Encuentro inesperado

Autor: emely282
Género: Romance
Fecha Creación: 31/03/2012
Fecha Actualización: 04/03/2013
Finalizado: SI
Votos: 6
Comentarios: 19
Visitas: 27847
Capítulos: 25

Vivir en un lugar pequeño como este en donde lo más interesante seria un día enteramente soleado. Frustrante seria la palabra con la que definiría mi vida en este lugar. Estancada es como se encuentro, sin poder ver más allá de las montañas y el musgo verde, había nacido y crecido en este lugar siempre anhelando huir de este lugar, conocer todo aquello que los libros describían, no existía libro en la biblioteca de este pequeño y decadente lugar que ya no haya leído al menos diez veces ya.

En un día normal y decadente como siempre saliendo a la misma hora, como cada día una fina lluvia y una densa niebla cubría la carretera donde por primera vez en mis veinte años en este lugar sucedió algo mas interesante que un día soleado..
 

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 16:

Los malditos aparatos sonaban y chillaban  provocando que mi dolor de cabeza no desapareciera jamás. Estaba a punto… lo juro por dios que me acababa de salvar la vida y la de Edward. Que desconectaría todos esos ruidosos  y molestos aparatos.

 

Edward y yo, ambos estábamos en lo que parecía una habitación de un hospital, en camas separadas. El aun continuaba durmiendo.  Y como no hacerlo después de todo lo que paso hace… ¿hace cuanto tiempo? Había perdido por completo el sentido de  tiempo y espacio. En mi mente solo tenia recuerdos de el estrés, el  pánico y la desesperación que habíamos vivido ambos. No podía dejar de mirar a Edward tan pacifico y  sereno, aquella imagen solo podía revolver mas mis pensamientos. Pero es que las circunstancias eran algo caóticas no. Creí que iba a morir y no fue así, aunque poco no falto ¿acaso es necesario tener tu vida en completo riesgo para decir lo que llevas guardado? deje de mirar a Edward  y de imaginarme cosas que no me ayudaban.

 

 

Me quede observando una única ventana que había en aquella habitación, intentando sacar de mi mente las caricias y  besos de Edward pero era inútil. Por un lado estaba Edward y muchos sentimientos reviviendo, por el otro reneesme…y al final un único daño enorme y caótico para todos. ¿Podía acaso arriesgar todo y  deshilar la vida de todos por el único capricho de estar con la persona que amo?

 

En la ventana apareció una enfermera, quien me miro unos segundos y luego continuos su camino...apareciendo de nuevo...Esta vez con una mujer. Pero no cualquier mujer.

 

-         hola querida... ¿como te encuentras?

-         ¡Señora Cullen!- hable sorprendida mientras intentaba incorporarme en la cama.

-         Quédate quieta mi cielo, yo puedo ir allá.- me sonrío ampliamente y tomo un pequeño banco que había en la habitación y  se sentó a mi lado- ¿Cómo te sientes?

-         Pues…- no sabia muy bien de que iba toda esta situación pero me parecía completamente extraña.- bien, aun sigo con vida.- sonreí lo mejor que pude.

-         No sabes lo mucho que eso me alegra…estuvimos muy preocupados.

-         ¿Estuvieron?

-         Si claro…Jacob y Ness mas que todo.

-         ¿Usted estaba con mi hija? ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Dónde esta mi niña?

-         No te exaltes querida.- esme puso su mano en mi mano y sonrío amable.- antes de responder tus preguntas quisiera que me escucharas unos minutos. Será que puedo.- la mire extrañada, pero que podía ser mas importante que saber donde esta mi hija.

-         Hable usted.

-         Primero quiero pedirte disculpas. Antes de contarte esto que llevo guardado desde hace mucho...- ahora si que no entendía ¿que iba a decirme? ¿Qué era mi madre?

-         Señora Cullen creo que….

-         Escúchame por favor.- pidió amable y yo solo asentí en silencio esperando.

