Words With Friends (+18)

Autor: nicoli
Género: + 18
Fecha Creación: 23/07/2013
Fecha Actualización: 04/11/2014
Finalizado: NO
Votos: 19
Comentarios: 47
Visitas: 57873
Capítulos: 29

Bella Swan está enamorada de la estrella de cine Edward Cullen. Ambos comparten la misma pasión por un juego. Podrán conectarse a través de Words With Friends y ser más que amigos? El tiempo lo dirá.


Bueno aquí estoy con una nueva traducción y esta vez en conjunto ya que carlarobpatt4ever están traduciendo el punto de vista de Edward, ese fic se llama Words With Strangers, el link es este: Words With Strangers (+18). Os dejo el summary:

La estrella de cine Edward Cullen está harto de las mujeres y está concentrado en su carrera. Una extraña lo encuentra via WWF. ¿Podrán sus palabras cambiar su pensamiento?

Esta historia, al igual que primero y diez (+18), son de Nolebucgrl, la cual nos ha dado su permiso. La historia original la podéis encontrar aquí:

Words with Friends Chapter 1 Name, a twilight fanfic | FanFiction

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 También os invito a pasaros por mi otro fic Primero y Diez (+18). Un beso!!

Primero y Diez (+18)

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Capítulo 7: Queer

Segundo capítulo del día.

 

-¡Es tan emocionante!- Alice se dirigió a nuestra fila y se sentó en el medio. No dejaba de saltar. Mantuve la calma exteriormente, pero estaba tan emocionada como ella. No podía esperar para ver a Edward en un papel que ponía a prueba sus habilidades de actuación. No es que dudara de él, era muy buen actor y seguramente que ganara un Oscar algún día, siendo estrella de acción o de cualquier otra película.

Hizo un gesto a Jess para que fuera a sentarse a su lado. Jess me lanzó una mirada escéptica, pero de todos modos fuimos donde se encontraba Alice, Ángela iba a mi lado, seguida de Jess y por último yo. Era lo más lejos que podía estar de Alice sin irme al otro extremo del cine y ponerme en evidencia.

Ángela estaba callada desde su conversación sobre la proposición que tuvimos en el restaurante.

-Estás emocionada?

Se encogió de hombros y sonrió ligeramente.

-Si, supongo. Quiero decir, es sólo una película. Pero parece estar bien.

Me encantaba que no se sintiera atraída por Edward. Aunque por otra parte, a diferencia de las demás, tenía novio.

-He estado ansiosa por ver la película, incluso antes de que firmara.

Ángela se rió.

-Lo sé. He visto tu libro, ¿recuerdas?- ¿Cual? Tenía tres. El que nunca toqué estaba nuevo en la estantería, el que se publicó antes de que se vendieran los derechos de autor y el que tenía que sustituir en breve. ¡Aunque no pudiera dejar de tocar la cubierta del libro! ¡Era tan guapo!

-¡Oh, mierda!- Los ojos de Jess se agrandaron y se encogió un poco en su asiento.

-¿Qué coño te pasa?- Lancé una mirada a Ángela, que se encogió de hombros. Alice sacudió la cabeza y arrastró sus dedos a través de su garganta. ¿Qué cojones significaba eso? ¿Quería matarme, antes de saber que yo estaba hablando con mi propio Edward?

-Eh, esto. Hola, Bella.- Mierda, no podía ser. Ángela se mordió el labio y trató de no reírse al ver mi cara. La miré y me volví hacia la derecha y allí estaba él. Mike Newton. ¿Qué coño estaba haciendo aquí? Se suponía que era una película para chicas en la que nos pondríamos a gritar. ¿Tendría una cita? Y si la tenía, ¿por qué se estaba sentando a mi lado?

-Mike. Um, ¿qué haces aquí?- No pude pasar la pregunta. Esto no tenía sentido. Si estuviera en una película de Steele, lo entendería, pero en esta no.

Sonrió tímidamente y se encogió de hombros.

