- POV EDURNE

Salí de casa y me dirigí hacia la ciudad; volví a pasar por la torre del reloj y la volví a ver.

- Hola de nuevo señorita

- Buenos días

Intente alejarme de ella; pero volvió a hablarme

- ¿Esta segura que no quiere ver el castillo? Es una experiencia inolvidable.

- Como le dije ayer; no quiero

De pronto empece ha sentir un embrujo, como si algo me dijera que aceptase su proposición...

- Yo...

- Venga; se lo pasara bien.

Me agarró de la cintura y me llevo a su lado... intente quitarme de su agarre pero era imposible.
De repente una maravillosa voz vino a mis oídos.

- Heidi; si no quiere ver el castillo no hace falta que la obligues

Me giré y le pude ver; era el ángel de la estación; de mis sueños... no había cambiado nada. Seguía tan hermoso como siempre.

- Pero Demetri...

- No Heidi, dejala marchar; además creo que Aro te llama. Era urgente.

Pude ver como la tal Heidi me miraba con odio.
Me quede hay parada... no sabía lo que decirle.

- Gracias - le dije mientras me sonrojaba - no sabía como quitarmela de encima; es que este castillo no me inspira confianza.

- No hay de que; ¿y eso?

- Si te digo la verdad no lo se; es como un sexto sentido o mismamente la intuición femenina; siento que si entro aqui no saldre.

Pude ver como su cara se llenaba de dolor; ¿que le habría pasado? un momento... el tenía los ojos rojos.

- ¿Te pasa algo? - me acerque con cuidado y le toque su mejilla. Estaba helado.
Debido a mi contacto el se quito bruscamente; me sentí herida.

- Lo siento; es mejor que me vaya

Quería salir de este lugar; me sentía avergonzada; ¿como me había atrevido a tocarle?

- No te vayas por favor

Me quede quieta; el mi ángel me había dicho que no me fuese...

- Oye; lo siento. Pero no estoy acostumbrado al trato humano

- ¿Al trato humano? Acaso no eres un humano... eres un ser inmortal o algo así.

No me respondió. Alejate mi conciencia me hablo, en ese momento sentía miedo.

Sin decirle nada me marche... tenía que aclarar dudas. Cuando ya estaba bastante alejada de el decidi echar a correr; pero torpemente me caí; estaba esperando al fuerte impacto pero no; unos fuertes brazos frios lo impidieron; levante la vista para darle las gracias a mi salvador y era el.

- Ve con cuidado por favor

¿Pero como me había visto? yo estaba bastante alejada¿y como había venido tan rapido?
No le di ni las gracias y me marche.

Mientras que iba para casa pude ver varios carteles por las paredes de la ciudad:

Muy pronto San Marcos; nuestro salvador, el que elimino los vampiros de esta ciudad.

Mi mente se quedo helada al ver esto... camine lo más rapido hasta casa.
En cuanto llegue tecleé la palabra vampiro.
Miles de paginas aparecieron al instante; pero hubo uno que me llamo la atención.

Piel pálida; bebedores de sangre humana; descomunal hermosura; fuerza, rapidez, ojos rojos; sentidos super desarrollados... algunos tienen dones... cuando tienen sed de sangre sus ojos se vuelven negros...

No podía seguir leyendo más; estaba consternada.
Yo conocía esas caracteristicas; cuando le vi por primera vez tenía los ojos negros; y hoy eran  rojos; era extremadamente hermoso; tenía la piel palida; era frío como el hielo rapidez y fuerza... y un momento, cuando esos dos chicos me atacaron vi su rostro... el me salvo.

El era un vampiro... pero hubo algo que me sorprendio; no tenia miedo.
Quería volver a verle; pedirle perdón por mi comportamiento.
Decidi salir otra vez de casa; quería buscarle... hablar con el.

La ciudad estaba desierta; estaba empezando hacer frío. Sentí un aliento realmente seductor en mi cuello, pero no era el... me di la vuelta y la vi.

- Ya se lo que os traéis entre manos... pero nunca estareis juntos.

- ¿De que estas hablando?

- ¿Que te crees que soy tonta? Lo he podido ver, el siente un gran amor por ti... y tu por el.

- Por favor dejame en paz... haré lo que quieras.

- Marchate de Volterra; olvidate de el...

- Yo no puedo

Y no recuerdo nada más. Solo sentí la oscuridad sobre mi.

 - POV DEMETRI

Pude sentir el miedo en sus ojos; me sentía realmente mal.
Si es que lo sabía, ella descubriría lo que era y se alejaría de mi; mi hermosa Edurne.
Quería contarla todo; expresarle mis sentimientos, mis pensamientos hacia ella... moriría por ella.

Camine cabizbajo por la ciudad pero hubo algo que me llamó la atención.
Sentí su maravilloso aroma junto con otro... ¿Heidi?
Me dirigí a su encuentro y las vi; Edurne estaba tirada en el suelo y Heidi la intentaba morder.

- No - un profundo grito retumbo toda la ciudad

Me abalancé contra ella y la estampé contra una pared.

- Ella tiene la culpa... no eres el mismo

- ¿De que estas hablando Heidi?

- Yo te quiero; se lo que sientes por ella... y ella lo que siente por ti. Es muy poderoso; y si ella desaparece tal vez...

- Nunca - la dije mientras la cogía del cuello - ella es mi vida, y no pienso perderla, nadie me separara de ella.

La deje hay tirada y me lleve a Edurne fuera de la ciudad; a su casa.
Todavía seguía inconsciente, pero por suerte no la había mordido.
Pase mi mano por sus delicadas mejillas; era hermosa, no me cansaba de repetirlo.

- Demetri; no me dejes

- Nunca

Le di un tierno beso en la frente y cayó rendida en mis brazos.

La luz de mi existencia; la luz de mis ojos; la luz de mi muerto corazon; Mi Edurne.