Capítulo 12

-Despierta, Bella durmiente.- Algo duro golpeó mi hombro, gruñí y traté de enterrar mi cabeza en la almohada.

-Vete, Emmet.-

-Oh, no, hermanito, tengo tu computadora y tu celular, ahora levántate y dime para qué es esto. Sé que tiene que ver con la chica que te tiene loco, pero quiero los detalles. Ahora.-

Solté mi mano y traté de esconderme entre las cobijas. Era de día, pero aún necesitaba unas buenas horas de sueño para reponerme. Mi reloj interno estaba cagado.

-Está bien. Igual, deberías cargar tu teléfono si quieres usarlo esta noche.- Me di vuelta para buscarlo y sentí mi cama moverse por el significante peso de mi hermano. -Yo lo haré, perdedor. También tu laptop. ¿Supongo que puedo tomar la vieja, entonces?-

Sí, él podría tomarla. Esa estúpida mierda tardaba tanto en cargarse que casi me da un aneurisma. ¿Por qué no podía conseguir una nueva? La única cosa que había ahí era… Bella. Me levanté y comencé a buscarla ciegamente. Emmet se rio y bailaba para que no la tomara, con la computadora entre sus manos. Estaba abierta y él la había encendido. -¿Qué estás escondiendo?-

-Dámela, Em.- Tenía sueño e intenté levantarme pero mis piernas se enredaron en las mantas y me costaba moverme.

-Sólo quiero ver… mierda, ¿es ella?- Gruñí y dejé de luchar contra las mantas. Era demasiado tarde.

-Sí, esa es Bella.-

-Bueno, mierda, con razón estás obsesionado. Ella es la cosa más caliente que he conocido en toda la semana, y me folle a Gianna antes de que regresara a nueva york hace dos días.-

Lo miré con mala cara. -No hables así de mi chica.-

-¿Tu chica? Bueno, esto es interesante.- Él se sentó en el borde de la cama y podía ver la foto de Bella por detrás de su hombro.

-¡Sí! ¡No! No sé lo que es, pero no quiero que la mires de esa manera.-

-Ella está apenas tapada. Y es putamente caliente. ¡Mira esas tetas!- Le di un codazo y él gruñó y se dio vuelta con una sonrisa. -En serio. Ella es caliente. Vayamos a Washington para conocerla.-

-Yo iré a Washington, tú te quedarás aquí.- Oops.

Me arqueó una ceja. -¿Irás? ¿Has llegado tan lejos con ella? ¿Sabe quién eres?-

Suspiré y sacudí mi cabeza. -Todavía no. Estaba esperando a hablar con ella al menos una vez. Quiero ver si tenemos la misma química que por mail y eso. Si todo se vuelve incómodo y raro, tendremos que ser más lentos.- Odiaba esa idea. Quería que Bella me conociera y quería verla y tocarla y besarla y todas las cosas sucias que habíamos dicho, pero aún sin todo eso, quería hablar con ella. Ella me hacía reír. Necesitaba eso. La necesitaba a ella.

Emmet me estaba mirando con interés. -¿Así que me hiciste traer tu teléfono para llamar en vez de llamarla de tu teléfono regular? Inteligente.- Eso había pensado. No era que no confiara en ella, lo hacía. Pero si ella descubría quién era y enloquecía, no quería que tuviera mi teléfono privado para ir corriendo a contárselo a la prensa o lo que sea. No lo sabía. Era todo tan raro. -¿Qué te hace pensar que no sabe quién eres?-

Me encogí de hombros. -¿Por qué lo haría?-

Emmet bufó. -Um, tal vez porque cada artículo sobre ti menciona tu voz aterciopelada, lo que mierda sea que eso signifique, y cómo haces acabar a las chicas con tan sólo decirles hola.-

Lo miré. -Sólo ha habido un artículo que dice que mi voz hace acabar a las chicas con decirles hola.- Lo de la voz aterciopelada era cierto y no lo entendía. Quiero decir, tenía un tono de voz normal pero ciertamente no hacía acabar a las chicas. Tal vez podría hacer acabar a Bella. Eso estaría bien. Y me estaba poniendo duro de nuevo. Genial.

