—Bueno, espero que Alice les haya contado cuanto sucedió en Volterra  - dijo Bella seguido de una pausa.

—Todo —contesto Alice aun con su sonrisa tradicional. 

--- ¿Y lo que está a punto de ocurrir? – pregunto de nuevo.

—Eso también.

Alice asintió.

—Perfecto; entonces, estamos todos al corriente. – volvió a quedarse en silencio.

--- No estés molesto Edward – pensó Emmett – Tu novia es muy inteligente… bueno de vez en cuando… bueno si, si lo es… tranquilo hermano, todo estará bien.

—Bueno, tengo un problema —continuo después de un tiempo—. Alice prometió a los Vulturis que me convertiría en uno de ustedes. Van a enviar a alguien a comprobarlo y estoy segura de que eso es malo, algo que debemos evitar… Ahora, esto nos afecta a todos. No voy a imponerme por la fuerza si no me aceptan, con independencia de que Alice esté o no dispuesta a convertirme.

Esme trato de hablar, pero Bella alzo un dedo para detenerla.

—Déjenme terminar, por favor. – me miro y después siguió. Esme estaba de acuerdo en que Bella fuera un vampiro. Genial, pensé.- Todos ustedes saben lo que quiero y estoy segura de que también conocen la opinión de Edward al respecto.

 --- Claro que si – pensó Emmett. Con tono burlesco.

--- Creo que la única forma justa de decidir esto es que todo el mundo vote. – continuo Bella-  Si deciden no aceptarme, bueno, en tal caso, supongo que tendré que volver sola a Italia. No puedo permitir que vengan aquí.

Solté la mano de Bella y un gruñido escapo de mi pecho. ¿Estaba hablando en serio? ¿Qué demonios estaba pasando con la gente o vampiros en tal caso, en los últimos días? ¡Su vida no estaba en votación!

—Así pues, tengan en cuenta que en modo alguno les voy a poner en peligro. – ¿Bella trataba de advertir a unos vampiros de otros vampiros?- Quiero que voten sí o no sólo al asunto de convertirme en vampira.

Antes de que Carlisle hablara como Bella se lo pidió logre hablar.

—Un momento. – Volví a tomar la mano de bella. —Tengo algo que añadir antes de que votemos…No creo que debamos ponernos demasiado nerviosos por el peligro al que se refiere Bella. – Sonreí al obtener la atención de toda mi familia, apoye mi mano libre sobre la mesa para inclinarme un poco hacia adelante.

—Verán, había más de una razón por la que no quería estrechar la mano de Aro al final del todo. Se les pasó una cosa por alto y no quería ponerles sobre la pista.

Sonreí de nuevo al escuchar preguntas en la cabeza de todos.

--- ¿Y qué es? —insistió Alice.

--- Los Vulturis están demasiado seguros de sí mismos, y por un buen motivo. En realidad, no tienen ningún problema para encontrar a alguien cuando así lo deciden —Mire a Bella—. ¿Te acuerdas de Demetri? -La pregunta iba para todos pero no deje de mirar a Bella. -Encuentra a la gente – continué- ése es su talento, la razón por la que le mantienen a su lado. Ahora bien, estuve hurgando en sus mentes para obtener la máxima información posible todo el tiempo que estuvimos con ellos. Buscaba algo, cualquier cosa que pudiera salvarnos. Así fue cómo me enteré de la forma en que funciona el don de Demetri. – Emmett puso más atención a lo que decía al igual que Alice y Carlisle - Es un rastreador, un rastreador mil veces más dotado que James. Su habilidad guarda una cierta relación con lo que Aro o yo hacemos. Capta el... gusto... No sé cómo describirlo... La clave, la esencia de la mente de una persona y entonces la sigue. Funciona incluso a enormes distancias. Pero después de los pequeños experimentos de Aro…

--- Crees que no va a ser capaz de localizarme —concluyo Bella a mi lado.

--- ¡Estupendo! – pensó Esme.

--- Estoy convencido. El confía ciegamente en ese don. Si eso no funciona contigo - dije mirándola a los ojos - en lo que a ti respecta, se han quedado ciegos.

--- ¿Y qué resuelve eso? – inquirió alzando sus cejas.

—Casi todo, obviamente. Alice será capaz de revelarnos cuando planean hacernos una visita. Te esconderemos. Quedarán impotentes —dije alegre—. Será como buscar una aguja en un pajar.

