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Anthony no dejó de mirarme en todo el camino y Alice no se cansó de burlarse de él.
-Anthony, cualquiera diría que estás enamorado de verdad
Anthony se obligó a apartar la mirada de mi y miró a Alice confundido.
-es que estoy enamorado
-no mientas... Bella me dijo que fingían ser novios
Anthony me miró enojado. Yo también lo estaba pero con Alice y decidí vengarme.
-si Anthony- murmuré- se lo dije, pero ella no dirá nada, también le guardo secretitos...
-ah, ya- se rió mi novio- seguramente algo pasó en ese cuarto el día de mi cumpleaños
-no quieres saber- me reí y Alice se puso roja
-bien- suspiró ella- supongo que me lo merezco
-entonces pasó lo que me imagino...- dijo Anthony con tono burlón- con razón Jazz no ha venido
-si, pero no digas nada- suplicó Alice- no se lo menciones si es que lo ves, yo prometo que no diré nada de tu falso romance
-Alice, no lo dije- intervine- pero Anthony y yo hemos decidido salir realmente
-¿es en serio?
-si- contestamos él y yo al mismo tiempo
-wow, pero ¿están enamorados o no?
-mmm... no exactamente -respondí- Anthony seguirá intentando estar con Rosalie pero yo dejé de intentarlo con Edward y no quiero que nadie me cuestione
Después de eso yo y Alice nos pusimos a hablar de ropa y Anthony decía que era demasiada la que habíamos comprado y se reía. Embry solo soltaba pequeñas risitas por las cosas que comentabamos. Sabía que él no diría nada de mi noviazgo antes falso que había entre Anthony y yo. Él era mi amigo y no creía que le beneficiara en algo decirle a Edward. Además a ese tipo yo no le importaba en lo absoluto. Me quitó mi virginidad y el muy estúpido se burló de mi. Pero ya no lo haría jamás. La Isabella Swan que conoció dejó de existir.
Anthony tampoco dejaba de decirme lo linda que me veía. Yo solo me sonrojaba.
-terminarán enamorandose- murmuró Alice- antes de lo que creen
Mi novio y yo nos ruborizamos a lo extremo e intentamos negar que eso pasaría pero no pudimos convencer a Alice.
Al llegar a la hacienda y dejar las cosas en casa le agradecí a Anthony mil veces
-no hay de que princesa- dijo dandome un beso en la mejilla- en verdad estás hermosa- me susurró en el oído- de hecho, siempre lo has sido
Se fue sin decirme nada más y yo lo miré extrañada mientras lo hacía. Era muy raro lo que Anthony me decía pero me encogí de hombros y lo dejé pasar. Me dirigí a mi habitación. Alice y yo nos pusimos el uniforme rápidamente. Mamá nos había dejado ir a Port Angels con la condición de que hoy la hicieramos de meseras en la cena que los Cullen iban a tener con la familia Hale. No sabía para que era todo esto pero bueno, las órdenes son órdenes. A mitad del camino nos encontramos con mamá quien estaba apurada pero cuando me vió se quedó boquiabierta.
-hija ¡estás divina!, eres otra- exclamó y yo me sonrojé
-gracias...
-Isabella, te estaba buscando, ve a quitarte ese uniforme y ponte algo bonito
-¿por qué?
-vas a ir a la cena- contestó- Anthony desea que vayas
-no puede ser
-ve a cambiarte mujer- intervino Alice con desesperación- no debes perder la oportunidad de hablar con tus suegros y que sepan la preciosidad que Anthony tiene por novia
-hermana, estoy nerviosa...
Mamá y Alice casi me llevaban a rastras de vuelta a nuestra casa. Realmente estaba aturdida.
Me iban a llevar frente a Edward y yo sinceramente no sabía como reaccionar
-ponte el vestido azul- dijo Alice cuando estuvimos en el cuarto
-pero...
-usalo con las zapatillas plateadas que has comprado
Mi hermana me ayudó a arreglarme en menos de media hora. Realmente ella tenía talento. Me dejó hermosa. Mamá no pudo verme porque se fue a la casa grande cuando me dejó en nuestra casa
-ahora ve hermanita y conquista a Edward, tengo el presentimiento de que lo dejaras totalmente fascinado y más idiota de lo que ya está
Me reí. Era cierto. Edward era idiota. Me divertiría mucho que me mirara impresionado pero obviamente eso no iba a pasar. Él seguramente ya había estado con mujeres que eran lo más cercano a diosas de la belleza. Rosalie Hale era una de ellas con su melena dorada, sus rasgos perfectos, cuerpo de modelo. En fin, todo lo que un hombre desea.
Me dirigí a la casa grande y entré. Anthony me recibió en la puerta. Se veía guapisímo y me quedé un poco atontada. Él me miró impresionado.
-te...te ves- tartamudeó- no, no hermosa, eso es un insulto a tu belleza
-no exageres Anthony- me reí
-no lo hago, eres incluso más hermosa que Rosalie que es a quien se supone que yo quiero... Edward se arrepentirá de haberte rechazado toda la vida
-hum... puede que si pero ya no importa, yo ya no lo quiero
-bueno, pasemos a la sala
Me condujo hacia la hermosa sala de estar de su casa. Ahí estaban sentados sus padres y su hermana quienes al verme se quedaron sorprendidos.
