Danza de pasiones

Autor: veronikice
Género: + 18
Fecha Creación: 25/04/2011
Fecha Actualización: 19/11/2011
Finalizado: SI
Votos: 20
Comentarios: 69
Visitas: 45486
Capítulos: 25

HISTORIA FINALIZADA

Tres mujeres, una camino insierto. Una herencia, una verdad revelada, una gran cambio.

Tres hombres, una fortuna, puja de poder y nuevos competidores amenazando su empresa.

Todos unidos por la pasión, la ambición el peligro y el amor en la fría y lejana Alaska.

Niñas aqui les dejo mi nueva historia ojala les guste y me ayuden con los votitos pero mas que nada con sus comentarios que son los que alimentan el alma de todas las que escribimos. Bueno sin mas que decir una abrazo grande a todas. Verooo

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Capítulo 17: 17- Alejamiento

Chicas aca les dejo un nuevo capítulo no tengo mas que agradecerles a todas las que comenzaron a leerme y a las que siguieron la historia siempre muchassssss GRACIAS!!!! Espero no me maten pero los personajes escriben la historia y quizás ellos necesiten un alejamiento. Las kiero besotes y abrazos desde Argentina. Yop



                                                                                           17-Alejamiento.

Edward

Fui a buscar a Bella tenía que decirle que Karla estaba aquí. No logré alcanzarla salía en su camioneta raudamente ¿Qué pasaría ahora? No tenía por que ser  nada malo,  de seguro Alice se acordó de algo que le faltaba para la fiesta las chicas estaba enolquecidas con el tema, reí al acordarme como Emmet estaba que volaba de rabia esa mañana por tener que acompañarlas a ver flores de estación pero claro bajo las amenazas de su novia lo hizo sin chistar.
Entré a casa, todo estaba tranquilo, buscaría a las chicas o preguntaría hacia donde fue Bella. Si eso era lo que debí hacer hace un par de días solo contarle la verdad.
Como por arte de magia Rose apareció ante mi me miró extrañada.
- ¿Qué pasa Rose me miras como si estubiera vestido de payaso?
- Algo así me querido cuñadito te estas sonriendo. -Todo un milagro ¿Qué hizo mi hermanita para que estes así?  Mmmm... no mejor no me digas, no quiero escuchar chanchaditas a esta hora, todavía es temprano y tu hermanito esta muy ocupado.
-No espero ninguna respuesta de mi parte solo siguió su camino.  Claro no la hubo mi boca todavía estaba abierta. Creo que mi hermano encontró la mujer perfecta para él. Murmuré.
Caminé hacia la sala donde Jasper y Alice andaban de arrumacos. Cuando entré los dos me miraron extrañados ¿Pero tú no ibas a encontrarte con Bella? Preguntó Alice ahora un poco incómoda por la situación.
- No ¿Por qué debía hacerlo? Nadie me avisó.
- No, hermano tranquilo quizás entendimos mal de seguro debía hacer algo.
  Logré disimular bastante bien mi sorpresa ante la idea que ellos pensaban que nosotros debíamos encontrarnos ¿Bella les habrá mentido y si fue así ¿cual fue motivo? Esto me daba mala espina-
- Si seguro chicos no se preocupen. Los dejo voy a mi cuarto nos vemos luego.
 Fui lo más rápido posible para ver si había alguna nota. Lo único que faltaba es que Bella se le haya dado por jugar a la investigadora o algo así. Ya se le preguntaré a Rose o a Steve de seguro ellos  saben donde fue Bella.
De poco sirvió ninguno sabía que ella había salido esto no me gustaba  subí a mi camioneta para ir a buscarla el pueblo no era muy grande así que no sería tan difísil dar con ella.
Di unas vueltas por la zona comercial hasta llegar a un parque el día era bastante frío pero por las dudas no estaba demás pasar.
¡Bingo! Su camioneta estaba estacionada allí, ella a pocos metros hablando con alguien parecían discutir o algo por el estilo frené para poder observar mejor. Era el maldito entrometido de Jackson
 ¿Por qué no podía hablar con mi Bella en casa?  Esto ya era demasiado ¿Qué se veían a solas? trataba de controlar la rabia y los celos que sentía en ese momento pero mi sangre no corría por mis venas mas bien bullía.
 Bajé de la camioneta para caminar hacia ellos al acercarme  a unos metros pude escuchar como el le decía...
...  -No quiero que sufras Bella pero debía contarte lo que te ocultó- Quizás no lo hizo a propósito...Cullen no te haría algo así.
- ¿ Qué le hice? ¿Qué cosas le ponía en la cabeza este sujeto? 
- De mi pecho salió un rugido ¡Alejate de Bella en este mismo instante! 
- Los dos giraron al verme. Lo sorprendente fue ver sus distintas reacciones.  Bella se sorprendió muchísimo, pero Jackson sonrió petulante.
  Llegué hasta ellos colándome entre los dos de manera que Bella quedó casi a mis espaldas ella se abrazó de mí con fuerza.
- Edward ¿Dime que tu no harías algo así, dime que tu no me ocultarías nada? Sus palabras eran puñales, para mi avergonzado corazón.
- La cara de mi ángel era  la angustia total.
- Ese sujeto supo que algo ocultaba no tenía la más mínima idea de como se había enterado el hijo de perra. Pero era el momento de aclararlo.
- Tomé toda la fuerza de voluntad que poseía.
 Giré ignorando a Jackson para quedar mirando directamente a mi amor.
 Me costaba hablar no por que no quería decir la verdad, si no por que mi garganta estaba anudada al ver la desilusión del rostro de Bella.
- No me dejo decir nada. -Es verdad dijo con su voz quebarada tu ex novia esta aquٕí. ¿Desde cuando lo sabes Edward?
- Hace un pas de días , no sabía como lo tomarías tu sabes que ella representa un dolor de cabeza para mí y mi familia, por eso no deseaba que te alteraras.
- Ya veo. No confiaste en mí Edward, o en realidad ¿te habría gustado mas que no lo sepa?
- No es eso, Bella en serio escuchame.
-Creo que escuché bastante tuve que enterarme por otra persona que ella estaba aquí y para colmo estaba enojada con Jac por decirme algo de ti. Necesito irme, quiero irme a casa.
- Trate de tomarla de un brazo, ella se soltó a la fuerza. ¡Déjame Sola Edward Cullen! - Gritó.
- Jackson la seguía de cerca. Inútilmente había tratado de reprimir mis impulsos exploté. Lo tomé del cuello de su abrigo para hacerlo girar
- ¡Suéltalo Edward! - Grito Bella. Pero la furia avanzó nublando mi razocinio.
- No pude contenerme cerré mi puño para estrellarlo en su cara, me sentía como un lobo una vez domó su presa al cazarla, poderoso y ávido de sangre,    creo que lo golpee unas veces más hasta que me dí cuenta el espectáculo que dábamos, Isabella lloraba impotente gritándome que era un bruto.

