-¿Así que, es cierto que has terminado con Jared?- Rose preguntó con asombro. Alice y yo le habíamos contado su triunfo de esta mañana. Terminé de hacer la ensalada que había hecho mientras Alice ponía los fideos en el colador. Los espaguetis estaban listos.

-Si. No le necesito. He encontrado a alguien mejor.- Mis ojos se encontraron con los de Rose y se encogió de hombros en silencio. Deshacerse de Jared, sea por lo que sea, había sido una buena decisión.

-¿Ya sabes el nombre de ese alguien?- Preguntó Rose, dándonos un vaso de vino tinto a cada una.

Alice frunció el ceño.

-Todavía no. Pero lo haré. Parecéis muy convencidas de que no es Edward Cullen, pero ¿cómo lo sabéis?

Rose levantó una ceja ante eso y negué con la cabeza. Claro que no, no le iba a decir lo que sabía. Era un momento perfecto, pero no. Arruinaría cualquier sentimiento de orgullo que tuviera por lo de Jared y bueno, no quería que se enfadara conmigo.

-Las probabilidades no están a tu favor, hay más de un millón de jugadores y su número es de Texas. ¿Por qué no saber el nombre de la persona con la que hablas?- Joder, le pregunté el nombre a Edward, a pesar de tener miedo a que mi fantasía se desvaneciera.

-Pero por ahora, disfrutaré.- Vertió salsa sobre los fideos y cogí un plato mientras cogían los suyos.- No hay nada de malo en tener un poco de diversión con un hombre misterioso.- Sentí que mi cara enrojecía y Rose resopló. Yo tenía mucha diversión con el mío. Y me moría por saber lo que me contaba en su último mensaje.

-No, no, puede ser muy liberador, ¿no? Escribirte con un desconocido. No tienes que enfrentarte a él al día siguiente. Puedes hablarle de cualquier cosa-, Rose pensó.- Tal vez debería buscar a alguien con quién jugar.

Me reí mientras giraba los espaguetis en mi tenedor.

-¿Desde cuando no dices lo que te viene a la mente?

Rose me miró y se tragó el vino.

-Tengo filtro. Un poco. Desde luego, no voy por ahí contando mis fantasías más sucias.

-¿Cómo e sucias?- Preguntó Alice, con sus grises ojos brillando.

Rose sonrió.

-No quiero que os calentéis y después tengáis que usar vuestros jugueteos. Y menos en la mesa.

-Creo que con lo que has dicho es más que suficiente-, le informé, pinchando un poco de lechuga con el tenedor.- Todavía tengo pesadillas con el último Halloween.

-¡Hey! No fue culpa mía que llegaras a casa temprano. Se suponía que no ibas a llegar.

-Tienes dormitorio, utilízalo.

Sonrió.

-Pero la parte trasera del sofá es mucho mejor que mi cama.

Hice una mueca al venir a mi cabeza la imagen de Rose en su traje de dominatrix y Royce inclinándose sobre el reposa cabezas del sofá.

-Sólo digo que deberíamos haber quemado esa cosa.

-Tiré la manta que estaba puesta-, Rose señaló.- Sabiendo lo que sé ahora, me gustaría haberle golpeado más fuerte.

-Ew ¡Basta!- Estaba echando a perder mi lado sexy de Edward.- Voy a perder el apetito.

Alice se rió.

-Es asqueroso. ¿Por qué follas con todas tus citas?

-Estaban buenos-, dijo Rose con tristeza.- No sabemos cómo es la polla hasta que es demasiado tarde. Al menos eso le pasó a Bella. Debería haberlo sabido. Tú lo sabías pero lo ignoraste.

Alice asintió con la cabeza.

-Es cierto, lo hice. El sexo era genial.

-Si, eso ayuda. O las heridas, según el caso-. Rose sonrió.

-Rose.- Me quejé.- No quiero oír nada sobre tu parte dominatrix.

-Solo fue esa vez, Bella. No llevo cuero negro ni látigos con Brady.

-Bueno.- Mi mente se llenó de imágenes de eso. Látigos. ¿Y si a Edward le gustaban esas cosas? Quiero decir, habíamos hablado sobre castigos. Esperaba que no pensara que me gusta que me azotaran o que a él le guste hacerlo. No, él dijo que no. Lo siento, Rihanna. Puedes quedarte con los látigos y las cadenas. Sólo necesito sus manos sexys, suaves y a la vez fuertes. Las manos de Edward.

