ENTRE EL ODIO Y EL AMOR

Autor: Yusale
Género: Romance
Fecha Creación: 23/05/2013
Fecha Actualización: 17/01/2014
Finalizado: SI
Votos: 27
Comentarios: 147
Visitas: 101023
Capítulos: 28

Por salvar la empresa de sus padres, a Bella no le queda otro remedio que casarse con el hombre que le quitó la virginidad y su primer amor, pero también el que le produjo su primera descilusión amorosa, Edward Cullen.

 

UN EMBARAZO DOS AMORES (TERMINADA)

http://lunanuevameyer.com/sala-cullen?id_relato=3392

 

NO TE BUSCABA PERO TE ENCONTRÉ (TERMINADA)

http://www.lunanuevameyer.com/sala-cullen?id_relato=3933

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 23: ACLARANDO LAS COSAS

Hola chicas regresé, jajaja, gracias a todas por sus comentarios, y me alegra saber que el capítulo anterior les gustó mucho, ya me dejo de tanta chachara y aquí tienen el nuevo capítulo.

__________________________________________________________________________________

CAPÍTULO 23: ACLARANDO LAS COSAS

 

Bella se despertó pero seguía con los ojos cerrados, en el cuarto todo estaba en silencio, pero a su lado la cama tenía un peso, recordó poco a poco todo lo que había pasado hace minutos o horas no sabía, la visita de Esme y de Tanya, las cosas que le dijeron, no tenía cabello, estaba flaca, demacrada, no podía darle a Edward un hijo, no sería mala idea pedirle el divorcio para que él fuera feliz con otra mujer, pero demonios, era egoísta y lo necesitaba a su lado, él era su pilar en este momento, y recordó de nuevo esa frase con la que se durmió “…quiero mi matrimonio junto a la mujer que amo, y esa mujer es Isabella Marie Swan…”

¿Sería cierto o sólo lo dijo para que ellas la dejaron en paz?, debía preguntárselo para así salir de la duda.

Abrió los ojos y vio las piernas de Edward.

-Buenas tardes dormilona- saluda Edward con una sonrisa.

Él había sentido su cambio en la respiración, por lo que supo que llevaba unos minutos despierta, había dormido seis horas, para los enfermos con cáncer es importante dormir, por eso no la despertó a la hora de comer.

-Hola, ¿qué hora es?

-Son las siete de la noche.

-¿Has estado aquí todo ese tiempo?

-Casi, sólo salí para almorzar, además este libro es interesante- dijo mientras le mostraba el título, PIDEME LO QUE QUIERAS- parece ser una trilogía, me da varias ideas para un futuro- movió las cejas de arriba para abajo y con una sonrisa.

Bella se rio un poco, ese era un libro que ella había terminado de leer hace poco e iba por la segunda parte, aunque practicar varias cosas de ahí le parecía interesante.

-¿Cómo te sientes?- preguntó Edward.

-Mejor.

-Bien, voy a decirla a Emily que te suba la comida.

-No tengo hambre- dijo Bella haciendo un puchero.

-Sin pucheros señora, debes comer.

Mientras Edward bajaba y le traían la comida, Bella iba al baño y hacía de sus necesidades fisiológicas, se lavó la cara y fue a la cama de nuevo.

A los pocos minutos entró Edward con una bandeja, Bella hiso el intento de comer lo más posible, pero se le hacía difícil cuando ya no podía saborearla, todo le sabía a metal, por lo que dejó un poco menos de la mitad de la comida, y eso es bastante ya que le daban porciones pequeñas.

-No quiero más- dijo apartándola.

-Está bien- dijo Edward mientras le quitaba la bandeja de encima de las piernas.

Era ahora o nunca, Bella se armó de valor.

-Edward, ¿te puedo hacer una pregunta?

-Si claro.

-Lo que le dijiste a Esme y Tanya sobre que yo soy la mujer que amas, ¿era cierto o sólo lo dijiste para callarlas?- dijo Bella bajando la cara y poniéndose roja.

