POV EDURNE

No sabía lo que me pasaba; le había dicho que se quedase conmigo... y el me dijo que no. ¿Acaso me gustaba Alec? no habíamos tenido mucha relación; pero lo poco que hablamos fue algo muy especial; el me había ayudado, el me había dicho lo mucho que le importaba a Demetri... entonces estaba claro; el no sentía nada por mi; de ser así el me habría mentido, hubiese dicho cualquier cosa para que mi relación con Demetri acabase; y el aprovecharía la situación.
Tenía que sacarme esa idea de la cabeza, el único era Demetri. Mi ángel.
Sentía que me moría si el no estaba conmigo, ¿tal vez la compañia de Alec me hacia olvidar la ausencia de Demetri? yo estaba perdidamente enamorada de el; y cuando el no estaba...

Me encontraba en el claro de un bosque; a pocos metros de mi podía ver el hermoso castillo de Volterra; estaba sola... pero sabía que algo iba a pasar; y así fue.
De entre los árboles salieron Demetri y Alec. Los dos me miraban con ternura... pero de pronto Alec se abalanzó sobre Demetri y le arrancó la cabeza.

- No - grite todo lo que pude y me dirigí hacia el cuerpo inerte de Demetri.

Mi vida se había marchado, si el no existe yo me muero...

En ese momento Alec me apartó de el y me llevo hasta lo más profundo del bosque. Con sus frías manos cogió mi hermoso rostro y me susurró al oído.

- Ahora tu y yo seremos felices

Dicho esto se acercó y me beso apasionadamente.
No podía reaccionar, quería quitarmelo de encima... pero había algo en mi que quería quedarse con el.
Lentamente me separe de el...

- Te quiero... pero yo no puedo vivir en un mundo donde el no exista.

Y todo se volvió negro.

Me desperte con un grito ahogado; sudando...

- Solo es un sueño Edurne - me dije para mi misma

Me volví a recostar y pude ver como esos hermosos ojos carmesí me miraban fijamente.

- ¿Que ha pasado? - le pregunte

- Hace un rato llegue de cazar... y te encontré tirada en el suelo

- Me desmaye...

- Eso parece

Quería contarle lo de mi frustrada ''huida'' , pero tenía miedo, el igual me decía que ya no me queria; que...

- Lo se - parecía que el me hubiese leido la mente

- ¿Como sabes lo que te iba... ¿quien te lo ha...

- Primero eres un libro abierto, te conozco más de lo que piensas... sabía que Heidi te diria algo así y tu... le harias caso - esto lo dijo con tristeza - por eso me fui de caza; quería comprobar como reaccionabas; y despues me lo dijo Alec

- Demetri... lo siento tanto

- No te preocupes, lo importante es que te hayas quedado; pero lo que mas me duele es que te creistes la versión de Heidi...

- Es que todavía pienso que esto es un sueño, no puedo entender como un ángel caido del cielo se fije en una simple humana... no soy nada.

Demetri cogió mi rostro entre sus manos y me hizo acercarme a el; haciendo que nuestras frentes se juntaran

- Escuchame bien; tu eres la única razón por la que sigo con vida... si se le puede llamar así. Eres mi luz; mi impulso... lo eres todo; has sido la única persona que ha resucitado mi muerto corazón. Me gusta verte dormir; escuchar mi nombre de tus propios labios; esos ojos verdes que me pierden; en los que me pasaría toda la eternidad mirandolos; tus hermosos labios... que me incitan a la perdición, cada curva de tu cuerpo; tu olor; tu sabor, tu sangre; los latidos de tu corazón... en definitiva todo. Yo solo soy un demonio que ha salido del infierno para encontrarse con las puertas del cielo... Edurne; te quiero.

- El demonio de mis sueños; mi protector. Mi vida empieza ahora; soy tuya para siempre.