-wow Isabella, te ves muy bien- exclamó Esme mientras se levantaba para darme un beso en la mejilla
Me puse colorada por el cumplido y por el hecho de que fuera de mi mismisima patrona.
-en serio, te ves muy bien- dijo Carlisle-el amor por mi hijo te ha sentado bien , Anthony nos ha comentado que eres su novia
-en verdad eres muy bonita- me dijo la joven Charlotte lo cual fue muy raro. Ella era un año menos que yo pero nunca fue mi amiga pero eso no significaba que nos odiaramos sino todo lo contrario. Ella me agradaba. Era una chica muy bonita. Su color de cabello era rojizo como el de su madre. El señor Cullen era rubio y me pregunté de donde Edward y Anthony habían sacado el cabello cobrizo. Quiza de algún abuelo...
Dejé de darle vueltas al asunto porque llegó Edward a la sala. Se veía guapisímo- incluso más que Anthony- con su esmoquin azul marino.Pero... Recordé lo que me había hecho y dejé de mirarlo porque si no... iría a matarlo a golpes
-¿listo para lo que harás?- le preguntó Carlisle a su hijo quien asintió
-si padre- respondió serio y me dió curiosidad por saber de que estaban hablando- estoy listo para pedir la mano de Rosalie
No. No podía ser cierto. Edward no podía casarse con otra. Él era solo mio. Quise echarme a correr, gritar, llorar, pero me obligué a permanecer en la habitación. Intenté no mostrar ni una mueca de dolor. En ese momento Edward se volvió hacia nosotros como percatandose de nuestra existencia. Se quedó ligeramente boquiabierto mientras su mirada me recorría de arriba hacia abajo .
-¿Isabella?- me preguntó. Oí un leve gruñido procedente de Anthony- ¿eres tú?
-si, claro que es ella- rió Anthony- tú no creías que mi novia era hermosa pero ya ves que si...
Edward no pudo despegar su vista de mi y sentí como mi plan estaba empezando a funcionar. Edward se obligó a apartar la vista de mi cuando tocaron a la puerta. Mi corazón se rompió solo por pensar en lo que ocurriría esta noche. Edward se comprometería con Rosalie. La familia Hale pasó unos segundos después a la sala. Me dieron celos al ver que la señorita Hale parecía ser la pareja ideal de Edward. Aun así me preguntaba por qué se casaban tan jovenes. Claro... Ahora recordaba por qué. Un día, papá me dijo que jamás me podría casar con Edward porque este ya estaba comprometido con Rosalie desde su nacimiento ya que si se casaban la empresa de los Cullen y de los Hale se unirían y mucho más si habían nietos. A mi me pareció una tontería pero ahora todo me resultaba lógico y no pude pensar más que lo peor de Edward porque se prestaba a todo esto.
Cuando Edward le entregó el anillo a la señorita Hale casi me moría de dolor pero me contuve. Ya no podría llorar en casa. Después pasamos al comedor. Era demasiado extraño ver a mis hermanos sirviendo y yo no poderles ayudar. Hubiera dado lo que fuera por no cenar en este comedor, por no estar "celebrando" el compromiso del quien era mi unico amor. Solo por educación comí. La verdad no tenía hambre.
Edward no dejaba de mirarme lo cual empeoraba la situación. Rosalie no miraba a su novio sino al mio con una expresión de sufrimiento. Estaba segura de que esos dos se amaban con locura pero por culpa de sus padres no podían estar juntos.
A Jasper se le veía muy incómodo en este lugar y lo entendía. Seguramente mirar a Alice y no poder estar con ella debía ser horrible. Era justo por lo que yo estaba pasando. Además, él estuvo involucrado físicamente con mi hermana al igual que yo con Edward. Ambos compartiamos el mismo dolor. Por primera vez en esta noche me sentí consolada. La presencia de Anthony y de Jasper me tranquilizaba de cierta manera.
La torturosa cena se terminó pronto gracias al cielo. Los adultos y los novios se fueron a la sala. Yo y Anthony salimos de la casa.
Pasó algo inesperado. Creí que sería yo quien lloraría pero alguien lo hizo. Fue Anthony.
-Bella- sollozó y me abrazó- mi Rose se casará con mi hermano, ¡no es justo! Todo esto es por culpa de la ambición de los Hale y de que mis padres nunca saben decir no... Bella, ¡ella y yo nos amamos! Yo no puedo ni quiero renunciar a ella
-tranquilo Anthony- dije al borde de las lágrimas. Me destrozaba ver así a mi amigo. Me dolía más que mi propio dolor.
-no soy capaz de vivir sin ella
-yo te ayudaré a hacerlo- le prometí. Lo solté y él me miró confuso- Anthony, por favor... enamorate de mi
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Espero que les guste este capítulo. Plis dejen comentarios para saber que piensan de este Fic =)
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Capitulo 1: Enamorada de un idiota
