El gran día

Había soñado miles de noches con este momento, y al fin había llegado, estaba sentada en el tocador de mi habitación mirándome al espejo, Rose y Esme me ayudaban con el peinado, mi pequeña Elizabeth, parecía estar feliz, ya que se movía en mi vientre como si estuviera dando pequeños brinquitos.  Faltaban solo unos cuantos días para poder verla, para poder conocer su rostro, para tenerla entre mis brazos, Edwrad y yo contábamos las horas para tenerla entre nosotros y hacíamos apuestas a modo de juego, sobre si se parecería a el o a mi.

Después de unos cuantos minutos, que a mi me parecieron horas Rose y mi futura suegra sonrieron felices al terminar de arreglar mi cabello.

- listo!! Eres una reina!- exclamo Rose.

- es cierto te ves bellísima, hija- confirmo Esme

- obviamente, me ayudaron las mejores- les dije sonriendo.

- te daremos unos minutos, pero no muchos Jasper subirá por ti en cualquier momento- dijo Rose cruzando el umbral de mi habitación, Esme se despidió con un abrazo, y luego me dijo que me esperaría en el altar junto a Edward.

Me puse de pie y camine hasta el espejo donde podía verme de cuerpo entero, mi vestido lo había diseñado Alice, la novia de Jasper, era una imitación del vestido de Julieta (Romeo y Julieta) en tonos tierra muy hermoso, mi cabello estaba semi recogido y caían sobre mis hombros montones de rizos perfectamente acomodados, el maquillaje obviamente era muy sutil, ya que a mi nunca me gusto ver mi rostro pintado como un cuadro, en los mismos tonos de mi vestido, mi ramo consistía en unas cuantas florcitas blancas, que daban el aspecto de estar recién arrancadas del jardín, muy sencillo, así era yo, me mire varias veces y realmente me sentía linda, obviando el detalle de que me sentía un globo a punto de explotar. Respire profundo tratando de controlar mis nervios y me acerque a la puerta, justo en el momento en el tome la perilla para abrirla, un suave golpecito me advertía que alguien quería verme.

- estas lista amiguita?- pregunto Jas tendiéndome su mano.

- si, listisima- le dije volviendo a suspirar, Jasper mi mejor amigo desde hacia muchísimos años había viajado desde Alaska donde cursaba la universidad con Alice ,el seria quien me entregara en el altar.

- mi sobrinita como esta hoy?- preguntó poniendo su mano sobre mi abultado vientre

- al parecer muy feliz, no ha dejado de moverse desde que desperté- le conteste mientras salíamos de la casa hasta el auto, para ir a la pequeña iglesia de Forks donde se llevaría a cabo la ceremonia y luego Rose, mi madre y Esme habían arreglado el jardín trasero de mi casa para llevar a cabo la fiesta allí.

Nos encontrábamos de pie, frente a la gran puerta de madera de la iglesia esperando que sonara la música que indicaba nuestra entrada,

- estas nerviosa?- pregunto Jas acariciando una de mis manos

- si, mucho-

- pero relájate, disfruta el momento, los has soñado desde siempre-

- lo se, es por eso, se que voy a llorar de la emoción y no quiero que se arruine mi maquillaje, quiero que Edward me vea bonita-

- si es por eso quedate tranquila, estas hermosa Bells-

- mientes, parezco un globo-

- no exageres te ves de veras muy hermosa-

Cuando iba a responderle comenzó a sonar la música, y las grandes puerta se abrieron ante mi.

Camine los miles de pasos hasta el encuentro con el hombre de mi vida, todos mi seres queridos estaba allí, Jake con Nessi, Rose y Emmet, mi madre, Carlise, Esme, el padre de Jake, muchos conocidos, pero todos se convirtieron en solo sombras en cuanto la mirada de mi amor se conecto con la mía, no aparte mis ojos de los de el en todo el trayecto que nos separo, hasta que al fin estuve a su lado,

- estas hermosa- me susurro al oído, nos dimos un tierno beso, y nos paramos de frente al sacerdote, en el transcurso de la ceremonia,

 en mi mente miles de imágenes se arremolinaban, Edward y yo de niños besándonos escondidos en el armario, Edward y yo con apenas diez años, tomados de la mano diciéndole a nuestros padres que queríamos casarnos, la gloria de nuestro primer beso real, la felicidad del día que le dije que seriamos padres, ya no quedaban recuerdos tristes, solo los momentos lindos, como Ed me dijo una vez, los que realmente valían la pena atesorar, era feliz y podía ver en los ojos de Edward que el también lo era.

- Edward Cullen,
prometo amarte...
con un amor que no falle o se desvanezca ante la adversidad.
con un amor que esté comprometido a crecer y llevar fruto.
con un amor que sea lento para la queja y pronto para la alabanza.
con un amor que construya puentes de reconciliación.
con un amor dispuesto a aceptar tus silencios, a animarte cuando no tengas ganas y a impulsarte en tus sueños.
con un amor que escuche a tu corazón y lo comprenda...
Prometo amarte con un amor que encuentre siempre la manera de decirte cada día:
" Que eres lo mas importante de mi vida "
te entrego este anillo como símbolo de mi compromiso, y mi amor eterno-

- Isabella swan,

prometo amarte...
con un amor que nos ayude a superar tiempos de prueba y dificultad.
con un amor que te inunde de confianza.
con un amor paciente, tolerante y comprensivo.
con un amor dispuesto a llenarte de alegría y felicidad, tanto como de ánimo y sostén.
con un amor que sepa secar tus lágrimas y te proteja en un abrazo...
Prometo amarte con un amor que busque siempre la manera de decirte cada día:
" Que eres lo mas importante de mi vida "
te entrego este anillo como símbolo de mi compromiso y amor eterno- las lagrimas no se hicieron esperar y luego de escuchar nuestros votos comenzaron a caer.

