Bella POV

Me baje hambrienta, y analice cuanto dinero me quedaba. Tenia apenas lo suficiente para tomar el próximo bus a Forks, por lo que fui derecho a la boletería a comprar mi pasaje. Por suerte no demoro en salir, y unas horas después estaba en la estación de mi cuidad natal. Todos en el lugar me conocen. No solo porque es un pueblo pequeño, si no porque ser la hija del jefe de policía, te da un cierto respeto de “no se metan conmigo”… Me miraban extrañados mientras caminaba por las calles hasta la estación de policía a un par de cuadras del lugar. En cuanto aparecí por la puerta, papa se abalanzo sobre mí y me abrazo.

-     Estábamos preocupados! Edward nos llamo que se habían peleado y que habías desaparecido!

-     Lo siento. No quería preocuparlos – Dije abrazándolo.

-     Edward nos conto que paso! – Dijo

-     Les conto? – Dije separándome de el y mirándolo extrañada.

Si algo no podía creer era que mi padre tomara partido por parte de el…

-     Estas de su lado? – Dije molesta.

-     No cariño, siempre estaré del tuyo sin importar que. Es solo que el te ama… es imposible no verlo…

Mire a mi padre con total sorpresa. Estaba totalmente anonadada… es posible?

-     Claro que si quieres aun puedo matarlo – Dijo riendo, haciéndome reír a mi también.

Lo abrace con fuerzas porque lo necesitaba…

-     Ven, vamos a casa que tu madre esta como loca!

En el camino no decíamos nada. Ambos estábamos en silencio, el cual se rompió en el segundo que bajamos del auto. Mi madre se abalanzo sobre mí, abrazándome y diciendo millones de cosas a la vez…

Fue agradable estar con mis padres. Si algo tenia que agradecer, era que Charlie no se metía en mis cosas, y si bien René lo hacia, sabia como manejar lo que no quería que sepa… El primer día les conté lo que había pasado, como me sentí cuando encontré a Edward en esa situación, y si bien ellos comprendieron, luego me reprocharon no haberme quedado a hablar con el… Tenia que darle el beneficio de la duda. Como pude asumir lo peor de el sin dejarlo hablar? El siempre me dio mi lugar, me trato con respeto y me mostro orgulloso en su trabajo… nada me hacia pensar que el podía llegar a engañarme, pero era un manojo de nervios e inestabilidad…

-     Es el embarazo amor – Dijo mi  mama notando mi lucha interna.

Mis padres me habían dado que pensar… inclusive lamente haberme ido de esa manera, asique tome mi teléfono y lo prendí. Vi que había cerca de 30 llamadas más perdidas, asique solo tome el teléfono y lo llame, pero no tuve respuesta. Como podía ser? Acaso había dejado de intentar buscarme? La desesperación me ataco, y solo me largue a llorar con todas mis fuerzas… No demore mucho en sentir unas cálidas manos abrazándome. Sentí su aroma inundándome, por lo que solo tome sus manos con las mías y volví a llorar…

-     No llores, por favor – Dijo.

-     Lo siento – Dije entre sollozos.

-     Lo siento yo! – Dijo besando mi nuca – No tendría que haber dejado que esa estúpida se me acerque. Lo siento tanto!

Me gire y lo vi a los ojos, tan sinceros… solo lo bese, porque sentía necesidad de hacerlo… Comenzamos a besarnos tiernamente. Su lengua se delineaba por mis labios de manera muy sensual, y yo sentía desfallecer… De la nada, sentí como mi estomago se movió justo donde el tenia su mano… Me sorprendí, por lo que me separe de el, y el también me miro extrañado…

-     Que fue eso? – Dijo mirando mi estomago.

-     No se – Dije mirándome también.

Segundos después volvimos a sentirlo ambos… Edward y yo comenzamos a reírnos mientras sentíamos como nuestro bebe se hacia notar desde dentro de su madre…

-     Te amo – Dijo acercándose a mi y besándome.

-     Como yo a ti – Dije respondiendo el beso.

