Besando Ranas !!!

Autor: Nekbhet
Género: Romance
Fecha Creación: 01/04/2010
Fecha Actualización: 10/01/2011
Finalizado: SI
Votos: 23
Comentarios: 158
Visitas: 63169
Capítulos: 25

Quiero agradecerle al Sr. Banner que se equivocara de rana.

Quiero agradecerle a la rana que me escupiera.

Quiero agradecerle a los Quileute que te enseñaran sus costumbres.

Gracias a ellos comprendi que no puedo vivir sin ti. Te amo Bells.

 

GRACIAS POR LA PORTADA, NUEVA!!! HIJADEMIVIDAYDEMICORAZON !! XDDD

Historia terminada


 

Los personajes aqui descritos pertenecen a Stephenie Meyer.

Hola, este es mi primer Fic, asi que espero que os guste.

Gracias por las visitas!!

Besitos desde España!!

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 11: El gato Edward


10º El Gato Edward

Edward PoV

-Edward, arriba dormilón-
Podía sentir la voz de mi pequeña susurrándome al oído para que me despertara, así como  sus manos acariciando mi pelo.
Un suspiro salio de lo mas profundo de mi pecho.
-Nooo, se esta muy bien aquí- Renegué, removiéndome y abrazando a Bells.
-Llegaremos tarde a clase y lo peor, ¿Quieres enfrentarte a los chistes de Emmett?- Esa pregunta fue suficiente para que me levantara de un salto, cosa que hizo a mi pequeña retorcerse de la risa.
Me la quede mirando, maravillado, Llevaba su pijama puesto, una camiseta de tirantes blanca con el ribete azul y un pantalón corto del mismo color que el ribete. Llevaba el pelo recogido en una trenza algo despeinada y como siempre que estaba en casa, iba descalza.
-Al parecer Esme nos ha preparado el desayuno- Me dijo mientras se sentaba y señalaba la mesa de centro.
En ella había una bandeja con dos muffins recién hechos y dos vasos de leche con cacao.
Me senté a su lado y le di un beso en la mejilla.
-Buenos días peque- Le dije mientras le pasaba uno de los muffins.
-Buenos días capi- Me contesto Bells, sonriendo.
-¿Capi?- Le pregunte confundido.
-Capitán ... Hmm que bien me lo voy a pasar ...- Dijo pensativamente, aunque a mi me pareció de lo mas sensual.
En ese momento entraron en la sala Alice y Emmett, seguidos de mamá y papá.
-Buenos días tortolitos, ¿Que habéis hecho esta noche?- Pregunto Emmett levantando las cejas repetidamente, mientras se sentaban todos.
-Dormir- Dijimos los dos a la vez, sonrojándonos.
-Gracias por el desayuno, Esme- Dijo Bells -Estos muffins están buenisimos-
-De nada cariño, supuse que tendríais hambre después de dormir tanto- Dijo Esme, mirándonos y sonriendo.
-¿Que tal habéis dormido?- ¿No os duele el cuerpo de dormir en el sofá?- Pregunto Carlisle, visiblemente interesado en la respuesta.
Genial, todos sabían que habíamos dormido aquí. Estaba seguro de que las bromas de Emmett no se iban a hacer esperar.
-Hmm, Yo estoy bien, aunque, Esme tiene razón, parece que llevo días sin comer-
-A mi me pasa lo mismo- Dije comiendo un trozo de muffin. Los cuatro se miraron entre ellos y se pusieron a reír. Bells y yo nos miramos confusos.
-¿Que nos hemos perdido?- Pregunte con el ceño fruncido.
-¿A que hora os quedasteis dormidos?- Pregunto Carlisle con interés científico.
-Diría que sobre las 3:00 de la madrugada, mas o menos- Contesto Bells, tomando un sorbo de su vaso de leche.
