Eres mía... por siempre (+18)

Autor: GabrielaCullen
Género: + 18
Fecha Creación: 15/06/2011
Fecha Actualización: 29/01/2014
Finalizado: NO
Votos: 32
Comentarios: 149
Visitas: 88408
Capítulos: 27

 

"-Nuestro próximo objeto es una joven estudiante de bachillerato, como ven es un poco vieja, pero note su piel, blanca suave– dijo Felix uno de los perros, ella estaba desnuda en medio del escenario de subasta, con una cadena al cuello – Comenzamos con 50 millones"

La mafia, es un juego... muy peligroso en donde no debes de confiar en nadia... Eso lo aprenderas de muy mala gana, Bella Swan, te viste involucrada con el tipo mas, Agresivo, Malvado, Amoroso, atento y guapo del mundo.

*Traicion, Engaño, Amor y  Pasion*

"- La llevare a tal grado de locura, en donde no pueda confiar en nadie mas que en mi..."

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 20: Cap.2 Una llamada que puede cambiar el curso de todo.

Chikas he regresado con mis locuras jijijijiji pero vamos a echarle galleta desde hace como una semana que quería subir los capítulos pero por una maldita razón no podía asi que decidí mejor seguirle escribiendo y ya cuando el maldito sistema me permitiera subir ya el aria con los que tengo asi que a darle….

 

 

 

 

¿Llamada que nos abre las puertas de la felicidad?

 

 Bella


- hola… ¡bella!

- ¡Alice! Acabas de salvarme

- ¿eh?.... Edward – bufo – lo sabía…

- ¿quién es? – oí su dulce voz, pero eso no le quitaba el tono serio, de Edward a mis espalda, al instante me puse nerviosa y trate de que mi cerebro trabajara rápido

- Alice?... este… c-claro que… ¡si, vamos al centro comercial! – ¿que era ese arranque de felicidad? tonta, tonta, no me va a creer.

- amm? Bueno si quieres escapar de él, claro que te ayudo. En una hora llego a tu casa.

 

 

Coloque lo más despacio que pude, gire poco a poco para encontrar a Edward apoyado en uno de las columnas de la sala, su mirada era seria y Tenía los brazos pegados en el pecho.

 

- Era Alice – mordí mi labio y desvié la mirada – quería que la acompañara al centro comercial. – intente decirlo de la manera más despreocupada, pero al parecer no me creyó.

- a ti no te gusta ir de compras

- Yo… ¿sabes qué? ¡Déjame en paz¡ - grite. Un sentimiento de iré se apodero de todo mi cuerpo, sentí una ganas de saltar sobre el y… vi comoabría los ojos como platos y  luego sonreía de manera arrogante. Ash, odio esa cara, camine hacia él y lo empuje y para mi desgracia volvió a sonreí, pase a su lado y le pegue con mi hombro.

 

Entre en nuestra recamara tome una toalla y me metí en la regadera. Mientras el agua se deslizaba por mi cuerpo también lo hacia la ira. Un sentimiento de culpa me golpeo en lo máshondo de mi pecho. ¡Le grite, solo porque me pillo en una mentira!

Me pegue en una de las paredes y comencé a llorar, me deslice hasta que quede sentada en el piso. ¡Dios! ¿Qué es todo esto?

 

Oí cerrarse la puerta de la recamara, rápidamente me puse de pie, cerré la llave del agua, tome una tolla y la enrede en mi cuerpo. Me asome y lo vi, de pie frente al closet, al parecer se había duchado en el baño del cuarto de invitados ya que de su pelo caían gotas de agua que se escurrían por su torso desnudo, una nueva punzada recorrió mi cuerpo. Haciendo una maraña de sentimientos en mi corazón; deseo, tristeza, rabia y confusión era lo que sentía. Me aferre muy bien la toalla y abrí por completo la puerta. Ni siquiera volteo a verme, siguió buscando no sé qué cosa en el closet.

 

- ¡Tu!

 

Volteo su rostro un poco para mirarme, trate de decir algo pero la verdad no podía. Saco un traje del closet y lo aventó a la cama. Giro todo su cuerpo y me miro aun serio, cruzo los brazos sobre su pecho, quizás esperando que yo hablara. Mis ojos comenzaron a nublarse y luego cálidas lágrimas se resbalaron por mi mejilla, aflojo la postura y en su mirada podía ver una chispa de desconcierto

 

- perdón -  me arroje  sobre él. Pase mis brazos por su cintura y seguí llorando

 

- ¿Qué es lo que tienes?

