Danza de pasiones

Autor: veronikice
Género: + 18
Fecha Creación: 25/04/2011
Fecha Actualización: 19/11/2011
Finalizado: SI
Votos: 20
Comentarios: 69
Visitas: 45497
Capítulos: 25

HISTORIA FINALIZADA

Tres mujeres, una camino insierto. Una herencia, una verdad revelada, una gran cambio.

Tres hombres, una fortuna, puja de poder y nuevos competidores amenazando su empresa.

Todos unidos por la pasión, la ambición el peligro y el amor en la fría y lejana Alaska.

Niñas aqui les dejo mi nueva historia ojala les guste y me ayuden con los votitos pero mas que nada con sus comentarios que son los que alimentan el alma de todas las que escribimos. Bueno sin mas que decir una abrazo grande a todas. Verooo

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Capítulo 4: 4- Los Cullen

Chicas mil perdones por la demora pero esta semana fu bastante dura no las aburrire con mas explicaciones. Solo espero que les guste este capi. Cariños a todas y por favor no se olviden de los comentarios!!!! besitos

4-Los Cullen


Rosalie

Llegamos justo a horario al lugar indicado para conocer a nuestros terribles competidores. Los llamábamos así por que solo escuchábamos comentarios de lo  feroces que eran con todo lo que se interponía en su camino en especial por su negocio, ya sea por que era su espíritu inquieto o porque a ellos  tampoco les gustaba hacerse cargo del negocio familiar y su mal genio lo descargaban en las empresas y en los deportes por lo que supe de las habladurías del pueblo. -Buena táctica- pensé para mi.

Estaba dispuesta a no dejarme avasallar por nadie. No resultaba muy contenta  con mi estadía en Alaska odiaba terriblemente el frío así que me había preparado para enfrentarme a los caballeros pero no me había pero no lo había hecho para encontrarme con tres hombres jóvenes que lindaban casi con semidioses puestos en la tierra.
¿Como podían ser tan guapos? Cada uno tenía su encanto al menos físico, era difícil para mí dejar de mirarlos cada posía un estilo que derrochaba clase,  mi cuerpo gritaba de deseo.
De costadillo mire a Alice que estaba tan anonadada como yo - Mierda ¿Podríamos decir algo o solo nuestras hormonas responderían ante tanta masculinidad? Mierda, mierda, mierda (debes dejar de insultar Rose) me dije mentalmente. Necesitábamos a la Srta. Hielo de seguro ella no le habrían movido ni un pelo. ¿Por que se me ocurrió disculparla de la cita? Ah si por algo de las ovejas.


El muchacho mas alto se adelanto a los otros para saludarnos, note varias cosas a la vez como que este nos saludo a ambas pero no pudo desconectar su mirada de Alice, que los otros dos se levantaron no de buena gana aunque al ver sus caras uno sonrió en mi dirección dejando ver unos dientes perfectos, una sonrisa que derretiría medio Alaska y en sus ojos la hermosa candidez y vivacidad de un niño.
El otro Mm ¿Como diría, esta enojado o molesto? Sus cabellos desordenados y un poco mas oscuros que el de sus hermanos le daban una jovialidad que chocaban con la frialdad de unos bellísimos ojos verdes. El estaba allí por obligación eso se notaba todo su cuerpo estaba tenso. Me dio la sensación de un felino a punto de atacar.
 Rápidamente desvié la mirada hacia donde escuche que hablaban ¿Se habrá notado que los miraba  intrigada?- Concéntrate Rose- Gritaba mi mente.


-Hola soy Emmet Cullen- dijo cara de niño entendiendo su mano la cual estreche casi de inmediato. El contacto con su piel era suave todo lo contrario de lo que esperaba de manos de un trabajador. El saludo duro un poco mas de lo necesario solo me soltó cuando lo mire directo a los ojos.
- ¿Así que Uds. son las hijas del viejo Charlie?- No esperaba que ese sabandija nos diera tal sorpresa. Tres hijas y tan bellas.
-Parece que todos estamos sorprendidos- conteste. Tampoco esperaba terminar aquí y a cargo de unos animales. Su risa resonó por toda la estancia. En esos momentos el de los ojos verdes extendió su mano presentándose.
-Edward Cullen - encantado Srta. Swan. Todavía no soy Swan Sr. Cullen pero pronto tendremos arreglados todos los papeles. Es un asunto engorroso eso de creerse hija de otra persona toda su vida. Mierda... el estar nerviosa me hacía hablar de mas y ya lo había hecho pero al menos había dejado sin palabras a nuestro hombre mal humorado y por supuesto estaba insultando otra vez- Concéntrate Rose!!