-¿Y no habéis tenido la necesidad de levantaros a comer?-
-Creo que yo me levante al baño, pero tenia sueño y me volví al sofá- Le contesté.
-Yo hice lo mismo- Dijo mi pequeña. Alice y Emmett no paraban de reírse por lo bajo, ya empezaba a mosquearme tanta pregunta.
-Bueno, ¿que pasa, a que tanto interés?- Le pregunte por fin a Carlisle.
-Lo que pasa es que habéis dormido como lirones, 28 horas seguidas, todo un record!!- Nos grito Emmett totalmente desencajado de la risa.
-¡¡¿¿QUE??!!- Gritamos Bells y yo al unísono.
Nos miramos a los ojos y empezamos a hablar entre nosotros, creando nuestra burbuja, de forma que solo nosotros nos entendimos.
-He perdido ...- Dijo Bells, refiriéndose a su examen de Calculo.
-No, yo iré ...- Conteste haciéndole entender que la anudaría con el director.
-Gracias, y en el ...- Dijo ella pensando en el equipo de hockey.
-No hay problema, soy el capi, ¿Cuanto ...?- Le pregunte, para saber cuanto tardaría en arreglarse.
-15 minutos- Me contesto, levantandose.
-Te espero en el coche- Le conteste, cogiéndola de la mano y saliendo dirección a nuestras habitaciones.
El resto de la familia nos miraba alucinados. Solo nosotros podíamos comunicarnos de esa manera.
-¿Habéis entendido algo?- Pregunto Emmett.
-No, pero al parecer ellos se han entendido a la perfección- Contesto Carlisle sonriendo.
Cuando llegamos al insti, lo primero que hicimos fue ir a hablar con el director. Me preocupaba que Bells suspendiera calculo por culpa de un examen, así que le dijimos que había estado enferma y por eso falto a clase el día de antes.
Lo cierto es que aun no nos creíamos haber dormido tantas horas seguidas sin inmutarnos.
-Mucha suerte, Bells- Le dije, cuando la deje en la puerta de su clase. Me acerque un poco a ella y le di un beso en la frente, aprovechando el contacto para, una vez mas, aspirar su aroma a fresas y quedar inundado de su fragancia, ella frunció el ceño.
Habíamos pasado 28 horas seguidas abrazados, durmiendo, pero aun así, todo ese tiempo había notado el contacto físico que teníamos. Me estaba resultando muy difícil separarme de ella, Sentía un hormigueo en mis manos, que ya no tocaban su piel y mi pecho reclamaba a gritos el peso de su cuerpo sobre el mio, así como mi pelo desesperaba por tener sus dedos enredados. Me sentía realmente extraño, sin ella en mis brazos.
-Gracias, gatito, hasta luego- Me dijo Bells, sonriendo de manera picara.
-¿Gatito?- Preguntamos Alice y yo al mismo tiempo, que en ese momento se había acercado a nosotros, para entrar en clase con mi pequeña.
Bells miro a Alice y le sonrió de manera espectacular, "demonios, yo quiero una sonrisa así para mi" pensé.
-¿Alice, que hacen los gatos cuando les tocan el pelo?- Pregunto Bells lazando las cejas y riendo.
Me quede pensando un momento y cuando me di cuenta de lo que decía, abrí los ojos como platos. "No puede ser, lo dice en broma, yo no hago eso" ...
-¡¡Yo no hago eso!!- Le grite algo asustado y confuso.
-Las personas no pueden- Era imposible.
-JA!! Te lo cuento en el almuerzo- Me dijo entrando a clase, seguida de Alice, que aun no lo había captado.