--- ¡Genial! Wow… no sabía eso, será divertido, burlar a los mismos Vulturis, genial, por fin un poco de aventura. – pensó Emmett, también emocionado. Lo mire sonriente.

—Te pueden encontrar a ti —dijo Bella.

--- Te imaginas… será genial, una pelea sencilla y se dan por vencidos. Genial.

Emmett se rió, extendió el brazo sobre la mesa y me tendió su puño.

—Un plan estupendo, hermano —dijo con entusiasmo.

—No —masculló Rosalie.

—En absoluto —continuo Bella.

—Estupendo —hablo Jasper – Sera fácil.

—Idiotas —murmuró Alice. – Claro que no será fácil.

--- No se pondrá en peligro nadie Edward – me regaño Esme con su pensamiento.

—En tal caso, de acuerdo. – Hablo Bella atrayendo la atención de nuevo - Edward ha sometido una alternativa a vuestra consideración Votemos. – su voz era fría. Estaba decidida.

--- ¿Quieres que me una a tu familia? – me pregunto seria.

—No de esa forma —la mire también serio pero molesto—. Quiero que sigas siendo humana.

Asintió y continúo mirando a mi hermana menor. 

--- ¿Alice?

--- Sí. – dijo segura. – Y no me importa que pienses Edward.

--- ¿Jasper?

--- Sí – Contesto, solo para apoyar a Alice.

--- ¿Rosalie? – continuo Bella.

No pienses que es por ti Edward – pensó Rosalie, aun seguía molesta porque no la había apoyado mucho en sus disculpas con Bella.  Se quedo pensando un rato lo que diría y después hablo.

—No —Levanto las manos para detener a Bella pues iba a continuar—. Déjame explicarme... Quiero decir que no tengo ninguna aversión hacia ti como posible hermana, es sólo que... Esta no es la clase de vida que hubiera elegido para mí misma… Me hubiera gustado que en ese momento alguien hubiera votado «no» por mí.

Todos lo sabíamos, Rosalie no amaba ser vampiro, más bien ninguno pero ella más que nadie sentía un odio a si misma por ser lo que era.

Bella asintió y miro a Emmett, el que antes que preguntara algo contesto con un gran grito y una sonrisa.

--- ¡Rayos, sí!… Ya encontraremos otra forma de provocar una lucha con ese Demetri.

Emmett volvió a sonreír.

--- Sí, por supuesto, Bella. Ya te considero parte de mi familia. – dijo mi madre antes de que Bella se lo preguntara.

--- Gracias, Esme —dijo Bella.

--- No te pongas así Edward, no hay otra forma de que Bella siga aquí, contigo, si lo piensas bien, estas protegiéndola, no creo que quieras que Bella sufra en manos de los Vulturis, o que tenga que estar escapando toda la vida para mantenerse a salvo.

Carlisle no dejo de hablar hasta que se dio cuenta que no le prestaba atención.

—Edward —dijo él al fin cuando Bella se detuvo viéndolo a él.

—No —dije, no pude evitar sonar molesto, aunque estaba más molesto de lo que alguien podía pensar.

—Es la única vía que tiene sentido —insistió Carlisle—. Has elegido no vivir sin ella, y eso no me deja alternativa.

Solté la mano de Bella, y me levante. Nadie entendía que esto no era una alternativa, ¡No quiero que Bella muera! ¡Esto no es vida! Sufrirá, extrañara a su familia, Bella tiene una vida por delante que yo no lo quitare.

—Supongo que ya conoces el sentido de mi voto —dijo Carlisle.

--- Edward, Bella estará bien, todos…

Corrí hasta el estudio donde me encerré, interrumpiendo los pensamientos de toda la familia que me daba razones por las que era bueno que Bella fuera vampira. Solo que nadie pensaba que realmente había mas cosas en contra que a favor. ¡Bella tiene que vivir!, quise gritarles pero en cambio me quede callado oyendo lo que decían. Bella estaba feliz, nerviosa pero feliz y era obvio ella no sabía nada de lo que  es ser un vampiro. Pero los demás, pero Carlisle, el más que nadie sabe lo que se sufre, el no podía estar a favor de esto, el no.

