La clase avanzaba igual que siempre mi mente se ocupaba de diversas cosas, mis pensamientos estaban en la clase y en mi madre al mismo tiempo, demasiadas ideas llegaban a mi, estar de nuevo con ella luego de meses de separación, la extrañaba enormemente debía admitirlo. Únicamente ella y yo así se conformaba nuestro mundo pero ahora se había integrado alguien más a mi mundo, repartir mí tiempo y lograr que esas dos partes coexistieran juntas eso seria el reto.
En mi recaía el miedo que las cosas saliese mal….

-disculpe la interrupción Prof.- apareció la secretaria de la dirección en la puerta del salón, toda nuestra atención paso de la pizarra a ella con curiosidad.- la directora necesita a la Srta. Swan en la dirección- rápidamente todas las miradas pasaron de la puerta a mi interrogares, mire a Adriana quien también me miraba, me encogí de hombros sin saber a que se debía todo eso. Mire a la profesora y ella hizo una señal en aprobación para que saliera, rápidamente y un tanto nerviosa recogí mis libros y los guarde en mi bolso. Íbamos por los desolados pasillos cuando mi mente comenzó a maquinar mil y una razones por las cuales me llamaría la directora, quizás me habían descubierto en una de mis escapadas nocturnas ¡OH Dios! ¿Si era así que haría? Seguro llamarían a mi mama ahora que esta en estados unidos entonces que mala impresión se llevaría de Jacob, y que pasaría luego. No podía imaginar que seria de mí si no pudiera ver a Jacob nada mas pensarlo aparecía un vacío en mi pecho 
Nunca me había planteado una situación así... ¿Que seria capaz de hacer por el? Estas siendo un poco irracional Ness solo llevan saliendo 3 meses la situación no puede ser tan mala y si lo fuera solo hay que aclarar las cosas. Suspire ya parada frente a la puerta de la oficina de la directora tome el pomo de la puerta y la abrí con sumo cuidado pero con el corazón latiéndome descontroladamente dentro de mi pecho. La puerta frente ami se abrió y no pude más que quedarme paralizada en mi lugar al mirar la escena.