-         No se si sabes que luego de que Edward volviera rendido a casa por no poderte encontrar, se marcho de casa yéndose a vivir  a la casa que mis padres le habían dejado como herencia.- la miraba atenta sin entender.- pues nunca estuve de acuerdo con el comportamiento que tenia Carlisle con Edward, pero el insistía en presionarlo y llevarlo por el camino que pensaba que era el correcto- ella suspiro mirando  el piso.- un día hablando con la nana de Edward, supe de  ti…- la mire enarcando una ceja, entonces ella levanto la vista y me miro- supe que por ti mi hijo no deseaba volver a su vida. Si no que prefería estar apartado e ignorar a su familia…

-         No entiendo.

-         Pues, Margaret resulto ser…prima de la nana de Edward.

-         Ósea que usted sabía  la situación mejor que todos y aun así dejo que pasara.

-         Las cosas no son así…déjame terminar de hablar- yo asentí mirándola- yo supe esto después…cuando Edward no te encontró y decidió aceptar la propuesta de su padre, claro con sus reglas… el punto es que yo tampoco sabia que hacer, así que solo seguí mis instintos y fui a forks a hablar con Margaret yo personalmente, pero resulto que ella tampoco sabia absolutamente nada de tu paradero. Solo me dio el por que de tu desaparición. Y querida créeme cuando te digo que al saber que  iba a ser abuela fue la alegra mas grande que sentí luego de ser madre, pero toda esa felicidad fue empañada con tu huida- esme suspiro mirándome- entonces hice lo que me pareció  mas adecuado.- guardo silencio por un momento, momento que para mi fue eterno.- contrate a un detective privado que  para el nacimiento de reneesme ya me había dicho donde estabas, que hacia y  donde vivías.  Sabía absolutamente todo. Pero por alguna razón me mantuve al margen pues mi hijo estaba resurgiendo de las cenizas y aunque no estuviera completamente feliz, estaba comenzando a hacerlo.

-         Usted fue...-me calle un momento intentando procesar todo lo que me estaba diciendo, aunque también intentaba  hallar las palabras y mi voz.

-         Yo fui la persona que se encargo de que, avanzaras  he hicieras lo que te gustaba. Sin que les faltara nada a ti y mi nieta.

-         Entonces, ¿no fue la tía de Ángela la que  me ayudo con  todo  lo de la agencia de viajes?

-         No, Ángela a sido mi cómplice y espero que no te molestes con ella somos excelentes  amigas desde hace muchos años y  por medio de ella me asegure de que  todo fuera de maravilla con ustedes dos.- esme acaricio mi cabello con una sonrisa tierna.

-         ¡Así que tu sabias!- la voz de Edward resonó en la habitación, molesta. Ambas giramos a verlo y se podía notar que estaba furioso- mama tu sabias, donde estaba…sabias de la existencia de reneesme desde el principio ¿y no fuiste capaz de decírmelo?

-         Edward hijo, no te exaltes…no hará bien a tu salud

-         No me cambies el tema… ¿por que nunca me dijiste?- esme se levanto y camino hacia Edward arrodillándose a la altura de la cama, quedando frente a el sin importarle ensuciar su hermoso y delicado vestido.

-         Intente hacerlo querido…pero en el fondo no quería alejarte de mi, no quería sentir de nuevo ese vacío en mi pecho que había sentido cuando te marchaste aquel día. Aparte mi mirada de aquella escena  era completamente privada, no solo por el hecho de que era una conversación madre e hijo si no que  ahora mi  mente estaba completamente desecha.

-         Mama, hablaremos de esto luego.- Edward beso la frente de su madre y ella hizo lo mismo, esme limpio las lagrimas que había escapado de sus ojos y luego nos miro sonriendo.

-         Le diré a los chicos que ya despertaron.- esme salio de la habitación dejándonos a solas…pero ninguno dijo absolutamente nada era demasiado lo que había en nuestras mentes como para llenarlas mas...

-         ¡¡MAMA!!- entro reneesme como un tornado a la habitación, directo a mi abrazándome.

-         Hola mi cielo.-  respondí el abrazo, mirando a Edward de reojo, este simplemente me sonrío de lado con tristeza en la mirada.

-         Mami lo siento…¡lo siento mucho!- reneesme beso mis mejillas con lagrimas en sus ojos

-         Todo esta bien mi cielo…no paso nada.

