Habían pasado ya unos meses...cuantos ni lo sé, para mí el tiempo siempre era la misma rutina, levantarme, oficina, casa y otra vez a dormir había dejado de salir con mis amigos y ellas ya ni se molestaban en llamarme...después de mi fiesta de cumpleaños, sólo mantenía una relación profesional con Edward...era lo mejor para los dos, bueno en realidad era por mí, él no sabía por que había cambiado de actitud, pensaba que era de esas niñas mimadas que jugaban con las personas pero prefería que pensara eso antes de conocer la verdad. Rosalie me insistió en que le dijera a Edward...pero ni en broma le diría, él está muy enamorado de su prometida y yo no era nadie para destruir su felicidad. Cuando te conocí me enamoré perdidamente... y tuve miedo de caer ante tus pies... sin darme cuenta te adueñaste de mis sueños... Después de mi vida y al final me enamoré...Y yo perdí... porque te di mi alma entera y la burlaste... por que sentí llegar al cielo entre tus brazos... me jugué el todo por el todo y me fallaste... te di la espalda y me clavaste un puñal... Y yo perdí... perdí mi vida... perdí la fe… la esperanza, me has destrozado el corazón de tal manera que para mí ya no existe el amor... me perdí entre las sombras que dejaste de tus engaños... Me fui mojando con las sobras los labios y saboree la hiel amarga Y yo perdí... Ya no podía trabajar estaba todo el tiempo pensando en él, sólo escribía poemas tontos que apuntaba en una libreta...no podía seguir así, todos se dieron cuenta de mi estado y esto debía acabar. Estaba escribiendo en mi libreta cuando Emmett entró en mi oficina, le pedí a mi secretaria que no dejaran entrar a nadie, a no ser que fuera mi papá. -hola Alba. -Emmett ¿qué haces aquí? -vaya, no sabía que tenía que pedirte permiso para entrar en tu oficina...¿se puede saber que te pasa? desde tu fiesta estas muy raro, ya no eres tú Alby. -sabes que no me gusta que me digas así. -antes no me molestaba y ahora sí. -a eso me refiero, apenas nos vemos y eso que trabajo a 10 metros de ti, te llamo y no me cojes el teléfono ¿se puede saber que te hice? -no me hiciste nada Emmett simplemente no me apetece salir. -ni ver a nadie tampoco. -estoy ocupada. -y una mierda Alba, sé el trabajo que tienes y no estas tan ocupada. -¿me estas controlando Emmett Mccarthy?-se puso rojo y asintió con la cabeza. -¿se puede saber con que derecho?-le dije enfadado-¿quien mierda te crees que eres? -yo pensé que era tu mejor amigo. -tú lo has dicho mejor amigo...por dios pareces un novio celoso que quiere controlar a su novia. -no seas ridícula Alba, tampoco es para que te pongas así, no te volveré a molestar-dijo saliendo por la puerta y dando un portazo...jamás había visto así a Emmett, es tan dulce conmigo es como mi hermano mayor, jamás se había enfadado tanto. -señorita Ruiz ¿está usted bien?-dijo entrando mi secretaria. -sí, estoy bien ¿por qué? -jamás vi a Emmett así de enfadado con usted, por eso me asuste. -no te preocupes no pasa nada, puedes volver a tu trabajo-ella asintió. -Lauren-la llame. -sí -gracias-ella me sonrió y cerró la puerta, la verdad me había pasado con Emmett...él solo se preocupaba por mí y yo lo despreciaba vaya clase de amiga estaba echa...uffff, me levante de mi asiento y fui a buscarlo a su oficina. -Emmet-dije llamando entrando a su oficina. -¿que haces aquí Ruiz? -Emmett por favor, perdóname...no fue mi intención, perdóname. -vete Alba. -Emmett, por favor perdóname-me fui hasta su silla y me senté en su piernas, -¿que haces Alba?-me dijo sorprendido. -¿no me puedo sentar aquí?, vamos Emmett perdóname-le dije abrazándome a su cuerpo, él se relajo y me envolvió en sus brazos. -gracias Emmett. -no te he perdonado todavía-me dijo, lo conocía y sabía que me había perdonado. -hagamos un trato-le dije mirándole a los ojos-te invito a comer, una cena y estamos en paz. -está bien y quizás un desayuno también-me dijo guiñándome un ojo. -Emmett. -era broma Alba, no te enfades. -vamos a comer-le dije levantándome y dándole la mano para que él también se levantara. -vamos-entrelazo nuestros dedos y no me pareció mal ese gesto ya que siempre lo hacía, bajamos al restaurante que había cerca de la oficina y entramos, el maitre ya nos conocía y nos dio la mejor mesa en el restaurante, pedimos nuestro platos y empezamos a hablar de temas de la empresa...hasta que Emmet me hizo la gran pregunta. -¿como vas con Edward?-me dijo -¿como voy con Edward de que? -Alba no te hagas la tonta, se muy bien que estas loca por él. -Emmett, entre Edward y yo no hay nada, él esta comprometido.... -y tú estas loca por él -bueno ¿y que? -¿como y que?, Alba debes luchar por él -Emmett, él esta interesado en su prometida, la ama yo no tengo ninguna posibilidad. -si te rindes no la tendrás jamás. -ayyy por dios Emmett, no entiendes o no quieres entenderlo, el se va a casar punto y final no hay nada que yo pueda hacer. -tanto esfuerzo para nada. -¡como esfuerzo? no entiendo -la fiesta en mi casa la organicé para que estuvieras con él, él se peleo con su novia por eso era ahí en cuando tuviste que atacar. -¿te estas oyendo?, Edward no es ninguna presa por dios, además ¿como pudiste hacerlo eso a tu amigo? -quería ayudarte Alba. -gracias Emmett pero por tu culpa Edward pasó unos días no demasiados buenos. -lo sé y ya le perdí perdón. -está bien-le dije cogiéndole la mano-pero no vuelvas a hacerlo más. -así nada mas Alba, ¿no vas a hacer nada? -otra vez Emmett, ¿eres sordo o que? -es que no me puedo creer que no pelees. -y para que quieres que pelee, para ver como el hombre al que amo se aleja de mi, al saber que lo amo...no gracias -es que no sabes... -basta Emmett-le corte-basta ya por favor, si este tema me hace daño y no quiero hablar mas de él -¿donde esta la Alba que luchaba por lo que quería? se ha perdido? -no pero sabe cuando no se puede hacer nada. -y una mierda...lo que te pasa es que eres una cobarde. -muy bien piensa lo que quieras. -es lo que me estas demostrando ahora mismo. -esta bien Emmett, no voy a discutir contigo...pero parece que no te das cuenta de la situación. -no la que no se da cuenta de las señales y de los claro mensajes eres tú-puso un billete en la mesa, se levanto y se fue.
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