-Ya estás de nuevo-, dijo Alice, apuntando con su tenedor hacia mí.- ¿Estás segura de que no estás enferma?

Mierda. Concéntrate, Bella.

-Estoy bien.

-¡Y una mierda! Estás a un millón de kilómetros de distancia. ¿Qué te pasa?

Lancé una mirada a Rose que temblaba con una silenciosa risa. Sabía exactamente dónde se pedría mi mente. Le di una patada debajo de la mesa.

-Sólo tengo un montón de cosas en la mente.

-¡Espera un minuto! ¿Es por Tyler? ¿No era vuestro aniversario?

Mierda. ¿Qué día era? 2 de marzo. Bueno, sería el aniversario de nuestra primera cita.

-¿Sabías que me había olvidado completamente? No pensaba en ello, Alice, te lo juro.

Me miró de cerca.

-Está bien. ¿Pero me dirás si hizo algo? No trató de llamarte, ¿verdad?

-¡No! Eso sería algo malo. No se habrá acordado. Su memoria es mucho peor que la mía.- Vi a Alice mirar a Rose.- ¿Qué? ¿Que no me estais diciendo?

-Joder.- Rose empujó su silla hacia atrás y se dirigió a la cocina. Abrió el armario de la basura, metió la mano y sacó un ramo de rosas rojas.- Esto llegó para ti. Las tiré. Tal vez estuviera mal pero no quería que te jodiera. Ahora y nunca.

Me quedé mirando las flores y luego la miré.

-¿Qué? ¿Son de él? ¿Por qué?

Suspiró y arrojó sobre la mesa la tarjeta. La cogí con manos temblorosas.

-Bella, nunca dejé de amarte. Hubiera querido que las cosas fueran diferentes. Siempre estarás en mi corazón. Te amo, Tyler.- Lo leí lentamente en voz alta. Creo que pensaba que desaparecería si lo leía despacio. O tal vez era un sueño. Bueno, una pesadilla.- ¿Por qué? ¿Por qué lo ha hecho?

-Porque es imbécil.- Rose las cogió y las tiró de nuevo a la basura.- Lo siento. Tal vez debería habértelo dicho. Yo las recogí. Al principio pensé que eran de Brady, pero cuando vi tu nombre, bueno, tenía que saber de quién era. Pensé que eran de...- se interrumpió mientras miraba a Alice.- Alguien nuevo y mejor. Pero no fue así.- Sí, yo también hubiera deseado que fueran de Edward. Pero él no conocía mi dirección. Ni siquiera sabía mi apellido.

Sentí como unos brazos me rodeaban y me apoyé en los brazos de Alice.

-Lo siento, Bella. Sigo diciendo que vallamos a su casa y le pateemos el culo, para luego enseñarle a su mujer la tarjeta.

Suspiré y sacudí la cabeza.

-No. Va a tener un bebé en un mes. No voy a hacer daño a esa criatura. Él o Ella no se merece saber lo idiota que es su padre. Ella tampoco. Ella no ha hecho otra cosa que enamorarse de él, como yo. Fui tan estúpida.

-¡No eras estúpida!- Rose gritó.- Ninguna de nosotras lo sospechó. No creo que fuera honesto hasta el verano pasado. No te merece. ¡Por favor, por favor, no dejes que esto te desanime, Bella! Últimamente has estado muy feliz. Recuerda por qué.

Cierto. Edward me hacía reír. Edward era hermoso y perfecto. Edward era... más que un sueño. No iba a volver a casa de su viaje y venir a Washington para mantener relaciones sexuales calientes conmigo, si lo había no le dejaría irse de mi lado. No iba a enamorarse de mí ni a casarse y tener preciosos hijos conmigo. Era una idiota. Era una ridícula soñadora en un mundo de fantasía.

Me aparté de la mesa.

-No me siento muy bien. Alice, creo que tenías razón. Tal vez me estoy enfermando. Creo que me iré a la cama.

-No-, Rose declaró, agarrando mi mano.- No dejes que te moleste.

-No lo haré-, respondí, apretando su mano antes de soltarla.- Sólo necesito tiempo.

-No te preocupes por los platos. Ya los recojo yo-, me dijo Alice. Sus ojos estaban tristes.- Tengo que ir con el grupo de estudio, pero cuando llegue a casa pasaré a verte, ¿vale?