-Bueno, salí con los chicos para ver la nueva película de superhéroes, pero os vi venir hacia aquí y pensé que podía verla con vosotras.

Joder, no. Estaba transformando mi tiempo con Edward en una cita planificada.

-¡Tengo palomitas!- dijo, cogiendo la bolsa y sacudiéndola, haciendo que saltara las palomitas y se mancharan de mantequilla a mis pantalones. Gracias, quería que mis pantalones estuvieran manchados de mantequilla.- ¡Lo siento!- Alargó la mano para limpiarlo.

-Ya lo tengo.- No me molesté en ocultar mi irritación. ¿Alguna vez cogería alguna indirecta? Me quité de encima las palomitas y cogí la servilleta que me ofreció y me limpié los jeans, no es que fuera a funcionar. Tendría que ver que hacer con ellos cuando llegara a casa.

-Sabes que esto es una película para chicas, ¿verdad?

Mike se encogió de hombros.

-No pasa nada, me gustan todo tipo de películas con la compañía adecuada.

Mierda.

-Jess está allí, seguro que la gustaría que la saludaras.

Me miró y luego miró a Jess.

-No se por qué.

-He oído que estuviste con ella cuando me fui anoche de la fiesta.

-Oh, bueno, no se si se podría llamar así...- Parecía avergonzado y sus mejillas se pusieron rojas.

Sonreí.

-Está bien. Haríais una bonita pareja.- Oí a Jess decir en voz baja “perra” desde donde estaba sentada, estaba intentando que la atención no recayera en ella.

-Bueno, en realidad... ¿te gustaría salir conmigo alguna vez?- Dijo rápidamente, probablemente pensando que le iba a interrumpir y huir como siempre hacía. En unos momentos se iba a encender la pantalla y aparecería Edward Cullen. Por él soportaría cualquier cosa. Incluido a Mike Newton.

Suspiré. Ya era hora de ponerle en su sitio.

-Mira, Mike, eres un gran tipo, pero...

-¡No digas que no!- interrumpió, sus mejillas estaban rojas. ¿Perdona? ¿Me invitan a salir y no estoy autorizada a decir que no? ¿En qué mierda de país estábamos? La última vez que lo comprobé esto era América, un país libre.

-¿Qué has dicho?- Pregunté alzando la voz con incredulidad.

-Quiero decir, no digas que no aún. Sólo piensa en ello mientras vemos la película, ¿vale? No te voy a molestar.- Su presencia ya me molestaba.

-Mike, ¿no crees que...?- Me hizo callar presionando un dedo contra mis labios. ¿Era gilipollas o que? Consideré morderle, pero podría contagiarme la rabia o algo así.- Quita el dedo de mis labios.- Exigí con fuerza. Lo quitó inmediatamente.

-Lo siento, Bella, pero me gustaría que no pensaras en él. Se que Ty era un idiota y...

-Mike, no se trata de Tyler, pero ¿no ves que esto es raro? Fuiste su compañero de habitación, por el amor de Dios. No quiero salir con el mejor amigo y compañero de cuarto de mi ex.

-Ya no somos amigos,- insistió, negando con la cabeza.- Cuando te hizo eso, le dije que era gilipollas y que no te merecía.

Eso fue bonito, la verdad.

-Gracias, pero aún así...

-Sólo piénsalo, ¿vale?

Las luces se apagaron y los anuncios empezaron, ¡ya era hora! La primera escena de la película fue de Edward en un rodeo, sosteniendo al todo, con una mirada de concentración, con los músculos tensos. Joder, que bueno que estaba. Vestía jeans azules, camisa azul y un sombrero de vaquero.

