Chicas aqui les dejo un nuevo capitulo. Gracias por aguantarme lo lento de la actualizacion espero les guste, las kiero. Verooo

8-Sorpresa

Bella

-¿Cullen?- Repetí todavía en estado de shock.
- Si. Bella - Edward Cullen es la persona de quien te hable, nos esta ayudando con el caso - Argumentaba Jacob a mi lado.
-Mi mente trabajaba a mil. Pero tu eres mi ángel salvador no puede ser que seas uno de los hermanos Cullen - Sin darme cuenta había expresado todos mis pensamientos en voz alta.
- ¿Perdón, que? Musitó despacio Edward Cullen.
- ¿Que dices Bella? preguntaba mi primo intrigado ¿Te pasa algo?
- No, nada es que me quede pensando en otra cosa. Vi que Cullen estaba totalmente abtraído mirando hacia mi, no supe muy bien que hasta que me di cuenta que era el brazo que mi primo seguía soteniendo en mi cintura, me safé grotesca de su agarre, lo cual fue una desafortunada maniobra ya que lejos de pasar desapercibida Jacob dijo - ¿Desde cuando te molesta que tome tu cintura en público?
- Genial ahora mi ángel debe pensar que con Jacob tenemos algo. Pensé. - ¿Y desde cuando te importa lo que piensen Isabella Swan? - Me pregunto mi voz interior.
- Es que no me moles... es que siempre me tienes agarrada Jacob a veces es bastante incómodo.
- Balbuceaba mis respuesta como una verdadera idiota la sorpresa me había afectado.
 Cullen levanto las cejas como tratando de entender algo que lo supero.
 -Bueno seguire trabajando. Nos vemos luego - Chicos dijo tratando de safar de una rara o mas bien cómica.
- ¿Que fue todo eso? ¿De donde conoces a Cullen? mi primo era una máquina de hacer preguntas que ni yo sabía como contestarme.
- Le conté la historia a grandes rasgos por que sabía que no me dejaría en paz hasta que lo hiciera. para cuando termine mi primo estaba rascando su cabeza. Mal signo se metería en medio ya sabría yo de sus locuras.
-Te gusta Isabella. Edward Cullen te gusta. Se te nota has encontrado a alguien que tumbó parte de tu muralla de Srta. No siento nada!!
- Que dices Jacob ¿estas loco?
- No no lo estoy, y si no fuera así detective Swan ¿Por que estas mas roja que un tomate?
-No estoy colorada. Le grite furiosa mas conmigo por que sabía que lo estaba que con él.
OK. Lo que tú digas prima pero te aseguro que ese te gusta como que soy capaz de comerme seis hamburguesas y sentirme bien luego. Se alejo rápidamente de allí sin dejar de reírse.





Edward


No podía ser ¿Por que el destino se ensañaba conmigo? ¿Que hacía mi demonio allí? Y pricipalmente ¿Por que Jacob la llevaba tomada de la cintura?

Mi mente iba saliendo del estupor lentamente, recordando lo que me había contado en la cabaña. Muchos datos encajaban perfectamente.
Pero ella  era detective, ¡ella sería la carnada para este tipo!
¡NO!! podía permitirlo Yo mismo vi lo que hacía a sus víctimas , por que así comenzó como un asqueroso violador, robando la inocencia de muchas mujeres que cayeron en sus garras. pero ahora su perfil había cambiado la, violaba, las torturaba y luego las asesinaba.
¿Por que ponerse a su alcance? Esto era mi peor pesadilla.
Menos mal que ninguna se había dado cuenta que estaba perdido en mis pensamientos, Jacob y Bella discutian como toda pareja de ¿enamorados? Una rara sensación recorrió mi cuerpo cuando imaginé a esa mujer en otros brazos.
Estaba perdido, ¡Que me esta pasando?. Puse la excusa de seguir trabajando despidiéndome rápidamente de ellos.
Ya a la noche mi mal humor había iba en aumento. Golpee la bolsa de boxeo que tenía adelante hasta quedarme casi sin fuerzas necesitaba sacar de mi cuerpo la furia que corría mi sangre.
- ¿Algo anda mal, Cullen?
-No, Jacoc solo el estres de siempre-  Conteste sorprendido por su aparición ilenciosa. Se había acercado sin que me diera cuenta.
-  La realidad que habría dado mucho por contestarle que si, que algo no estaba bien. Que no deseaba que Isabella Swan sea la zanahoria del conejo. A nadie parecía importarle mucho, ellos la querían pero la veían como a su compañera nada más,  se preocupaban claro esta pero era simple era la detective Swan.
- Jacob. Lo llamé.
-SI, Edward -
-¿A ti no te molesta que Isabella se preste como señuelo?
-Este levantó las cejas en señal de no entenderme-
- No. ¿Por que debería molestarme? Ella sabe lo que hace- Contesto tan tranquilo como si le hubiese dicho que iría a comprar dulces.
- Claro. Era solo curiosidad.
- OK. Si necesitas algo estoy por aquí - Dio media vuelta dejándome solo con mis pensamientos.
- Asentí, solo con un gesto. Su respuesta me dejo perplejo.
- Ahora si que no entendía nada. La ama lo suficiente como para no dejarla de abrazar ni siquiera en la oficina pero no le molesta que se enfrente a un sádico. Otra vez esa sensación de malestar recorría mi cuerpo, esto no era casual.