Logré enviarle una leve sonrisa y un guiño antes de ir a mi habitación. Mi ordenador estaba en el escritorio y mi iPhone junto a la cama, pero no les hice caso, lo único que quería era enterrarme entre las almohadas. ¿Por qué? ¿Por qué esta bofetada de vuelta a la realidad cuando abrazaba mi fantasía? Esta era mi vida, un ex novio al que había aburrido durante las vacaciones de verano y que decidió volver con su antigua novia. No era un cuento de hadas de Hollywood.

No voy a llorar. No estaba llorando por él. Era por el recuerdo de lo que mi vida me había dado reciente mente. ¿Por qué me molestaba en coquetear con Edward? No iba a llegar a nada, me hundiría cuando volviera a Hollywood y empezara a salir con alguna famosa, siendo así el cotilleo del mes.

-¡Para!- Mi puerta golpeó fuertemente la pared y miré para encontrarme a Rose yendo hacia mi ordenador.- No voy a permitir que te hundas, Isabella Swan. Debí triturar esas flores.- Abrió el portátil y lo encendió.

-¿Qué haces?

-¿Qué crees que hago? Te voy a recordar lo mejor que te está pasando en este momento.

Rodé los ojos.

-¿Mejor? ¿Cómo puede ser mi vida mejor?

-Estás prácticamente teniendo sexo on line con Edward Cullen. ¿Cómo no puede ser mejor?- gritó. Miré hacia la sala y resopló.- Alice se fue. Dejé que estuvieras sola cinco minutos, y ahora estoy aquí para recordarte que tienes una relación electrónica con el sexy Edward Cullen.

Sentí como una sonrisa quería salir. Era muy molesta cuando quería.

-Rose, es sólo una fantasía. Incluso si él es Edward, no es como si nos fuéramos a quedar.

-¿Quién ha dicho eso? He leído vuestras conversaciones, Bella. Cualquier hombre quisiera conocer a esta chica. Ahora sal de la cama y supéralo, responde a su correo electrónico o lo haré yo.

-¿Me ha escrito?- Me deslicé hacia el borde de la cama.

-Claro.- Frunció el ceño.- Y estoy usando todo mi autocontrol para no leerlo. Así que mueve el culo y ven aquí para hablar con tu hombre. Un hombre que quiere que le respondas. Le gustas a Edward Cullen. Tanto si lo conoces como si no, él vale mucho más que Tyler.

-Estoy no es por Tyler, Rose. Es que Edward es un sueño. ¿Por qué seguir si esto no va a ninguna parte?- Ya me importaba, demasiado.

-Por que puede ir a algún lado.- Se acercó y me levantó de la cama.- Dale una oportunidad, Bella. Muéstrale quién eres. No podrá dejar de pensar en ti si lo haces.

-No le voy a mandar una foto ahora mismo.

Se rió y me miró.

-No estoy hablado de eso. Ya te haremos una foto pronto. Tengo una idea.- Señor ayúdame.- Sabes perfectamente que me refiero a que le muestres a la mujer que eres. Sigue coqueteando, pero dale un pedacito de ti.

-Tengo miedo. ¿Y si no le gusto?

-Entonces es tonto. Te has abierto a él mucho más que a cualquier otra persona en estos meses, ¿no?- Asentí con la cabeza.- Y no se ha ido corriendo todavía. Habla con él, Bella.- Sonrió mientras salía de la habitación.- Y dile que tienes las tetas grandes. Eso también le gustará.

Me reí y me senté en la silla de mi escritorio.

-Eres como un dolor en el culo.

-Mira que saco mi látigo del armario y te enseño el dolor de culo que puedo llegar a ser.

-¡Grosera! ¡Vete!

-Nada de seguir en la cama llorando. En un rato vengo a verte.- Cerró la puerta y miré el correo electrónico sin abrir de Skeletor17. Los normales nervios all abrirlos estaban ahí y me sentí sonreír. Era una estupidez, pero no podía evitarlo.

-No es Tyler.- Dije en voz alta. Hice clic sobre él.

Bella,

Pienso que eres bastante increíble. Sé que me haces sonreír incluso cuando todo el mundo me hace fruncir el ceño, lo que creo que es bastante genial. Loción, código Morse, WWF… de alguna manera haces que esas tres cosas sean más entretenidas. Bueno, no se sobre código Morse, ¿pero cuán interesantes pueden ser los puntos y las líneas? Son mucho más interesantes cuando vienen de una sexy chica de Washington.

¿Realmente le hacía esas cosas? No me importaba nada más, merecía la pena. Que Edward Cullen sonriera era una cosa fantástica, ¿verdad?

