Queremos agradecerles cada uno de los comentarios, estamos muy felices por haber llegado a los 100. Por eso hemos decidido hacer este capítulo donde se explica una cuantas cosas, esperamos de todo corazón que les guste…así como a nosotras nos gusta todos sus comentarios. Gracias por ellos
Jovi & Alba

ALBA POV

-¿de verdad eres tan ciega?... ¿de verdad lo eres?-me dijo acercándose a mí.

-¿podrías dejar de repetir eso? no lo entiendo y de verdad me frustra.

-ya te enteraras a su debido tiempo-se iba a marchar pero lo cogí del brazo.

-tú no te vas Emmett Mccarthy-le dije.

-de verdad Alba no me apetece discutir.

-de verdad, debes estar enfadado, tú nunca me llamas Alba-se paro en frente mío y suspiró. 

-ya no quiero pelear más contigo Alba…de verdad que no.

-eres tú el que dice cosas sin sentido.

-Alba por favor no insistas.

-está bien… ¿pero me dirás?

-cuando esté preparado. Todavía seguía dándole vueltas a las palabras de Emmett en mi cabeza, y eso que ya había pasado una semana…algún significado tendrían que tener, nuestra relación seguía igual que siempre como los mejores amigos… dejamos atrás ese pequeño malentendido…bueno malentendido no porque no que era, estaba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta de que llamaron a la puerta y me sorprendí mucho de ver a Edward en la puerta de mi despacho.

-Alba puedo pasar-me dijo, cada día estaba más guapo…se ve que su noviazgo le sienta bien…alba con la última persona con la que deberías ser cínica es contigo misma.

-pasa Edward, ¿ocurre algo?-él nunca venía a mi despacho...siempre me esperaba en el aparcamiento.

-sí…bueno…no, ufff no sé por dónde empezar.

-¿por qué no te tranquilizas?, siéntate ¿quieres agua o algo?

-agua por favor-fui a llenarle un vaso de agua y se lo di.

-gracias-me dijo-¿por donde empiezo?

-¿que tal por el principio?-le dije sonriéndole para infundirle confianza-¿es algo malo…tu familia está bien, Rosalie está bien?

-si ella está bien-cada vez se le veía más nervioso.

-puedes decirme lo que quieras.

-es que me da miedo de su respuesta y de perder mi empleo.

-Edward eres un gran trabajador… ¿por que ibas a perder tu empleo?, dime que te ocurre, me preocupa.

-está bien…prefiero quitarme la duda, y ser consecuente con mis actos.

-ahora sí que no entiendo-¿que pasa era el mes de dejar a Alba como estúpida?, porque primero Emmett y ahora Edward.

-¿tu que sientes algo por mí?

-¿como?-dije atragantándome con mi propia saliva.

-¿tu que sientes algo por mí?

-¿a que viene esa pregunta? -mierda…mierda como se había enterado, no Rosalie…como se lo haya dicho ella me va a oír.

-me llegaron unas noticias y quiero saber si es verdad o mentira-que le decía que si…no podía me daba miedo de su reacción y si le decía no estaría mintiendo y ya todo el mundo lo sabe que estoy loca por él-a mi novia Jovanna le llegaron unas noticias y ella está muy preocupada.

-¿qué tipo de noticias Edward?

-de que usted está enamorada de mí-me dijo muy nervioso, yo casi no podía ni mirarlo a los ojos del miedo que tenía.

-si es cierto, me gustas mucho Edward-él se levanto de la silla y empezó a dar vueltas por el despacho.

-Alba…yo…-decía nervioso

-Edward podrías sentarte me estas poniendo nerviosa-le dije tratando de tranquilizarme, piensa en Kellan Lutz…piensa en Kellan Lutz.

-es que yo…no se uffff

-Edward yo se que estas comprometido y quiero que sepas que no voy a hacer nada, tu corazón pertenece a Jovi…lo sé y lo admito, no quería que te enteraras porque me daba miedo tu reacción

-a mi me da más miedo la suya.

-la mía…la mía ¿Por qué?-dije extrañada.

-usted es una persona influyente y poderosa…y me da miedo lo que pueda hacer.

-¿a que te refieres con eso?…¿crees que te obligaría a que estuvieras conmigo?-él no me miró, de verdad lo pensaba…

-¿se puede saber qué opinión tienes de mí?-le dije enfadada-yo jamás haría una cosa así, ya te lo dije he admitido que estés comprometido y que jamás serás para mi…jamás haría daño a una persona, jamás y me duele mucho que tengas esa opinión de mí.

-yo…lo siento-dijo apenado-solo es que me daba miedo de su reacción.