Durante las siguientes dos horas, me olvidé de que Mike estaba sentado a mi lado. Seguramente si me hubiera molestado, no le habría hecho ni caso, estaba absorta en la increíble y fascinante película. Me quedé asombrada. Me reí y llore, me enfurecí y me alegré. Era muy bonita. Cuando se encendieron las luces, miré a Ángela y vi que se estaba limpiando las lágrimas. Alice tenía un montón de pañuelos en el asiento de al lado. Jess parecía normal. Mike estaba... Joder, Mike se había dormido. Era algo bueno, ya que si no, nunca me hubiera dejado irme.

Alice empezó a decir algo y la hice un gesto de silencio, señalando a Mike. Me hizo un gesto con los pulgares hacia arriba y se dirigió al otro extremo de la fila. Jess y Ángela se apresuraron para seguirla y le miramos una vez más antes de escabullirnos. Sólo había aplazado la discusión, pero no estaba de humor para tratar con él después de haber sido expuesta a la belleza y al brillo de Edward durante dos horas. Seguramente no fuera muy amable con él.

-¡Eso estuvo bien!- Alice chilló cuando llegamos a el estacionamiento. Seguí mirando hacia atrás para comprobar que Mike no nos seguía.

-¡Lo mismo digo!- Ángela estuvo de acuerdo.

-La escena de sexo fue tan caliente-, dijo Jess. La miré.

-¿Eso es todo lo que viste! Por dios.- Alice sacudió la cabeza.- Estaba guapísimo. No puedo esperar para...- Se interrumpió de nuevo y me miró.- Verla de nuevo.- Buena salida, Alice.

-En serio, tal vez deberías volver y despertar a Mike, Jess. Haríais muy buena pareja-, dije con sarcasmo.- Edward me rompió el corazón.- Y así fue, la escena de sexo fue muy caliente, eso es evidente, pero había muchas más cosas, a parte de esa.

-Si, si, muy buena, pero cuando tenga el DVD, ¡lo único que haré será ver esa escena una y otra vez!- Alice la golpeó.- ¡Ay! Joder, Ali, no sabía que estuvieras ahí.

Alice rodó los ojos.

-Estoy en muchos sitios que desconocéis.

-¿Cómo qué?

¿Les iba a contar lo de Edward?

Alice se encogió de hombros.

-Eso solo lo se yo, aquí está mi coche. ¿Nos vemos más tarde?

-Si, Ang, vamos a casa. Tengo una cita con mi vibrador.- Ángela hizo una mueca, pero se despidió y siguió a Jess a su coche.

-¿Por qué somos sus amigas?-Alice preguntó cuando nos metimos en el coche.

Suspiré.

-Porque hay veces en las que es divertida. Y porque me da los apuntes cuando falto a clase.

-Bueno, eso explica por qué te juntas tu a ella, no yo.- Empujé a Alice y ella se rió mientras arrancaba el coche.- No puedo esperar a decirle a Edward lo buena que es la película.

Ahí íbamos de nuevo.

-¿Le dijiste que la íbamos a ir a ver?

-No, aún no se lo he dicho, quería darle una sorpresa.

Seguro que te la dan a ti antes, Alice. Vas a ir a la cárcel.

-Es un buen plan.

-Si.- El silencio reinó durante el corto viaje a casa. Era tarde y estaba demasiado cansada. No quería hablar de Edward con ella, ya sea del de la película o el de su partida. Sólo quería recordar lo fantástica que estaba en la película.

Alice se detuvo en nuestro edificio y nos dirigimos a casa.

-Gracias por conducir esta noche.

Bostezó y sonrió.

-No hay problema. Te veré mañana. Estoy cansada.- Eso parecía, después de su noche de desenfreno con Jared.

-Buenas noches.

Me fui a la habitación y me cambié, poniéndome la camiseta que me gustaba para dormir. Actualicé mi estado de Facebook, dejando que todo el mundo supiera que Wild al Heart era una película fantástica. Tenía la esperanza de que fuera un buen fin de semana.

Cerré el portátil y lo puse en la mesita de noche junto a mi teléfono. Tal vez debería comprobar si me había respondido. Habían pasado mas o menos cuatro horas. Era muy probable que lo hubiera hecho.