Sentía que el ardor en mi garganta era más fuerte, era como si el fuego que normalmente está presente en mi cuerpo ahora estuviera más fuerte. Era un dolor agudo, me sentía traicionado, era estúpido por parte de todos apoyar aquella ridiculez, Bella… simplemente Bella debía ser humana.

--- Bueno, Alice —oí la voz de Bella aun cuando gritaba por la ira—. ¿Dónde quieres que lo hagamos?

Alice dudo, sus ojos mostraban miedo. Ella ni si quiera estaba preparada, no era posible que Isabella estuviera hablando en serio. No era posible que Carlisle ni si quiera se hubiera asombrado por lo que había dicho.

--- ¡No! ¡No! ¡NO! —Entre al comedor, de nuevo, gritando como loco. La imagen de mi cara en la cabeza de Esme me hubiera asustado en otro tiempo pero ahora no había nada que me asustara más, más que lo que Bella quería, lo que no sabía y lo que mi familia apoyaba—. ¿Estás loca? ¿Has perdido el juicio? – le grite mirándola con rabia, sentía que necesitaba aire. Bella se hizo para atrás con las manos en los oídos.

--- ¡Edward cálmate por favor!

--- Bella, no me parece que yo esté lista para esto – Claro que no, pensé - Necesito prepararme...

--- Lo prometiste —dijo Bella con la voz entre cortada. Esme y Emmett estaban a mi lado, tratando de calmarme, pero era inútil.

--- Lo sé, pero...

--- Alice, no lo hagas - dije pero Bella no logro escucharme.

--- Bella, de verdad, no sé cómo hacerlo sin matarte. – Alice me miro – Edward…

No la mire.

--- Puedes hacerlo —insistió Bella—. Confío en ti.

--- Si lo haces te arrepentirás Alice, y hablo en serio – dije acompañado de un gruñido que todos pudieron oír.

--- No lo hare – me aseguro Alice, mientras negaba con su cabeza para Bella.

--- ¿Carlisle? – pregunto Bella mirándolo.

--- Edward, no…

Tome el rostro de Bella entre mis manos, quería que viera el sufrimiento que pasaba solo en pensar en que se convirtiera en un monstruo. Miles de veces le había dicho que sería lo último que quisiera para ella, pero ahora estaba ahí, luchando por ser un vampiro. Espere que mi mirada la convenciera pero fue en vano.

--- Soy capaz de hacerlo —contesto Carlisle. Mientras rogaba que Bella cambiara de opinión y se diera cuenta que era una tontería—. No corres peligro de que yo pierda el control.

--- Suena bien. – dijo aun mientras me miraba. No es posible, Carlisle – pensé mientras lo mire con algo muy parecido al odio.

--- Espera... No tiene por qué ser ahora. – dijo Carlisle.

--- No hay razón alguna para que no pueda ser ahora —contesto Bella desesperada

--- Se me ocurren unas cuantas. – dije

--- Naturalmente que sí…Ahora, aléjate de mí. – Bella trato de sonar molesta, pero estaba asustada, solté con más brusquedad de la que debería su cara y me cruce de brazos.

Bella se mantuvo en silencio. Carlisle trato de hablar conmigo pero lo ignore.

--- Sugiero que pospongamos esta conversación en aras de seguir pasando desapercibidos. Al menos, hasta que Bella termine el instituto y se marche de casa de Charlie. – Dije para mis hermanos. Mire a Carlisle de nuevo, traición era lo único que podía pensar.

--- Es una petición razonable, Bella —dijo Carlisle.

--- Lo consideraré. – dijo después de unos minutos. Di un pequeño suspiro. Alice tuvo una visión de Bella en su casa con Charlie, las cosas habían cambiado. Decidí sacarla de ahí antes de que volvieran a cambiar, sabía que no sería fácil convencerla en que ser un vampiro no es nada bueno, pero si tenía aunque sea una duda ahora en su cabeza era bueno para mí.

--- Lo mejor sería que te llevara a casa…Sólo por si Charlie se despierta pronto. – quise justificar, aunque supuse Alice sabia porque mi desesperación.

--- ¿Después de la graduación? – inquirió Bella a Carlisle.

--- Tienes mi palabra. – le prometió Carlisle. Esme estaba detrás de él, con expresión preocupada. No quise prestar atención a la mente de nadie, aunque estaba seguro que más de uno quiso comunicarse conmigo.

—Está bien, puedes llevarme a casa. – dijo Bella después de sonreírle a mi padre.