Edward la miró unos segundos, y se dijo que ya era momento de aclarar todas las cosas.

-Es cierto Bella- dijo mientras le subía la cara-yo te amo, nunca he dejado de hacerlo.

-Pero…- comenzó a decir, pero no supo como continuar.

-Creo que ya debemos hablar, ¿por dónde comienzo?- dijo mientras se alborotaba el cabello.

Bella se sorprendió, la amaba, él dijo que nunca dejó de amarla, y estaba nervioso, no lo veía así desde hace muchos años, cuando le dijo que la quería y le pidió que fuera su novia, ese recuerdo hermoso le sacó una sonrisa sincera de sus labios.

-Quizás sería mejor por el principio- dijo Bella con una sonrisa para darle ánimo- o mejor, aclárame algo.

-¿Si?

-¿Porque de un día para otro comenzaste a odiar a Jake?

-Pues fíjate, ese aunque no lo creas es el principio, responde tú a mí una pregunta antes, ¿cuántas veces te has besado con Jacob?- esa pregunta no le agradaba, pero ese era el principio de todo.

-Una sola vez- contestó Bella, ella no entendía que tenía que ver eso.

-Esa sola vez que se besaron, yo los vi, yo iba a buscarlos y cuando llego a la piscina vi cómo se besaban, al ver que se separaban me fui e hice que no vi nada, tú ya me gustabas en ese momento, y me dio mucha rabia ver eso, al pasar los días no los veía diferentes, por lo que pensé que eran novios a escondidas o tú no sentías nada por él, le pregunté a Seth sino sabía de alguien que te gustara y me dijo que no, por lo que pensé bueno si son novios a escondidas se supone que no se nada, así que comencé a conquistarte, y cuando me dijiste que si querías ser mi novia, pensé que el que sentía algo por ti era Jacob y por eso fue que comencé a ignorarlo, porque siempre estaba contigo, y creí que quería conquistarte.

-Pero es que nos besamos porque creímos que sentíamos algo más por el otro, pero nos dimos cuenta que sólo nos veíamos como hermanos.

-Eso lo supe hace poco.

-¿Cómo?

-Si, un día llegó Jake a mi oficina, me dijo que tú necesitabas de todos nosotros, y que por tu bien será mejor que aclaráramos nuestras diferencias,  e intentáramos llevarnos bien, así que le comente lo que ocurrió y él me dijo lo mismo que tú, y que suponía que era por eso, ya que le pareció ese día ver una cabellera cobriza, pero no estaba seguro.

-Ok- fue lo único que pudo decir Bella.

-Bella el tiempo que fuimos novios fue el mejor de mi vida, sólo tuve dos novias en toda mi vida, tú fuiste la última, pero fue suficiente, la mejor, déjame continuar por favor- dijo Edward al ver que ella lo iba a interrumpir-  desde que éramos unos niños decías que querías estudiar en la Universidad de Versalles Saint Quentin en Yveles, y por eso comenzaste a estudiar francés, y luego español  e italiano, por si llegabas a visitar los países vecinos, y yo quería ir a Harvard en Boston, aquí en Estados Unidos.

-Recuerdo el día que ambos enviamos las solicitudes a esas universidades, estaba tan feliz de que estuviéramos a un paso de nuestros sueños- dijo Bella con una sonrisa en los labios recordando ese momento.

-Si, al poco tiempo me llegó la respuesta de Harvard diciendo que me aceptaban, y me sorprendió tanto no alegrarme por completo de ello, no entendía porque no me alegraba, esa noche estaba pensando en ti como siempre, te lo iba a contar, y entonces estuve pensando en nosotros, tú y yo juntos, de pronto nos imaginé casados, con dos hijos iguales a ti, en una casa grande con un jardín inmenso donde pudieras sentarte en cualquier parte de él y leer tus novelas, luego recordé mi aceptación a la universidad, y entendí porque no me alegraba, y simplemente por el hecho de que nos íbamos a separar, tú irías a Francia y yo me quedaría aquí, estaríamos separados, y pensé en declinar a Harvard y enviar una solicitud a la misma universidad que tú.