-pues tranquilo yo no soy de esa clase de chicas…que consiguen lo que quieren a costa de hacer sufrir a otras personas.

-lo siento…de verdad no quería.

-ya no te disculpes Edward, entiendo que pienses eso de mí no tengo buena fama en este empresa…no creas que no sé que me llaman bruja.

-¿lo sabe?-me dijo sorprendido

-claro que lo sé, son poco originales-dije triste…si de verdad me conocieran

-Jovi no se lo tomó a mal, ella está pasando por una maña racha-me dijo preocupado-pero no quiero que piense mal de mí…ya hubo un malentendido entre usted y yo y no quiero más problemas, ahora entiendo porque se puso así Jovi.

-lo comprendo, si quieres puedo hablar con ella…para que este tranquila

-no-me dijo

-claro también temes que pueda decirle algo malo de ti, o mucho mejor que le diga que estamos juntos.

-no…es eso.

-claro y yo me chupo un dedo…está bien no iré a hablar con ella.

-gracias y con respecto a mi trabajo-me dijo con miedo.

-¿que pasa con tu trabajo?

-quería saber si…

-todavía tienes tu trabajo….no soy tan mala persona como tú crees-le dije levantándome de la silla, mis lagrimas salían sin control de mis ojos y no podía pararlas.

-Alba…yo…

-te pido por favor que te marchas y que regreses a la hora de siempre…tengo mucho trabajo.

-claro-se levanto de la silla y estaba saliendo por la puerta cuando dijo un leve gracias o eso me parecía a mí. Estuve toda la tarde en el cuarto de baño de mi despacho…llorando, yo sabía que Edward no iba a tener nada conmigo, pero sus palabras me dolieron mucho…muchísimo. Llame a mi secretaría y le pedí la dirección de la novia de Edward, sÉ que se lo había prometido pero no quería que por mi culpa tuviera problemas con ella, además de que tenía muchas ganas de saber quien le había dicho que yo quería a Edward. Cogí mi bolso y mis llaves y me marche de mi despacho, le di unas cuantas indicaciones a Lauren y ella me pregunto si me encontraba bien.

-si Lauren no te preocupes, si no tienes mucho trabajo puedes irte también.

-gracias alba.

-de nada… ¿seguro que esta es la dirección?

-si Edward la puso como segunda residencia.

-muy bien gracias Lauren…hasta mañana.

-hasta mañana Alba y cuídate- asentí con la cabeza, bajé por el ascensor y llegue a la entrada del edificio, el portero se extraño que saliera a esta hora…pero no dijo nada mejor no tenía animo de hablar con nadie, salí y llamé a un taxi le di la dirección y en veinte minutos estaba en la puerta de su casa. Llamé y me abrió un chico rubio…esperen ese no es el chico por el cual Alice suspiraba, él fue quien malinterpreto las cosas entre Edward y yo, por eso Edward estuvo ese tiempo tan dolido y triste...ahora todo encajaba.

-buenas tarde ¿podría hablar con Jovi?-le dije.

-usted no va a venir aquí a hacer daño a mi hermana.

-esa no es mi intención-porque todos pensaban lo mismo-necesito aclarar unas cosas con ella, por favor.

-no voy a permitir que le hagan daño…no otra vez.

-está bien, si quieres puedes quedarte mientras hablo con ella, así veras como mis intenciones no son malas como todo el mundo piensa.

-he dicho que no-dije cerrándome la puerta en las narices…pero era muy testaruda, así que puse el pie en la puerta para que no se cerrara.

-usted es muy testaruda… ¿es que no entendió?

-solo será un momento.

-está bien Jazz-oí que le decían.

-pero Jovi…

-déjame hablar con ella a solas-abrió la puerta, salió a la puerta.

-hola-dijo tímidamente.

-hola Jovi… ¿puedo llamarte así? no se tu apellido

-si puede llamarme Jovi.

-¿sabes quién soy?

-si claro, usted es la jefa de Edward, ¿gusta pasar?

-no gracias, no tardaré mucho.

-ok.

-uff no sé por dónde empezar-cogí aire y empecé a contarle-no sé quién o qué te hayan contado pero quiero decirte que entre Edward y yo jamás había o ha habido nada de nada… solo una relación profesional.

-lo sé…solo que es normal que me preocupe. 

-lo entiendo, Edward me pidió que no viniera a hablar contigo…pero no quería que él tuviera problemas contigo.

-lo sé y se lo agradezco-se notaba muy triste.

-Edward seguirá con su trabajo, yo no soy ese tipo de chicas que hacen daño para conseguir lo que quieren-ella no dijo nada más-y que me resigne a que Edward está contigo y me alegro mucho de que él sea feliz, debo marcharme.