-     También te amo a ti – Dijo en mi estomago y se movió nuevamente haciéndome que nos riamos juntos…

Edward me explico como la mujer con quien la había encontrado era una mujer con la que había estado hace muchos años en una conferencia… Ella había llegado a la ciudad y fue a buscarlo. Le explico que ya no podía ocurrir nada entre ellos, pero ella no acepto un no por respuesta, y luego yo entre y los vi. Me juro, juro y juro que nada había pasado, y le creí…

El fue a buscarme, perdono mi actitud infantil, asique no había razones para no volver con el a casa… me sentía tan bien de tenerlo a mi lado… pasamos ese día con mis padres, cenamos juntos y nos fuimos a la cama… Demás esta decir como no demoramos en sentirnos… Sus manos conocen cada parte de mi cuerpo a la perfección. Saben donde tocarme y hacerme perder la noción de todo… Intente hacer el menor ruido posible para no incomodar a mis padres, pero Edward me lleva tan a los extremos que aunque quisiera, no podía bajar el volumen…

-     Oh Edward! – Gemí en mi orgasmo…

El se quedo tirado sobre mi pecho, intentando controlar su respiración, mientras yo acariciaba su espalda…

-     No vuelvas a dejarme así – Dijo mirándome a los ojos.

-     Nunca – Dije riendo.

Volvimos a Forks, y los chicos nos esperaban atentos. Me disculpe con ellos por mi actitud, y con Carlisle especialmente por fallarle en su consulta. La cual re coordinamos para esa misma tarde de nuestro regreso. Como era de esperarse, la sala estaba totalmente llena, y mientras Carlisle pasaba el aparato en mi panza, todos mirábamos esperanzados…

-     Quieren saber el sexo no? – Dijo Carlise…

-     Papa! – Dijo Edward amenazadoramente.

-     Pues… vayan eligiendo nombres de varón! – Dijo Carlisle.

Edward estaba totalmente feliz, y yo no dejaba de llorar. Alice llamo a mis padres al instante y les dio la noticia, los cuales lloraron de felicidad también…

Con Edward las cosas no podían estar mejor. El trabajaba lo menos que podía para pasar tiempo con migo, mientras seguíamos los controles y comprábamos las cosas para recibir a nuestro bebe… Habíamos desarmado la biblioteca de la casa, y pusimos allí el cuarto del bebe. Mi mente estaba totalmente puesta en hacer todo para el pequeño Cullen, asique con Edward pasábamos todo nuestro tiempo libre en su habitación, y lo que nos quedaba, juntos, en nuestra habitación…

Me levante una mañana con muchos dolores en la espalda. Descarte la idea de trabajo de parto porque había tenido dos falsos avisos de parto, y me sentía muy estúpida de terminar en el hospital, levantando a Carlisle a mitad de la noche para que me viera y no era nada… Asique solo deje a Edward acostado y fui para el baño. Me sentía inclusive un poco descompuesta, pero calculo era producto del calor que sentía… Si bien no hacia mucho calor, era L.A., y allí siempre hace calor y con casi 9 meses de embarazo, era aun mas pesado…

-     Estas bien cariño? – Dijo Edward besando mi espalda.

-     Si, bien – Dije riéndome en el espejo.

Últimamente tenía mucho en mi cabeza… Estaba próximo a nacer nuestro bebe, y las inseguridades me atacaron. Si bien siempre fui un manejo de nervios emocional, en este último tiempo  era un manojo de nervios histéricos, emocionales, depresivos e inestables… La idea de no estar casada antes de tener mi primer hijo me golpeo en uno de los  últimos controles cuando fui a ver a Carlisle y una secretaria suplente me dijo Sra. Cullen… No la corregí, y desde ese momento, no pare de pensar en mi bebe, que si bien seria un Cullen porque Edward nunca dejaría de reconocerlo, yo no seria parte de esa familia… Eran la hormonas, estaba segura de ello ya que en otro momento de mi vida jamás me haría ese planteo, pero no dejaba de darme vueltas en la cabeza, y Edward parecía notarlo.  Creo que una vez lo hice mas que notorio, cuando con palabras torpes le plantee como veía su futuro con migo… El solo reía y me quería dejar tranquila que no concebía un futuro sin mi y su bebe en el, pero así y todo me sentía mal… No podía negar que la única razón por la que con Edward había pasado algo era porque estaba embarazada…

-     No estas bien, y puedo verlo – Dijo abrazándome por detrás.

