Helen escucho atenta las cosas  que Gabriel le decía , cada palabra , cada detalle coincidía con sus sueños y visiones, ya no quedaba dudas aquel hombre sabia más de Helen Cohen que ella misma.

-¿dime si eh errado en algo de todo lo que te eh dicho? Gabriel se paró y camino a paso lento hacia el balcón, contemplo la vista de la ciudad- hay más cosas en este mundo de las que tu y la mayoría de las personas creen , cosas que nosotros intentamos mantener ocultas para el bien de toda la humanidad.

Lucil seguía sentada frete a Helen fumando su tercer cigarrillo, inspeccionando cada gesto de esa otra mujer que sería su complemento en las batallas futuras, claro eso si aceptaba el sacrificio que ser una cazadora implicaba.

-sus alma reencarnan una y otra vez, algunas veces naciste como hombre, en otros lugares , países que tal vez no has escuchado hablar, en épocas que solo están en la historia humana, siempre fuiste una guerrera , una cazadora –Gabriel continuaba de espaldas buscando las palabras adecuadas para hacer entender a Helen quien era ella.

-ya no sé qué decir, eso suena como un cuento…-Helen hundió su rostro en sus manos  masajeando su cabeza, todo esto le estaba dando un jodido dolor de cabeza-

No podía negar que cierta parte de lo que él le contaba era real, pero aun no le cerraba del todo ¿Cómo ese hombre lo sabía?¿quién era él?  

-qué clase de cazadores se supone que somos? Es decir, no creo que cacemos alces , tigres o esas cosas, tampoco soy lenta mentalmente para no darme cuenta que lo que ustedes me dicen implica algo más allá de mi conocimiento racional…

-Vampiros –le corto tajante Lucil mientras apagaba su cigarrillo en el cenicero de vidrio negro –es eso-vio como los ojos de Helen se abrieron de par en par.

¿acaso había oído bien? Se decía internamente ella ¿vampiros? Esos seres que se alimentan de sangre según los cuentos de terror, Drácula y esas cosas que ella una vez oyó pero no le presto nunca la suficiente atención.

-también otras cosas-continuo Gabriel- también hombres lobos, los descendientes de los nefilim, hemos acabado con muchos pero aún hay más, es una tarea difícil de completar

¿Nefilim ¿ alguna vez escucho sobre eso Helen , pero no recordaba donde , pensó y pensó  buscando la respuesta pero el dolor de cabeza se acrecentaba y no la dejaba aclarar sus ideas.

-¡vaya!-rio nerviosa, aquellos dos eran muy convincentes, ella no quería creer en lo que le decían, pero es que  sabían tanto de ella de su vida de todo- ¿tú también eres una cazador verdad? Le pregunto a Gabriel

El hombre que aún seguía en el balcón lentamente dejo caer su camisa al suelo , su espalda perfectamente tonificada , marcaba cada musculo, Helen no en entendió aquella acción hasta que vio como dos alas negras aparecían  en su parte trasera, unas alas como las de los ángeles ,pero estas eran negras , y rápidamente el recuerdo de la pluma le vino a la mente,.

Entonces era verdad, esa noche eran ellos quienes la espiaron por la ventana.

-E...e...eres un  ángel-tartamudeo-

-casi-Gabriel se giró extendiendo sus alas de lado a lado , eran unas cosas divinamente hermosas , la cosa más maravillosa que Helen vio en su vida- soy un arcángel, mi nombre es Gabriel.

“el arcángel Gabriel” había ido mucho tiempo a clases de catequesis como para no recordar quien era el arcángel gABRIELl, la biblia lo menciona.

-Es él –le confirmo Lucil como la cosa más natural de mundo-¿ahora vas a creernos?

¿Cómo podía no créeles? Si lo estaba viendo con sus propios ojos, camino hasta donde estaba el arcángel y lo inspecciono con sumo cuidado, sus alas estaban pegadas a su espalda no era ningún truco, palpo las plumas que eran igual de suaves que la que ella poseía.

Helen no aguanto mas la presión mental que todo eso le produjo y colapso, cayo desmayada pero no llego a tocar el suelo, Lucil fue rápida y la detuvo en sus brazos.

-pobre niña-dijo con una voz sincera-no sabe lo que le espera y a todo lo que renunciara.

-aún no ha aceptado, ni firmado el contrato sagrado-Gabriel miro a la joven que  aún mantenía sus ojos cerrados- si ella dice que no….

-No lo ara , en sus manos está la vida de su padre , la felicidad de su familia, ella firmara el contrato por amor a sus seres más cercanos-Lucil sintió envidia, ya que ella en su pasado firmo el contrato por odio, un odio que crece día y noche y no la deja descansar , no hasta el día que ella encuentre y mate al vampiro que se llevó su felicidad, el vampiro que por error se topó con ella, lo mataría sin piedad, no había otro ser en la tierra que Lucil detestara más .y lo encontraría , ya que esa mujer siempre fue tenaz , persistente , y con toda una vida inmortal por delante hasta que ella lo deseara , porque jamás rompería el contrato sagrado hasta tener en sus manos a ese hombre que cambio su vida para siempre.

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