- ¡hola Ness!- sentada frente a la directora se encontraba mi mama, con la mirada fija en mi, aun parada n el umbral de la puerta.
- ¡Mama!- grite de emoción y corrí a abrazarla, ella se levanto de inmediato y me recibió gustosa.
- ¿Como estas querida?- pregunto en mi oído mientras una de sus manos pasaban por mi cabello 
- Estoy muy bien ma’ – me separe de ella limpiando algunas lagrimas que escaparon de mis ojos por la emoción de tenerla ya frente a frente-¿que haces aquí?
- Pues, quedamos en almorzar, así que le e pedido permiso a tu directora para que te excuse de tus ultimas clases- suspire un poco al darme cuenta de lo paranoica que me estaba volviendo últimamente.
- Puede retirarse en paz señorita Swan- dijo la directora con una sonrisa simpática en sus labios. Yo solo le respondí con una sonrisa igual y un asentimiento mientras aun me mantenía abrazada de mi mama.
- Muchas gracias- hablo mi mama intercambiando un apretón de manos con la directora antes de salir de la oficina… juntas caminamos hasta mi habitación para que pudiera cambiarme el uniforme.- no entiendo por que quisiste cambiar tu libertad de vestimenta en Londres para esclavizarte con un uniforme.- hablo mi mama acostada en la cama, mirando todo el cuarto mientras yo terminaba de peinar mi cabello- no lo peines tanto cariño- apareció reflejada en el espejo justo detrás de mi- tus rizos son perfectos – paso sus manos por mi cabello dejándolos caer sobre mis hombros, miro fijamente mis ojos a través del espejo con una de esas sonrisas indefinibles que solo ella podía dar y que jamás pude identificar. Luego pedimos un taxi y nos dirigimos a uno de los tantos restaurantes de la ciudad.
- ¿Y que crees que tengan pensado esas personas del twiligth palace?- pregunte mientras mi mama me contaba su experiencia al llegar a estados unidos
- Realmente no lo se cariño, pero me parce que son muy astutos- sonrío mi mama sabiendo que esto seria un reto muy interesante para ella.- y cuéntame de Jacob, ¿quienes son sus padres que hacen?, ¿donde estudia?
- Pues….- hice una pequeña pausa mientras nos Traian el postre- realmente se muy poco, hemos salido por 3 meses y no hemos hecho nada formalmente, solo se que su papa es abogado y su mama tiene algo que ver con diseñadores
- ¿Ness como no puedes saber esas cosas tan importantes?- pregunto mi madre
- Pues, es que cuando estoy con el; el mundo desaparece es como si solo fuésemos el y yo y nadie mas- mi mama me miraba seria, sabia que no era muy lógico que no conociera esos pequeños detalles después de tres meses.- es que como te dije no hemos hecho nada formal… Jacob quiere conocerte primero y tu sabes causar una buena primera impresión- sonreí mientras ella solo comía su postre escuchándome atenta y pues luego conoceremos a toda la familia.
- ¿Conoceremos?
- Claro…para Jacob todos deben conocer a todos, ya te darás cuenta cuando lo conozcas personalmente.- esa tarde paso extremada mente rápido, mientras hablábamos de todo hasta lo mas mínimo. Entrada ya la noche volví al internado no me había dado cuenta lo cansada que estaba hasta que caí sobre mi suave cama….de la nada algo comenzó a vibrar ¡rayos! Mi cama no era vibradora que demonios era lo que provocaba ese vibrar que para este momento era simplemente molesto, me quede en mi lugar con los ojos cerrados esperando que terminara, desapareciera, se esfumara y me dejara dormir pero no sucedió seguía y seguía, un tanto molesta y mas que nada adormilada busque la causa de ese vibrar y no era nada mas que mi celular, mire la pantalla pero era tanto en cansancio que no pude leer solo me limite a contestar la llamada.
- ¿Hola?
- ¿Ness te e despertado?- era la voz de Jacob al otro lado de la línea
- Lamento informarte que si jake- respondí con los ojos cerrados mientras me arropaba con las sabanas
- Preciosa lo lamento…pero es que no podía dormir
- ¿Por qué?
- Es que…e estado pensando como presentarme con tu mama…tu sabes
- Ujum- dije apenas-
- Pues se me ocurrió que el próximo fin de semana podríamos ir a cenar los cuatro
- ¿Cuatro? 
- Si preciosa...
- ¿Quiénes cuatro?
- Pues...tu, yo tu mama y mi papa...- se hizo el silencio por un rato en los cuales comenzó de nuevo a atacar el sueño – Ness preciosa estas de acuerdo…
- Si, si claro, me parece bien.- dije en un bostezo.
- Creo que mejor te dejo dormir y por la mañana hablamos mejor
- Esta bien jake buenas noches- susurre no alcance a escuchar su respuesta calando me deje llevar por el sueño nuevamente.

Luego de dejar a Ness en el internado, tome un taxi y me dirigí al hotel, aun no le había echado un vistazo y esta noche tampoco lo haría. Después de que Carlos el chofer que habían enviado a buscarme al aeropuerto se ofreció a dejarme en el internado jurando que mi maleta llegaría totalmente a salvo al hotel. Pase una excelente tarde con mi hija ella simplemente es la luz de mis ojos.

El taxi avanzaba por la ciudad que aun bajo las sombras nocturnas se mantenía despierta personas iban y venían, del trabajo, al trabajo a algún club nocturno para divertirse el mundo se mantenía en constante movimiento, siendo cual fuese el motivo; eso es lo que adoraba de cualquier lugar del mundo que visitara todos se mantenían en constante movimiento dándole vida a cada ciudad, pueblo o nación 