Estuve al menos media hora más sentía como dolían los músculos de mis brazos  y piernas hasta que me di por vencido, me dirigí a las duchas, varios muchachos de la fuerza estaban allí y otros que no conocía.
- Saludé pero no me quedé con ellos, pase a ducharme. Aún escuchaba perfecto lo que hablaban y para desgracia mía el tema era Isabella.
- Ehy! Jake Bella esta hecha una hermosura hermano. Decía uno.
-Si parece que Alaska le sento bastante bien. Se escucho decir a otro que estaba mas lejos.
- Tu disculpa, pero te juro que me gustaría mucho tenerla algunas noches para que caliente mi cama. Bromeo otro mientras las risas no se hacían esperar.
- ¿Que demonios este tipo no esta enamorado de Isabella o es un témpano de hielo? Para él no es nada me dije para mí mismo. En cambio yo  deseaba salir y pegarle uno por uno solo por que hablaban de ella tan livianamente.
- Tranquilos muchachos que me haran poner celoso,ni que les digo a Billy si los escuchara las suspendería a todos. Retrucó a todos Jacob pero sin una pizca de enojo en su voz.
- A su vez yo reventaba en la ducha deje que el agua corriera tranquilisadora sobre mi rostro. Pero un pensamiento cruzó mi mente como un furioso relámpago estaba mortalmente celoso de Jacob Black, no podía ocultarme ese hecho tan rotundo a mi mismo. Tampoco podía negarme que desde que la vi algo cambio en mí.
- Salí del gimnacio sabiendo que trataría de mantenerme lo más alejado de ella posible y que lo lograría solo con mucha voluntad. Claro lo que no tomé en cuenta era el destino.
- Cullen, quisiera hablar con vos un momento ¿Puede ser?-
- Esa voz tiró abajo todas mis convicciones en un segundo - Solo pude darme vuelta y sonreir  como tonto al ver el rostro de Isabella Swan-



Isabella


No sabía muy bien como enfrentarlo pero debía decir algo entablar una conversación con él.
¿Por lo ocurrido en el rancho? ¿Como policía? ¿O como la mujer que el no deseaba como señuelo? Mierda- Bella pareces una adolescente- Me decía mentalmente no sabes como hablarle a un hombre. -No me respondí yo misma - No se como hablarle a un hombre que hace que mi corazón se desboque con solo mirarlo.
Le hablaré de trabajo si eso es. Me pareció una buena idea abordarlo por allí hoy en la jefatura me parecio que era casi adicto al trabajo ya que hacía miles de cosas a la vez.
No sabía donde encontrarlo, por lo general los muchachos iban al gimnacio después de su turno. Fui hasta allí un vez adentro lo ubique facilmente. Estaba en la bolsa de boxeo a la cual creo yo le iba ganando por puntos.
Luego se acercó mi primo y hablaron un rato.
Decidí esperarlo afuera para no ser tan evidente ante todos. el tiempo se me hizo eterno hasta que lo vi salir.
¿Por que siempre irá tan serio? Me pregunte.
Paso dando largas zancadas delante mío sin ni siquiera notarlo por lo que lo llamé.
- Cullen, quisiera hablar con vos un momento ¿Puede ser?
-Para mi sorpresa se dio vuelta sonriendo cosa que había visto muy pocas veces en él pero que me dejo totalmente idiotizada.
- Dime - Dijo con la voz algo rara.
-¿Por que no quieres que sea el señuelo en la investigación del violador?
- Su cara denoto sorpresa por la pregunta. ¿Habrá creído que no sabía nada?
- Demoro un instante para contestar cuando lo hizo lo explico buscando las palabras.
- No es que no quiera que te prestes tú Swan - Solo que no me gusta que nadie arriesgue su vida ante alguien tan peligroso. No creo que valga la pena arriesgarte.
- ¿Que no vale la pena? Claro que si. -Casi le grité - Hay que atrapar al maldito y si yo le paresco simpática pues bien que se acerque así lograremos atraparlo.
- Su mirada cobró más intensidad al escucharme decir esto pero no veía ninguna expresión en su rostro no podía descifrar lo que pensaba y eso me dejaba con las manos vacías. Tanto en lo profesional como en lo personal.
 ¿Que pensabas que iba a decir Bella? No quiero que te arriesgues por que me pareciste la mujer mas linda del mundo. O me enamoré de ti no lo hagas. Ya Bella ¡Qué novelas te haces! Mis pensamientos ocupaban mi mente ahora mientras sus ojos esmeraldas parecían traspasarme.
- ¿Eso es todo Detective? Pregunto el tono fue tan helado que me turbó.
-Si gracias por escucharme -Le balbucee casi sin sonido.
- Hasta mañana - Saludó amablemente pero igualmente frío que antes.
- Hasta mañana. Conteste odiando mi plan de acercamiento a Edward Cullen.