¿Sabías que dork se le llama al pene de la ballena? Mi hermano me lo dijo el otro día y luego tú lo usaste en tu mail. Esto no puede ser una coincidencia, aunque no creo que tú tengas algo que ver con el pene de una ballena. Si Ron Jeremy te asusta, el pene de una ballena probablemente te daría un infarto.

¿Pene de ballena? ¿De donde lo ha sacado? Sin embargo, me estaba riendo. Edward Cullen era increíble.

¿Están tus brazos abiertos para mí, Bella? Lo admito, un abrazo me serviría, luego de la semana que pasé. De alguna manera, creo que un abrazo no va a ser suficiente. Nunca te librarás de mí.

Edward, no te burles de mí. No dejaría que te fueras, si pudiera tenerte.

Es algo muy bueno que hayas ido a clases. No me gustaría castigarte, de una manera no divertida. Saltearse clases está prohibido. Tengo que sufrir durante mis reuniones. Tú tienes que pasar por lo mismo. Luego nos podemos compensar y hacernos sentir mejor. ¿Te parece justo?

Me parece más que justo. Se me ocurren un montón de formas de hacer que te sientas mejor.

Ahem. ¿Qué estaba haciendo tu compañera de apartamento en la cama contigo? ¿Me dirás o dejarás que mi mente enferma y depravada haga el trabajo? Porque, tú sabes, soy un hombre. Sólo digo. Aunque estoy un poco celoso que ella (¿es una mujer verdad?) estaba en la cama contigo en vez de mí. De verdad espero que sea una mujer. Mmm.

Estaba celoso de nuevo. Era tan tierno. Había olvidado decirle que vivía con dos compañeras de piso. Bueno, él ya sabía que Rose era una chica, pero pensaría que vivía con otro hombre. Si mi padre estuviera muerto y enterrado, sería así.

¿Así que estabas pensando sobre mi desnudez en pleno Starbucks? Cambio de sentido es un juego justo, mi bella Bella. Por lo menos no había evidencia física de tu reacción, um, dado por hecho de que tuviste una, por supuesto. Trataré de no ofenderme si no la tuviste, pero, sí lo haré. Dime que la tuviste. Miénteme si es necesario.

Por favor. El pensamiento de Edward desnudo me enrojeció. ¿Por qué era tan bueno en hacerme olvidar que no tenía ninguna posibilidad con él?

Bueno, mi Bella, debo dormir, ya que no estás aquí para entretenerme de otras maneras. Espero con ansias tus palabras en la mañana.

Tu Edward.

Seguí con mis dedos la última línea donde decía que era mío. Tonta, era tonta. Sólo tenía que disfrutar del momento y no dejarme atrapar ante la idea de tener algo más que un coqueteo por internet. En el mejor de los casos os llamaríais. ¿Eso era malo? Un poco de diversión sexy no hace daño a nadie, a menos de que estúpidamente me enamora de alguien que no conozco. No era estúpida. Claro que no.

Edward,

Tú eres bastante increíble también, ¿lo sabías? Tuve un recuerdo del pasado bastante malo esta noche y cuando entré a mi correo y vi tu mail, bueno, me hiciste sonreír y reír lo cual pensé que no lo iba a hacer por un tiempo. Así que gracias por eso.

A mi también me vendría bien un abrazo. Sabías que, bueno por supuesto que no lo sabías, no me conoces, pero… aparentemente hoy sería el aniversario de tres años con mi ex. No que lo recuerde. Había tenido un lindo día, excepto por los flashes calientes en Starbucks que sí, fueron reales. Tú sabes lo que los pensamientos tuyos desnudos me hacen.

Me encantaba que sus pensamientos de mi desnudo le dieran flashes calientes. Pero odiaba que algo la estuviera molestando. Los ex son un dolor en el culo. Yo lo sabía demasiado bien.

Ves, los pensamientos tuyos desnudos me desvían de mi trance. Como sea, todo estaba bien pero esta noche regresé a casa y una de mis compañeras (las dos de ellas son chicas, gracias) me mostró las rosas que había tirado a la basura. Ella estaba tratando de protegerme e intentando que me enojara, pero, honestamente, no estoy enojada de que no estemos juntos. Estoy enojada porque él es un imbécil quien piensa que está bien para él enviarme rosas en nuestro no aniversario cuando está casado y esperando un bebé con la chica con quien me engañó. ¿Quién hace eso? Lo que es más importante, ¿cómo llegué a salir con un hombre así? ¿Qué pasaría si los roles hubieran sido intercambiado y hubiera sido yo la que estaba esperando el bebé mientras él le mandaba notas de amor a su ex diciendo que desearía que las cosas hubieran sido diferentes y que la amaría siempre?