-Okey, tal vez ningún artículo oficial lo ha dicho, pero lo he visto online.- Ugh. Con razón Kate me prohibió googlearme.

-Eres perturbador. ¿Por qué me buscas en internet?-

-Necesito mantenerme al tanto de ti. ¿Qué pasa si ya no eres la sensación del mes? Tal vez tendría que hacer cambios en la vivienda alternativos.- Se rio cuando lo pateé entre las sábanas. Idiota.

-Tú deberías de estar haciendo eso, idiota. Devuélveme mi computadora.-

-Relájate, no quiero a tu chica. Quiero decir, ella es caliente, pero estás muy metido en ella, comprándote nuevos teléfonos y computadoras. No puedo competir contra eso si quisiera.-

-Tú no podrías competir conmigo para Bella. Ella me quiere a mí.-

-Estoy seguro que sí. ¿Qué le has estado diciendo?- Él hizo un movimiento sugestivo con sus cejas y sacudí mi cabeza. Él no iba a obtener esa información. -Bueno, claramente le contaste sobre la fantasía de la profesora. Has admitido eso, y luego ella va y te lo da. Eso es increíble. Me gusta esta chica. ¿Cuándo la conoceremos?-

-Yo iré a conocerla en dos semanas, siempre y cuando todo vaya bien en la charla de esta noche. Ella tiene vacaciones de primavera.-

-¡Genial! Vayamos a Cabo. ¡O a Ft. Lauderdale!- Típico de Emmet, siempre dispuesto a ir a cualquier lado.

-No iremos a ningún lado. ¿Por qué quieres venir?-

-Um, ¿has visto a tu chica, Edward?-

Tantas veces que podía verla con mis ojos cerrados. -Sí.-

-Bueno, está comprobado que las chicas calientes tienen amigas calientes. Es como una regla. Se juntan en manadas. Y si tu chica es caliente, entonces sus amigas deben ser igualmente calientes. De esa manera, debo conocerlas.- Él lo dijo como si fuera la cosa más lógica del planeta.

-Primero que nada, no sé de donde sacas eso, pero no creo que sea verdad.-

-Es absolutamente cierto. Las chicas son competitivas. Les gusta competir por quien es más caliente. Todo el mundo sabe eso.-

Lo miré. -Lo que sea. Segundo, todavía tenemos nada sólido. Todavía tenemos que hablar físicamente y luego planear. No sé si podremos juntarnos en su casa durante las vacaciones de primavera. Que yo esté en una ciudad universitaria no es una buena idea.-

La cara de Emmet se encendió. -¡Exactamente! ¡Podremos ir a algún lugar privado! Tú, yo, Bella y sus amigas calientes. Podremos alquilar una casa o algo.-

-¿Por qué estás tan ansioso de ir, dejando de lado las chicas calientes?- Él estaba más interesado en esto de lo que debería.

Sus ojos azules me observaron y su sonrisa despareció. -Okey, simple hecho. Eres una celebridad. No conoces a esta chica. Sí, crees que la conoces y te gusta y es genial. Pero ella podría ser una completa psicópata y no voy a permitir de ninguna manera que mi hermanito vaya a quién sabe dónde con quién sabe quién. Crees que no tienes necesidad de tener un guardaespaldas pero sí la tienes. Puedes contratar una persona al azar o puedes llevarme a mí. Soy mucho más genial y si ella es bien, los dejaré en paz a los dos.-

Parpadeé en sorpresa ante la vehemencia de su tono. -Em, ella es una chica de veintidós años. No es Kathy Bates en Misery.-

-Tú no sabes eso. No lo sabes. Tal vez ella es parte de una secta secreta donde secuestra hombres de la nada y los mantiene encadenados en el sótano obligándolos a tener sexo con ella y todas sus amigas porque son de un culto raro donde todas quieren tener bebés juntas y… espera, eso no sería tan malo.- Me reí mientras él me sonreía. -En serio, aunque debes tener cuidado. O soy yo o es Gambino el matón. Tú eliges.-

-Emmet, estás loco. Estaré bien. Sólo iré y…-

-Le diré a mamá si vas solo.- La mirada triunfante en su cara decía que me tenía.