 

Poco a poco sentí como pasaba su brazos por mis hombros empujándome cuidadosamente hacia atrás, mis brazos cedieron ante su fuerza, levante mi rostro y seguí llorando.

 

- no se ¿sabes? Todo es por tu culpa… no sé como pero es tu culpa – moví sus brazos y volví a aferrarme a su cintura, sin poder dejar de llorar

 

- Sigo pensando que eres sumamente extraña – levante mi rostro y lo vi sonreír.

 

Me tomo en brazos y me llevo a la cama, me deposito con sumo cuidado y se recostó junto a mí

 

- Mi pequeña complicación andante – pasó uno de sus brazos por mi espalda y me pego a su cuerpo. – pequeña, tengo que ir a la oficina. Creo quehe descuidado el trabajo…

 

- no, quédate conmigo… - acaricie su rostro, y delicadamente deslice mi mano por su cuello, llegando a su pecho y luego un  poco más abajo

 

- creo… - su voz se había vuelto ronca, lo mire a los ojos y se veían más oscuros de lo normal, en contra de todo lo que había predicho, tomo mi mano y la subió a sus labios; le dio un tierno beso y la coloco a la altura de su corazón - He dejado ya bastante tiempo a cargo a Emmett y a Jazper. Aparte tú tienes una cita con Alice en el centro comercial – levanto una ceja y sonrió abiertamente. Alice, ¡rayos! Tendría que cumplir.

 

- ¡Claro! – sonrió aún más a causa de mi puchero, nos quedamos unos cuantos minutos en silencio.

 

- Es hora –

Se levantó y comenzó a vestirse, su clásico y espectacular traje negro, le daban una aire elegante y altivo, tal como éllo era. Antes de irse me dio un beso en los labios “no se me ha olvidado llamar a Eleazar, tan solo queda pendiente” tomo sus llaves y salió.

 

Me levante de la cama, me quite  la toalla y pase enfrente del espejo, esa imagen llamo mucho mi atención. Muy pocas veces había visto mi cuerpo desnudo, pero para haber sido la última vez por lo menos hace un mes, parecía muy cambiado, mis caderas se habían ensanchado un poco más y mi busto había crecido, al parecer mi estatura también había aumentado, pero lo que me llamo más la atención fue que la areola de mis pezones habían aumentado su tamaño y su color era un poco más obscuro. Sí que mi cuerpo estaba cambiando.

 

Deje la imagen del espejo a un lado y me dirigí al closet, tome mi ropa interior, unos jeans y una camiseta de manga corta de un lindo tomo azul eléctrico. Después de vestirme me cepille el cabello y me lo amarre en una coleta.

 

Recogí la habitación, arregle nuestra cama, y lleve la ropa y sabanas sucias al cuarto de lavado, al parecer prontotendría que lavar. Después fui a la sala tome el control remoto y me tire en el sofá que está en frente de la gran televisión, prendí la tele, pero en realidad estaba viendo sin verla.  ¿Qué fue todo eso de la mañana? Estaba tan inmersa en mis pensamientos que no me di cuenta que tocaba el timbre, hasta que unos estruendosos golpes impactaba en la puerta y unos cuantos grito “Isabella sé que estas hay, ahora me cumples”

 

 

- Alice – abrí la puerta lo más rápido que pude, una mareo impresionante me hizo golpeare de lleno con la puerta mucho antes de llegar a ella

- ¡bella!, ¡¿Bella?! ¡Estás bien? – me recupere del golpe y del mareo, trate de componer mi aspecto y abrí la puerta muy sonriente

- Sí, Alice, ¿podemos irnos?

 

 

La hice retroceder, en su mirada podía ver el desconcierto, di unos cuantos pasos y cerré la puerta tras de mí. Comencé a andar, se quedó estática un instante, quizás observándome, pero al poco tiempo camino a mi lado. Me sentía extraña, muy extraña a decir verdad, aunque el mareo había pasado, sabía que no era tan solo eso, algo en mi había cambiado y empezaba a tener una ligera idea de lo que podía ser.

 

Llegamos al auto, su hermoso Porche amarrillo. No cruzamos ninguna palabra durante un gran lapso del camino, se detuvo en uno de los semáforos, suspiro y por fin hablo

 

- ¿Qué es lo que tienes? Me estas preocupando

- no lo sé… bueno en realidad creo que si sé, pero no estoy segura

- ¿quisieras decírmelo?