- los declaro marido y mujer, señor Cullen puede besar a su esposa- dijo el sacerdote.

*******************************************************************************************

Edward POV

La fiesta estaba llegando a su fin, sin lugar a dudas este día estaba entre los mejores de mi vida, ya era tarde, muchos de los invitados ya se habían marchado, yo bebía una copa con Em y Rose, mi hermosa esposa y mi pequeña Ellizabeth, bailaban con Jacob, ya no me molestaba podía ver en los ojos de el, el gran amor que sentía por Nessi, le debía mucho, para ser sincero le debía la vida,  porque Bella era mi vida.

Cuando termino la canción que mi ángel estaba bailando con Jake, este se fue en busca de Nessi y ella se acerco hasta donde estábamos nosotros, se veía tan hermosa que no me cansaba de mirarla, sus ojos sonreían igual que su rostro, pero al llegar junto a mi su gesto cambio, parecía asustada.

- Bells estas bien?- le dije algo preocupado

- lo siento se que no es un buen momento pero creo que,  Elizabeth, ya quiere conocernos- dijo sentándose a mi lado

- de que estas hablando amor?-

- si Ed ve por Carlise, creo que la pequeña quiere felicitar a sus padres el día de su boda- respondió con cara de susto y dolor, era increíble verla en esa situación, parecía muy dolorida y aun así tenia ganas de hacer bromas, la bese en la frente y fui en busca de mi padre. Cuando volví con el, mi ángel estaba rodeada de los pocos invitados que quedaban, Rose y mi madre estaban sentadas junto a ella, y Renne llegaba casi con nosotros con un enorme bolso,

- dense prisa, mi nievecita no tarda en nacer- dijo mi padre ansioso, era muy gratificante ver lo feliz que estaba el con la llegada de mi pequeña Elizabeth,

- Jas puedes quedarte con los invitados?- le pregunte

- no hay ningún problema, solo prométeme que me mantendrás al tanto de todo- respondió agitando su móvil.

- lo haré- tome a mi ángel en brazos y fuimos hasta el auto.

Llegamos al hospital en tan solo diez minutos, mi Bella, parecía estar sufriendo, pero no lo demostraba, seguía haciendo bromas y sonriendo, estaba orgulloso de ella, hacia unos pocos minutos Bella había ingresado a la sala de partos junto a mi padre, estaba ansioso y nervioso, caminaba de un lado a otro detrás de la puerta que me separaba de mis dos amores, Rosalie, mi madre y Renne se encontraban sentadas a pocos metros de donde yo estaba hecho un manojo de nervios, pocos minutos después escuche un sonido que me hizo estremecer y llorar como un niño, frene en seco mis pasos frenéticos y una sensación de paz y alegría inundaron mi alma, el llanto de mi Elizabeth, podía escucharse desde donde yo estaba, su llanto era la melodía mas dulce que jamás hubieran escuchados mis oídos, me invadió un enorme deseo de tenerla en mis brazos, me escabullí por la puerta y me encontré con la imagen mas tierna que jamás vi en mi vida, Bella, mi ángel, llorando de felicidad con mi pequeña Elizabeth en brazos, me acerque a ellas ignorando las advertencias de las enfermeras, que me decían que no podía estar ahí, mi niña había dejado de llorar y tenia sus pequeños y hermosos ojos abiertos y miraba a su mama que le hablaba muy suavemente, cuando estaba lo suficientemente cerca estire mi mano y acaricie una de las mejillas de Bella,

- como te sientes?- le pregunte sin poder apartar mis ojos de ambas.

- muy feliz- respondió sincera- Elizabeth saluda a tu papi- se dirigió a la niña, y esta como si hubiese entendido lo que Bella le decía me miro. Era abrumadoramente bella, blanca como una nube, tenía el cabello dorado y unos enormes ojos color chocolate, estaba completamente fascinado con aquella niñita, estire mis brazos y Bella deposito a mi hija en ellos, en ese momento sentí que mi corazón se hacia mas grande, para poder albergar el inmenso amor que sentía por estas dos mujeres.

- gracias- le dije a Bella, esta me miro sin entender a que me refería.

- gracias por ti, por amarme, por ser mi esposa, por hacerme feliz, y por hacerme la persona mas afortunada del planeta dándome la bendición de ser padre, te amo… las amo-

- y yo a ustedes- dijo mi ángel.

Volví a dejar a Elizabeth en los brazos de Bella, la bese en los labios y me encamine hacia la sala de espera donde todos aguardaban noticias, sentía como si mis amores y yo fuéramos dos grandes imanes atrayéndonos, me costaba mucho alejarme de ellas, pero debía salir, tenia que contarles a todos lo hermosa que era mi hija.

Hola!! Espero que les guste el cap, al final me decidí y haré uno mas, pero ese si será el ultimo, espero sus comentarios, Gracias por leerme, y les vuelvo a pedir disculpas por el tiempo que tarde en actualizar.

Las kiero y ya saben cualquier cosa solo me avisan!!! besos