POV EDWARD

Asi que este es mi departemento... Bien. Es bonito. 

Una sala espaciosa, con varios recortes de notas que había hecho junto a Jasper. Un estante con varias fotos de mi familia. Algo me llamo la atención. No tenía ninguna foto con Bella ni de ella. Por que haría eso? Es mi novia y se supone que debería tener fotografías con ella, y también con mi mejor amigo, Emmett.

Seguí caminando por la sala, observando los detalles, pensando que algo podría resultarme familiar. Pero no. Nada de ese lugar me era conocido. Ni el gran sillón de la sala, ni los cuadros, ni siquiera un balón de fútbol américano autografiado. Entré a la cocina, estaba todo ordenado, en su lugar. Yo nunca fui muy ordenado, por lo que seguramente debo tener alguien que hace la limpieza, tal vez mi madre. Nada. No reconozco nada de este lugar.

Mientras caminaba hacia la que creía que era mi habitación, me di cuenta que había demasiado silencio. Miré hacia la sala, y Bella estaba parada en la entrada aún. Seria, y con una mueca extraña en su cara.

- Bella amor, que sucede?- le pregunté mientras caminaba hacia ella. Inmediatamente cambio su cara.

- Nada cariño, por que lo preguntas?- me sonrío, pero esa sonrisa no le llego a los ojos.

- Tu cara no dice lo mismo. Estas molesta?- Me daba esa sensación.

- No Edward, no estoy molesta. Realmente deseaba que recordaras algo cuando vinieras.-  Parecía sincera, pero aún había algo que no me gustaba.

Esta semana que estuve en casa de mis padres, Bella vino todos los días. Llegaba temprano por la mañana, para desayunar conmigo, y se iba en la noche, para cenar con Emmett, ya que este estaba acostumbrandose a su nuevo empleo. Cuando lo ví a Emm por primera vez luego del accidente tuve la misma sensación que habia tenido con Bella, que hacía mucho que no lo veía. Lo cual podría ser perfectamente, ya que el estaba trabajando en Seattle , mientras que yo vivía aquí, aparentemente. Esa noche estaba extraño. Como distante. No hacía las mismas bromas de siempre y hasta sentí que me miraba con algo de recelo. Quizás no termine de aceptar que estoy con su hermanita. Estaba más sobreprotector que nunca. Cuando la bese mientras nos despedíamos, juraria que escuche un gruñido. Era extraño. Luego de esa noche no lo había vuelto a ver. Bella lo excuso diciendo que estaba adaptandose a vivir aquí, y aún no tenía muy claros los horarios. Mis padres los habían invitado a cenar esta noche. Jasper también vendría y me parecía una muy buena idea que se conozcan. En poco tiempo le había tomado cariño y realmente quería que pasara tiempo con Emmett y conmigo.

Sin soltar a Bella continué mirando el departamento.

- Oye! A ti si que te recuerdo.- dije mientras caminaba hacia mi piano. Era un regalo de mis abuelos- Había pertenecido a mi abuelo Anthony cuando era jóven. Cada vez que iba a su casa le pedía que tocara para mi, hasta que tuve la edad suficiente como para aprender y me enseño. Habiamos pasado tardes sentados en ese piano tocando juntos. Cuando murió, mi abuela decidió que yo lo tuviese. Era mi bien más preciado.

Me sente en el banco, y comencé a tocar. Al parecer esa parte de mi estaba intacta ya que toqué un par de piezas que recordaba a la perfección.

- Que bueno que no hayas olvidado eso.- dijo Bella mientras me observaba sentada en el sillón. - Siempre ame verte tocar. Te transformas en otra persona. -

- En otra persona?- pregunté- Y como sería eso?-

- No se como explicarlo. Cuando tocas es como si desapareciera todo a tu alrededor. Tu cara se relaja, y tienes un aspecto inocente. Encantador.- 

La miré sorprendido. No sabía que ella pensara eso. 

