Besando Ranas !!!

Autor: Nekbhet
Género: Romance
Fecha Creación: 01/04/2010
Fecha Actualización: 10/01/2011
Finalizado: SI
Votos: 23
Comentarios: 158
Visitas: 63160
Capítulos: 25

Quiero agradecerle al Sr. Banner que se equivocara de rana.

Quiero agradecerle a la rana que me escupiera.

Quiero agradecerle a los Quileute que te enseñaran sus costumbres.

Gracias a ellos comprendi que no puedo vivir sin ti. Te amo Bells.

 

GRACIAS POR LA PORTADA, NUEVA!!! HIJADEMIVIDAYDEMICORAZON !! XDDD

Historia terminada


 

Los personajes aqui descritos pertenecen a Stephenie Meyer.

Hola, este es mi primer Fic, asi que espero que os guste.

Gracias por las visitas!!

Besitos desde España!!

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 6: Aniversario

Se cumplía un año de la muerte de mis padres, pero aun se me hacia difícil asimilarlo. Desde el día que murieron no había vuelto a derramar una sola lágrima por ellos.
Este iba a ser un día especialmente difícil para mi.
Me levante como un día cualquiera, no quería pensar en la fecha en la que estábamos.
Me duche, me vestí con unos vaqueros de color negro, un jersey de lana negro, muy suave y pegado al cuerpo y mis bambas negras de tenis. Me hice dos trenzas a los lados y baje a desayunar, como todos los días.
-Buenos días- Dije al entrar en la cocina y ver que todos estaban ya desayunando.
-Buenos días, querida- Contesto Esme, dándome un beso en la mejilla -¿Como has dormido?-
-Bien, Esme, gracias- Le dije, devolviendo el beso.
Alice puso en mis manos una taza de leche con cacao, mi desayuno de todos los días.
-Buenos días hermanita, ¿lista para irnos?- Me dijo como siempre, con una sonrisa radiante.
-Si, me tomo esto y nos vamos, debo pasar por secretaria para recoger las notas del examen de lengua- Le conteste mientras, de un trago, me bebía la leche. Todos me miraban expectantes y cautelosos y yo sabia por que.
-Estoy bien- Les dije, agachando la mirada.
-Vamos, hoy os llevo yo- Dijo Edward, levantándose de la silla.

La mañana paso rápida y tranquila, como siempre, hasta que llego el almuerzo.
Cuando llegue a la cafetería todos mis hermanos ya había empezado a comer. Me senté como siempre entre Alice y Edward, sin pasar por el mostrador de comida, por lo que me lleve unas cuantas miradas de reproche por parte de mis compañeros de mesa.
-Bella, tienes que comer, o no tendrás fuerzas para acabar el día- Me dijo Emmett, claramente molesto,. cosa que me confundió, el casi nunca se ponía serio.
-No tengo hambre, ya comeré algo esta tarde- Le conteste.
-Al menos come algo de fruta, al ser ligera pasa sin tener hambre- Me contesto Edward, ofreciéndome la manzana que había comprado para su postre y ganándose la mirada de asombro por parte de todos los presentes.
Por lo general, Edward y yo apenas nos mirábamos desde que vivíamos en la misma casa y por eso nos desconcertó a todos que se preocupara tanto.
Acepte con una sonrisa su manzana y le di un par de bocados, sin llegar a comérmela del todo. Al menos así se quedaría tranquilo, al ver que comía un poco.
El resto del día paso despacio, no quería enfrentar mi pena, pero cuanto mas avanzaba el día, mas triste me sentía. Y llego la noche.
Cenamos todos juntos, charlaban de como les había ido el día, que habían hecho, contaban chistes y se reían. Yo no participaba activamente de las conversaciones, estaba mas ausente que de costumbre.
Después de cenar y ayudar a recoger la mesa, salí al jardín a tomar aire, sentía que me ahogaba.
No hacia frío, la noche era clara y se podía ver la luna en el cielo. Me senté en el césped doblando las rodillas hacia mi pecho y rodeándolas con mis manos en un abrazo. Después de contemplar la luna un rato, pose la barbilla en mis rodillas y me puse a pensar en el año que había pasado.
De pronto note que alguien se sentaba a mi lado, gire la cabeza y me encontré con Edward, sentado en mi misma posición y mirando la luna.
-Sé como te sientes- Dijo, girando la cabeza para mirarme.
"¿Como puedes saberlo?" pensé frunciendo el ceño, sin entender muy bien que quería decir.
-Yo perdí a mis padres a los 8 años- Ahora si que me había perdido. Edward se dio cuenta y me sonrió y yo no pude evitar sonreirle también.
-Un borracho se los llevo por delante, murieron los tres en el acto. Mis tíos, Esme y Carlisle me adoptaron.
Durante mucho tiempo estuve resentido con ellos, no entendía que pasaba a mi alrededor. Me encerré en mi propio mundo, no quería saber nada de nadie, fueron años muy difíciles para mi y para los que me rodeaban, sufrieron mucho por mi comportamiento.- Hizo una pausa para tomar aire, yo lo miraba embobada. Empezaba a entender ese brillo de tristeza que siempre habitaba en su mirada.
-No quiero que sufras tanto como yo lo hice, Bells, tienes que seguir tu vida como ellos lo hubieran querido- Me miro con ternura y tristeza y de pronto una lágrima traicionera se escapo de sus ojos.
En ese momento me derrumbe y todas las lágrimas que había contenido durante 1 año entero, salieron sin control. Apoyé la frente en mis rodillas y me puse a llorar como nunca lo había hecho. Al momento, Edward se arrodillo a mi lado, paso una mano por mi espalda y la otra por mis rodillas abrazándome, dejo caer su cuerpo contra el mio y reposo su mejilla en mi cabeza.
Estuvimos abrazados en esa posición, llorando los dos durante mas de una hora. De pronto sentí como el peso de su abrazo aumentaba.
Esme se había unido a nuestro abrazo, después de ella, Alice y por ultimo Carlisle y Emmett.
Todos estaban abrazados a mi, todos buscaron un trocito de mi espalda para que notara que estaban conmigo.
Fue algo mágico y emotivo, sentí que estaba en casa, en familia, supe que podría contar con aquellas personas siempre que lo necesitara y ese sentimiento lleno mi pecho de felicidad lo que provoco que me pusiera a reír tontamente.
Edward apoyo la frente en mi nuca y se puso a reír también. Después de el, todos nos estábamos riendo.
Poco a poco el abrazo se deshizo, quedandonos otra vez solos Edward y yo. Apoye mis manos en su pecho, me arrodille frente a el y me aferre a su cuello, haciendo así que el me cogiera de la cintura envolviéndonos en un fuerte abrazo.
-Gracias por contármelo Edward- Le dije, enterrando mi cara en el hueco de su cuello y apreciando así el aroma que emanaba de su cuerpo.
-Gracias a ti por escucharme, Bells, la verdad es que no se lo había contado a nadie hasta ahora- Me contesto.
A partir de esa noche, mi estado de animo fue mejorando, lentamente deje de encerrarme en mi habitación, para empezar a salir al mundo.
La relación con Edward seguía siendo algo distante, pero no tanto como al principio. Compartiamos un momento de dolor y eso nos daba cierta exclusividad de vez en cuando.
Y pronto pasaron los años....

Capítulo 5: Superando la pena Capítulo 7: NOTA DE AUTOR, GRACIAS POR LEERME

 
14446013 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10762 usuarios