Mierda. -No lo harías.-

Él sonrió maliciosamente. -¿Por qué no?-

Maldición. -Ugh, está bien. Hablaré con Bella sobre esto. No tenemos nada concreto además de que iré a visitarla y cuando. Tiene que será esa semana, porque empezaré a filmar Steele el próximo mes y es en Europa.- Iba a estar lejos de ella de nuevo. Si nos llevábamos bien como pensaba que íbamos a llevarnos, la separación me mataría.

-Es todo lo que pido. Una vez que sepa quién eres, no se va a sorprender si llevas a alguien.- Él sonrió. -Primero Washington y luego Europa. Los hermanos Cullen nos estamos moviendo.-

Le sonreí. Una de las mejores cosas de las películas Steele era que Emmet hacía mis escenas de acción. Él no era mi doble, porque era demasiado grande, pero él siempre hacía de doble para los tipos malos, además, coordinaba todo. Era el mejor en este negocio. -Será bueno trabajar contigo de nuevo.-

-Sí, pero no me arriesgues. Mamá se enojará si su hijo favorito muere intentando avivar la carrera de su otro hijo.-

Me reí. -Sigue diciéndote eso.-

-Sé lo que sé.- Él miró a Bella de nuevo. -Y sé por qué estás tan determinado a ir a Washington si esto te está esperando. ¿Qué sabes sobre sus amigas?-

Rodé mis ojos. -Sus compañeras de apartamento se llaman Alice y Rose. Rose tomó esta foto, aparentemente.-

-Caliente.- Dijo Emmet. -Tiene buen ojo.-

Me iba a divertir un poquito con él. -En la otra foto que me envió Bella, la cual no verás.- Él hizo una mala cara. -Ella está acostaba boca abajo, usando sólo una remera. Rose aparentemente la alisó por ella.-

Los ojos de Emmet se agrandaron cómicamente. -Verdaderamente caliente. ¿Es también una futura profesora?-

Intenté recordar lo que Bella me había contado sobre ella. -Ella me dijo que era leal y que era la chica más hermosa que había conocido.-

Emmet se dio vuelta. -¡Te lo dije! ¡Una banda de chicas calientes!-

-Ella también me dijo que era la chica más aterradora y que me había amenazado si intentaba hacerle daño a Bella.-

Él asintió en aprobación. -Determinada. Me gusta. Tal vez pueda distraer a Rose por ti.-

Me reí. -Tal vez deberías hacerlo. Ella no ha hablado mucho de Alice pero dijo que era su amiga más antigua y que le había pegado una patada en las bolas a un tipo porque le dijo que podía salir con otros mientras ella se lo cogiera a él o algo así.-

Emmet silbó. -¡Doblemente caliente! ¡Ves! ¡Me necesitas allí! Esas dos podrían matarte antes de siquiera tocar a Bella.-

-¿Así que estás dispuesto a recibir los golpes por mí?- Tal vez no sería tan malo, realmente. Tendríamos a nuestros amigos alrededor para estar más cómodos.

Él rio. -Lucharé con dos chicas calientes por ti. Pero tal vez tenga que llevar un protector o algo por las dudas.-

-Mejor prevenir que curar.- Le dije.

-En serio, será divertido. Mantendré a las amigas ocupadas mientras tú y tu chica se conocen mejor.- Él movió sus cejas sugestivamente de nuevo. Ugh. Ese era el problema. ¿Cómo tendríamos privacidad en su apartamento?