Me quede observandola durante un momento. Estaba sentada, con los pies sobre el sillón, mirándo sus manos. No me miraba como solía hacerlo. Algo en ella había cambiado. No se decir exáctamente que, pero desde que la vi luego del accidente, podría asegurar que algo es distinto. Si mis cálculos son correctos, debe ser algo de tres años que estamos juntos. Y sin embargo me parece tan poco. Cuando comencé a salir con ella, pensé que sería algo momentáneo. Era la mejor amiga de mi hermana, la hermana de mi mejor amigo. Muy complicado. De hecho la noche que la besé, luego de dejarla en su habitación, me arrepentí. No tenía intenciones de modificar mi situación romántica. Además ella me gustaba, pero no sentía que estuviese "enamorado". Luego de eso no la llamé ni la busqué. Seguimos así hasta que nos cruzamos en una clase en las que estaba como ayudante. Ella evitaba mirarme y yo durante un rato hice lo mismo, hasta que me dí cuenta que no podía evitar prestarle atención a todo lo que hacía. Me sentía estúpido. Era Bella Swan! Una chica corriente, algo bonita, pero nada más, sin embargo había algo en ella que era sumamente atractivo para mi. No podía entender que. Me di cuenta que algo en mi iba mal cuando me encontré parado en la puerta de su habitación buscando una excusa para verla. Cuando finalmente pensé que tenía una buena, la puerta se abrió y ella salió como una tromba sin ver que yo estaba allí y choco conmigo. Cuando me vio se quedo helada. Le iba a dar mi patetica excusa, algo sobre unos apuntes, cuando me dijo que estaba yendo a verme. No entendía el porque de mi actitud de ignorarla y que si me había arrepentido del beso, solo debía decirselo y no se cuantas cosas más, hasta que me cansé y la besé, primero para callarla y luego porque, sinceramente, llevaba días esperando hacerlo. Luego de eso, me di un "permiso" para estar con ella. Pero en mi fuero interno sabía que no iba a poder estar con ella mucho tiempo. No me gustaban las ataduras, y estar de novio con la hermana de mi mejor amigo, definitivamente era una. Y si a eso le sumabamos que mis padres la amaban, mi hermana la consideraba su hermana... Era prácticamente una sentencia de matrimonio. Pero me gustaba, y no pensaría en eso de momento. Solo disfrutaría un tiempo con ella y haría que ella la pasara bien, de eso no tenía dudas. 

No se exáctamente cuanto tiempo había pasado desde ese momento, pero hoy todo era distinto. 

De pronto, esa chica con la que estaría un tiempo, se convirtió en la mujer de mi vida. No se que parte de mi cabeza se había golpeado con exáctitud, pero hoy me sentía distinto que en ese momento. Estaba seguro que querría estar con ella para siempre y esta sensación de inseguridad que tenía con respecto a esto me estaba atormentando. 

De pronto clavo sus grandes ojos en mi.

- Que pasa?- preguntó poniéndose de pie y viniendo hacia mi.

Me pare y la abracé con fuerza.

- Te amo Isabella. Te amo como jamás pensé que podría hacerlo.- le dije con todo mi corazón.

- Edward... - comenzó, pero se corto- yo también te amo.- dijo mientras apoyaba su mejilla en mi pecho.- Y creo que nunca dejaré de hacerlo.- En su voz había pesar.

- Y eso te entristece?- le pregunté mientras me soltaba para mirarla.

Tomo mi rostro entre sus manos y acarició mi mejilla.- Por momentos.- dijo sonriendo.- Pero este no es uno de ellos.- y acercando mi rostro al suyo me beso.

Comenzó siendo un beso tierno, pero a medida que avanzaba, fue tomando una intensidad mayor. Sin dejar de besarla comencé a caminar por el departamento. Al lado del baño principal había una puerta que debía dar a mi habitación. Entramos en ella, aún besándonos, y caímos en la cama. Seguimos besándonos intensamente hasta que Bella abrió sus ojos y vio donde estabamos. Inmediatamente se puso de pie, dejandome tumbado en la cama solo.

- Lo siento Edward, pero no puedo. - Dijo saliendo y cerrando la puerta.

Me quede donde estaba, tratando de controlar mi respiración. Me puse de pie y sali a la sala.

Estaba sentada, con el rostro entre sus manos.

Me acerqué suavemente y, poniéndome de rodillas frente a ella, quite las manos de su rostro.

- Esta bien amor. No tienes que hacer nada que no quieras. Lo siento, me deje llevar por el momento.- 

Ella me miro y volví a sentir esa sensación extraña en el estómago.

- No tienes nada que disculparte, yo también me deje llevar.- sonrío- Siempre se me hizo difícil controlarme contigo.- Me guiño un ojo. 

- Sabes que a mi también- respondí mientras acariciaba su rostro.- Puedo hacerte una pregunta?-

- Si Edward.-

- Por qué te controlas? Digo... yo quiero estar contigo.- le dije dándole a enteder a lo que me refería.

- Porque no creo que sea bueno por el momento.- Por el momento? De que estaba hablando?

- Lo dices por el accidente? Ya estoy bien Bella. Recuerdas que el doctor dijo que físicamente estaba bien?- Ok. Sonaba ansioso, pero es que de verdad quería estar con ella así.

- Si, dijo que estabas bien, pero todavía estas convaleciente, no creo que sea conveniente.- 

- Pero yo me siento bien- dije haciendo puchero.

- Pero yo no. Al menos hasta que tu medico lo diga.- Me cortó.- Y quita esa cara, ya no me afecta Cullen.- dijo riendo.

Me reí y la besé. Quizás estaba exágerando con tanto cuidado, pero me gustaba que me cuidara. Significa que me ama. Aunque no tanto como yo a ella.