¿Está mal ser agradecida por haberlo dejado? Ella está estancada con él, pero estoy casi segura que ella lo ama. Espero que él se quede con ella, a pesar de sus comportamientos idiotas. Wow, te he contado todo vía mail. Lo siento. Tal vez lo borre antes de enviarlo.

Bueno, Rose me había dicho que le enseñara mi verdadero yo. Esto era. Una chica a la que habían dejado por una chica embarazada. Por otra parte, me había desecho de él.

Había escuchado que dork era el pene de una ballena, aunque no puedo decir que esa información quedó en mi cabeza. Gracias por regresarlo a mi vida y hacerme reír.

¿Quién dice que me quiero deshacer de ti? A menos que planees embarazar a tu ex, tú ya estás una pierna más arriba que todos mis ex. Bueno, ¿a quién quiero engañar? Tú estás cabeza y hombros más arriba. Así que, no Edward, si yo tuviera la suerte de tenerte, no te dejaría.

Volvía a soñar. Deseando, mejor dicho. Eso era menos destructivo de lo que podía ser.

Felizmente me lamentaré contigo. Como puedes ver, necesito un poco esta noche. Probablemente debería de haber esperado mandar este mail hasta cuando esté más contenta. Tal vez debería de leer tu WWF. Dios, eso si me pone feliz. Tal vez me encontrarás más feliz ahí. Los diferentes lados de Bella. Tal vez estabas en lo cierto al llamarme Sybil anteriormente. Se siente raramente bien hoy.

La compañera de apartamento estaba en mi cama de una manera no sexual, te lo aseguro. Tuvimos una pelea y vino a pedirme disculpas, así que se subió a mi capa y esperó a que despertara. Un poco raro si lo piensas. Desearía haber despertado contigo. Aunque me estuvieras mirando, de una manera rara, probablemente estaría bien.

Dulces sueños, Edward. Desearía que estuvieras aquí para endulzar mi realidad, pero estamos estancados con esto, no es que me quejo. Hablaremos pronto.

Tu Bella

¿Enviar o no enviar? Esa era la pregunta. ¿Qué daño podía hacer? Me conocería un poco mejor. Y si lo eliminara no lo haría. Pulsé enviar. Tal vez se sentiría mal y quisiera venir a Washington para darme ese abrazo. Jaja, Bella.

Ahora vería si me dejaba tan caliente y mojada como de costumbre. Esa sería la mejor manera para terminar la noche, mi estado de ánimo cambió de repente. Aunque sólo fuéramos ciberamigos para el sexo, sería algo, ¿no? Me tiré a la cama y cogí el teléfono.

¿Tin? Miré mis cartas y mierda. ¡Mierda! Tenía la palabra perfecta. Ni siquiera esperé para jugar. ¡Era Wet! Frota y moja. Para tener esas letras, era increíble lo que podían hacer. Sabía que iba a ganar. Ganar lo era todo.

Skeleton17: Estoy dispuesto a tener la ira de las naciones con tal de tener tus traviesas palabras. Algunas cosas valen el sacrificio, Bella, y tú eres una de ellas.

¡Qué calor!

Skeleton17: Soy extremadamente fácil de complacer, o eso parece, cuando se trata de ti. Tus palabras me ponen duro vergonzosamente muy fácil. Tengo miedo de escuchar el nombre Bella en público y ser como el perro de Pavlov, mi dura vara se erguirá y la verá todo el mundo. No lo lamento, igual.

Jeje. ¡Edward cogido con erección! ¡En el interior la foto! Compraría esa revista.

Skeleton17: Bella, Bella, Bella. ¿Qué voy a hacer contigo? Estás haciendo muy difícil mi trabajo como caballero (bueno, estoy seguro de que mi madre discutiría conmigo de que no he sido uno, en cuanto a ti se refiere) y decirte exactamente lo que quieres escuchar.

Skeleton17:¿Quieres saber que quiero flexionarte y pegarte en tu lindo culo por tentarme, por dejarme duro múltiples veces al día? Y luego quiero meter mi polla dentro de ti y hacerte gritar mi nombre mientras te tomo por detrás en tu escritorio de profesora. ¿Es eso lo que querías saber, Bella? Esa es una de las muchas fantasías que tengo desde que empecé a hablar contigo. ¿Qué hay de ti? Lo justo es justo.

