- Básicamente eso. Mis padres nos esperan para cenar.-
Estaba manteniendo una conversación con Jasper por teléfono mientras terminaba de guardar algunas cosas en el depósito de la tienda.
- Si amor, eso lo entendí. Mi pregunta iba a si ellos saben que nosotros...-
- No Jazz. La idea es que se lo digamos juntos.- Sabía que no le encantaba la idea.
Tenía miedo que mis padres pensaran que no es bueno para mi debido a su historia, Sophie y vaya uno a saber que más. Le dije que mis padres serían felices con mi elección.
- Esta bien. Lo haremos juntos. Pero a cambio...- dejo en suspenso.
- Ya me imagino lo que vas a decir Whitlock.-
- Es lo justo.- lo sentí reír del otro lado.
- Bien. Se lo diremos a Rosalie cuanto antes.- Mi amiga iba a estar feliz. Lo sé.
Hablamos un rato más y luego seguimos con nuestras tareas.
Entendía el temor de Jasper pero, en realidad, era injustificado. Mis padres lo conocían, tenían la mejor idea de él y Sophie era una niña imposible de no querer.
- Allie linda ¿Estas bien?- me pregunto Kate. Me había quedado tildada mirando hacia la calle.
- Si Kate, estoy bien amiga, gracias por preguntar.-
- Alice ¿Cuándo me lo contarás?- preguntó haciendo puchero.
- ¿Cuándo te contaré que Kate?-
- Lo tuyo con Jasper.- Bien, resulta que ahora todo el mundo lo sabía.- ¡Vamos! ¡No te hagas la sorprendida! Es evidente Alice, no insultes mi inteligencia.- Rió.
- Eres increíble amiga.- Le dí un abrazo.- Bien, estoy saliendo con Jasper hace algún tiempo. no quisimos decir nada hasta que Sophie lo supiera y diera el visto bueno.-
- ¿Acaso dudaron de que la niña estaría feliz? Ella te adora Al! Desde que se conocieron hubo una conexión especial.-
Era verdad. Entre esa niña y yo había algo único y me hacía feliz.
- Pero eso no es lo que te preocupa ¿Verdad?- preguntó-¿Son tus padres? ¿Bella y Edward?-
- No. A mis padres les encantará, lo sé. En cuanto Bella, ella lo sabe.- Me miro ceñuda.- Sin querer le envié un mensaje que era para Jasper y se entero. Cambia esa cara, recién lo supo hace unos días.-
- No vale.- refunfuño mi amiga.
- Si vale.- reí.- En realidad es otra cosa que me tiene preocupada. Amiga, necesito hablarlo con alguien o desesperaré.-
- Ya sé.- Dijo levantando un dedo.- ¡No te acuerdas de como estar íntimamente con un hombre!-
- ¡Dios Kate! ¡NO!- Aunque era verdad.- Es algo más importante que eso, tonta.-
- ¿Más importante que eso? No se me ocurre...- Ya parecía Emmett.
- Te pido que esto quede entre nosotras por favor.-
- Bien Al, vamos. Me estas asustando.-
Le relate el mensaje que recibí en mi contestador y mi sospecha.
- Creo que no es María, Alice.-
-¿Cómo lo sabes?-
- Fácil. No tiene un dato de Jasper desde que se mudo. Según tengo entendido Rosalie jamás la quiso, por lo que tampoco sabe donde vive ella. A ti ni te conoce. Es imposible. Debe ser alguien más.-
Desearía que fuera así. Sabía que Jasper me quería, pero también sabía que tenía un tema inconcluso con María y sobretodo, sabía que Sophie extrañaba a su madre.
- No sabes como quiero que tengas razón.-
- La tengo.- resolvió segura.- Pero pensemos por un momento que es María ¿Qué es lo peor que podría pasar?-
- Que Jasper vuelva con ella y que Sophie se olvide de mí.- Respondí sin dudar. Era algo que venía pensando desde hace días.
- Primero, no loo conozco demasiado a Jasper, pero dudo que, si vuelve a aparecer María, el vaya corriendo a sus brazos. Tu sabes mejor que nadie cuánto sufrió por ella.-
- Si lo sé.- Respondí en voz baja.
- Bien. En cuanto a Sophie, es la madre. Seguramente le emocionaría volver a verla.-
- Conocerla querrás decir. Ella casi ni la recuerda.- Agregué furiosa.
- Bueno, conocerla. Pero no por eso se olvidará de ti Al. Ella te adora.-
- Y yo a ella. Por eso me da terror.-
- No te adelantes a los hechos. Lo importante es lo que tienes hoy con Jasper ¿Se aman?-
Suspiré. Aún no lo sabía.
- Bien, no me respondas. Ni tu lo sabes.- Me conocía demasiado bien.- Entonces preocupate de eso. De quererlo, de ser feliz y de disfrutar lo que tienes hoy. Mañana será otro día. Además recuerda algo, a veces lo que temes se cumple porque uno se predispone para que así sea. No abras puertas extrañas.-
Tenía razón. Mi loca, desvergonzada y extraña amiga tenía razón.
- Oye.- le dije mientras la miraba entrecerrando los ojos.- ¿En que momento te convertiste en una persona tan sabia?-
- Siempre lo fui Alice. Solo que nunca antes necesitaste que lo fuera contigo.-
Dí la vuelta al mostrador y la abracé fuerte.
- Te quiero tanto amiga. Gracias. créeme, ahora tengo paz.-
- Me alegro. Para eso estamos.- contestó devolviéndome el abrazo.- En cuanto al otro tema... tengo un par de tips si quieres...-
- ¡Kate ya!- El corazón se me salía del pecho tan solo pensarlo.
- Alice, no es como si nunca hubieses estado con un hombre ¡Conviviste con uno!-
- Lo sé, pero con Jazz es distinto. No se... No quiero pensar en eso aún.-
- Pues creeme que el lo piensa cariño.-
- Puede ser. No me dijo nada aún.-
- Porque es caballeroso. Pero creeme. Lo piensa.-
- Bueno, de a una cosa por vez ¿Si? - dije poniéndome de pie.- Tengo que ir a cenar a casa de mis padres con él y la niña, deja que me preocupe por eso solo hoy.-
- ¡Oh! ¡Que buen momento!- rio para si.
- Gracias por el ánimo.- refunfuñe yo esta vez.
- Sabes que Carlisle y Esme los amarán.-
- Eso espero.
-¿Y si no?-
- Y si no lo lamento. Ya son parte mía.- Respondí segura.
- Eso es lo que quería escuchar.-
|