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Mala Noche

Bella

Las lágrimas me corrían por las mejillas, mi corazón parecía querer salirse por la boca el terror me invadía huía de algo frenéticamente, el terreno era irregular, caía una y otra vez me esforzaba para saber donde estaba pero estaba muy oscuro. Caí nuevamente y algo viscoso se adhirió a mis manos además de tierra, logré apenas vislumbrar era sangre, iba a gritar pero me arrepentí en el último momento le advertiría donde estaba, me dije.

    Con esfuerzo levanté, miré lo que pensaba que era adelante, vislumbré una luz muy tenue debe ser mi imaginación pero conforme me acercaba la iluminación resplandecía no podía más ahora todo era blanco por la luz pero el terror seguía ahí. Si dejo que me alcance todo se termina puedo descansar mis piernas me abandonaban, no puedo seguir no más.

    —Vamos Bella tienes que hacerlo la vida de muchas personas están en juego ahora no puedes dejarlos—

    —La voz me resultaba extrañamente conocida mire a través de mis ojos somnolientos por el miedo y el cansancio.

    —Julián eres tú ya no sentí miedo todo era tranquilidad cuando volví a mirar no estaba solo ahora la mujer de cabello rojizo estaba junto a él.

—   ¿Quien eres por que estas con Julián?

—    Ellos sonrieron ahora escuché la voz de ella era suave casi musical Tú y Edward tienen derecho a ser felices, Uds. Son el uno para él otro pero ten mucho cuidado la oscuridad los rodea quiere separarlos no lo permitas lucha, lucha hasta la últimas consecuencias y no creas en las evidencias no creas en nada solo en Edward.

    — ¿Lo amas pregunto la mujer? Sus ojos eran tan verdes casi hipnóticos.

    — Si— Con toda el alma contesté

    —Así debe ser. Entonces lucha —

    —Despierta Bella. Despierta— La voz de Julián se escuchaba perturbada

La imagen se desvaneció. Sentí un calor agradable luego todo volvió a estar oscuro y el calor ya no acogedor si no mas bien abrasador Fue ese mismo calor el que me despertó.

 Estaba en mi casa pero ¿Que era esa luminosidad? Estaba en los brazos de Edward, trate de razonar, no era un sueño entonces fui tomando conciencia lentamente.

    —No. ¡Fuego!! —

    —Moví a Edward despierta, por favor fuego—

    —El brincó ¿Qué? — Fuego Ed no me salían las palabras tome mi pantalón que estaba en el suelo.

    —Edward tomo la iniciativa — escucha Bella todavía no llegó adentro toma algo de ropa y unas toallas o mantas livianas. La adrenalina me corría por el cuerpo hice lo que me dijo en un minuto tire ropa en un bolso saque tome mi cartera tenía todo lo necesario documentos tarjetas etc. De camino a la sala tome unas toallas.

—   Edward estaba comunicado con el 911 — escuche que decía todavía estamos bien pero la casa esta rodeada por el fuego, digan o que digan trataremos de salir.

—   Al escucharlo tome conciencia que todo alrededor de la casa estaba rodeado por el fuego, no podía ser ahora no por favor Dios no me hagas esto, La videncia era imposible de evadir, caí de rodillas las manos de alguien con guantes rociando la casa, llevaba ropa oscura, nos estuvo espiando, vio como hacíamos el amor, de allí solo pude ver imágenes horribles que se dibujaban en su cabeza. Hasta que punto nos odiaba y ¿por que?

No esperaba que salgamos vivos de esta, la mujer de cabello rojizo ocupaba su pensamiento también otro hombre rubio y apuesto a quien no conocía.

   — ¿Bella por favor dime que te sucede?

   —Tenemos que salir de aquí puede que el fuego no haya llegado al interior pero el humo lo hace con rapidez. Por favor Bella ¿que pasa, por que te pones así hoy ya te sucedió lo mismo, no? Su voz sonaba preocupada.

   —Escuchaba a Ed pero las visiones seguían— Eran tantas esa persona estaba cerca estaba mirando como ardíamos junto con la casa eso era enfermizo.

   —    Sentí cuando Edward coloco algo húmedo y frío sobre mí. Escuchaba sus pasos que se alejaban. ¿Me dejaría?

   —No me dejes intentaba gritarle pero— no me salía la voz estaba en pleno trance.

   — Volvió ¿era el? El miedo me paralizaba. Pude sentir que alguien me tomaba en sus brazos— ¿Edward?

   —Esto puede que duela un poco pero es necesario.

—   ¿Qué era lo que dolería, qué era necesario? —

—   Solo sentí un fuerte golpe, mi cuerpo cayo muy duro contra el suelo. Escuchaba la consternación de su voz Bella ¡Por favor, contéstame!

—    Lentamente logré esbozar unas palabras tranquilo Edward estoy bien. Pero ¿Cómo salimos? — Había vuelto a la normalidad.