 Respiré profundo para terminar de tranquilizarme.
- ¡Vete de aquí Edward! No quiero verte estas loco, luego te asustas de la tal Karla.
- Sus palabras me paralizaron me dio la sensación de golpe seco, de aquellos que te dejan sin respiración. ¿Me comparaba con una psicótica? 
- Pues si crees eso Isabella, elije entre este sujeto o yo.  Te vas y lo dejas o te alejas de mí. No se que hizo que pronunciara esas palabras pero sabía que me arrepentiría en pocas horas.
- Sus ojos de abrieron inmensos, pero no se movió del lado de su amigo ni un ápice.
- Tú decidiste, ya no sabrás de mí Isabella Swan.
- Sin más que hacer allí, subí a mi camioneta dejando todo atrás incluso mi alma.


Bella


El doctor ya había atendido a Jackson, el cual estaba descansando todos sabían lo ocurrido y no solo por el estado de la cara de Jac si no por que Edward había buscado todas sus cosas llevándoselas.
Emmet trató de acompañarlo, pero se lo impidió diciendo que no quería que nada cambiáse, solo nosotros teníamos unos problemas de pareja. No era cuestión de que todos pagaran los platos rotos.
A estas alturas mis hermanas estaban en pie de guerra, haciendo que la convivencia no sea tan fácil. Alice estaba totalmente del lado de Jackson.
Rose odiaba que por mi culpa Emmet ya no este tan a gusto por aquí, eso era volver a sus maliciosos comentarios, o mal humor lo cual no era simple.
Por mi parte me sentía abrumada, en mi interior sabía que había exagerado en el reclamo a Edward pero tampoco justificaba su violenta reacción. Además no podía dejar de pensar el por que había ocultado que la tal Karla este aquí.
Estuve dos días enteros sin salir de mi habitación me sentía muy cansada y extremadamente triste ahora me daba cuenta poco a poco que Edward no quería saber nada de mí. Ya no sabrás más de mí. Esas palabras resonaban en mi mente hasta casi enloquecer.
Esa mañana el sol brillaba a pleno no así mi estado de ánimo. Golpearon la puerta suavemente. Las chicas entraron con una bandeja de desayuno donde había de todo. Parecía que todo estaba mas calmo ya que sus sonrisas eran resplandecientes. Bella hermana vamos hoy haremos las fotos de la familia y etc. Necesitamos que cambies esa cara debemos arreglarte.
 - ¡Claro! chillo Alice ni creas que tendré una dama de honor con cara larga.
 -Pero Alice- proteste como niña pequeña.
- Ya nada de peros come algo y luego relájate nosotras nos ocuparemos.
- Me entregué a ellas sin protestar era lo mejor, aunque ahora que miraba los resultados en el espejo valía la pena la tortura.
- Cuando bajamos Emmet excalmó. ¡¡Guaooo!!! Que mujeres  hagan conmigo lo que desean gritó ligando un buen empujón de Rose. Si alguna se le ocurriera tocarte desearía no haber nacido queridito asi que vamos se hace tarde.
- Uffff, hermano eso dolió rió Jasper que estaba enfundado en un traje impecable su pelo tirado hacia atrás. Miró a Alice con adoración mientras ella se derretía a su lado.
- Una extraña oleada de celos me invadió dejando lugar al vacío de mi corazón. En ese momento un Jackson tan impecable como los novios de mis hermanas se presento ante mí.
- ¿La acompaño srta. Swan? Si. Vamos todos - Repetí sonriendo.
Sabía que todas las miradas estaban puestas en nosotros, recordé que el diario de Jackson cubriría el evento para todo el país.
 
Olvidaba que ahora éramos parte de las familias adineradas, esas que todos queremos leer en las páginas sociales cuando no somos mas que gente con una vida común.
 La fortuna de Charlie Swan, el como se encontraron sus herederos, su vida y la nuestra fue expuesta a los lectores. El casamiento de una de las herederas de una inmensa fortuna con otro heredero era todo un acontecimiento social aunque en realidad la fiesta de Alice era bastante privada.
Nos dirijimos al lugar donde sería el civil un grupo de personas invitadas entre ellos Steve, que dicho sea de paso estaba muy apuesto con un traje gris.
 Me sorprendió que una chica con facciones nativas estaba tímidamente tomada de su brazo tenía un cuerpo para el infarto pero su cara denotaba una serenidad envidiable. Busqué a Edward debía andar por allí pero fue en vano.