Oh, madre mía. Si. Wet era la palabra correcta. Mierda, esa imagen me vino a la cabeza. Edward Cullen estaba siendo, sin dudarlo, el remedio para mi mala noche. ¿Por qué había estado molesta? ¿Y qué si no era más que una fantasía? Una muy buena, por cierto.

Skeleton17: Creo que tenemos que hablar sobre estas manos cuando vuelva a la misma zona horaria. No sé lo que haremos, pero sí sé que disfrutaremos de esta fantasía en tiempo real. Eso es un hecho.

El eufemismo del siglo.

Skeleton17: Nunca rechazaría un mail adjunto tuyo, Bella. Leeré todo lo que me mandes. ¡Deberías saberlo ya! Me tomará algún tiempo montar solo, ¿verdad? Hasta que pueda montar contigo.

Estás burlándote de mí ahora, Edward.

Skeleton17: Mis manos son perfectamente fuertes y estos pensamientos me harán trabajarlas más. No tienes nada en que temer, Bella. Los pensamientos de ti y ese pequeño juguete me tienen loco.

Skeleton17: Hablamos pronto,

Edward

¡Qué hombre! De empezar suave a ir subiendo de nivel. Este hombre me hacía volar. Era hora de hacérselo saber.

Bluebell22: ¿Leíste mi palabra, Edward? ¿En qué pensaste cuando la leíste? Porque, déjame decirte, unas pocas palabras de ti y quedé como la palabra. Mojada. Especialmente cuando mencionaste el escritorio y la nalgada y luego, bueno no lo embellezcamos, follarte por detrás. Esa es una de mis fantasías favoritas también.

Definitivamente muy alto. También estaba la fantasía de la limusina de camino a unos premios, lo que no te podía decir, la bañera de hidromasaje, su mansión, en el patio alumbrado y... si, había más.

Bluebell22: Sabes, toda esa charla sobre volar me hizo pensar si alguna vez lo hiciste en un avión. Debo admitir que nos he imaginado a los dos encerrados en un pequeño baño, casi sin movernos, pero tan cerca. Yo sentada en el lavamanos y tú parado estocándome en un avión lleno de gente que no sabe.

¡Dios mío! Estaba sudando. Necesitaba una ducha fría en estos momentos. Nunca había tenido que tomar una en mi vida, menos cuando me había quemado la piel por el sol, y había sido tibia y no caliente. Esta era la mejor razón.

Bluebell22: Sospecho que el suministro de loción alemana escaseará. Espero que estés listo cuando ocurra, Edward. Estaría triste si no volvieras a mi, o por lo menos a mi zona horaria. En estos momentos querrás el manos libres, ¿no?

Bluebell22: Me alegra saber que abrirás mi correo adjunto. Espero que te guste lo que verás. Tal vez te sorprenda con algo pronto. Te prometo que no será x-rated. ¡Hay cosas que no haría!

Nunca se sabe, en estos tiempos, donde acaba algo. Tendría pesadillas al saber que mi padre sabía que su hija subía fotos guarras a la web. No, gracias.

Bluebell22: Me alegra mucho escuchar sobre esas manos fuertes tuyas, Edward. Tienen que estar prontas para levantarme y cambiarme en algunas posiciones que tengo en mente. Te dejaré con eso.

Bluebell22: Tú muy caliente, Bella

Bueno, la noche había mejorado considerablemente. Rose estaba en lo cierto. Edward lo había conseguido A lo mejor nunca le vería, pero podía divertirme mientras. A la mierda Tyler.

…..............

Tin: Estraño.

Wet: Húmedo.

…..............

¡Hola! Dos cosas por las que pediros perdón: la primera por el retraso, ayer se nos hizo imposible tanto para Isa como para mí tener los capítulos a tiempo por lo que hoy aquí estamos. Y la segunda, me acabo de dar cuenta de que este capítulo iría con el capítulo anterior de WWS, lo siento, aquí faltan capítulos que los tendré todos subidos para antes del miércoles que viene, si notáis otra semana que me pasa, decírmelo por favor, puede que se me pase como ahora por que no tenga tiempo y no revise cuantos capítulos tengo que subir o porque se me pasa mirarlo.

Chicas, os veo la semana que viene con más, o antes con los capítulos que faltan.

Espero vuestros comentarios y votitos que me tenéis muy abandonada jaja

Un besoo!!

PS: Os veo por Primero y Diez el sábado :P