EDWARD POV:

Otro dia de mi vida, iria a mi empresa como siempre, hoy me tocaba escoger a la nueva asistente, tanya estaba insoportable con ese tema siempre me espantaba las asistentes porque decía que eran unas zorras que lo único que querían era acostarse conmigo, ella sabia que yo no lo permitiría, a pesar de todas mis mierdas, se podía decir que la quería, ella me cuidaba siempre procuraba lo mejor para mi,era una buena mujer, aunque muy posesiva a veces.

- Oh Edward si si dame.- gemia tanya mientras la envestia de manera brusca, a ella le gustaba y sabia que yo lo necesitaba asi para estar bien.- ah ah ah, estoy cerca Edward, dame mas duro.

- Oh ..-dije y porfin puede venirme llevándome con migo a tanya y derramando mi semilla en su interior

- Edward, eres tan salvaje en la cama me gustas asi, sentirte dentro es lo mejor.

- Me alegra que te guste , ahora debo irme llegare tarde a la empresa

- Edward no vallas a escoger una secretaria muy exuberante y bonita ya sabes que son todas unas zorras.

- Esta bien tania  no lo hare.

Sali de allí dejando a tanya en la ducha, hace 1 año que vivíamos juntos aun no me decidia casarme con ella aun lo veía muy pronto. Angela me recibió con una gran sonrisa como siempre , yo solo asentia .

- Buenos días señor cullen las aspirantes a asistente han llegado.

- Esta bien señorita weber hagales la prueba y apenas finalicen las haces pasar una por una como siempre lo hacemos.

-Esta bien señor cullen enseguida.- angela salio de mi despacho y yo me sente en mi gran sillón, pronto vendrían esas chicas y debía escoger a una.

Luego de unos minutos angela trajo a la primera chica, su nombre era Eleonor mots, era algo desaliñada y no me gustaba para nada su personalidad hablaba demasiado, le dije que no estaba interesada en ella para el puesto y parecio no afectarle, luego de ella entro alessandra  giliard una pelinegra , un poco timida y algo atontada a decir verdad le dije lo mismo que a la otra chica y esta salio de allí cabizbaja. La siguiente chica que entro llego directo hasta mi mesa y se sento cruzada de piernas tenia una falda muy ajustada y corta la cual no dejaba nada a la imaginación, tenia el escote del vestido abierto y se le alcanzaba a ver la parte superior del sostén, tal como decía tania parecía una zorra. Intento acercarse a mi pero la apartre diciéndole que yo necesitaba una asistente no una calientapollas, la chica medio una bofetada y salio de ahí como un demonio. La mejilla me ardia y me encargaría de que no la contrataran en ninguna empresa donde me la pudiese topar, su nombre era lauren rosend.

Le dije a angela que pasara a la siguiente, cuando entro la chica que venia junto a ella me dejo estupefacto, era una linda chica de cabello marron chocolate al igual que sus ojos, piel blanca como la leche y un cuerpo de lujo, no era muy exuberante pero tenia lo suyo, lo que mas me llamo la atencio fue que para verse tan mujer desprendia un aire de inocencia en su rostro y en su mirada, note que me quedo mirando como inspeccionándome, Sali de mi ensoñación cuando angela hablo

- Señor cullen ella es Isabella swan.- me dijo angela

- Esta bien señorita weber puede salir.- le respondi angela salio de inmediato y volvi de nuevo mi atención a la señorita swan que aun seguia mirándome, no resisti el impulso y le dije…

-A terminado su inspección señorita swan?, puede tomar asiento pase.

- Perdón?.- me  pregunto.

- Que si a terminado su inspección.- volvi a decirle, la cara de esta chica era un poema al ver su expresión corrobore lo de su aura de inocencia.- le gusta lo que ve?.- le dije con mi mejor sonrisa torcida, no se porque hacia esto con ella, no solia comportarme asi.