Alice, Jess, Eric, Lauren y ¡sí!¡Allí estaba! ¡Joder! Había estado tan ocupada antes por mi triple palabra, que no me había dado cuenta de que había otro en el otro lado. Edward la obtuvo y jugó Jibed por 60 puntos. Sólo le sacaba 35 puntos. Eso me pasaba por no estar atenta al juego.

Joder, Bella. Era más importante ver que decía. Apreté el botón del mensaje y leí sus palabras, perfectas para irme a dormir.

Skeleton17: Sabía que eras demasiado ingeniosa e interesante para ser ilegal, al menos esperaba que fuera el caso. Esperaba que no quisieras que fuera a la cárcel, porque después no podrías jugar más conmigo. ¡Y los dos sabemos que de verdad te gusta!

Edward, no lo dudes. Y me encanta que me encuentres ingeniosa e interesante. Así eres tú, tío bueno.

Skeleton17: Tengo 25, así que puedes guardar las esposas para hacer cosas más interesantes que arrestarme. Felizmente asumiría la posición si me lo pidieras del modo correcto (y por supuesto quiero decir mi posición favorita, la cual te debes de estar preguntando cuál es, no tengo duda).

Mierda, al final tendría que utilizar mi propio juguete. Me estaba convirtiendo en Jessica. Pero al menos, tenía una buena razón. Edward, esposas, posiciones... ¡A este paso iba a morir!

Skeleton17: Claramente disfruto que seas pervertida, ahora que sé que estás preparada para hacerlo legalmente. Está bien que no tenga que censurarme. No puedes imaginarte la cantidad de cosas que me encantaría decir y no tengo permitido.

Hmm, bueno, eso era interesante. ¿Podría ser por que si dijeras esas cosas, serían publicadas por todo el mundo y te atacarían con noticias y blogs? Puedes ser honesto conmigo, Edward. Nunca te juzgaré.

Skeleton17: Me gustan tus mensajes y no tengo duda que me encantarían tus masajes, cuando alguna vez tenga el placer de tu compañía. Sé que no tienes personalidades múltiples, pero a veces siento como si yo sí las tuviera. ¿Alguna vez has sentido como que el verdadero tú es un extraño? Lo siento, eso fue más profundo de lo que quise decir en una conversación al azar con una nueva amiga de WWF. Supongo que me sentía un poco introspectivo hoy.

Estaba con él. Debe ser muy difícil ser un famoso. Cada línea que escribía, sonaba más y más a cómo podría ser Edward Cullen. ¿Le había encontrado?

Skeleton17:¡Basta de eso! Así que, ¿de verdad te gustaría que te enseñara yoga? Debo admitir, la idea me atrae. Y creo que estás yendo a los lugares correctos de nuevo. ¿Cómo logras hacer eso con unas pocas palabras, Cheese girl?

Tengo un talento, Edward. Y quiero mostrártelo.

Skeleton17: Tengo que decirte que una profesora caliente es un imán para cualquier hombre de sangre caliente en el mundo. Y ahora tengo una, o alguien que pronto se va a convertir en una, ¿del otro lado del iPhone? Sí, definitivamente vas a los lugares correctos. ¿Puedes combinarlo con la fantasía de la bibliotecaria y atarte el pelo en un moño, tal vez? ¿Y gafas?

Qué calor hacía aquí, ¿no? Si, eso lo haría por ti, Edward. Necesitaba que Rose llegara ya de su cita.

Skeleton17:¿Así que BluBell22 quiere decir más que tu amor por el mejor queso del mundo? Bueno, usando mis habilidades de deducción, supongo que 22 se refiere a tu edad, cosa que ya habíamos establecido. ¿Tienes ojos azules? ¿Pelo azul? ¿Te gusta el color azul? Resulta ser mi favorito. O tal vez es la bell que me dará más. ¿Tocas las campanas en el coro de la iglesia? No, no puedo creer eso.