—   Salté, tuve que hacerlo antes que el humo nos asfixiara— No pudo sostenerme la mirada.

—    ¿Qué pasa Edward que va mal?

—   No se si todo esto sea mi culpa Bella. Mi familia fue amenazada y casi sufrimos un accidente muy serio si tú no despertabas a tiempo. Además no se que te ocurre veo que a veces no te sientes bien y quizás yo sea el culpable— Su tono era tan sincero que una oleada de amor me invadió.

—   No seas tonto Edward Cullen, no tienes nada que ver con esto y lo que me ocurre a mí es una larga historia, que te contare cuando lo desees, pero creo que no querrás verme luego— Al decir estas palabras mi corazón se contrajo involuntariamente con solo pensar que no lo vería.

—   Pues creo que seré yo el que juzgue eso. Bella— Pero no creo que nada que hagas me separe de ti.

—   Ya veremos— le conteste amargamente.

Ana

Ya habíamos quedado con Carlisle que yo iría antes a Forks. Llegaría como turista con mi hermano esto no era mentira así que no era tan difícil John me acompañaría los dos tenderíamos redes para saber que estaba pasando.

Las amenaza que recibía la familia Cullen habían dejado de ser chiste para pasar a ser un juego macabro, Edward y Alice sufrieron un acoso alguien estaba jugando algo peligroso lo que averiguaríamos es quien y por que; por supuesto que también quería que los atraparlos y ponerlos presos.

—   ¿En que piensas? Ana — Preguntó mi hermano, el sabía que me preocupaba por los Cullen

—   No se de que va todo este rollo—conteste no se quien tendría problemas con el Dr. Cullen tú lo conoces tan bien como yo y sabes que es raro todo esto.

—   Mira, si pero como bien dijiste el es un Dr. Muy conocido y si falla en su trabajo puede costar vidas tanto como en el nuestro— Ya hablamos del tema con el doctor Cullen.

—   ¿Qué Uds. Hicieron que? — Debí suponer que hablarían con él, me moví inquieta en mi asiento.

—   Mira no te lo dije por que sabía que te disgustarías. Pero entiende somos policías encubiertos es nuestro trabajo averiguar que se esconde de tras de todo este lío. La policía de Forks nos esta esperando. Pero como es costumbre ellos no están muy felices de tenernos allí, sienten como si nosotros querríamos enseñarle su trabajo.

—   El jefe hablo con Carlisle necesitábamos saber si en algún momento algo no salió bien con un paciente.

—   ¿Cómo puedes decir algo así? Mi hermano me miro tratando de saber lo que pensaba.

—   Todos tenemos un muerto en el placard hermanita— Basta de sandeces tienes razón en un cosa, puede que algo no halla salido como se esperaba con un paciente el Dr. Cullen no es Dios para salvar a todos. Pero de allí a amenazarlo, con matar a sus hijos se pasa de castaño oscuro.

—   En eso coincido plenamente, pero bueno por eso vinimos hasta aquí aunque sigo en desacuerdo en que te inmiscuyas. Nosotros lo podemos hacer muy bien las cosas. Me escupió molesto.

—   Quiero ayudar a atrapar a ese tipo, antes que tengamos que lamentar algo más grave. Además sabes que ellos nos ayudaron mucho después de la muerte de nuestros padres. No podría pagar jamás la atención que nos brindaron cuando nuestros padres sufrieron un accidente que al final les costo la vida a ambos. Luego la insistencia de Edward para que trabaje con él sabía a la perfección que no tenía idea sobre arquitectura, pero me soporto hasta que logré ser una secretaria eficiente.

 Dándome luego de unos años la responsabilidad de ser su representante en una de as principales sucursales de su empresa nada más ni nada menos que en España.

—Por eso también trate que el jefe se hiciera cargo de este caso, pero que tú te arriesgues An no me gusta nada— Sabía que John estaba molesto pero no sabía cuanto a ciencia cierta.

 Cuando entramos al pueblo fuimos directamente a la comisaría.

John y uno de sus compañeros que nos seguían de cerca bajaron para reportarse con el jefe y ponerse al tanto de lo sucedido, su otro compañero y yo seguimos hacia las cabañas que habíamos alquilado se encontraban separadas pero lo suficientemente cerca como para planear estrategias sin ser descubiertos, ya que a partir de estos momentos seríamos meros turistas.

Una vez que nos instaláramos llamaría a Edward para que sepa que estábamos aquí, sabía que Alice volvería pasado mañana y Esme y Carlisle lo haría en dos días.

Al cabo de un par de horas ya nos habíamos instalado, John estaba con sus compañeros trazando planes de la estrategia a seguir y como vigilarían a los sospechosos que tenía la policía del pueblo aunque ellos creían que estaban errados. El perfil trazado no daba con las personas señaladas.

Yo aproveché el tiempo libre marqué el número de Edward.

Atendió a los pocos segundos.

