Un Embarazo y Dos Amores (+18)

Autor: Yusale
Género: Romance
Fecha Creación: 09/11/2012
Fecha Actualización: 06/06/2013
Finalizado: SI
Votos: 19
Comentarios: 75
Visitas: 101138
Capítulos: 27

Quien diría que mi embarazo me traería dos amores, el hermoso amor de un hijo, y el amor de mi alma gemela.

Este es mi primer fic espero sea de su agrado. Gracias a Odet Swan por ayudarme con la portada, sin ella no lo ubiera subido aún.

Los personajes son de S. Meyer la historia es de mi creación.

 

FINALIZADO

 

ENTRE EL ODIO Y EL AMOR

http://lunanuevameyer.com/sala-cullen?id_relato=3796&id_capitulo=0

+ Ańadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 27: EPÍLOGO

Pov Bella

-Ana, Abi, no quiero que entren en mi cuarto sin mi permiso- gritó Ethan.

-¿Qué hicieron niñas?- pregunté.

-Sólo entramos y le movimos un poquito el cuarto- dijo Abi con inocencia.

Inocencia que yo sabía no existía para hacer maldad a su hermano. Anastasia y Abigail son nuestras gemelas, ellas adoran a Ethan, de hecho lo cuidan de, según ellas las niñas fastidiosas que lo persiguen.

Porque si, hay que admitirlo, a Ethan las niñas le llueven, con ese color moreno, sus ojos azules, bromista como Jake y caballeroso como Edward, él no tiene que hacer nada para que las niñas estén detrás de él.

Ethan hoy cumple 13 años de edad, y mis niñas tienen 9 años, que rápido corre el tiempo pareciera que fue ayer cuando ellas nacieron.

Flashback

Me desperté asustada porque me sentí mojada.

-¿Cómo pude haberme orinado?- me pregunté

Me senté en la cama y me quité las sabanas, pero ese líquido era oscuro y espeso.

-Rompiste fuente, ese es el líquido amniótico.

Vi la hora y eran las dos de la mañana.

-Edward, despierta que rompí fuente.

-Hummm- fue la respuesta de Edward.

Me levanté, cepillé mis dientes, mi cabello y comencé a vestirme, al girarme a la cama vi que mi esposo seguía dormido.

-Edward despierta- lo volvía a llamar.

-Aja- fue su respuesta.

Tomé mi celular y comencé a llamar.

-Aló- contestó Brian con voz de dormido.

-Brian acabo de romper fuente.

-¿Las contracciones?- preguntó ya con la voz un poco más clara.

-No tengo aún.

-Está bien Bella, nos vemos en el hospital.

Colgué y llamé a mis padres.

-Bella ¿Qué pasa?- preguntó mi papá un poco dormido.

-Papá ya rompí fuente, antes de ir al hospital vamos a dejar a Ethan con ustedes.

-Si claro hija, yo los espero afuera.

Colgué y entré al cuarto de nuevo, y Edward aún seguía dormido.

-¿Cómo puede ser posible que a los que llamas se despiertan de una vez y el padre NO?

- EDWARD DESPIERTA ROMPÍ FUENTE- grité.

-rota… fuente… bebes…-dijo parándose al fin de la cama y vistiéndose.

Me fui al cuarto de Ethan, y se encontraba dormido, por lo que tomé el bolso que le habíamos preparado para este momento, lo cargué, le puse una manta y cuando salí al pasillo, vi a Edward con la pañalera en el hombro, con pantalones, medias, pero sin camisa y sin zapatos, corriendo hacia la calle.

Entré al cuarto agarré una camisa y los zapatos para él, cuando de pronto escucho que el carro se aleja sin nosotros.

-Bueno, ¿y es que el que va a parir es él?, digo como se fue y nos deja a los cuatro aquí.

-Menos mal que no tengo contracciones, me tocará manejar.

Iba saliendo de la puerta al garaje cuando vi que entraba de nuevo el carro de mi esposo, Edward se baja corriendo y me abre la puerta de atrás para dejar a Ethan ahí.

-Ten, no querrás ir al hospital sin camisa y descalzo- dije mientras le daba la camisa y los zapatos.

-Perdona mi amor, estoy como loco- dijo poniéndose la ropa rápido.

Nos subimos al auto y nos fuimos.

-Hay que llamar a Brian- dijo Edward.

-Ya lo hice.

-Hay que llamar a tus padres, para avisarles que le vamos a dejar al campeón.

-Ya lo hice.

-Respira Bella, respira- decía.