- No vendrá, Edward no esta aquí. Me dijo una suave voz a mis espaldas.
Me dí vuelta para encontrarme con una Esme que no podía disimular la tristeza de sus ojos.
- ¿Cómo? Sentí como el mundo se abrió a mis pies. Esperaba verlo al menos de lejos.
- Edward se fue, no puedo reprocharte nada mi niña no se que sucedió pero se marchó todavía no sabemos donde.
- Es normal en él cuando esta muy molesto o algo le duele prefiere marcharse. No quiero que te aflijas. Volverá solo debes darle tiempo- Acarició maternalmente me mejilla, ¡ Envidié su temple odiaría a la mujer que aleje mi hijo de su familia. Mas en ocasiones como esta.
-Ahora ya lo sabía no estaba aquí se había marchado cuando pensaba que nada podía ser peor el destino comenzaba a patearme el trasero de verdad.
- Nos llamaron para comenzar con las fotos la fotógrafa salió para saludar a todos. Note como los Cullen se paralizaban al verla sus caras demostraban variedad de sentimientos, enojo, incredulidad, fastidio un murmullo se levantaba entre algunos invitados dejandonos a una gran parte afuera de lo que ocurría.
Miré a la mujer era extraordinariamente hermosa el cabello rojizo brillaba a la luz del sol,  sus ojos verdes resaltaban en la blancura de su tez, Me parecía más a una modelo que a una fotógrafa pero era una de las top del momento al parecer Alice no escatimó en gastos ni en buscar lo mejor.
Agradecí internamente no tener que aparecer en una fotografía con ella opacaría a todos.
Saludó a Alice amable, salteando a Jasper deliberadamente, mientras este sin levantar la voz preguntaba que hacía allí dirijiéndose a mí su voz sensual se complementaba con su figura.
- ¿Tú eres Isabella Swan?
- Si respondí. ¿Nos conocemos?
- No claro que no, linda yo soy Karla Scolari
- Me temblaron las piernas. ¿Había escuchado bien?
 ¡Karla la ex novia de Edward! Ahora todas las piezas encajaron y comprendí la incomodidad de los Cullen no pude evitar sentirme pésimo todo alrededor  se volvio negro desfallecí en brazos de alguien, lograba escuchar el alboroto de alrededor pero no podía hablar.
- Esta vez no había perdido el conocimiento así que me recuperación fue mas rápida. Carlisle revoloteaba a mi alrededor no fue él quien me auxilió pero claro sabía de lo que hablaba el Dr. Loretto cuando este me pregunto si estos desmayos pasaban con frecuencia observé que escuchaba interesado.
- Un poco al menos hace uno o dos meses. Conteste.
- Deberías realizarte unos análisis de rutina Isabella, estas bajo mucho estres y de seguro no te preocupas bien por tu alimentación. Repetía el médico mientras en mi cabeza estaba la imágen de aquella mujer, esto era una pesadilla Ed me contó de su relación, de los poblemas de acoso pero nunca supe la hermosa que era.
- Lo mismo pienso yo Dr. Respondió Alice- Que apareció como un remolino para pararse justo delante de mí haciendo sonar el zapato golpeado contra el piso.
- Escuchaste al Dr.  Bella debes alimentarte mejor le juro Dr. que me ocuparé personalmente que ella se alimente en forma correcta.
- El Doc sonrió ante mi hermana.  -Esta bien Alice de seguro será así.
- Nos saludó dejándonos solas. -Perdona Al no quise hacerte pasar un mal momento no se que me pasa en realidad- No sabía como disculparme.
- No te preocupes Bella todo esta bien y lo más importante es que tú lo estés. Nos abrazamos en unos instantes me continuamos con lo que debíamos hacer, no supe muy bien de donde saqué fuerzas pero enfrenté las cosas lo mejor que pude.
 Ahora al resguardo de todos y en la soledad de mi habitación repasaba todo lo sucedido en mi vida estos meses, sin poder negar que el punto coincidente era Edward, lo extrañaba estaba arrepentida de no haber echo nada ese día fatídico.
También estaba Jac que al menos estaba allí conmigo pero claro no era lo mismo él era solo un amigo y yo necesitaba a mi amor, a mi ángel protector.
Tomé una desición me tomaría unos días de descanso luego de la boda de Alice pero no le avisaría a nadie solo dejaría unas notas para que no se preocupen total no serían mas que unos cuatro o cinco días.
Me quedé dormida pensando donde podría estar Edward y como me gustaría sorprenderlo.