-Eso me asustó mucho Bella, Harvard siempre fue mi sueño, ¿cómo era posible que después de haberlo conseguido iba a tirarlo por la borda por ir detrás de ti?, eso me aterró, no supe como manejar ese miedo, ese amor que sentía por ti, esa sensación de no estar a tu lado, de que te fueras a Paris y conocieras a alguien más y me llamaras una noche para terminar porque ya no me amabas, esa noche dormí, no podía, por mi cabeza pasó de todo, y mi solución a ese problema fue la más fácil, la más cobarde también, y poco a poco comencé a salir con otras muchachas mientras tú y yo seguíamos juntos.

-Pero Edward, ¿por qué no me lo dijiste?, lo hubiéramos hablado y conseguido una solución entre ambos, a mi también me preocupaba eso.

-Lo se, fui un idiota, era un adolescente que no supo como manejar la situación, tú lo sospechabas ¿cierto?

-Si, tú cambiaste y eso hiso que sospechara que algo no iba bien, ¿y ese día?, el día que los vi.

-Inconscientemente quise que  me descubrieras, yo no podía terminar contigo, pero si tú me veías lo harías,  y cuando me vistes, la mezcla de esos sentimientos que se reflejaban en tus ojos, no pude con ellos, el odio que vi en ellos, eso me destrozó y supe que había metido la pata por completo, te esperé la semana siguiente, quise hablar contigo, y vi que no venías al instituto, te llamé pero obvio, no me atendías, te llamaba a tu casa y no pasabas al teléfono, le preguntaba a Seth y estaba furioso conmigo por haberte lastimado, así que tampoco me decía nada de ti, cuando decidió darme una razón tuya, lo que me dijo fue que te habían aceptado en la universidad, con beca y todo, y te fuiste, no ibas a asistir a la entrega de diplomas ni al baile.

-Te iba a dar la noticia esa noche, a decirte que me habían aceptado y me ofrecieron una beca por mis notas, te iba a preguntar como ibamos hacer para que la relación funcionara de lejos, pero cuando te vi, me dolió tanto confirmar tu traición, pasé toda la noche llorando, al levantarme le dije a mis papas para irme lo mas pronto posible para Paris, no estuvieron de acuerdo pero los logré convencer y al hablar con la directora como mis notas eran excelentes me quiso convencer porque yo era la que iba a dar el discurso, pero luego de ver que yo estaba decidida no tuvo problemas y me dieron mi diploma y todo lo necesario por oficina. Quise poner distancia entre nosotros.

-Cuando te volví a ver ya habían pasado tres años, te veías mas hermosa que nunca, estabas echa una mujer sexi, experimentada, madura, inteligente, me iba acercar para hablar contigo pero Jacob me lo impidió, no quise pelear con él en el club de Jasper así que decidí irme, total, lo mas probable es que te viera ese fin de semana en el cumpleaños de Seth, y así fue, pero noté que me estabas huyendo y cuando te tuve cerca tenías la misma mirada de odio en tus hermosos ojos achocolatados y me di cuenta que no me habías perdonado y quizás nunca lo harías.

-Luego ocurrió lo de Renee, en el velorio te veías tan indefensa, me acerqué a ti y te di el pésame, noté que estabas en automático, y que no sabías que era yo, en ningún momento te vi llorar, creí que lo ibas hacer cuando la enterraron, pero ni en ese momento, no se si lo hiciste en algún momento pero yo no te vi

-Es cierto, no recuerdo mucho de ese día, no podía llorar, no porque no quisiera, sino porque las lágrimas no me salían, lloraba sola en mi cuarto, pero si alguien llegaba en ese momento mis lágrimas dejaban de salir, sentía que debía ser yo la fuerte de mi familia y si alguien me veía llorar no estaba siendo lo suficientemente fuerte para ellos, durante el velorio y el entierro sólo estaba pendiente que mi papá y mis hermanos estuvieran bien- dijo Bella con lágrimas en los ojos recordando ese momento, y era cierto ella no recordaba haber visto a Edward, no sabía quiénes habían ido y quienes la habían abrazado, sólo recordaba a Charlie sentado a un lado de la urna, a Leah y Seth llorando, a Sue de un lado para otro, a ella obligándolos a todos a comer, y a Jacob detrás de ella sin dejarla sola un minuto.