 

Agache mi mirada y comencé a jugar con mis dedos, no se lo podía decir, ¿Espera? Se supone que es mi amiga, la quiero demasiado y puedo confiar en ella. ¿Puedo? Claro, ella ha estado conmigo en un montón de situaciones de sumo peligro y las ha  sabido afrontar por las dos… 

 

Llegamos al centro comercial, bajamos del auto y nos encaminamos hacia la entrada principal, las puertas eléctricas se abrieron para darnos el paso, caminamos sin decir nada, tan solo la seguía a ella, veía a muchas chicas de un lado a otro, sonriendo, por un instante me dieron envidia pero, yo tengo a Edward, no le puedo pedir nada más a la vida… pero me lo está regalando.

 

 

Alice estaba muy seria, ni expresaba emoción alguna, como en otras ocasiones, cuando habíamos venido de compras, Esa no era mi amiga.

 

Llevaba a unas cuantas bolsas, se le antojo un helado y fuimos a comprarlo, tan solo  escuche su vos cuando pidió los dos conos del apetecible helado. Nos sentamos en una de las bancas. Estábamos tan juntas, la vi de reojo disfrutar de su cono con una delicada sonrisa.

 

- Creo que estoy embarazada

 

Abrió los ojos de golpe y dejo caer su cono, en seguida me puse de cuclillas ante ella. No me miraba, sus ojos estaban opacos, su cara estaba de un tomo blanco, casi transparente y no emitía ningún sonido. Estaba en completo shock.

 

- ¡Alice! Por dios di algo, ¡Alice! – la tome de los hombros

- E-embarazada – susurro

 

A sus ojos regreso el brillo al par del color a su cara. Apretó los dientes, y juro que oí un pequeño rechinido

 

 

- embarazo a mi hermanita – susurro

- ¿Alice? – me incorpore deprisa y la mire asustada

- E-él, lo voy a… matar – se puso de pie y al parecer estaba demasiado enfadada

- aun no es seguro Alice, por favor tranquila. – Coloque mis manos en sus brazos – No estoy segura

- pues ahora mismo lo averiguamos – parecía enojada pero en su mirada había un brillo un poco extraño.

 

Me arrastro a una de las farmacias de la Plaza, pidió varias pruebas de embarazo, de distintos precios y marcas. De ahí pensé que íbamos a ir a su departamento o al mío, pero mi sorpresa fue absoluta cuando entramos en el baño de mujeres y cerro con llave

 

- anda ¿Qué espera?

- Alice deberíamos ir al departamento

- ¡AHORA!

Me grito, le arrebate la bolsa de las pruebas y me metí en uno de  los cubículos, tuve que repasar las instrucciones una y otra vez.

 

 

Después de realizar las 10pruebas que compro, tan solo quedaba esperar, Salí del baño, estaba sentada en el piso, con los brazos cruzados y una cara de pocos amigos, me senté  a su lado. Fueron los 5 minutos más tortuosos de mi vida, mire por ultima ve el reloj, la voltee a ver y ella hizo lo mismo, tomo mi mano.

 

- perdón - me dedico una delicada sonrisa y nos pusimos de pie, nos acercamos al cubículo, como si fuéramos dos prisioneras que iban hacia la muerte.

 

 

Alice tomo la primera prueba

 

Positivo

 

No había soltado mi mano así que le dio un pequeño apretón, arrojo la prueba al pequeño sesto, y me miro. Tome la siguiente prueba.

 

Positivo.

 

El corazón se me detuvo durante un instante, arroje la prueba y Alice tomo la siguiente.

 

Positivo.

 

La mire, estaba realmente asustada me dio otro apretón y  la tiro. Seguimos con las pruebas, dos positivos más.

 

Tome con manos temblorosas la 6ta. Prueba.

 

Positivo.

 

Las 4 siguientes también lo fueron. Es completamente oficial.

 

 

- voy a tener un bebe –

 

____________________________


DE acuerdo me proyecte!!! que tal les parese!!!  dejen sus comentarios......

 


Capítulo 19: SegundaEtapa Cap. 1 Indicios de algo inesperado Capítulo 21: Cap.3 ¿Una linda sorpresa?

 
14439760 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10757 usuarios