-No pienses que vas a follarte a las amigas de Bella. Incluso una ya es demasiado.- Ella se enfadaría conmigo si él se coge a alguna de sus amigas. Amo a mi hermano pero él es difícilmente el tipo de los que se establecen con alguien.

-Hey, no puedo evitar si ambas me desean. ¿No se trata de hacer experimentos en la universidad? Tal vez le gusten los tríos.-

Me reí. -Estás mirando mucho porno de nuevo.-

-Un tipo puede soñar, Edward.-

-Aléjate de las amigas.- Él se rio. -Dame mi ordenador. Tengo una idea.-

Él me la devolvió esta vez y yo pasé un dedo en la pantalla por la mejilla de Bella antes de conectarme a internet. -¿Qué te parece si vamos a las montañas, alquilamos una cabaña o algo? Estará tranquilo.- Abrí una página sobre las cabañas en Mt Rainier y ahí estaban. -La cabaña de Lazy Bears Creekside. Para diez personas. Cuatro habitaciones, un jacuzzi, una chimenea, una mesa de pool…-

Me callé mientras él daba un grito de alegría. -Me atrapaste con el jacuzzi, hermano. Estamos ahí.-

Me reí. -Es un viaje de tres horas desde Seattle conduciendo. Así que fácilmente podremos volar y conducir desde allí. Tendré que hablarlo con Bella.-

-Tú habla con ella, yo haré las reservaciones. Siempre podremos cancelarlo si lo necesitamos. Este lugar suena bastante bien. Una habitación para ti y para Bella, otras dos para las amigas y otra para mí cuando no esté corriendo entre las habitaciones de las amigas. Perfecto.-

-Sigue soñando, Emmet.- Aunque la idea de compartir la habitación principal con Bella era muy atractiva.

-Si no sueñas no se cumple, Edward. ¿Cuándo son las vacaciones de primavera?-

-Uh, dos semanas desde el viernes pasado.-

-Estoy en ello. Puedes volver a dormir así te preparas para estar luego con tu chica. Luces como mierda. No hagas facetime.-

Me reí. -No puedo hacer facetime hasta decirle quién soy.-

Él se levantó, con mi laptop en sus manos. -¿Qué vas a hacer con tu voz?-

Me encogí de hombros. No lo había considerado. -Soy un actor, así que puedo actuar.-

Él se rio. -¿Qué, vas a hacer un acento? ¿Serás un político francés? ¿Un músico británico? ¿O un caballero sureño?- Él imitó todas esas ridículas voces y lo miré con mala cara.

-Eso es tan tonto. Ella se enojará cuando le diga la verdad. Puedo hablar un poco más agudo o un poco más grave.-

-O puedes hablar como tú y ver si te reconoce.- Podía. Ese había sido mi plan hasta que él comenzó a preocuparme.

-Podría.- Sería interesante si me reconociera y qué haría.

-Está bien, arreglaré nuestro viaje. Conecta tu teléfono y descansa por tu chica.-

Sabía que discutir con él no tenía sentido. Si Bella no lo quería hacer o si nos llevábamos mal, podíamos cancelarlo. Sentí un dolor al pensar que podríamos no llevarnos bien. Eso no era posible. No lo era. Conecté el teléfono y me acosté. Lo íbamos a averiguar muy pronto.

Xoxoxoxo

El sonido del teléfono me cortó de mi sueño y gruñí mientras lo buscaba. Abrí un ojo, luchando contra el sol y lo tomé, sonriendo cuando reconocí el tono. -Janie's Got a Gun- era únicamente para una persona.

-Hola, Janie.- Dije con voz ronca en el teléfono. ¿Qué hora era? 2:30 PM. Había dormido doce horas, incluidas las interrupciones. Nada mal. Mañana ya sería casi humano.

-Suenas como si hubieras tenido sexo o estuvieras durmiendo. Por favor dime que es la última.- Ella rogó.

Me reí y quité mi cabello de mis ojos mientras me sentaba. -Sí, tristemente es la última. ¿Cómo estás?- No había podido hablar con ella desde que Em me había contado sobre ella y Demetri. Las diferentes zonas horarias nos habían jugado en contra.