Edward

Estaba en un estado lamentable traté de sentarme en la barra y casi caigo al suelo de no ser por la mujer que me acompañaba.
- Mejor nos vamos que te parece amiguito creo que la compañía te hará bien.
- La miré estaba borracho pero no perdido, pude ver que llevaba varios años en esto su mirada estaba vacía. - Ni en sueños presiosa le conteste, pero gracias igual pagué al cantinero y le di algo de dinero a ella se lo merecía, seguro que su vida era tan cruel como la mía en este momento.
Salí, quedándome sentado un rato a las afueras de aquel lugar perdido en la nada a nadie se le ocurriría que estaba aca todavía pero que mejor escapatoria que un pueblo perdido en la montaña lleno de mineros y un puñado de mujeres como la que rechazé hacía unos minutos atrás.
 Me levanté para caminar hasta la pieza espantosa que conseguí esa tarde de seguro no lo notaría en el estado que me encontraba lo único que debía hacer era dormir.
El cielo estaba iluminado por la aurora boreal algo muy común en estos lugares, o sea que era imposible no ver la camioneta desvencijada que venía de la mano contraria, lo que no se me ocurrió cuando decidí caminar que los demás podían estar en un estado de ebriedad parecido al mío.
Cuando note como zigzagueaba por el camino fue demasiado tarde, enturbiados por el alcohol, mis reflejos no ayudaban. Mis pensamientos fueron hacia Bella ¿Ya no la vería más? El solo pensarlo dolió.
Un fuerte golpe sacudió mi cuerpo el dolor me transpasó, luego otro golpe. Estaba en el piso, polvo había mucho polvo,  aire
¿Por que me costaba tanto respirar? Abrí mi boca para tratar de aspirar mas aire, la oscuridad se mezclaba con el sabor a la sangre, me asusté hasta que la vi Bella estaba allí, mi amor...
-Te amo...Silencio.

 


Capítulo 16: 16 Días de Confusión Capítulo 18: 18- Un día para el olvido

 
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