Sin saber bien la razón comencé a llorar.

-     Dime cariño, que pasa?

-     Que que pasa?! – prácticamente grite – Mírame! Soy una ballena, tu no me amas, seguramente ya te has dado cuenta de que la única razón para que estés con migo es este bebe, y una vez que nazca que pasara con migo?

Mi cuerpo estaba casi convulsionando por los sollozos, y Edward estaba totalmente helado mirándome…

-     Crees que no te amo? – Dijo con voz rota.

Yo solo lo mire…

-     No puedes negar que la única razón por la que todo comenzó entre nosotros es  por el embarazo… que pasara cuando tenga el bebe? Cuando ya no sientas algo que te ate a mi?

Edward solo rio y negó con la cabeza.

-     Te burlas de mí? – Dije con ira.

-     No cariño… ben, necesito que nos sentemos y charlemos – Dijo agarrando mi mano y llevándome hacia la cama..

El me miraba tiernamente a los ojos mientras que yo seguía llorando… que me diría?

-     Yo siempre fui una persona muy orgullosa, y no me gusta quedar expuesto, especialmente con los sentimientos… - Dijo mirando al piso.

Yo lo mire extrañada.

-     Pues… la primera vez que te vi, no fue la mañana que despertamos juntos en el hotel en las vegas… es mas, estamos juntos porque yo luche contra viento y marea para estar contigo esa noche…

Yo trague pesado y lo mire sorprendida…

-     Te vi por primera vez en el hotel cuando caminabas con las chicas, y yo arrastre a los chicos para que conversáramos con ustedes. Las seguimos al bar a donde fueron, y cuando comenzamos a ver como desechaban a cada hombre que se les acercaba, solo esperamos para hacer nuestra movida… ustedes estaban muy alegres, pero nunca pensamos que no recordarían nada… cuando estábamos en el bar, un presentador  las hiso subir al escenario, y le pague 500 dólares al guardia para que nos dejara subir a bailar con ustedes… la manera en la que tu bailaste con migo me volvió loco y dejamos a todos y nos vinimos al hotel… en el taxi cuando veníamos nos besábamos con una urgencia increíble, y cuando llegamos, nunca supe lo que era estar conectado a alguien hasta que estuvimos juntos esa noche… esa noche fue tan magnifica para mi… tan especial… Cada vez que pienso en esa noche mi cuerpo reacciona al instante…

Eso si no podía creérselo…

-     Sin embargo no te costo mucho estar con otras… - Dije enojada

-     Déjame terminar por favor – Dijo

Se acomodo delante mio y continuo con su relato.

-     Me desperté a mitad de la noche, y tu hablabas dormida… decías mi nombre y me enterneció el alma… sabia que algo adentro mio había cambiado luego de esa noche, y cuando te despertaste y ni siquiera te acordabas de haberme conocido, me daño el orgullo y fue mas fácil para mi actuar como si yo tampoco recordara nada… La manera en la que te trate, fue porque me desconcertaba inclusive estar a tu lado… que el estúpido del barman te coqueteara me volvía loco de celos. Estaba celoso, no enojado y tu no te dabas cuenta…

Me sorprendió tanto cuando me lo contaba que aunque quisiera hablar, las palabras no salían de mi boca…

-     Nunca estuve con otra mujer que no fueras tú después de esa noche… Las mujeres que fueron al hotel, eran solo para ver tu reacción. Nunca más estuve con otra mujer después de estar contigo, inclusive cuando creí que jamás te vería de nuevo…

-     De enserio? -´Dije con la voz rota.

-     Si… no me enorgullece decirlo, pero le robe tu teléfono a Rose para agentarte en mi celular, y el día en que me hablaste para decirme que estabas embarazada, estaba tan nervioso que me caí de la silla… Jane me miraba cono si estuviera loco… - dijo riendo

Me costaba mucho estar separada de Edward en ese momento. Quería tirarme arriba de el y devorarlo…

-     Te amo – Dije besándolo con todas mis fuerzas

-     No tanto como yo a ti – Dijo riendo y acariciando mi rostro…