-He estado mejor, pero estoy sobreviviendo.- Ella contestó. Escuché la tristeza en su voz.

-¿Qué sucedió?-

Ella bufó. -¿Conoces a la nueva chica en su show? ¿La rubia caliente con un cuerpo que mata?-

Busqué en mi memoria su nombre. -¿Algo raro?-

Ella se rio. -Renata, un solo nombre, por supuesto. Joven, hermosas y apiladas. ¿Mencioné que era joven? Sí, bueno, ella sucedió.-

Eso apestaba. -Lo siento, Janie. No sé mucho sobre ella, pero tú eres más bonita.-

-Esa es la cosa. Ella es yo diez años atrás. El mismo color de cabello y ojos, el mismo cuerpo, si bien es cierto que mejorado.- Ella siseó la última palabra y sonreí. -Ella es una Jane 2.0 pero más joven. Claramente soy muy vieja para él.-

-Jane, tienes veintisiete. Eso no es ser vieja.-

Ella lagrimeó. -En Hollywood, eso es prácticamente ser una anciana. La próxima cosa será que me pidan ser la mamá de una adolescente. Espera y verás, Edward. Seré la madre de Justin Bieber en su película.-

Esta vez no pude aguantar la risa. -Apenas eres nueve años mayor que él, creo.- No sabía la edad de ese niño. Tampoco me importaba. -¿Y no tiene alguien más en la película?- Vagamente intenté recordar algo sobre eso.

-Sí, pero esa película es la historia de su vida o algo. Estoy hablando sobre la inevitable película romántica adolescente, en donde él será el galán.- Largué una risotada ante la idea de llamar a Bieber galán. -y todas las chicas lo quieren pero él se enamorará de la chica nerd interpretada por Emma Roberts o Emma Stone o la adolescente que esté de moda en esa época. Marca mis palabras; me llegará el guion para hacer el papel de su mamá hip hop.-

-Bueno, serás la más hip hop ya que lo concebiste cuando tenías ocho. Zorra.-

Ella suspiró. -Eso desearía. ¿Sabes hace cuánto que no tengo sexo?-

Uhhhh, no. -En verdad no quiero saber eso, Jane.-

-Deja de ser un mojigato, Edward. Digamos que el sexo se secó mucho antes de que la relación terminara. Ahora sé por qué. ¿Has visto la última Us Weekly? Ellos se están besando en algún bar.-

Aunque ella estaba tratando de sonar desinteresada, se escuchaba el dolor en sus palabras. Recuerdo como me sentí la primera vez que vi a Irina en una revista con un tipo. Y yo no había estado enamorada de ella. Jane había amado a Demetri desde siempre.

-Lo siento, Janie. ¿Hay algo que pueda hacer? ¿Patear su culo? Mejor aún, ¿enviar a Emmet para que lo haga?- Él era más grande, él debería de hacer lo de los golpes. Yo tenía que ir con Alec y entrenar unos meses más antes de meterme en alguna pelea, dentro o fuera de la pantalla.

Ella se rio ligeramente. -Él ya se ofreció. Prefiero no llamar la atención sobre lo patética que soy. Por eso esperaba llevar al hombre más caliente del planeta conmigo a los People's Choice Awards.-

-Los dos sabemos que no piensas que soy caliente.- Le dije.

Ella rio. -¿Demasiado engreído? Tal vez no estaba hablando sobre ti.- Esperé. -Okey, estaba hablando, y pienso que eres caliente, de una manera -pequeño hermanito deja de babearte.--

Sonreí. -Eso sería insultante, pero lo voy a tomar como un cumplido.-

-Bien, ¿eso significa que serás mi cita?-

Dudé. Sí, Jane y yo éramos amigos, pero la prensa no dejaría de especular, lo que significa que Bella podría saberlo, no es que ella supiera quien era yo todavía. Pero cuando se lo dijera, ¿recordaría la cita con Jane mientras nosotros estábamos haciendo lo que sea que estuviéramos haciendo y se enojaría? Esto era tan complicado.