-¿Respira Bella o respira Edward?, porque yo estoy bien y soy la que va a parir.

-Cosa que no podemos decir de otros.

Al llegar a casa de mis padres, mi papá estaba afuera esperándonos, sacó a Ethan y nosotros seguimos al hospital, cuando llegamos ya Brian me estaba esperando con una silla de ruedas, me senté en ella y me llevó a un cuarto para examinarme.

No había dilatado mucho, por lo que decidió ponerme el pitosín para dilatar más rápido, ya eran las 12 del mediodía y seguía en cuatro de dilatación, y ya tenía una hora en el  mismo punto.

-Bella, vamos a tener que hacerte cesárea, no estas dilatando nada, y la presión de los bebes está bajando- dijo Brian.

-Esta bien Brian, lo que creas mejor- dije segura.

Ya me habían practicado una cesárea por lo que no estaba nerviosa, Edward se fue a cambiar y me llevaron al quirófano, donde para mi todo fue muy rápido, al poco tiempo escuche los llantos de mis bebes.

Luego me llevaron al que sería mi cuarto y conmigo a las niñas, eran blancas con los ojos verdes y una motita de cabello marrón, yo no podía dejar de mirarlas, no me cansaba de ello.

-Son las niñas más hermosas- dije.

-Porque tienen a la mamá mas hermosa- dijo Edward.

-Vez Edward, estamos destinados a que un embarazo siempre nos traiga dos amores.

-Tienes toda la razón- dijo dándome un tierno beso en la frente.

Fin del flashbak

 

-Bella me llevo a las niñas un momento- dijo mi nana entrando en la cocina.

-Si claro, diviértanse- les dije mientras les daba un beso a las tres.

Definitivamente el tiempo pasa rápido, cada uno de nosotros está felizmente casado y con familia, Jacob y Nessi tienen dos hombrecitos, Billy de 7  años y Harry de 4 años. Jasper y Alice tienen a Sophia de 7 años y Stephanie de 5 años, Emmet y Rosalie a Junior de 8 años y   Anne de 5 años, y Tanya y Demetri sólo tienen a Félix de 9 años.

-¿En qué piensas Sra. Cullen?- preguntó Edward abrazándome por la cintura.

-En la familia- dije girándome para poder verlo -¿Estas listo para hablar con Ethan?

-Estoy asustado, y si después no me quiere- dijo Edward con miedo en sus ojos.

-Amor Ethan no va a dejar de quererte, acuérdate que le dejaríamos decidir, incluso si quería conocer a Elliot- dije yo dándole suaves besos en el cuello para calmarlo.

-Sra. Cullen, no toque sino va a comprar- dijo Edward con voz ronca.

-¿Y qué pasa si quiero comprar?- dije.

Esa no era mi intención en un principio, pero ya estando aquí quien puede resistirse, sintiendo la erección de mi esposo, y también como iba humedeciéndome.

-Bella, no estamos solos.

-Las niñas salieron con nana y Ethan está encerrado en su cuarto, además con uno rapidito me conformo por el momento.

Dicho eso, me agarró la mano y me llevó a un baño de la planta baja, entramos y cerré la puerta con llave.

Me encarceló entre la puerta y su cuerpo comenzando a besarme desesperadamente, cosa que por su puesto respondí, y tardé mucho en desabrocharle el pantalón y dejarlo desnudo de la cintura para abajo, y como cargaba falda, pues el sólo tuvo que quitarme mi panty.

Lo empujé sentándolo en el retrete.

-Definitivamente me encanta cuando cargas falda- dijo Edward.

Me senté encima de su pene provocando un gemido de ambas partes por la penetración, yo me movía de tal forma que fue duro y el atacaba mis senos.

-Sra. Cullen córrase-ordenó Edward.

Y con sólo esa orden mi cuerpo le hiso caso, llegando a un orgasmo espléndido, y él a los pocos segundos.

Cuando nos recuperamos de este sexo rápido, comenzamos a arreglarnos, pero yo no conseguía mi panty.

-¿Busca esto Sra. Cullen? – preguntó Edward mostrando en su mano lo que buscaba.

-Si. Gracias- dije con una sonrisa.

-No, yo me lo quedo, así sé que está libre para mi- dijo con voz seductora, provocando con eso que me volviera a humedecer.

-Como desee Sr. Cullen, ¿ahora si podemos ir hablar con Ethan?- dije con una sonrisa.

-Si- dijo Edward después de respirar profundamente.

Salimos del baño tomados de la mano y nos dirigimos al segundo piso, donde se encuentra la habitación de Ethan, tocamos la puerta.