-         ¿Cómo que no paso nada? Mama es que te volviste loca…casi mueres. Sabes donde los encontraron

-         No mi cielo donde nos…

-         Los encontraron sobre el techo de una casa…después de que la mayoría del agua del Tsunami bajo. No puedo creerlo- reneesme volvió a abrazarme con fuerza-

-         Hay, hay…cielo no estaré gravemente herida pero si tengo moretones

-         Lo siento mami- dijo reneesme apenada alejándose un poco de mi- oye por cierto me encanta ese nuevo look

-         ¿Que look?- reneesme sonrío y busco en su cartera un espejo compacto y me lo dio.

-         ¡Ho por dios! ¿que le paso a mi cabello?- mire a reneesme asustada. Al ver que mi cabello estaba demasiado corto…más arriba de mis hombros para ser clara.- y tu ¿por que no me dijiste nada?- mire Edward seria y este simplemente balbuceo levantando las manos  en rendición

-         Mama, lo que paso es que cuando los encontraron en aquel techo…había un árbol enorme que había sido arrancado de raíz por el terremoto, y fue arrastrado por el tsunami así que pues el árbol quedo pisando tu cabello y que suerte de que fuera tu cabello y no tu cabeza…entonces lo rescatistas hicieron lo mas prudente no-  reneesme miro a Edward quien  se encogió de hombros- y cortaron tu cabello para poderte sacar de allí por que tenían demasiada agua en los pulmones y sus signos vitales eran casi imperceptibles.- lentamente pase mis manos por mi cabello una y otra vez dándome cuenta que no era un sueño, era real.- aun debo decir que lo arregle mucho ma’ por que te lo había cortado de un ¡horrible! Estas a la moda.- reneesme sonrío y yo simplemente suspire.- y ¿Cómo esta usted señor Cullen?

-         Estoy muy bien Ness gracias… pero ya que eres hoy la encargada de dar noticias dime ¿donde estamos?

-         Bueno primero estaban en un intento de hospital en Hawai…pero el señor Carlisle los encontró….por que tengo que decirlo el señor Carlisle movió cielo y tierra y cuando estuvieron mas estables los trajeron a los Ángeles.

-         ¿Hace cuanto de eso?- reneesme hizo una mueca.

-         Tres días exactos.

-         ¿estuvimos inconciente por tres días?- reneesme asintió

-         Si señor Cullen...tres días que dormilones ¡he!

-         ¡Papa!- entro Jacob apresurado cerrando la puerta de la habitación.

-         Hola hijo...- Jacob se acerco a Edward y le entrego lo que me pareció un pote de helado de mantecado

-         Aquí tienes.- dijo Jacob sonriendo. Edward agarro el pote y lo escondió detrás de uno de los aparatos electrónicos que había junto a la cama, luego miro a reneesme y a mí  y con una señal nos pidió que no dijéramos nada.

-         No creas Jacob que con eso remedias lo que hicieron.- Edward miro serio a Jacob y a reneesme quienes bajaron la mirada.

-         Edward tiene toda la razón…reneesme estoy muy decepcionada de ti, jamás pensé que harías algo así.- mire como mi hija se ponía triste ante mis palabras.- pero  Edward y yo no tocaremos el tema- mire a Edward antes de continuar hablando.- cuando salgamos de aquí aclararemos cuentas.- mire a ambos adolescentes quienes asintieron en silencio.

-         Y… ¿como es que terminaron juntos?

-         Me encontré a bella esterita en un pasillo….por que nues…reneesme  había desaparecido y cuando íbamos a buscarte Jacob resulto que nos quedamos en el ascensor por el terremoto hasta que salimos por  suerte.

-         Y luego el tsunami…y después aquí.- concluí yo mirando a Edward por su casi metida de pata-

-         Pues lo están sobre llevando muy bien…- dijo Jacob abrazando a reneesme por sobre los hombros. Acción que me hizo entender que las cosas se pondrían muy difíciles.

-         Pues, si fue algo estresante pero…sigo vivo ¡no!- dijo Edward un tanto despreocupado.

-         Dilo por a ti… yo por mi parte me alejare de las islas y me divorcio definitivamente de los ascensores…de ahora en adelante solo confiare en las escaleras.- todos rieron ante mis palabras mientras yo los miraba seria.- es enserio.

-         Jacob…¿y tu madre?- la sonrisa de Jacob y reneesme se borro inmediatamente

-         No se sabe nada de ella papa.

