Apenas hacia 2 meses que había cumplido los 15 años cuando mi vida cambio radicalmente.
-Bella, mamá y yo nos vamos a cenar a Seattle, celebraremos nuestro aniversario, ¿quieres venir?- Me preguntó Charlie esa tarde.
-No papá, marchaos vosotros y tened una noche romántica, disfrutad de un poco de intimidad- Le conteste con una sonrisa.
-No queremos dejarte sola-
-tranquilo papá, me iré a casa de Billy, dormiré con Rachel y Becca, eso si dormimos ...-
-Esta bien peque, llamare a Billy para avisarle, tu pórtate bien, eh?-
-Si papá, no te preocupes- Le dije con una enorme sonrisa dibujada en mis labios.

Entre a la cocina a eso de las 7 de la tarde para preparar algo de cena para llevar a casa de Billy y me encontré a papá vestido muy elegante, con un traje de chaqueta azul marino, una camisa blanca y una corbata a juego con el traje, se le veía un poco incomodo.
-UALA PAPÁ !!! Que guapo estás !!!- Le grite
-Gracias peque, ¿Crees que le gustara a tu madre?- Me pregunto algo nervioso.
-¿Que si me gusta? Por dios, estas tremendo!!- Dijo mi madre entrando en la cocina. Nos giramos para mirarla y nos quedamos los dos con la boca abierta. Mi madre vestía un precioso vestido halter, con la espalda descubierta y falda evasé, ceñido a la cintura, de un intenso color azul que hacia juego con el traje de mi padre. Llevaba unos zapatos de salón, de tacón bajo, color rojo oscuro, con una piedrecillas transparentes adornados los laterales. Había recogido los lados de su corto cabello rojo con unas horquillas que llevaban las mismas piedrecillas que los zapatos. Se maquillo ligeramente, resaltando sus labios de un tono rojo oscuro, a juego tanto con sus zapatos como con su bolso de mano.
-¡¡¡DIOS MIO!!!- Gritamos Charlie y yo a la vez.
-Mamá estas impresionante!!!-
-Gracias hija- Me dijo mi madre, muy contenta por mi comentario.
-Voy a tener que pelearme con mas de uno- Refunfuño mi padre, dándole un apasionado beso en los labios.
-Hugh!! Por favor!! esperad a que me vaya para hacer eso!!- les grite mientras me tapaba los ojos teatralmente y salia de la cocina con falsa molestia.
-Pasároslo bien, tortolitos-
-Y tu pórtate bien y no abuses de Billy !!- Me gritaron mis padres mientras me dirigía a casa de mi mejor amigo.
Cuando llegue, Jacob, Rachel y Becca ya me esperaban con una maratón de terror preparada para pasar la noche despiertos. Vimos todo tipo de películas  de miedo, los mas variopintos títulos y comiendo palomitas por doquier.
A eso de las 5:30 de la madrugada me despertó el molesto sonido del teléfono. Intente, sin mucho éxito, levantarme para contestar pero Billy fue mucho mas rápido que yo y ya estaba contestando cuando conseguí sentarme en el sofá.
-Diga?- Dijo con voz ronca por el sueño.
-Si, soy yo .... si, está aquí ..... - Le decía a una voz al otro lado de la linea.
-Dios mio- Susurro de pronto ...
Mi corazón se encogió dolorosamente, en ese mismo instante lo supe.
"¿Dios mio?" Pensé "No, eso no es nada bueno ... papá ... mamá ..." Me levanté del sofá rígidamente, me encamine al baño cogiendo mi mochila en el camino, me duché, me vestí, me cepille el pelo y luego los dientes, todo en 15 minutos, la ducha mas rápida de toda mi vida. Cuando salí, entré en la cocina, Billy estaba sentado en una silla, mirando al vacío, sumido en sus pensamientos.
-Billy ...- Se giró sobresaltado y al verme abrió los ojos desmesuradamente.
-Supongo que me esperan en el hospital ...- Las lágrimas empezaron a resbalar por las mejillas de Billy.
-Mi pequeña, debes ser fuerte, sabes que ellos lo querían así- Dijo Billy mientras de levantaba y me abrazaba.
-Me he quedado sola- Susurré dándome cuenta realmente de lo que pasaba.
-¡¡NO!!- Grito Billy -No estas sola, Isabella, nos tienes a nosotros y tienes a la familia Cullen, que a partir de ahora sera tu familia y ...-
-¿Mi familia?- Interrumpí -¿Cómo que mi familia? ¿A qué te refieres?- Le pregunté confusa.
-Bella, tus padres acordaron en su testamento que si algo les pasaba algún día, tu tutela pasaría a manos del matrimonio Cullen- Me explicó.
-No lo entiendo, ¿Por qué hicieron eso?- Pregunté mas confusa aún, ¿cómo era posible que mis padres hicieran algo así? ¿Qué pasaba con Billy entonces?. Yo me había criado con él, con su familia.
-Bella, pequeña, eso ocurrió cuando murió Sarah. Entonces yo no estaba en condiciones de cuidar de mi, ni de mi propia familia, así que los cinco hicimos una reunión con los abogados presentes y decidimos que tanto tus padres como los Cullen eran los mas indicados en cuidar de nuestros hijos en caso de que algo malo pasara. Yo acababa de perder a mi esposa y tanto mi alma como mi cuerpo y mi mente se resintió hasta el punto de desear reunirme con ella. La propuesta fue mía, no quería dejar a mis pequeños desamparados en caso de que en un arrebato de locura y dolor tomara una terrible decisión. Después mi depresión fue pasando, pero los testamentos no se volvieron a revisar y así siguen a día de hoy. Pero tranquila Bella, ahora lo más importante no es eso, debemos ir al hospital y preparar los funerales ... Yo ... Isabella, como anciano miembro del consejo de la tribu, te ofrezco con todo el dolor de mi corazón la posibilidad de un funeral Quileute-

No podía creer lo que Billy me había contado. Jamás pensé que él hubiera pensado alguna vez en suicidarse.
Me llevó un minuto analizar y procesar toda la información que me había dado y cuando me di cuenta del ofrecimiento que me estaba haciendo, me eché a llorar.
-Oh Billy!! a Charlie y Renné les habría gustado, sera un honor aceptar tu ofrecimiento.