- señora hemos llegado.- dijo el taxista sacándome de mis pensamientos
- muchas gracias- con una sonrisa amable le pague al hombre y me dispuse a bajar del auto, frente a mi se alzaba un excelente edificio, elegante y moderno también, con diversas banderas ondeando y justo en medio de todas ellas encima de la puerta que daba la bienvenida a todo aquel que se aventurara en ese lugar. Aquello que resaltaba con letras negras perfectamente elaboradas y sumamente elegantes sobre las paredes teñidas de un sutil color crema dándole el nombre de “twiligth palace” 
- buenas noches y bienvenida al palace- me recibió el portero con una sonrisa encantadora mientras abría la puerta dejándome entrar 
- muchas gracias- le sonreí de vuelta mientras entraba al lugar. El recibidor era muy elegante sus paredes teñidas de color crema, con una decoración en negro y dorado observe todo a mí alrededor antes de dirigirme a la recepción.
- Buenas noches.- saludo la mujer al verme acercar
- Buenas noches- salude de vuelta antes de continuar hablando- quisiera por favor, me entregue las llaves de mi habitación
- Por supuesto, dígame su nombre- la mujer me miraba atenta con una sonrisa en sus labios.
- Isabella Swan- la mujer al escuchar mi nombre tecleo algo en su computadora y lego me entrego la llave.
- Aquí tiene Sra. Swan, bienvenida a L.A y tenga una excelente estancia en el palace- asentí en agradecimiento con una sonrisa mientras con la lave en mi mano me dirigía al elevador, luego de esperar unos segundos después, estaba ya dentro del elevador, observe el llavero y decía el nombre del hotel y justo detrás de el y con letras muy legibles “hbt. Imperial” mire el tablero del elevador y pulse el botón que llevaba el mismo nombre. Minutos después me encontraba caminando por un pasillo completamente solo y una única puerta frente a mi introduje la llave en esta e inmediatamente se abrió mostrando algo que mis ojos no habían visto jamás; era todo un atardecer, literalmente captaba la esencia de un atardecer.
En el techo había dibujado todo un cielo que a medida que este llegaba a la pared donde se encontraba la inmensa cama; se iba iluminando, pues en dicha pared y como espaldar de la cama se podia observar los últimos rayos del sol. Técnicamente el respaldo de la cama estaba teñido de todos los hermosos colores del crepúsculo elevándose un poco sobre el techo, tales colores hasta cierto punto se veían desaparecer en un oscurecido cielo nocturno con estrellas y todo. Junto a la cama estaba mi maleta y sobre la cama un elegante arreglo de diversas flores, tome la tarjeta que en el había y esta solo decía “bienvenida al palace Sra. Swan

- me pregunto si se tomaran las mismas molestias por todos sus huéspedes.- me pregunte en voz alta mientras colocaba el arreglo en una de las mesas. Luego de ducharme y prepararme para dormir tome mí lacto y en un cuadro de observaciones anote todo lo que el palace representaba ahora para mí.
…………………………….

-volvamos al hotel Jaime.- dije con mi imitación de señora de alta inglesa
-como usted ordene miladi- respondió el chofer; que casualmente se llamaba Jaime, con una sonrisa discreta mientras me veía sentaba en el asiento trasero del auto. Eran ya alrededor de las 11:30 PM había optado por contratar a un chofer para mi constante traslado por la ciudad, cansada suspire recostando mi cabeza en el respaldo del asiento. Una semana había transcurrido y para los negocios había sido una semana lucrativa. La cadena de hoteles “Imperial Castle”. Tenían sin duda una gama de hoteles de mucho atractivo pero más que nada un ingenio inigualable e impresionante por parte de sus dueños. Dentro de aquella fachada estilo medieval se escondía toda una fortaleza llena de tecnología, realmente muy impresionante la manera sutil y elegante como disimulaban tanta electrónica simplemente inimaginable la manera como con solo decir una palabra la puerta de la habitación abría. Y por medio de un control remoto controlabas todo incluso las persianas del lugar. Había pasado una semana entera conociendo las instalaciones del aquel lugar en compañía de Aro, Marco y Cayo Vulturí los dueños y cabeza de aquel imperio. Personas realmente muy amables y centradas en lo que desean
- ¿desea ir por algo de comer?- abrí los ojos al escuchar la voz de Jaime. Mire sus ojos a través del espejo retrovisor 
- no, vamos al hotel, estoy cansada- respondí con una leve sonrisa en los labios

- buenas noches señora Swan.- me saludo la recepcionista mientras buscaba mi llave 
- buenas noches- salude de regreso antes bostezar
- Sra. Swan, le han dejado un mensaje…esta tarde.- dijo la mujer entregándome la llave junto con un pequeño papel 
- Muchas gracias, tome ambos objetos y me dirigí al elevador, tome la note y la desdoble mirando que con una letra legible estaba escrito el mensaje, era de Ness y me comunicaba que el domingo tendría la oportunidad de conocer formalmente a Jacob. Revise mi celular y estaba apagado seguro sin carga ; al llegar a la habitación no dude un segundo en caer a merced del sueño y el cansancio 

……………………………..

El sábado y parte del domingo lo pase prácticamente encerrada en mi habitación del hotel esclava de mi computadora y miles de papeles, si todo salía como lo tenia planeado en dos meses estaría volviendo a Londres dos semanas serian suficiente para formar contratos y cerrar tratos con los que están dispuestos a aceptar tanto mis peticiones como yo las suyas.