-¿Hola, hay alguien en casa? Te acabo de pedir una cita, Edward, lo menos que podrías estar sería halagado.-

-Lo estoy, pero…-

-¿Quién es ella?- Ella demandó.

Maldición, ¿por qué todo el mundo me leía tan rápido? -¿Qué?-

-¿La chica? ¿Por qué estás dudando? ¿Tienes alguien más con quien ir?-

Suspiré. Tenía que terminar con esto. -No exactamente. He estado hablando con alguien pero ella no va a ir conmigo ni nada por el estilo.-

-Okey, voy a necesitar más detalles que eso pero no tengo tiempo para molestarte. Tengo que volver al set. Sólo dile que te tomaré prestado por la noche y te devolveré sano y salvo como te encontré. Sólo necesito refregarle en la cara a mi ex que no estoy llorando por su culo tramposo. Ella lo entenderá, si ha sido dejada antes.-

No tenía duda que ella iba a entender el sentimiento, sólo que… -Es complicado.-

-¿Qué es tan complicado? ¿Irás a los premios, verdad?-

-Sí.-

-¿Solo?-

-Sí.-

-Entonces vayamos juntos, como amigos que somos. Puedes contarme todo sobre ella cuando pasemos la aburrida noche. Espero los detalles.-

Largué un suspiro. -Está bien, iré contigo.-

Ella largó un llanto triunfante. -Gracias, Edward. Prometo que seré la mejor cita que hayas tenido. Déjamelo a mí.-

Me reí. -Más te vale.-

-Palabra de scout.-

-Nunca fuiste una niña scout, Jane.-

-Diablos, no. No lo fui. A menos que dieran medallas por besarse con chicos, no estaba allí.-

Me reí. -Te veré el miércoles. ¿Te paso a buscar o…?-

-Mi limosina pasará a buscarte a las tres. Amo lo temprano que tenemos que estar, para los de la costa este.- Ella dijo.

-Eh, por lo menos volvemos temprano a casa.-

-Es cierto, yo no iré a ninguna after party; dejémoslos que piensen que me llevaste a tu casa.-

Hice una arcada. -Desagradable, Jane.-

Ella rio. -Tienes razón; Temblé de miedo cuando dije eso. Okey, tengo que ir a pagar las cuentas así puedo costear la limosina para el miércoles a la noche.-

-Ve a ser la mamá más caliente, Jane.-

-Vete a la mierda, Edward.- Pero ella se estaba riendo cuando colgó. Misión cumplida.

Me levanté y me dirigí a la cocina. Una mirada al refrigerador me demostró que Emmet había estado viviendo de deliverys desde que me fui a hacer la promoción de la película. Abrí la caja de pizza y casi vomito ante la basura seca delante de mí. No importa. Lo puse de nuevo en el refrigerador y me hice una nota mental de decirle a mi hermano que lo limpiara. Tomé pan, mantequilla de maní y mermelada y me hice un sándwich. Me quedaban cinco horas para hablar con Bella. ¿Por qué el tiempo no podía pasar más rápido? Sabía que podía hacer para que pasara más rápido.

Tomé mi celular y llamé a mi madre. -¡Bueno, ahí está mi niñito! ¿Cómo estás?- Rodé mis ojos por la manera en que contestó el teléfono.