-Mi hermana y el otro chico se fueron presentando pero no pude dejar de notar como si un universo paralelo al nuestro se creara entre ellos, siempre Alice fue la mas sociable de las tres pero parecía otra persona mientras charlaba con ¿Como era su nombre?
Jasper, Jasper Cullen.
En realidad fue el mas simpático de los tres durante nuestra charla de la cual escuche muy poco pese a los esfuerzos que hacía mi cerebro para que me concentre en lo que se hablaba creo que me lo dije al menos cien veces y no funcionaba. Ya casi terminando la reunión, Edward , el de los ojos verdes, pregunto tratando de parecer lo menos curioso posible.
- A ver Srtas.- ¿ Uds. no eran tres hermanas? Por que no han traído la otra ¿es acaso la mas fea o la mas inteligente?
-La pregunta cayó como un balde de agua fría para nosotras, fue de lo mas hiriente tanto que tardamos en reaccionar el que si lo hizo fue cara de niño,Emmet.
-Vamos Ed tranquilo de seguro la Srta. que falta ha sufrido algún inconveniente y por eso no esta aquí.
-Antes que alguna diga algo el Sr. mal humor se disculpo con nosotras y también por no poder asistir a la cena que amablemente nos habían invitado sus hermanos- Una vez dado por terminado el asunto y nuestro encuentro nos fuimos a cenar. Las horas pasaron volando una vez que estuvimos mas relajados esos chicos eran simplemente hombres hechos y derechos. No se muy bien como precisar el momento  en que  Alice y yo nos dimos cuenta que teníamos un problema y muy serio. Nos gustaba nuestra competencia y no por la competencia en si sí no por que adoramos desde que los vimos a los hermanos Cullen lástima ese tal Edward.
Aunque nuestro mayor problema ahora no era el Sr. mal humor si no como le decíamos a Isabella que casi no habíamos hablado de negocios ni nada que tenga que ver con la empresa.


Edward

-Vamos Emmet no me dirás que iras tras una de las Swan, son muy lindas pero ¿Para tanto?
-Recién las conoces no puedes estar convencido que esa chica sea la mujer de tu vida ¿Cuantas horas compartieron ayer solo cuatro o cinco? No puedes decir que Rosalie Hale será la futura madre de tus hijos. - Trataba que mi hermano no se deje llevar por la primera impresión, por lo que había visto de esa chica el día anterior debía llevar a unos cuantos hombres de las narices era una perfecta belleza y Emmet era tan influenciable como un niño.
Pues créete lo que quieras Edward, no solo por que tus cosas no han ido bien debes juzgar a todas las mujeres por igual no todos tenemos mujeres a las cuales debemos ponerles una orden de restricción por un juez para que nos dejen tranquilos.
-Puse los ojos en blanco por que fuera que se preocupaban por mí también bromeaban de mi situación cada vez que podían.
-Además Ed no te preocupes por mi mas bien yo lo haría por Jas - Por pregunte intridado?-

Por que si yo te digo que me encargare que Rose sea la futura madre de mis hijos tendras que cuidar que nuestro hermanito no secuestre a Alice esos dos si que que se encontraron ¿No te diste cuenta que estaban en su mundo desde que se vieron?
-¿Que Jas también enloqueció? ¡NO me digas eso! no puede ser que son esas mujeres ¿Brujas?
-Shhh no seas celoso solo por que encontramos mujeres bellas y cuerdas!!
- Ya basta Em, no quiero pelear contigo. Este levanto sus brazos como si se estuviese rindiendo ante el enemigo pero en su cara su risa no demostraba lo mismo. -¡Donde esta Jasper? - pregunte para salir del tema.
-Hoy salio temprano, pero tu sabes que el hace cualquier cosa por no hacer su rutina de ejercicios, ya aparecerá.
Como si lo hubiésemos llamado con el pensamiento Jasper apareció casi a los gritos.

- ¿A que no saben a quien conocí hoy discutiendo acaloradamente con el viejo Tanner?
 -De seguro alguien que desea perder los dientes- Contesto riéndose Emmet sin perder el ritmo en la cinta de correr.
 -No. No.  Jasper movía su cabeza en forma negativa solo se que cuando se los diga caerán sobre sus lindos traseros
 -Al loco James conteste, mientras dejaba de costado una mancuerna tomando la toalla para secarme, hace al menos un mes lo persigue para que le venda unas trampas.
 -No. Muy frío sacudió sus manos- Vamos Jas no sabemos nos damos por vencidos- Odiaba las adivinanzas.
 - Hay Edward déjame disfrutar de esto no seas aguafiestas Uds. nunca traen buenos chismes.
 -Ya!!! dinos grito Emmet.
 -Bueno esta bien escuchen esto... a la Misteriosa Srta. Cullen
 -¿Que? De seguro estas equivocado Jasper Contestaron casi al unísono
 -Pues no lo estoy el mismo Tom me dijo quien era la chica.
 -Por lo que vi creo, que en este momento el pobre viejo debe estar entregando algunos materiales en la Esperanza, no sabes el carácter de esa chica. No quisiera ser el hombre que dome a semejante mujer.
-Waooo y ¿es tan linda como sus hermanas? Pregunto intrigado Emmet
-Pues si tine un cuerpo espigado, una cabellera marrón larga que llevaba atada, no vi muy bien su cara pero si la escuche y te puedo asegurar que el viejo Tanner le dará un ataque cuando esa chica siga tratandolo de igual a igual.
-Eso hay que verlo- aplaudía Em divertido. -O sea que la hermanita es puro carácter muero por conocerla en eso coincidieron mis dos hermanos bueno yo también es difícil que una Srta. de ciudad se enfrente a hombres rudos pero todo puede pasar me dije para mi mismo.
Ehy!! Edward en que piensas - pregunto Emmet en la Srta. Fuego
-Las risas de ese par de tontos no se hicieron esperar- Ahhh ya basta tontos quizás solo fue suerte o el viejo Tanner ya muestra su edad y se esta ablandando.
- Yo no me pondría a prueba con el - Edward, pero con la Srta. fuego tal vez.
-Ten cuidado Emmet respondió Jasper no se juega con fuego. Aparte al que le gusta hacer eso es a nuestro hermanito.
-Nuestras risas se escucharon en el lugar, pero reconocía que la curiosidad enveneno mi cabeza.

Capítulo 3: 3- El viaje Capítulo 5: 5- Mala suerte

 
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