cuando llegué me quedé parada junto a la puerta del copiloto. Edward le hablaba a Riley, pero no pude entender bien lo que decía. En un momento, Edward agarró a Riley del cuello de su camisa.
-¡Edward!- Le grité o eso terminaría feo. Edward me miró y soltó la camisa de Riley, le dio un empujón en el pecho haciendo que se tambaleara y luego, al fin, caminó hacia el auto.
-Súbete- Me dijo abriendo la puerta para subirse él. Le obedecí y entré al auto, el cerró la puerta de un portazo y aceleró haciendo rechinar las llantas del auto contra el pavimento mojado. Lo miré, aunque se dio cuenta no me habló ni me miró. Mantenía la vista fija en la carretera, después de unos minutos suspiró.
-Edward, yo…- Me interrumpió:
-¿Qué? ¿Qué me vas a decir? Lo besaste, Bella, ¡lo besaste! ¿Por qué lo hiciste?- Dijo y luego golpeó el manubrio.
-Primero cálmate, baja la velocidad y hablaremos- No contestó, pero poco tiempo después estacionó cerca de una esquina y apagó el motor.
-Edward, escúchame-
-Primero te diré una cosa: hace tiempo ya que te dije que Riley no me agrada, sabes que me pongo celoso y sigues estando con él. Pero si ya no me quieres no hace falta que hagas eso, Bella. ¿Qué dirías si de un día para otro yo aparezca besando a una de tus amigas? ¿Cómo te sentirías si de repente apareciera con otra? ¿Cómo crees que me siento? ¿Por…?- Le tapé la boca con mi mano.
-¡Cállate y escúchame!-
-No me interesa oírte, Bella- Dijo sacando mi mano de su boca, pero no la soltó. Mis ojos se llenaron de lágrimas en ese momento. Ya comenzando a llorar, le grité:
-¿¡Por qué mierda no quieres escucharme!? ¡Edward, fue Riley, el me besó, yo no lo hice! ¡Si quieres ve y desquítate con él pero no me eches la culpa a mí, porque yo no lo hice!-
-¿Hablas enserio?-
-¡Pues claro, maldita sea!- No contestó, solo se quedó mirándome.
-Di algo, no te quedes callado- Dije secando mis lágrimas.
-No sé qué decir…Debí haberte escuchado antes de echarte la culpa. ¿Me perdonas?- Dijo acercándose a mí y mirándome con cara de perrito mojado.
-No puedo enojarme contigo cuando me miras con esos ojos- Dije seria y luego sonreí. Me acerqué a él y me apoyé en su hombro.
-Me cansé de pelear contigo- Dije acariciando sus dedos.
-Me cansé de mis celos. Me cansé de Riley-  
-Mañana hablaré con él-
-No quiero que sigas siendo su amiga-
-¿Por qué no?-
-Siempre hay algo que termina mal. Hace poco habló conmigo y me prometió que no te tocaría. Y ya ves como terminó todo-
-Nunca me hablaste sobre eso-
-Eso no importa, Bella. Lo que trato de decirte es que el rompió lo que me había prometido y puede volver a hacerlo- Ahora nos mirábamos a los ojos.
-Ok, hablaré con él y le diré que no lo vuelva a hacer-
-No me refería a eso-
-Edward, dejemos de lado los problemas durante un rato- Dije y le di un beso corto.
-Vamos, llévame a casa, a este paso llegaremos el año próximo- Edward me llevó a casa. Cuando bajé del auto corrí hasta la puerta porque había empezado a llover muy fuerte. Entré, saludé a mi madre, dejé mis cosas en mi habitación y bajé a tomar algo. Después me puse a hacer las tareas. Reneé miraba televisión cuando escuché que tocaban la puerta. Me levanté y abrí, era Riley.
-¿Qué quieres?- Dije al verlo al otro lado de la puerta.
-Lamento lo de hoy-
-Podrías irte al diablo, Riley. Le dijiste en la cara a Edward que no me tocarías, y mira cómo termina todo por tu culpa-
-Yo… Lo siento, de verdad-
-Debemos discutirlo los tres. Lo hablaremos mañana-
-Ok, adiós-
-Adiós- Dije y cerré la puerta.
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Al día siguiente, Edward vino a buscarme para ir a la escuela.
-Hola- Dije cuando subí al auto.
-Hola amor- Dijo sonriendo, luego se acercó a mí y me dio un beso corto. Después de unos minutos desde que había empezado a conducir le dije:
-Eh… Riley fue…-Me miró- Riley fue a casa ayer… Me pidió disculpas-
-¿Qué le dijiste?-
-Que hoy lo hablaríamos los tres- Asintió. Llegamos a la escuela, bajamos del auto y entramos tomados de la mano.

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Holaa! Chicas aca les dejo otro capitulo! :)

Espero que les gustee...

Chauu, cuidenseee! :P