Me reí a carcajadas por sus palabras. ¿Yo cantando en la iglesia? Dios quisiera que el edificio fuera destruido.

Skeleton17: Bell, Bells, Bellísima. Bella, que quiere decir hermosa. ¿Estás tratando de decirme que eres hermosa? Creo que ya había sospechado eso. ¿Estoy cerca de alguna manera? Me Mataste con esa Blue Cheese Girl. Me voy a tocar un poquito de Van Halen. Estoy con ganas de tocar -Hot For Teacher- por alguna extraña razón. Espero que estés impresionada por mi palabra de 60 puntos. ¡Tú turno!

Edward, ¡qué lindo eres! Lo averiguaste, aunque no lo sepas. Si te lo digo, ¿me lo dirás? Sólo hay una manera de averiguarlo. Doblé mis demos y me puse a ello.

BluBell22: Me rompería el corazón el no poder jugar contigo. Después de todo tienes buen gusto. Me encuentras ingeniosa e interesante, así que claramente tienes un gusto decente.

BluBell22: Así que ahora me estás provocando con tu posición favorita, ¿pero todavía no te has dado por vencido? Eso está bien. Sacaré las esposas y veré que te puedo sacar cuando estés a mi merced. Creo que te rendirás a mis tácticas interrogativas muy pronto.

Mi padre me pondría sus esposas si supiera lo que estaba escribiendo y le daría un infarto. Bueno... lo que papá no sepa no le hará daño.

BluBell22: Nunca tendrás que preocuparte sobre censurarte conmigo. Sé lo que tú clamas que no puedes ser siempre y yo seré yo misma y nos divertiremos sin juzgamientos. ¿Funciona eso para ti? Y puedes profundizarte conmigo cuando quieras y de las formas que quieras. ¿Ves? ¡Sin juzgamientos!

BluBell22: En caso de que no lo hayas notado, soy bastante talentosa con mis palabras, por eso sigo pateando tu culo en el juego aún con tu palabra de 60 puntos. Igual, te felicito. Si mis palabras están haciendo cosas en tu cuerpo, bueno, consideraremos eso mi contribución a tus ejercicios de yoga hasta que vengas a enseñarme. ¿Okey?

BluBell22: Resulta que tengo un par de gafas de armazón negro y pelo largo, marrón que es perfecto para ponerlo en un moño. ¿Debo usar un lápiz y luego quitarlo y dejarlo caer mientras sacudo mi cabeza en cámara lenta mientras un botón se desprende de mi blusa blanca transparente? ¿Es así la fantasía? Tendrás que refrescarme la memoria.

Oh, sí, Rose se iba a morir.

BluBell22: Estás equivocado con el pelo y los ojos, gracias. Tengo 22, no 82 y no soy Katy Perry. Creo que las profesoras de pelo azul les caerían bien a los estudiantes, así que tal vez lo considere. Y, sí, de ahí es donde viene el 22. Acertaste esa parte también. Bueno, creo que me veo bastante bien, no iría por la vida declarándome que soy hermosa, pero mis padres no lo consideraron cuando eligieron mi nombre. ¿Lo entiendes ahora, Hércules Poirot? Y si vas a usar mi nombre, ¿puedo usar el tuyo? ¿Qué dices?

Eso fue todo, por ahora. Abrí de nuevo la partida y decidí que ya era hora de hacer uso a mi “Q”. Conseguí una palabra doble con Queer y volví a tener una ventaja de 61 puntos, lo que me gustaba mucho. Cerré la aplicación y apagué la luz. Tal vez mañana me dijera su nombre. Su edad era la adecuada, por lo que ya era una pista nueva. Mañana me daría otra, tal vez la definitiva. Ahora era el momento de dormir y soñar con un sexy cuerpo y con unos ojos verdes.

 

 

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Queer: Raro.

Bell: Campana.

 

Jibed: Burló.

Capítulo 6: Berry Capítulo 8: Leech

 
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