POV BELLA

No podía creer lo que casi había hecho. Casi me acuesto con Edward. Y en la cama donde estuvo con Irina. Tal vez el no lo recuerde, pero yo si. No podía dejar que eso volviera a ocurrir.

Le había dicho que lo amaba, que me dolía pero lo amaba. Eso había sido un gran esfuerzo para mi, pero luego de escucharlo decir que me amaba no podía no decirselo. Sobre todo cuando era verdad.

Luego del encuentro cercano del tipo estúpido, Edward decidió que, si bien no recordaba nada de ese lugar, quizás sería una buena idea mudarse. Logré convencerlo de aplazar un poco esa decisión, al menos hasta que le dieran el alta total.

Esa noche cenaríamos en su casa, por lo que luego ir al departamento, volvimos allí.

Cuando llegamos Esme estaba terminando de poner la mesa. 

- Hola chicos! Como les fue?- pregunto ansiosa.

- Pues... nada especial mamá- le dijo Edward mientras la saludaba. - Lo único que reconocí  fue el piano del abuelo.-

- Eso es algo cariño!- dijo Esme mientras lo acariciaba. 

- Como fue chicos?- preguntó Alice mientras entraba.- Mamá, acaba de llamar Jasper. Dijo que no podría venir a la cena ya que su hermana había llegado de sorpresa hace un rato. -

- Jasper no vendrá? Que pena, quería presentarselo a Emmett- se apenó Edward.

- Ay hermanito! Parece que no me conocieras. Solo quería avisarle a mamá que debe poner un plato extra ya que Jasper vendrá con su hermana, Rosalie.- y la sonrisa de Alice se ensancho.- No subestimes mi poder!- Era de temer. 

Estos últimos días la actitud de Alice para con Jasper había cambiado. Se mostraba más agradable, sacaba tema de conversación y hasta se sonrojaba con algunas de las cosas que le decía. Era cuestión de tiempo para que caiga. 

A la media hora llego Emmett.

- Buenas noches familia- saludo una vez que Alice le abrió la puerta. - Esme! Que gusto verte!- dijo abrazandola fuertemente.

- Emmett cariño! Que feliz me hace tenerte aquí!- respondió una Esme muy feliz.

- Hey hermano!- dijo Edward mientras se acercaba para abrazarlo- Tenía ganas de verte!-

- Que tal Ed- saludó Emmett lo más agradablemente posible- lo mismo digo.- dijo y me miró. 

"Gracias" dije sin hablar.

- Hola pequeña- me saludo- no tienes idea de lo que me cuesta esto- susurró a mi oído.

- Creo tener una pequeña noción- susurré en el suyo.

Nos sentamos en la sala mientras esperabamos a que Carlisle llegará del hospital y a Jasper con su hermana. 

- Sabias que Rosalie es medio hermana de Jasper?- preguntó Alice.

- La verdad que no Ali- río Edward

- Jasper me contó que sus padres se separaron cuando el tenía dos años y que su madre se casó dos años después con el padre de Rosalie. Ella es un año menor que nosotras Bells.- Ahora sabía vida y obra del pobre muchacho.

Durante la charla, Edward no soltó mi mano. Por momentos depositaba pequeños besos en ella, mientras Emmett nos miraba intentando no enojarse.

A los quince minutos llego Carlisle y quince minutos después Jasper con su hermana.

- Hola a todos!- saludo Jazz. 

Detrás de el se encontraba una chica alta, estilizada, rubia y con ojos claros, al igual que Jasper. Era muy bella.

- Ella es mi hermana Rosalie.- presentó.

- Hola Rosalie- la salude mientras me acercaba a ella- soy Bella un placer conocerte!- 

- Hola Bella! Lo mismo digo! Pero diganme Rose por favor.- sonrío. No pude evitar mirar a Edward para ver como la veía. El la miraba normalmente, sin ninguna intención, al menos eso me pareció- Cuando se acerco a saludarla no soltó mi mano.

- Hola Rose, soy Edward, no te conocía verdad?- preguntó riendo.

- Hola Edward, no, no nos conocíamos. Jazz me conto lo que te sucedió, realmente lo lamento.- 

- Podría haber sido peor- río el.- Jasper, el es Emmett, mi mejor amigo- dijo mientras invitaba a mi hermano a acercarse.

-Finalmente te conozco Emmett! - saludó Jasper- Edward me ha hablado mucho de ti.-

- Quisiera decirte lo mismo- dijo mi hermano tratando de sonar agradable- un gusto Jasper.- saludó para a continuación girar hacia Rosalie, a la cual no había visto aún.

- Ho- hola- tartamudeo cuando la vio. Tartamudeo? Mi hermano? Ok, no entendía.

- Que tal Emmett?- saludo Rosalie coquetamente.

- Ahora... excelente.- dijo Emm mientras tomaba su mano y dejaba un suave beso en ella.

Esta iba a ser una cena muy interesante...