-gracias-de verdad ¿solo me iba a decir eso?, yo creía que lucharía por Edward y me diría no te vuelvas a acercar a mi novio o algo por el estilo, me dejó muy sorprendida…de verdad me preguntaba si ella estaba enamorada de Edward.

-no hay de que solo espero que sean muy felices-le dije, me puse mis gafas de sol y fui andando hasta el taxi.

-Alba-me gire 

-si

-fue Emmett quien me dijo.

-gracias Jovi-me subí al taxi.

-hola Emmett

-hola Alby, ¿donde estas? he pasado por tu despacho y me dijo Lauren que te habías ido, ¿te encuentras bien?

-sí, ¿donde estas? quiero verte 

-estoy en casa, hace poco que he llegado.

-genial voy para allá, no te muevas de tu casa.

-ok te espero mi niña-le di la dirección de Emmett al conductor y mientras entraba en el taxi no podía dejar de pensar en las palabras de Edward…como me habían dolido.

-está usted bien-me dijo el taxista, hasta que él no me dijo eso no me había dado cuenta de que estaba llorando.

-si gracias…no se preocupes-le dije secándome las lagrimas, llegamos a la casa de Emmett y le di el dinero, llame a la puerta y me abrió un muy sonriente Emmett.

-hola mi niña-me quite las gafas y le di una fuerte cachetada en la cara

-se puede saber que haces, a que viene esto-me dijo sorprendido

-¿como se te ocurre decirle a la novia de Edward que yo estoy enamorada de él?-le dije enfadada entrando a su casa, lo que menos necesitaba era montar un escándalo en la calle

-¿como te enteraste?-me dijo sorprendido y sobándose la mejilla

-el mismo Edward me lo dijo, eres un cabrón Emmett…se supone que eres mi amigo, mi hermano y tu vas y me hechas a los leones

-solo quería arreglar las cosas con Jovi

-y por eso tenías que decirle, es que no lo comprendo…casi parece que nos quieres hacer daño a mí y a ella.

-¿como puedes pensar eso de mi Alba?-me dijo enfadado

-¿pues que quieres que piense?, te dije y te rogué que no le dijeras nada a nadie…confié en ti, pero ya se dé que me vale la amistad de Emmet Mccarthy

-eso no es justo y lo sabes.

-a no…no es justo verdad-en este momento las lagrimas ya surcaban libremente por mi cara-lo mío si que no es justo…nada justo, hoy me enteré que el chico al que quiero me ve algo así como una bruja, que jamás podré tener algo con él porque él ama a su novia y que mi mejor amigo…casi hermano es un traidor en el que jamás podré confiar.

-¿como que cree que eres una bruja?-me dijo 

-él solo se preocupaba por que no le hiciera nada malo a su novia y que conservara su trabajo, jamás le importó mis sentimientos.

-lo voy a matar-dijo Emmett enfurecido.

-tú no le vas hacer nada a nadie…me has oído, en todo caso matate a ti mismo porque eres el culpable de esto

-lo siento Alba…jamás pensé que podría hacer tanto daño.

-pues piensa antes de actuar…ahora ya es tarde.

-yo solo quería ayudarte… 

-ayudarme a que a destrozarme la vida…a eso pues déjame decirte que lo has logrado y de pleno-me seque las lágrimas y me acerque a la puerta-todo el mundo quería ver a la mujer de hielo muy bien lo han conseguido…no quiero volver a verte en la vida, para mi estas muerto y enterrado.

-no me digas eso mi niña

-deja de llamarme mi niña...ya no soy nada para ti-le dije gritandole-adiós señor Mccarthy

-no te puedes ir…no sin escucharme antes

-me importa una mierda lo que tengas que decirme, es más tú y tus palabras os vais a la mierda-iba a abrir la puerta cuando me cogió de la mano y me abrazo a su cuerpo.

-suéltame Emmett- ¿porque tenía que ser tan fuerte y alto? -¿es que eres sordo o estas más tonto de lo que aparentas?…te he dicho que me sueltes

-no me da la gana ahora vas a escucharme tú

-y una mierda

-lo harás quieras o no

-sí y ¿acaso me vas a obligar?

-si no me queda más remedio, si lo haré

-eres un cerdo de mierda

-puedes insultarme todo lo que quieras…no vas a evitar que te diga lo que quiero decirte

-¿es que no entiendes que ya no me importa nada ni nadie?

-y tampoco lo que yo hago

-nada…eres sordo

-muy bien entonces ¿no te importara que haga esto?

-¿el que?-le dije agacho su cabeza y estampo sus labios contra los míos.