-         ¿Absolutamente nada?

-         No.- el silencio se hizo en la habitación, hasta que entro un doctor pidiendo a los chicos que se marcharan para dejarnos descansar.

-         Yo creo que ella estará bien Edward.

-         Si, yo también espero eso. Alice es muy fuerte.- Edward paso si mano por su cabello y luego se inclino aun lado.

-         ¡¡Huy!! ¡¡Lindas pompas!!- dije riéndome haciendo que Edward  se acomodara enseguida.

-         ¡Bella!

-         ¿Que? en ningún lado esta prohibido ver

-         Ahora no te daré helado…- mire con la boca abierta a Edward y este me ignoro ganándose un almohadazo – y tampoco te  devolveré  la almohada.

-         Eres un estupido Edward.- dije haciendo puchero ganándome escuchar su carcajada.

-         ¿Bella dime que haremos?

-         ¿Con que?

-         Con nosotros y los chicos…

-         Crees que se.

-         Hay que decirles

-         Tu crees

-         Es la única forma que existe para que nos entienda bella…o seguirán haciendo tonterías como escaparse.

-         ¿Llego la hora?- Edward asintió a mi pregunta – ¿me darás helado?

-         Solo si duermes conmigo esta noche.- lo pensé unos segundos, antes de pasarme a su cama realmente, la noche la pasamos hablando puras tonterías hasta que el helado se acabo, finalmente nos quedamos dormidos hasta el otro día que llego una enfermera y nos encontró a ambos dormidos en la misma cama. Ambos recibimos un regaño muy grande por su parte pero igual no prestamos mucha atención pues todas las noches lo hicimos. dos días antes de darnos de alta  esme y Carlisle le dieron noticias a Edward de que había encontrado a Alice gravemente herida entre los escombros de lo que antes era un tienda en aquellos momentos…sentía que sobraba por completo.

 

Al salir de alta yo insistí en ir a un hotel…ya que reneesme tenía mi tarjeta de crédito pero Edward se negó completamente y nos suplico que nos quedáramos en  su casa tuve que aceptar por que reneesme se puso en el mismo plan de Edward. Y esta muy claro que ganaron por que por más que sea no le podía ganar a ese dio de gemas  que tenían por ojos suplicando. Situación más incomoda que esa no hubiera conocido.

 

 

-         Jacob, reneesme ¿Dónde están?- llamo Edward bajando las escaleras, dándome una mirada seria. Era la hora

-         ¡Estamos en la cocina!-grito Jacob

-         Por favor vengan.-Edward se sentó a mi lado y minutos después aparecieron Jacob y reneesme- por favor siéntense.- a ambos se les borro la sonrisa que tenían al vernos serios y se sentaron frente a nosotros. Esto no seria nada fácil.

-         Papa, ya se lo que nos van a decir…y no es ¡justo! Tú sabes perfectamente que Ness y yo nos queremos y es totalmente injusto. Además nunca nos dieron una razón…y lo que hicimos lo hicimos con la intención de que entendieran lo que nosotros sentimos el uno por el otro. Y que no podrán hacer nada.

-         Jacob…terminaste- pregunto Edward serio, a lo que Jacob  quien se veía muy nervioso asintió.

-         Vean chicos yo se que nosotros hemos sido muy injustos con ustedes…no les dimos una razón y…

-         Es cierto no la dijeron.- dijo reneesme mirándome seria. Yo suspire pesado y mire a Edward.

-         Bien chicos la razón es…- Edward tomo mi mano y ambos las apretamos con fuerza- la razón es que…reneesme es mi hija.- ambos chicos ensancharon los ojos  sorprendidos mientras Edward y yo no soltábamos el agarre de nuestras manos

-         ¿Como?- preguntamos ambos al mismo tiempo.

-         Así es reneesme Edward es tu padre. Y Jacob es tu medio hermano…esa es la razón por la que  intentamos separarlos.- nadie dijo absolutamente nada…reneesme parecía estar en shock  y Jacob igual mientras que Edward me miraba y yo a el. Estaba echo las cartas ya estaban sobre la mesa.

Capítulo 15: Capítulo 17:

 
14447182 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10762 usuarios