- Lo siento no lo entiendo.- volvió a decirme

-  A entrado y se a quedado parada en la puerta mirándome fijamente como si de un bicho raro se tratara.- le explique aunque pareciera que como un bicho raro no me encontraba.

- Disculpe si lo incomode.- se disculpo bajando la cabeza, pobre chica de seguro ya se había dado por perdido el puesto.

- No se preocupe ya estoy acostumbrado se lo que causo en las mujeres, pero señorita es solo una cara.- al decir esto vi como un bello sonrojo se formaba en sus mejillas, de repente mordio su labio eso se vio terriblemente sexy…

- No haga eso.- dije para mi, pero al parecer ella lo había escuchado

- Hacer que?.- me pregunto

- Nada olvídelo, siéntese.- trate de cambiar el tema .- y digame señorita swan cuénteme de usted.

- Que quiere que le diga señor cullen?.- me pregunto

- Cuantos años tiene, con quien vive, sus antiguas experiencias laborales?.- le dije en un tono un poco sarcastico

- Pues tengo 23 años, vivo sola , estudie en la universidad de Seattle , y mi ultimo trabajo fue en   DA REVIN S.A – 23 años si era muy joven, un momento da revin s.a, era la empresa de mi amigo Laurent porque habría renunciado, era una buena empresa.

-Y cuénteme porque renuncio soy amigo de Laurent da revin y su compañía es muy prestigiosa en el mercado.- decidi preguntarle.

- Solo quise darme un respiro tenia trabajando ahí desde que empeze a hacer mis practicas y necesitaba cambiarme de trabajo, tener mas aspiraciones y su empresa es la mejor ubicada en el mercado y me encanto la idea de probar suerte aca al enterarme de la vacante.- comenso a decirme, no se porque pero se me dio por mirarle los pechos, la blusa que tenia era un poco escotada pero solo dejaba ver lo necesario, estaba seguro que su piel es ese lugar seria aun mas blanca, porque pensaba en eso?

- Bien señorita swan, y quien me asegura que no se va a querer retirar de aqui en poco tiempo?-dudo un poco pero luego me contesto.

- Pues la verdad eso no se lo podría decir señor cullen, yo solo puedo asegurarle que cumpliré con mi trabajo a cabalidad todo el tiempo que trabaje aquí y espero que sea mucho.- muy segura la chica y no la dejaría ir, me levante de mi asiento y camine a su alrededor.

- Bueno señorita swan aquí desempeñara el cargo de asistente personal y secretaria de presidencia eso quiere decir que estará conmigo casi las 24 horas del dia será mi sombra mi mano derecha lo que yo necesite usted me lo debe tener listo debe ser muy eficiente si de verdad desea trabajar aquí por mucho tiempo.

- Eso que quiere decir señor cullen.- me pregunto, me acerque a su oído quería apreciar mas de cerca su fragancia, olia a fresas…

- Eso quiere decir señorita swan que el trabajo es suyo.- lo siguiente no lo vi venir, la señorita swan se levanto muy emocionada  y me abrazo…

- Señorita swan mantenga la compostura.-  le dije después de unos minutos alejándola de mi lado, pude sentir como se me formaba una erección en la entrepierna, que tenia esta chica que con solo ese rose me había causado esto, la separe de mi y me dirigi a mi escritorio.- bueno ya puede salir venga mañana temprano para arreglar todo lo del contrato, informare a angela para que no me pase a mas nadie.

- Esta bien señor cullen y disculpe mi reacción es que estoy muy contenta.

- Tranquila señorita swan, puede retirarse.

- Hasta mañana señor cullen.- solo le asentí no podía permitir que esta chica se metiera en mi vida, para eso ya tenia a tanya ella me daba lo que necesitaba y no se quejaba, es mas le gustaba que hisiese eso con ella, estaba seguro que la señorita swan no estaría dispuesta a hacer todas las cosas que a mi me gustaba, aunque no sabia porque pensaba en ella de esa forma.