-Pasa- dijo Ethan desde adentro.

Abrí la puerta y ambos pasamos, el estaba sentado en su cama y con la laptop en sus piernas.

-Hijo necesitamos hablar contigo- dijo Edward sentándose en la cama.

-No fue mi culpa, Edgar fue el de la idea de rapar al gato- dijo Ethan con nerviosismo.

Al ver nuestras caras, se dio cuenta que él solito se hecho la soga al cuello.

-No era de eso cierto- afirmó.

-No – dije yo molesta- luego hablaremos de eso.

-Los escucho.

-Hijo, necesitamos contarte algo, pero por favor no interrumpas hasta que hayamos terminado- dije, viendo que Edward no hablaba.

Y comencé a contar la historia de él, Elliot, Edward y yo, habías decidido contarle todo, ya que merecía saber la verdad, con cada palabra intentaba medir las reacciones que Ethan tenía, pero no estaba segura, ya que permanecía callado y con la vista fija en Edward, cuando terminé de relatar la historia el silencio se estableció en la habitación.

-Entonces, tú no eres mi padres de sangre- afirmó viendo a Edward.

-No- dijo este.

-Pero siempre has estado ahí, en las fotos de embarazo, en mi nacimiento- susurró.

Edward sólo afirmaba con la cabeza.

-¿Por qué tengo tú apellido?- le preguntó.

-Porque para mi eres mi hijo, y quería que legalmente lo fueras, te amé desde un principio- dijo Edward viéndolo a los ojos.

-¿Por qué decidieron contármelo?

-Porque nos pareció que era justo, ya tienes edad suficiente para tomar decisiones.

-¿Y si quiero conocerlo?

-Respetaremos tu decisión, cual sea que tomes.

Yo a todas estas era una mera espectadora, sólo veía el miedo en la cara de Edward, y me parecía que Ethan estaba midiendo las reacciones de su padre.

En eso Ethan abrazó a Edward, y éste le respondió el abrazo, no se cuento tiempo duraron así, hasta que mi hijo se soltó.

-Gracias por decirme la verdad, gracias por no abortarme- dijo esto último viéndome a mi –pero no lo quiero conocer, para mi tú eres mi padre, tú fuiste el que me enseñó a andar en bicicleta, cuando me enfermaba, el que me llevó al hospital cuando me caí y me fracturé la pierna, cuando nací.

-Siempre has sido tú, y para mi, eso te hace mi papá, y no el hecho de que lleve o no tu sangre, te amo papá- dijo Ethan abrazándolo otra vez.

-Y yo a ti hijo- dijo Edward.

Mis lágrimas no paraban de correr por mis mejillas, estaba feliz, seguiríamos siendo la misma familia, eso no va a cambiar, Edward me agarró la mano y me jaló para abrazarnos los tres al mismo tiempo.

-Abrazo familiar sin nosotras no es justo- dijo Abi parada en la puerta del cuarto.

-Aquí tienes tu regalo, es nuestra forma de decir lo siento…- dijo Ana

-Por molestarte la vida- terminó la frase Abi.

-Bueno, nos la obstinamos mutuamente, para eso son los hermanos ¿cierto?- dijo Ethan tomando el regalo.

-ABRAZO FAMILIAR- gritó Ana, y seguido de eso nos abrazamos los cinco de nuevo.

Cuando uno cree que no puede estar peor siempre pasa algo que te demuestra lo contrario, de igual forma pasa cuando eres feliz, siempre puedes ser más feliz, yo tengo una familia hermosa que amo con toda mi alma, y ellos a mi, no puedo pedir más.

 FIN

UN MILLÓN DE GRACIAS a todas por haberme apoyada en mi primera historia, estoy emocionada y triste a la vez, emocionada por la aceptación y su apoyo a mi historia, y triste porque esta terminó :_(

Las lectoras silenciosas gracias por leerme, a las que me dieron su voto de apoyo, y a:

Ale74                                    Aleriass                                               Anayely                                              Danii B

Daryanny                            Evelyn_Swan                    HindyraCullen                   Lilly_pattz

Loreefernandez                              Luizi                                      Martha                                Massy

MayaMasenCullen         OdetSwan                          OvejaSwanCullenBlack Sachiko

Que me dejaban sus comentarios, eso me alegraba y me inspiraba a escribir, saber que les gustaba y las ideas que tenían, espero de verdad haber cumplido un poco con sus expectativas.

CHAITO Y CUIDENSE.

Capítulo 26: Capítulo 26

 
14446225 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10762 usuarios