- ¿quien es?- pregunte cuando escuche que tocaban la puerta de la habitación; era domingo en la tarde y yo estaba enviando faxes a Ángela de algunos documentos importantes, folletos, fotos y muchos otros trámites aburridos.
- ¡MAMA!-grito Ness molesta del otro lado de la puerta haciéndome saltar dejando caer un sinfín de documentos, corrí a abrir la puerta y al hacerlo encontré a una Ness muy molesta con los brazos cruzados.
- Hola cariño… ¿como estas?- pregunte con mi mejor cara de ángel, sabia que algo se me había olvidado pero ¿Qué?, abrí la puerta dejando que entrara.
- Mama que desastre tienes aquí, y mira como estas vestida…- mire mi atuendo
- ¿Que hay de malo? ¿No te gustan mis pijamas de ositos?- mi hija aun con sus brazos entrecruzados sobre su pecho, comenzó a mover su pie contra el piso provocando un sonido un tanto molesto, que solo podía demostrar impaciencia
- Mama- comenzó a hablar de espacio- son las 5 de la tarde… y hoy quedamos en que ibas a ir conmigo y con Jacob a cenar para que lo conocieras formalmente- ¡OH! Rayos era eso 
- Cariño lo lamento…se me olvido completamente…con tanto trabajo- dije esto ultimo señalando todo el cuarto patas arriba.
- ¿Es que acaso no te interesa conocerlo mama?- me miraba seria- dijiste que habías venido también a pasar tiempo conmigo y yo solo veo trabajo- camine, hasta quedar parada frente a ella
- Cariño de verdad que lo siento pero sabes como es todo esto…- levante su rostro con mi mano para poder mirarla a los ojos.- aun tengo tiempo…puedo ducharme súper rápido vestirme linda e ir- Ness me miro seria a los ojos- cariño te lo recompensare…de verdad a ti y a Jacob si me cae bien- sus ojos seguían sendo serios – vamos renesmee estoy tratando de acomodar la situación.
- Arréglate rápido… y mas vale que esas compensación sea buena.- bese la frente de Ness antes de salir corriendo a la ducha
- Cariño elige algo bonito allí en mi maleta- hable desde el baño
- ¿Que elijo?
- No lo se, unos jeans una camisa linda…
- ¡MAMA! Vas a conocer a mi novio no al cine tienes que vestirte mas seria- asome mi cabeza por la puerta del baño.
- Esta bien, elije algo elegante, pero cómodo cariño… recuerda que toda esta semana e usado puros zapatos de estilete- deje a Ness a cargo de mi vestimenta mientras me duchaba relajando mi cuerpo, la sensación era simplemente placentera todo el estrés que llevaba acumulado comenzaba a desaparecer.
- Mama, ¿te fuiste por el desagüe?- pregunto Ness tocando la puerta del baño, abrí mis ojos y cerré la lave de la ducha.
- No cariño ya estoy lista.- finalmente Ness había elegido un sencillo vestido negro con un escote discreto en la espalda un vestido de coctel que convino con unas discretas zapatillas igualmente negras. Luego que estuve lista, fuimos a un lindo restaurante italiano muy cerca de la playa.
- Buenas noches señora Swan- nos recibió un chico moreno, muy apuesto y con una sonrisa muy calida. Levantándose de la silla donde estaba sentado demostrando ser un caballero ante nosotras.
- Muy buenas noches, me imagino que tu debes ser Jacob- sonreí amable al chico mientras extendía mi mano para estrecharla en un saludo
- Así es señora y es un gusto por fin conocerla.- hizo un ademán para que lo acompañáramos en la mesa y así lo hicimos
- Igualmente Jacob, me han hablado mucho de ti…- le dije sincera mientras tomaba la servilleta de la mesa y la colocaba sobre mis piernas 
- Espero que hallan sido cosas buenas.- respondió con simpatía mientras miraba a renesmee a los ojos besando su mejilla. Bueno el chico estaba comenzando a gustarme respetaba el echo de que estaba sentada frente a ellos al momento de demostrar cariño. comenzamos a hablar de muchas cosas el chico parecía ser responsable y muy difícil de avergonzar, celebrando sus victorias y derrotas con el mismo tono de arrogancia y orgullo.- me disculpan un segundo- se excuso y retiro de la mesa atendiendo su teléfono celular.
- ¿Lo apruebas mama?- pregunto renesmee curiosa pero mas que nada nerviosa 
- Aun es muy pronto Ness pero si te hace feliz te apoyo…
- Mama eres la mejor- mi hija me abrazo con fuerza acto que devolví de igual manera 
- ¡Chicas! Les tengo una mala noticia- dijo Jacob cuando volvió a la mesa 
- ¿Algo grave?- pregunto renesmee 
- No, preciosa…nada grave solo que mi padre no podrá acompañarnos esta noche- Jacob me miro con disculpa 
- No sabía que nos acompañaría….
- Hay si, mami…su papa nos acompañaría….- renesmee sonrío traviesa- se me olvido decirte.
- Bueno, ya no importa no vendrá- respondió Jacob con una sonrisa simpática a pesar de que en sus ojos se podía ver algo de tristeza.