-Estoy bien, mamá. ¿Cómo estás tú?-

-Estás cansado por el cambio de horario, ¿verdad? Lo puedo escuchar tu voz.-

Me reí y me senté en la cocina para comer. -Dormí por doce horas. Otra noche como esa y podré volver a la normalidad.-

Ella chasqueó su lengua. -Ellos te explotaron, ¿verdad? Tal vez debería hablar con Marcus.-

Oh, diablos no. -Mamá, no necesito que llames a mi agente. Me puedo defender solo.-

-Está bien, pero no creo que debas ir de nuevo a una promoción tan larga como esa. Luces cansado en los videos que he visto.-

Rodé mis ojos. -Estaba cansado y estaba esquivando las preguntas de Irina. Por suerte, no estaré haciendo otra película con ella así que no será un problema.-

Ella lagrimeó. -Claro que no. Veré que ella no consiga ningún papel bueno en esa ciudad.-

Me reí. Ella también lo haría. Mi madre era una agente de audiciones muy poderosa. -No necesitas estafarla por mí, mamá. De verdad, no me importa.-

-Ella se lo merece después de tratarte de esa manera. ¿Sabías que su matrimonio con James no es legal? Dicen por ahí que ella ya no usa su anillo.-

Sonreí aunque no pudiera verme. -No me sorprende. Pobre tipo. Apuesto a que está sorprendido, él no se lo veía venir.-

-Pobre tipo mi lindo culo.-

-¡Mamá!-

-¿Qué, Edward? Tengo un lindo culo, pregúntale a tu padre.- Tartamudeé pero ella continuó. -De todas maneras, él sabía en dónde se estaba metiendo. No siento pena por él.- Ella hizo una pausa. -Mmm, tengo un papel en la nueva película de Apatow que requiere un hombre hetero con mucha mala suerte. ¡Él se cubre de mierda! Voy a asegurarme de que James tenga una audición.-

Me reí. -Mamá, me estás matando.-

-Sólo es un poco de venganza, al estilo Cullen. ¿Cuándo vendrás a cenar?-

Me encogí de hombros. -No se cuál es mi agenda. Iré a los PCA con Jane el miércoles a la noche. ¿Qué te parece el domingo, como siempre?-

-Eso funciona. Pobre Jane, ¿cómo está?-

Suspiré. -Tan bien como se puede esperar. Ella está bastante destrozada, pero sobrevive. La hice reír un par de veces.-

-Eres un buen tipo, Edward. Un día la chica indicada lo verá.- Me callé sabiamente, aunque mi mente estaba en Bella.

-Está bien, mamá. Iré a comer. Te hablo más tarde.-

-Okey. Te amo.- Ella me tiró un beso por teléfono y me reí.

-Yo también te amo.- Los deberes como hijo estaban terminados, así que ella no me llamaría en la noche, en la mitad de mi conversación con Bella.

Hablando de Bella, abrí mi correo. Sonreí cuando leí su nombre.

Edward,

Espero que estés en tu casa sano y salvo y durmiendo. Tu cuerpo debe de haber estado desordenado debido al cambio de horario, ¿huh? Cuando fui a Florida me tomó unos días ajustarme y no fue al otro lado del mundo como tú.

Cambiando de tema, supuse que ya que hoy es la noche donde vamos a charlar, debería darte mi teléfono. ¿Estás nervioso? Yo lo estoy, lo que es raro, porque es tan fácil hablarte a ti ahora. Supongo que quiero que sea lo mismo cuando te escuche. ¿Entiendes lo que quiero decir?

Siento que esto sea corto pero tengo que ir a la biblioteca a terminar un ensayo antes de nuestra charla esta noche. Te extraño y espero con ansias tu llamado.

Mi número es 206-555-2382. Nos hablamos a las ocho. ¡No puedo esperar!

Con amor,

Bella

Sonreí y le envié una respuesta rápida por teléfono.

Bella,

Estoy vivo y bien. En realidad más que bien, ahora que tengo tu número. Estoy sonriendo como un tonto en la cocina. Estoy muy entusiasmado por llamarte, pero sí, también nervioso. Sólo se tú y yo seré yo y así estaremos bien, ¿okey? ¡Eso no nos ha resultado mal para nosotros!

No puedo esperar a escuchar tu voz. La he imaginado incontables veces en mi cabeza pero no hay manera de que pueda adivinar como es, ni siquiera sabiendo como luces.

Termina tu ensayo como una buena chica así no tendré que castigarte, a menos que tú quieras, por supuesto. Te hablaré en unas pocas horas.