-Y Jacob que tú estuvieras bien, he de admitir que esos días lo odié y envidié con todas mis fuerzas, yo quería ser el que estuviera ahí para ti, que ser el apoyo que necesitas, pero admito que fue mi culpa no ser yo y que fuera él.

-¿Por qué te volviste un mujeriego Edward?, ¿por qué no tuviste otra pareja?- esa era una pregunta que a ella le intrigaba.

-Te sonará ridículo, pero porque ninguna eras tú, así que preferí estar con diferentes mujeres, que estar con una todos los días sabiendo que ella no eras tú.- contestó sinceramente.- Cuando supe que te habías ido con Jake a Italia, quise coger el primer avión y secuestrarte, pero fue Seth el que me detuvo, nos reunió a todos en la sala de conferencias y nos dijo su idea para poder salvar más rápido las empresas, nos expuso todos los puntos, y aclaró que ninguno de los dos estábamos obligados a aceptar.

Flashback

-Ninguno de los dos está obligado a aceptar esta idea- dice Seth.

El silencio inundó la sala de conferencias, tanto Charlie como Carlisle estaban callados, meditando lo que acababa de decir Seth, un matrimonio por conveniencia, serían tan egoístas como para poder hacerle eso a sus hijos, Carlisle sabía que su hijo aún quería a Bella y quizás eso lo ayudase a sentar cabeza, Charlie por su parte no quería que su hija se casara sin amor, apenas si le había hablado en todos estos años después de que terminaron, sin mencionar la mirada de oído que tenía para él.

Edward estaba pensando, casarse con Bella, casarse con la mujer que nunca ha dejado de amar,  casarse con la mujer que lo odia, casarse, no tuvo que pensarlo mucho, él aceptaría y le demostraría a Bella que la amaba y le pediría perdón por su idiotez.

-¿Esa es la solución más rápida para salvar ambas empresas a la vez?- preguntó Charlie.

-Si papá, Edward sino quieres lo puedes decir, e incluso si quieres pensar la respuesta- dijo Seth viéndolo.

-Si es la manera más rápida lo hago, no tengo problemas por ello- respondió Edward con su voz segura y tranquila, mientras que por dentro se sintió ese adolescente de 18 años de edad de nuevo.-¿Quién se lo dirá a Bella?

-Yo, es mi idea y si va a matar a alguien que sea a mí- bromeó  Seth intentando relajar el ambiente, cosa que sabía no iba a ocurrir.

Una vez hubo terminado la junta Seth le pidió a Edward que lo acompañara a su oficina.

-Dime- habló Edward una vez se sentó en una silla y su amigo se queda viendo el paisaje.

-Bella adora esta vista a pesar de temerle a las alturas- prensó en voz alta Seth.-Edward tú y yo somos mejores amigos desde que tengo uso de razón, te conozco muy bien y sé que aún amas a mi hermana.

Edward no pudo dejar de sorprenderse por tal afirmación, ya que pensaba que lo ocultaba muy bien.

-Ya vez que te conozco- prosiguió Seth al ver la reacción del cobrizo- sé que eres un mujeriego, pero te voy a pedir que una vez casado con mi hermana dejes esa vida de mujeriego y la respetes como la mujer que es y la esposa que será, siempre y cuando ella acepte claro.

-Claro Seth, la voy a respetar y si ella acepta la idea, pues dejaré de estar con otras mujeres.

-Otra cosa, deja que disfrutes de estas vacaciones que Jake  le obligó a tomar, se las merece, las necesita y no vayas a buscarla a Italia.

Edward abrió los ojos como platos por la sorpresa de nuevo.

-Por algo soy tu mejor amigo- dijo Seth con una sonrisa en los labios y la ceja izquierda levantada.