—   ¿Cómo esta mi jefe favorito? Le dije bromeando.

—   ¿Ana eres tú? En su voz se noto la sorpresa pero también había algo de preocupación esto no me gusto.

—   Si Edward llamaba para decirte que estaba aquí en Forks en vista a los acontecimientos que vivieron Alice y tú, como sabrás tus padres llegan en un par de días.

—   ¿Estas acá, como es eso? Lo de mis padres me lo comunicó la enana, pero que tienes que ver tú ¿Qué esta pasando realmente Ana? La noticia que Ana estaba en el pueblo comenzó a darme escozor si estaba preocupado por el incendio ahora sentía en mi cuerpo el peso de la incertidumbre.

—   Mira la verdad me gustaría que hables con ellos primero pero las cosas se salen de control así que me gustaría poder ponerte al corriente hoy mismo si lo deseas, Edward.

—   ¿Esto no me lo esperaba que era lo que pasaba que toda la familia estaba movilizada? ¿Tenía que ver con la amenaza recibida? pues lamentaba tener que decirles que ahora ya pasaba de amenaza a un hecho concreto que casi nos cuesta la vida a Bella y a mí. Mi cabeza trataba de procesar toda la información.

—    ¿Dónde estas Edward? Te veré donde quieras.

—   Estoy en la comisaría del pueblo, alguien intento…  La voz se me quebró involuntariamente. Alguien prendió fuego a la cabaña donde estaba— Lo único que logre escuchar del otro lado de la línea fue un gemido ahogado.

—   Espérame ya salgo para allá— Me dijo Ana que no me dio lugar a replica.

Edward

  Estaba desesperado no sabía que hacer esperaba que Bella terminara su declaración, el comisario quiso que la hagamos por separado. El llamado de Ana me descoloco por completo ¿que pasaba en realidad que era lo que se iba de las manos?

Me senté en los escalones de la vieja comisaría de Forks, tomándome la cabeza entre las manos pensar que parte de la noche fui feliz había hecho el amor nuevamente con Bella y si la primera vez fue una experiencia inolvidable esta fue maravillosa ya que sentí su necesidad de estar conmigo. Pero también sentí la distancia de ella cuando volví a preguntarle que le sucedía ¿estaría enferma?

Solo de pensarlo mi mundo se desplomaba. Necesitaba que me diga que me ocultaba, cuanto mas pensaba mas entraba a un caos sin salida.

—   Edward, podemos irnos — Me di vuelta para mirarla su voz me daba paz una paz relativa sería absoluta cuando conociese su secreto, pero mi alma se tranquilizaba solo de tenerla cerca.

—   Bella, amor estoy esperando a una amiga que viene para aquí — llamo cuando estabas con el comisario. Abrió los ojos por la sorpresa. Una amiga tuya ¿aquí en Forks?— Sonreí ¿que era lo que percibía celos acaso? Su caro se compuso en segundos.

—   Esta bien, esperemos— iba a decirte que Jacob también vendría para aquí llamo cuando salía le conté lo sucedido y venia hacia aquí muy preocupado. Mierda la alegría de los celos se esfumó en un par de minutos, era yo el que cambió la cara ahora.

—   Bella. Quiero que nos quedemos en mi… en tu cabaña no se como decirlo bien unos días hasta que las cosas se tranquilicen— No quiero que vuelvas a tu casa por favor te lo suplico.

—   No tienes que suplicar nada Ed lo Hare, es más creo que te debo una explicación por lo raro de mi comportamiento, pensaba dártela junto con Jacob, pero sabes que estoy cansada de ocultarme no me interesa que tu amiga lo sepa es hora que todos conozcan a la verdadera Bella.

—   Iba a decir algo cuando el deportivo de Jacob Black estacionó con un ronroneo cerca de nosotros, no tuve tiempo ni siquiera de sentirme molesto. Del otro lado de la calle, Ana estacionó con vehemencia su camioneta haciendo que mirásemos hacia ella.

—   Lo que no teníamos en nuestros planes ni Bella ni yo era la mirada que cruzaron nuestros amigos se pudo percibir casi en forma tangible las chispas que surgieron de la misma.

—   Con Bella solo nos miramos y comenzamos a reír. Volví a mirar esta vez mas objetivamente y logré ver lo mágica que puede ser la naturaleza por que ensamblaban de forma absoluta el era alto, fuerte muy varonil despedía seguridad y una sonrisa que desarmaría a cualquier mujer. Ella era absolutamente práctica muy hermosa su cuerpo hacía que giraran a mirarla despidiendo femineidad y seguridad por cada poro de su piel. Eran simplemente perfectos uno para el otro.

Bueno chicas otro capítulo espero que les guste. Y sobre todo que me hagan saber que `piensan bueno o malo Un abrazoooo enorme Verooo

P.D Nitaaaa espero que te guste el cap. Que tanto esperaste. TKM amiga