Con amor,

Edward

Abrí WWF y maldije por milésima vez en los últimos días. El servidos se había caído y mi teléfono no podía abrir la aplicación así que todavía tenía que leer su respuesta a mi respuesta sobre el sexo anal. Debería saber como se siente ella antes de hablar, así no diría nada estúpido. Esperaba.

Bluebell22: Definitivamente puedes tener mi culo de una forma no literal. De verdad creo que no sé en qué estaba pensando cuando te pregunté eso anoche. No es que no quiera hacer eso, algún día, pero definitivamente no quiero en las vacaciones de primavera, si eso pasa. ¿Sabes? Como dijiste, es una cuestión de confianza. Pero me halaga que lo quieras hacer si yo quisiera. Eres tan caballero.

Bluebell22:¡Ha! Te llamé caballero por querer follarte mi culo. ¡Es la primera vez! ¡Me gusta un poco!

Me reí en voz alta. ¡Un caballero! Había hecho lo mejor que pude, pero no había manera de ser un caballero cuando se estaba discutiendo sexo anal.

Bluebell22: Yo también quiero que me escuches. Y yo también quiero escucharte. ¿Tal vez el lunes? ¿Tal vez más tarde? Creo que veremos qué pasa luego. ¿No puedes planear sexo telefónico, verdad? Veremos que pasa, ¿cierto?

Dios. Esa era la pregunta del millón. ¿Íbamos a tener sexo por teléfono esta noche? Quería escucharla acabar, pero no quería quedar como un pervertido que sólo le gustaba porque ella era la mujer más sexy del planeta. Me gustaba por otras razones también. Ella era inteligente y divertida y muy buena. Como ella dijo, teníamos que ver que sucedía.

Tu fantasía en la ducha me mató, Edward. Es un sueño mío, algo que nunca he hecho. Me encantaría que me levantes y me folles mientras coloco mis piernas alrededor tuyo y ambos quedamos mojados y resbaladizos bajo la ducha. Añadiremos eso a la lista. Estoy comiendo una manzana ahora, ¿sabes?

Las manzanas probablemente me pondrían duro por el resto de mi vida. Era ridículo. Y sí, el sexo en la ducha estaba definitivamente en la lista.

Bluebell22: Pronto, Edward. Comienza a gustarme esa palabra.

Yo también, Bella, además de otras cosas.

Skeleton17: ¿Un caballero? Lo admito, intento lo mejor que puedo. Tienes razón, tal vez algún día llegaremos a ese punto, pero por ahora nos quedaremos con las duchas y los escritorios y las profesoras calientes, ¿okey? Eso ya es suficiente para matarme, de todas maneras. ¡No necesitamos agregar más nada!

Skeleton17:Voy a hablar contigo en unas pocas horas, lo que parece una vida ahora. Supongo que puedes planear sexo telefónico, ¿pero dónde está la gracia? Si sucede, sucede. Si no, estoy seguro de que disfrutaré de escucharte hablar, Bella. Siento que he querido eso por años, en vez de días. ¡Las 8:00 PM pueden apurarse en llegar!

Skeleton17:La ducha está en la lista sin dudas. Ha protagonizado mis fantasías desde que pongo un pie en el agua. Tú no sabes lo que me haces, ¿verdad? O tal vez lo sabes y te divierte torturarme. Esa es otra ofensa castigable, sabes.

Skeleton17:Pronto, Bella. No puedo esperar.

Ella jugó laved y yo gruñí. Definitivamente lo estaba haciendo por gusto. No tenía nada genial, pero podía jugar horsed de laved y así lo hice. No más alborotos, Bella. Se va a poner tan real como nunca. Espero que esto salga bien. Tiene que hacerlo.

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hola q les perece el capi????? ya estamos cerca del ansiado momento en nada hablaran q pasara????? bueno tambien les pido q se pasen x mi fic el ladron del rayo un beso y....

cmenten;)