Fin flashback

 

-¿Estabas tan seguro que aceptaría?

-En realidad no mucho, sé que te sacrificarías por proteger a tu familia, y si esa era la solución más rápida estaba seguro que lo harías, aunque cabía la posibilidad de que me odiaras más de lo que yo pensaba y dijeras que no. Bella desde que Seth nos comunicó su idea, yo no he vuelto a estar con otra mujer, porque no quería volver a meter la pata contigo. Se que cometí muchos errores, pero nunca dejé de amarte, cuando aceptaste yo brincaba de la emoción.

-Por dentro será porque no lo demostraste- comentó Bella en son de burla.

-No podía manifestarlo, porque sabía que no confiabas en mi, esta casa la compré hace dos años y fue pensando en ti, en que un día fueras la dueña y señora de esto, cuando llegaste a la casa como mi esposa fui dichoso, yo quería demostrarte con acciones que estaba arrepentido, por eso nunca llegaba tarde, te comencé a llamar de apoco y cuando fuiste mi mujer otra vez y no pusiste ninguna traba para ello Dios eso fue un éxtasis.

-Pensé en que al menos disfrutaría del sexo, y quizás si lo que tenías aquí te gustaba no lo buscabas por fuera, no sabes como me martirizaba pensar que podías estar con otras mujeres mientras yo era tu esposa, no quería pensar en eso, pero a veces no podía evitarlo.

-Cariño por favor perdóname, por el daño que te hice, por habernos separado, yo te amo, eso no ha cambiado,  y no cambiará, cuando te lo pensé decir, te dijeron lo del cáncer, y creí que si te lo decía en ese momento pensarías que era por lástima y no por sentirlo, pero Bella, aquí en mi corazón tú eres la única que manda, ¿tú sientes lo mismo, o debo seguir luchando para conseguirlo?- dijo Edward mientras sostenía la mano de Bella en su pecho del lado del corazón.

-Edward no sabes como te odié, durante muchos años te odié, y sabes estando en París dos veces me pidieron matrimonio.

Esa noticia a Edward lo dejó sorprendido, por supuesto él estaba seguro que Pierre había sido uno de esos, pero ¿por qué no aceptó?

-Uno fue mi primer novio en Paris y el segundo fue Pierre, pero cuando dije que no a ambas veces, puse excusas de porque no estaba lista aún para ese paso y no se que otras excusas más, pero la realidad es que a pesar de todo yo te seguía amando, no tienes que seguir luchando  para conseguir algo que nunca dejó de ser tuyo Edward Cullen, yo te amo y mi corazón también te pertenece.

Apenas Bella terminó de decirle eso  Edward atacó sus labios, el saber que ella le seguía amando le hiso el hombre más feliz del universo, ambos se sentían en las nubes, el haberse sincerado y el conocimiento de lo que realmente sentía el otro era realmente satisfactorio.

-Edward, pero yo no puedo darte un hijo- dijo Bella al caer en cuenta de eso y bajar de la nube en la que se encontraba.

-Eso no me importa, lo que me importa es que le ganes al cáncer cariño, podemos adoptar todos los hijos que quieras, pero eso si, tienes terminantemente prohibido morirte antes que yo.

__________________________________________________________________________________

Al fin se supo porque Edward le fue infiel a Bella, y se dijeron todas las verdades que necesitaban para que fueranfelices, espero que les haya gustado mucho el capítulo, lo que es este capítulo y el anterior son los que mas me gustó escribir, espero que a ustedes les guste tanto como a mi escribirlo.

Gracias a todas por sus comentarios, sus votos, e incluso por sólo pasarse a leerme, les quiero informar que esta historia está por terminar, no se cuantos pero a lo mucho seran tres capítulos más, y de nuevo quiero agradecerles la recepción que a tenido esta historia así como las otras.

Chaito y cuidense.

Capítulo 22: SACANDO A LAS VÍBORAS Capítulo 24: FIESTA NAVIDEÑA

 
14441103 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10758 usuarios