Mientras tanto, en un auto al otro lado de la acera.

Luego de salir de la oficina, subió a su auto recordando que tenía un compromiso con su hijo, estaba feliz por el no conocía a la chica pero si era capaz de hacer que si hijo tuviera una sonrisa en los labios tan solo al escuchar sonar su celular era suficiente para el.

Esa felicidad albergaba una parte de su mente, pero una cantidad de sentimientos encontrados no podían salir de su mente luego de aquella llamada, no podía describir la cantidad de emociones que sintió en el momento en que escucho su voz. Y solo pensar que el simplemente había respondido el teléfono de la oficina de su padre, ahora no podía evitar preguntarse que haría dentro de dos semanas, cuando la tuviera ya frente a frente.

Lentamente estaciono el auto cerca del restaurante un tanto lejos ya que habían diferentes autos estacionados, pero aun así pudo distinguir a Jacob sentado cerca de la ventana junto con dos personas mas, una de ellas era una chica mas o menos de la misma edad de el, con el cabello color cobrizo que casi le llegaba a la espalda baja, rizado en las puntas muy hermoso, con una sonrisa encantadora. La otra persona era una mujer mucho más mayor que ellos, con un hermoso vestido negro con un escote en el centro de la espalda provocador pero discreto, su cabello lo tenia de un lado. Estaba apunto de bajar del auto cuando aquella mujer volteo...

-¡OH!  ¡Diablos es ella!- dijo apenas vio aquel rostro delicado, iluminado por la tenue luz  de los pintorescos faroles, que adornaban aquel lugar…su voz fue totalmente un susurro  su mirada  no se aparataba de ella que a pesar estar de espaldas no podía negar jamás que no fuese ella, esa mujer la que hace tantos años sus ojos no miraban, a la que sus idos no escuchaban… pero su mente sin duda jamás podría ni  podrá olvidar.

Luego de un fuerte suspiro seco sus manos sudorosas  y temblecas con su pantalón de mezclilla miro una vez más en  su dirección y sin poder evitarlo se pregunto si acaso ella lo recordaría.

Estuvo allí unos minutos mas y descubrió que aun no estaba listo para enfrentarse cara a cara con ella, su mente y su alma aun no estaban listas para enfrentar lo que  eventualmente les venia. Apretó su tabique nasal  sabiendo que esto seria algo grande, demasiado grande, era obvio que aquella chica la que ahora estaba tomada de la mano de  su hijo era la hija de ella…. una pizca de coraje recorrió su cuerpo  al  darse cuenta que ella había continuado con su vida,  aun que claro el también lo había echo. Pero eso no le daba  el derecho de haber desaparecido de su vida luego de todo lo que tuvo que pasar. Una vez mas suspiro  e hizo lo mas prudente que se le ocurrió llamar a su hijo  y excusarse  vagamente  por no poder asistir intentando camuflar  la molestia que en esos  momentos sentía con  cansancio. No había cosa que le doliera mas que decepcionar a su hijo en un momento tan importante para el, pero el daño seria mas grande si se presentaba en aquel lugar sin estar mentalmente preparado para lo que le venia.

Arrano el auto  en dirección a su hogar, sin poder dejar de pensar  las  mil y un cosas que tenia que decirle a esa mujer… pero mas a un se preguntaba así mismo y al destino como es que podía hacerle algo así volver a ponerla en su camino cuando ya  estaba seguro que  su recuerdo no lo causaba ningún tipo de sentimiento.

 Era injusto en muchos niveles, tanto para el como para su hijo. Colocarlo en una situación tan difícil ahora que su vida estaba realizada el fantasma del pasado aparecía y revolvía las piezas manejando el juego a su  manera y disposición.