- Por dios cullen apenas y la conoces y ya te provoco una erección.- me dije a mi mismo.- eres un masoquista para colmo la contratas.

Esto no podía seguir asi necesitaba hablar con alguien de esto, sentía unas ganas de volver a ver a esta chica y ¿follarla?, era eso lo que quería, ya no supe que pensar y me dirigi donde mi psicólogo, amigo y sobre todo confidente emmet  mcCarty, el es el que me ayuda a sacar toda la mierda de mi cabeza cuando quiero recaer, aparte era la persona en la que mas confiaba aparte de mi familia, el siempre estaba cuando yo lo necesitaba, aparte estaba enamorado de mi hermana rosalie pero aun no lograba nada con ella.

Llegue a la casa de emmet y como siempre me recibió con un caluroso abrazo.

-Edward! , como estas que te trae por qui?.- me dijo emmet luego de casi romperme los huesos, era muy musculoso  y fuerte, yo le decía que estaba superdesarrollado.

-Emmet , nesecito hablar con alguien, hoy me ha pasado algo, y no quiero volver a caer en lo mismo.- le dije a mi amigo.

-necesitas al psicologo o al amigo?.- me pregunto.

-Creo que en este momento necesito a los dos.

Le conte  todo lo ocurrido con la señorita swan, emmet estaba un poco sorprendido por mi manera de actuar hace mucho que no me pasaba algo asi, luego de lo que paso, yo sentía que con tania lo había superado pero conocer a esa chica trajo a mi cabeza recuerdos que prefería siguieran olvidados.

- Edward, exactamente que fue lo que sentiste cuando esa chica te abrazo.- me pregunto emmet con su libreta en la mano.

- Pues la verdad no se, solo me paso, su solo rose fue suficiente para que mi erección despertara, la verdad esa chica es muy guapa.

- Y aun asi la contrataste solo unos minutos de conocerla y ya te provoco eso?, eres masoquista amigo, la vas a tener todo el dia cerca de ti y si como me dices te provoca sin darse cuenta, solo quiero saber una cosa, porque lo hisiste?

-  Es que tiene muy buenas referencias, me inspiro confianza, y se ve que es eficiente en lo que hace.- y podría darme una gran mamada con esa boca, pensé.-  y porque me miras asi?.- le pregunte, pareciera que ubiese leído mi pensamiento anterior.

- Edward dime la verdad sabes que lo que me dices no son tus verdaderos motivos, no me engañes soy tu doctor.- me dijo a manera de regaño.

- Esta bien, emmet, esta bien, sentí la necesidad de tenerla cerca, de no dejarla ir, no se porque pero la quiero conmigo, eso era lo que querias oir, pues hay lo tienes.- le dije un poco enojado a emmet aunque no debía hacer el era mi doctor y debía contarle todo si en verdad quería que me ayudase.

- Solo quería la verdad Edward, y bueno lo hecho esta hecho ahora no puedes despedir a esa chica después de lo emocionada que se puso al conseguir el puesto, parece ser que lo quería de verdad, pero una cosa si te digo, si ves que te sales de control lo mejor será que pases de ella, sabes que debes evitar a toda costa las tentaciones, y ni me imagino lo que dira tanya ahora que conosca a tu asistente.- dijo emmet eso ultimo entre risas.

- Cállate emmet, esa chica no es nada, la tratare con indifernecia como hago con todas mis demás secretarias, tania no tendrá de que preocuparse, ni tu tampoco, no recaere.

- No seas muy cruel con la chica ella no tiene la culpa de que te atraiga, mira lo que a pasado con tus demás secretarias por ser tan duro con ellas.

- Lo se emmet tratare de no serlo.

Y dicho esto me despedi de mi amigo y me fui a mi casa mañana me esperaba un dia largo en compañía de mi nueva asistente Isabella swan.