El Gato Edward

Bella PoV

-Mucha suerte, Bells- Me dijo, dándome un beso en la frente y tomando aire con fuerza.
Miles de descargas recorrieron mi cuerpo, igual que otras veces, y al igual que otras veces, fruncí el ceño ante esa sensación.
No quería despegarme de el. Le necesitaba. Mi cuerpo reclamaba su calor y mis manos picaban por la falta de su pelo entre mis dedos. Recordé entonces lo que había pasado horas antes de que se despertara.
Sobre las 5 de la mañana abrí los ojos, me sentía descansada, quise levantarme pero un peso sobre mi me lo impedía. Edward dormía sobre mi pecho placidamente. Tenia la mano izquierda en mi cadera y la derecha le colgaba por el filo del sofá. "Que tierno" pensé "mi reino por una vida llena de mañanas como esta".
Sin poder, ni querer evitarlo, pase mis dedos por su desordenado pelo, acariciándolo, hasta que empecé a escuchar un sonido proveniente de su pecho. No lo podía creer. Pare de tocarle y el sonido ceso. Mis ojos se abrieron como platos. Volví a enterrar mis dedos en su cabeza y a los pocos segundos el sonido volvió.
Ante ese recuerdo se me vino una idea a la mente.
-Gracias gatito, hasta luego- Le dije sonriendo. Ya tenia un mote cariñoso sin llegar a delatar lo que sentía realmente.
-¿Gatito?- Preguntaron el y Alice al mismo tiempo, mientras ella se acercaba a nosotros. El recuerdo de ese sonido tan tierno hizo que mis labios mostraran una gran sonrisa mientras me dirigía a Alice.
-Alice, ¿que hacen los gatos cuando les tocan el pelo?- Pregunte. Se pusieron los dos a pensar y Edward lo pillo al vuelo, primero frunció el ceño, pensando en la pregunta, pero al segundo abrió los ojos desmesuradamente.
-¡¡ Yo no hago eso!!- Me grito asustado, me había entendido.
-Las personas no pueden- Su cara era un poema.
-JA!! Te lo cuento en el almuerzo- Le dije entrando a clase, seguida de Alice y dejándolo con la intriga escrita en la cara.
-¿A que te refieres con lo de los gatos?- Me pregunto Alice aun sin entender.
-Lo dicho, en el almuerzo te lo cuento, te gustara - Le conteste sin perder mi sonrisa.
La mañana paso sin incidentes, pude hacer el examen de calculo sin problemas, ahora solo esperaba aprobar.
Al salir de la ultima clase antes del almuerzo, la de historia, me reuní con Alice y Rose en el pasillo y nos encaminamos al comedor. Íbamos hablando animadamente cuando un susurro en mi oído me hizo estremecer.
-Yo no ronroneo- Me dijo Edward entrando en el comedor.
-Ooooh si!!! Ya lo creo que lo haces- Le solté.
-No lo hago- Repitió el.
-Si lo haces- Le volví a contestar y empezamos una mini-discusión en nuestra burbuja.
-Que no-
-Que si-
-Que no-
-Que si-
-Que no-
-Que no- Le dije para confundirlo.
-Que si- Pico!!
-Lo que yo decía!!- Me reí, uniéndose a mi Alice y Rose que habían estado atentas.
-Maldición!!- Mascullo enfadado.
-Siempre me haces lo mismo- Se quejo.
- Y tu siempre picas- Dijimos las tres mientras nos reíamos y nos sentábamos en nuestra mesa, donde ya nos esperaban Jasper y Emmett.
-¿De que os reís?- Pregunto Emmett.
-Edward ha vuelto a picar- Le contesto Rose, dándole un beso.
-Nunca aprendes hermanito ¿y sobre que era esta vez?- Se rió Emmett.
-Edward ronronea- Le dije a todos, que me miraron asombrados.
-¡¡No digas tonterías Bells!!- Me grito el.
-No digo tonterías, lo has estado haciendo durante un buen rato- Le conteste.
-¿Como lo has hecho?- Pregunto Rose.
-Le he tocado el pelo- Dije encojiendome de hombros. Todos se echaron a reír mientras Edward se enfurruñaba en su silla, murmurando algo que no llegue a oír.
-Hazlo otra vez- Me dijo Alice entusiasmada.
-Hay mucho ruido- Le conteste. No quería que nadie lo oyera, prefería quedarme ese sonido para mi.
-Espera, toma mi móvil, grabalo- Demonio de duende. Cogí el móvil a regañadientes y me senté en las rodillas de Edward, que me abrazo de forma inconsciente. Puse en marcha la grabadora, pase mis brazos por su cuello y acomode mis manos en su nuca, empecé a acariciar su pelo apoyando mi frente contra la suya. El cerro los ojos y yo le seguí en cuanto empecé a oír ese suave sonido que me había hipnotizado horas antes. Aun no pasaba un minuto cuando pare de grabar.
Me levante y le pase el móvil a Alice, quien empezó a escuchar lo grabado.
Poco a poco sus ojos y su boca empezaron a abrirse y fue pasando el móvil para que los demás escucharan también, hasta que llego a manos de Edward.
En ese momento todos tenían la misma expresión de asombro que Alice, incluido él.
-¡¡Déjame probar!!- Grito Alice, abalanzandose sobre su hermano y sobandole el pelo.
-Venga, venga, ronronea...- Canturreo Alice...
Nada. Ni un solo sonido alio del pecho de Edward. Alice le miro con cara de confusion.
-Yo lo hare- Dijo Rose, acercandose.
Enterro los dedos entre su pelo, quien empezaba a molestarse. Igual que con Alice, no paso nada. Edward bufo enfadado.
-¿Quereis dejar de sobarme? Me estais despeinando-
Nos lo quedamos mirando y estallamos en carcajadas.
-Es imposible despeinarte mas de lo que ya estas, gatito. ¿Pero acaso te has peinado alguna vez en tu vida?- Le dije sin parar de reir.
-Supongo que tienes razon- Me dijo riendose tambien.
-Aun asi, dejadlo ya chicas- Se quejo.
En ese momento sono mi movil. Mire la pantalla y sonrei al ver quien era.
-Disculpad- Dije, separandome de la mesa para contestar.
-Jake!!- Salude cuando estube un poco lejos.
-¿Que pasa linda?- Me dijo Jake.
-El tiempo- Le conteste, como siempre.
-¿Que ocurre Jaek?-
-Este sabado Seth cumple 15 años- Me dijo.
-¿Estais preparando el ritual?- Pregunte emocionada.
-Tienes que venir, ademas te necesita, esta nervioso- Me contesto.
-Jake... yo... los Cullen...- No me dejo terminar.
-Estan invitados, sera divertido!!- Me dijo riendo...

Capítulo 10: El Experimento Capítulo 12: La Invitacíon

 
14446250 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10762 usuarios